Despertar con frondosos viñedos de fondo, para después disponerte a disfrutar de una relajante práctica de yoga; comer auténtica cocina local con ingredientes excepcionales y terminar con un tratamiento holístico en el sofisticado spaasí serán los días en de Banyan Tree Veya Valle de Guadalupe. Fotos: Cortesía.

Con su inauguración programada para febrero del año 2024, este alojamiento promete ser un santuario entre viñedos, con hermosas vistas, lujosas habitaciones, restaurantes de alta cocina, bar y un exclusivo spa. Te contamos lo que sabemos hasta ahora:

 

Sobre sus elegantes villas

 

Banyan Tree Valle de Guadalupe habitaciones

 

Primero, sabemos que las instalaciones de Banyan Tree Veya Valle de Guadalupe forman una encantadora colección de 30 elegantes y modernas villas, cada una con alberca privada, bar de vinos, chimenea y terraza exterior. Todas ubicadas en las colinas de este destino considerado “La tierra del vino de México”, donde el paisaje se extiende a través de colinas y viñedos.

 

Experiencias gastronómicas en el corazón del Valle 

 

El aspecto gastronómico también es un pilar muy importante en Banyan Tree Veya. El exclusivo hotel contará con dos restaurantes. El primero, “Aldea”, abierto durante todo el día, perfecto para que los visitantes se puedan sumergir en la gastronomía local. 

El segundo es el restaurante de alta cocina que se llama “5”. El concepto de este espacio está impulsado por la noción de preservar y aprovechar la calidad y autenticidad de los productos frescos de Baja, productos sostenibles que dan como resultado un menú dinámico.

 

Banyan Tree Valle de Guadalupe comida

 

Si prefieres una opción más casual, te encantará el Food Truck del hotel, en el que encontrarás una amplia oferta de comida callejera local y creaciones que ofrecen productos regionales y de temporada.

Por otro lado, “Atalaya” será el bar de Banyan Tree Veya Valle de Guadalupe, donde podrás encontrar bebidas exclusivas, cocteles sin alcohol y aperitivos especiales. Complementa con una de las experiencias gastronómicas imperdibles, como explorar la bodega de vinos secreta escondida en las colinas y disfrutar de una cena en el corazón de esta bodega entre tintos, blancos, rosados y mezclas espumosas de la casa.

 

Spa para disfrutar los poderes curativos de la naturaleza

 

masaje herbal

 

Así como la gastronomía es vital en Banyan Tree Veya Valle de Guadalupe, el bienestar también lo es. A través de Banyan Tree Spa, podrás experimentar una serie de tratamientos holísticos y de bienestar que ayuden a restablecer el equilibrio en tu cuerpo y claridad en tu mente. Esto lo logran fusionando los poderes curativos de la naturaleza, conocimientos y rituales locales.

Contará además con zonas de relajación, hidroterapia, sala multifuncional Veya, albercas panorámicas, gym y terraza.

 

¿Más por hacer?

 

Banyan Tree Valle de Guadalupe paisaje

 

Con la intención de que los huéspedes puedan forjar una conexión profunda con el Valle de Guadalupe, podrás disfrutar de un programa de actividades que incluye: yoga y meditación, sesiones de fitness, rituales del atardecer, actividades culinarias, enoturismo y talleres de artesanía. Sé de los primeros en reservar tu estancia, aquí.

 

Sigue inspirándote con estas imágenes y arma tu ruta a este destino: 15 instantes en el Valle de Guadalupe.

El creciente boom del enoturismo en México ha propiciado que cada vez más viajeros acudan a viñedos en busca de experiencias en torno del vino y su disfrute. Sin embargo, esta tendencia también ha abierto más la brecha entre el consumidor y la tierra, así como con la gente que la trabaja. Por suerte, en Tablas Taller Agrícola, en el Valle de Guadalupe, han volteado a ver a los inicios para proyectar una propuesta vinícola con futuro. Te contamos. Fotos: Arturo Torres Landa.

 

Rescatar la esencia

 

Viajar a Ensenada para comulgar con los sabores que hacen posible su frío mar y su caliente territorio ya es algo habitual para muchos amantes del vino y la gastronomía. Afortunadamente para quienes buscan novedades, así como un contacto estrecho con el origen del producto, cerca de este puerto de Baja California se producen los vinos de Tablas Taller Agrícola. Fundado en 2017, en la médula del Valle de Guadalupe, Tablas Taller Agrícola cuenta con 85 hectáreas, de las cuales cerca del 90% corresponden a vides y el resto a olivares.

