En la Sierra Madre Oriental se revela una joya natural única de nuestro país, se trata del valle de Cuatrociénegas, ubicado al centro de Coahuila. Piensa en un desierto con altas dunas de arena blanca, imponentes paredes de mármol de varios metros de alto y manantiales de aguas azules… Todo ello es el resultado de un mar que existió ahí hace millones de años, cuyos escenarios se combinan con un Pueblo Mágico. Fotos: Cortesía / Arlett Mendoza.
Calles con encanto
La cabecera municipal de este municipio de Coahuila, es el Pueblo Mágico de Cuatro Ciénegas de Carranza. Fue fundado en 1800 por varias familias españolas, a quienes les pusieron la condición de tener solvencia económica e hijos. Entre ellos, estuvieron los padres del revolucionario y expresidente Venustiano Carranza. De ahí que en donde fuera su casa, encontrarás un museo que cuenta su historia desde el nacimiento hasta su muerte, exaltando sus aportes como la creación de la Constitución de 1917 y la Ley del Divorcio.
Sal de ahí y camina hasta su plaza para conocer la iglesia de San José de arquitectura neoclásica. Fue construida hace más de 200 años con piedras de las estructuras calcáreas de estromatolitos (constituidos por cianobacterias que fueron las primeras oxigenadoras del planeta). Si vas por la noche, podrás gozar de la bella iluminación de esta parroquia y de la estatua de Venustiano Carranza.
Minas de mármol
Una sesión de fotos es lo primero que se te antojará al ver estas colosales paredes verticales de mármol travertino, ubicadas en la Loma de San Marcos, a 23 kilómetros del pueblo de Cuatro Ciénegas. Realiza una caminata entre sus bloques de roca y luego, sube hasta el mirador para observar las postales que regalan las montañas aledañas.
Dunas de yeso
Altos montículos de arena blanquísima que contrastan con cielos azules y cambian constantemente de acuerdo al soplar del viento, es lo que encontrarás en las Dunas de yeso, ubicadas a 14 kilómetros del pueblo de Cuatro Ciénegas.
Este arenal único en México se formó a partir del mar de Tetis que existió hace millones de años. Se cree que luego de un movimiento de las placas tectónicas, este océano se transformó en lagunas que se evaporaron quedando solo el yeso.
Si observas con cuidado podrás ver las huellas de los animales que habitan este paraíso natural, como serpientes y aves migratorias.
Poza azul y Río San Marcos
Otro obligado en el valle de Cuatrociénegas es la Poza Azul, se trata de un oasis en medio del desierto, cuyas aguas de diferentes tonos de azul son ricas en minerales. En esta área protegida no podrás nadar, pero si subir a un mirador de madera para observar sus asombrosos colores que combinados con el contraste de las serranías aledañas, regalan un sitio lleno de paz.
También camina por su sendero interpretativo para descubrir más de la flora y fauna que habita este sitio y conocer uno de los lugares subterráneos donde emerge el agua de esta ciénega.
Para seguir tu día, ve a Aruna Parque Natural. Se trata de un balneario donde encontrarás cabañas de madera, ideales para un pícnic. También podrás practicar kayak y paddle board en los 4 kilómetros que conforman el afluente del río San Marcos.
Ten en cuenta
Es muy posible que no tengas internet en estos sitios, por lo que es mucho más fácil llegar si contratas los servicios de una tour operadora, encuentra opciones en la plaza del Pueblo Mágico o pregunta por los itinerarios que ofrece el hotel Hacienda 1800, si lo deseas pueden incluir pícnics, recorridos en bicicleta, rappel y camping.
Porque pronto volveremos a viajar
Cómo llegar: el Pueblo Mágico de Cuatro Ciénegas se encuentra a 3 horas y 40 minutos de Torreón y 3 horas y 50 minutos de Monterrey. Para cuando sea seguro viajar, Aeroméxico ofrece rutas a ambos destinos desde Ciudad de México. Alojamiento y Tours: Hacienda 1800.
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