De su arenoso suelo brotan ocho variedades de uva, pero es únicamente con las tablas 1, 4 y 5 (de ahí el nombre del concepto) que elaboran su único vino premium, Tablas, un blend de tempranillo, petite syrah y grenache.

 

Uvas en Valle de Guadalupe

 

 

Que sea el terreno quien hable

 

Que en esta bodega solo elaboren una etiqueta de tinto demuestra el compromiso puesto en aprovechar el terreno empleando las uvas mejor adaptadas a él. Además, también revela que Tablas Taller Agrícola es un proyecto 100% agrícola. Aquí trabajan bajo tres ejes primordiales: sustentabilidad, respeto a la tierra y al trabajo humano.

 

Viñedo Tablas Taller Agrícola

 

Si bien el viñedo y bodega de Tablas Taller Agrícola no están abiertos al público, quien así lo desee puede solicitar una visita al sitio para conocer los procesos de elaboración de su vino. Así, lo primero que sorprende al llegar es la marea verde de vides que parece cubrir el valle, sobre todo en los meses previos a la vendimia. Y en medio de los campos, recortadas contra un horizonte de cerros, cielo y olivos, emergen las esculturas que el artista mexicano Jorge Yázpik creó para el viñedo.

 

Escultura de Jorge Yázpik

 

Además, también destaca su pequeña pero completa vinícola, cuyo diseño arquitectónico de inspiración industrial permite ver el origen y razón de ser de Tablas Tallar Agrícola: el paisaje y sus frutos. Su diseño en dos niveles también responde al aprovechamiento de energía, pues cuando la uva es cosechada y despalillada, esta se deposita en los tanques por acción de la gravedad.  En cuanto a la fermentación, esta ocurre en modernos tanques de polímero, donde los caldos permanecen por 12 meses. El uso de este material de vanguardia disminuye el consumo de madera.

 

En armonía con el entorno

 

Por supuesto, hay que hablar de las prácticas sustentables de Tablas Taller Agrícola, entre las que destacan el reciclado de desechos. Por toda la vinícola se advierte el uso de pallets reutilizados, impregnados de fragante vino. Además, también optimizan el uso del agua para riego, la cual proviene de pozos dentro de la propiedad.

 

Vinícola de Tablas

 

Finalmente, cabe destacar que el abastecimiento eléctrico proviene de páneles solares, y que gracias a que las corrientes de aire, hay poca proliferación de plagas. Así, el uso de pesticidas se reduce al mínimo.

 

¿Cómo es el vino de Tablas Taller Agrícola?

 

Vino Tablas

 

Elaborado con grenache, tempranillo y petite syrah, Tablas es un vino joven y fresco, de color rojo violáceo intenso. Tiene un balance correcto entre taninos y acidez, presentes en un cuerpo medio con capa media. En nariz es muy frutal y un poco floral: ofrece notas a grosella, jamaica, frutos negros y un ligero toque a rosas. Se puede acompañar con quesos madurados y mermeladas, aunque marida fantásticamente especialidades mexicanas como tacos de birria. Beberlo solo también es una gran idea y se puede adquirir aquí.

Para conocer más sobre Tablas Taller Agrícola, puedes dirigirte a su página web o seguirlos en Instagram: tablastalleragricola.

También te puede interesar: La relación entre vino de uva zinfandel y primitivo

Los que saben dicen que beber una copa de vino tinto al día es bueno para el corazón. Pero nosotros comprobamos que pueden ser dos o tres, siempre y cuando el entusiasmo por el vino nos lleve directito al terruño que ve crecer la uva, y nos acerque a aquellos que consagran su vida al saber hacer del vino, como en Ribera del Duero.

Nunca un sorbo de este elixir de la tierra será el mismo que cuando se está frente a los viñedos, en los que la uva lucha por sobrevivir en condiciones que, de tanto parecer adversas, resultan ideales. Por eso, realizar un viaje por la cuenca del río Duero, al sur de la provincia de Burgos, por Castilla y León, justo en Aranda, es bueno también para el alma.

 

Virtudes otorgadas

 

El verdadero protagonista de este viaje es el río Duero, que nace en los Picos de Urbión, en Soria, y después de completar 897 kilómetros, desemboca en la ciudad portuguesa de Oporto, bañando a su paso el paisaje y los campos.

La Ribera del Duero nos lleva, a lo largo de 115 kilómetros, por caminos de una comarca esencialmente agrícola, donde se cultivan cereales, betabel y vid. La ganadería más conocida de esta zona son los rebaños de ovejas, a los que les rendiremos honor en los restaurantes locales que ofrecen los famosos y deliciosos corderos lechales asados.

 

Ribera del Duero silos

 

En medio de las condiciones naturales más convenientes para la elaboración del vino, vamos descubriendo que solo algunas de las zonas de la ribera del río forman parte de la Denominación de Origen (D.O).

Se trata de una región donde confluyen ciertas características: tierras arcillosas; 450 milímetros de lluvia al año; veranos tan cálidos que alcanzan los 40 grados centígrados, e inviernos tan fríos que pueden llegar hasta menos 18 grados, nos cuentan desde el Consejo Regulador de la D.O. Ribera del Duero, un organismo creado en 1982 con la finalidad de garantizar la calidad del vino.

 

Cientos de bodegas

 

Recorremos la franja vinícola de Ribera del Duero, que acoge a unas 300 bodegas, con tanta curiosidad como ganas de catar las diferentes versiones de una misma uva, la tempranillo, que es el alma de la zona, y a la que el consejo regulador ha admitido ensamblarla con otras variedades como cabernet sauvignon, merlot, malbec y garnacha, o la única blanca, la albillo (eso sí, en 25% como máximo).

Y mientras catamos estas joyas vinícolas de intenso color púrpura, notas a cereza y cuero, de textura aterciopelada, sabemos que estamos guardando para siempre las postales de estos viñedos y abrazando entrañables bodegas, moldeadas por su carácter histórico y por la encantadora personalidad de su gente.

 

Bajo el cobijo del olivo: Tr3smano

 

En el municipio de Peñafiel, en Valladolid, una bodega mimetizada en el desnivel natural de su parcela, construida con materiales de la tierra e iluminada con luz del Sol, nos obliga a hacer una parada, en la que descubrimos la presencia más deslumbrante de nuestro recorrido: un maravilloso olivo de más de 1,500 años.

El olivo domina, soberbio, la bodega de Tr3smano y relata la historia de Valladolid como valle de olivos. Construida por el estudio de arquitectos Konkrit Blu, y soñada por tres hombres amantes y expertos en vino, la bodega integra de manera conmovedora la capacidad técnica, la historia y el arte que dan como resultado un vino de gran calidad cuya esencia es la uva tempranillo.

 

Ribera del Duero Tr3smano

 

José Ramón Ruiz y Antonino Sierra González, socios de La Europea, la empresa líder de importación de vinos del mundo en México, tejieron su sueño de hacer un vino inolvidable en la Ribera del Duero, y para ello, se unieron a Fernando Remírez de Ganuza y a Pedro Aibar, grandes personalidades del mundo del vino.

Toma nota: Pago de las Bodegas, s/n 47314 Padilla de Duero, Valladolid, España. tresmano.com

 

Cuando el vino corre por las venas: Emilio Moro

 

Nunca se podrá catar un vino de la misma manera que recorriendo las bodegas donde cada viticultor le da su toque personal, y donde se entablan encendidas conversaciones alrededor de la mesa con las familias que por generaciones, han dedicado su tiempo y energía a ver nacer y desarrollar cada una de sus etiquetas de Ribera del Duero.

“Uno de los recuerdos más antiguos que conservo es el olor del lagar. Cuando era niño, acompañaba allí a mi padre para ayudarle a prensar la uva. Y en los descansos comíamos patatas con las manos impregnadas de vino. ¡Estaban deliciosas! Ése es un recuerdo imborrable”, nos cuenta lleno de orgullo y pasión, en cada palabra que enuncia, José Moro, tercera generación de viticultores, y actual presidente de las legendarias bodegas Emilio Moro.

 

Ribera del Duero Emilio Moro

 

José nos recibe en esta bodega, localizada en Pesquera del Duero, en Valladolid, cuya historia se remonta a más de medio siglo de amor al terruño. “La primera generación se entregó a la tierra, la segunda inculcó a la tercera el saber hacer, y ésta última, ha construido una marca de nivel internacional”.

A todas estas generaciones las une la pasión por el vino y a esta bodega de 200 hectáreas propias, las cuales ven crecer las uvas que dotan de personalidad a su variedad de tinto fino. Las experiencias enoturísticas que ofrecen son ideales para conocer en primera persona todo el proceso de elaboración del vino, desde el cultivo de las cepas en el viñedo hasta su degustación.

Toma nota: Carretera Peñafiel-Valoria, S/N. Pesquera de Duero, Valladolid, España. emiliomoro.com

 

Entorno en armonía: Alonso del Yerro

 

En una ruta enoturística por Ribera del Duero, atravesamos los municipios de las provincias de Soria, Segovia, Valladolid y Burgos, donde se le dan vida a vinos rosados, roble (tintos jóvenes), crianzas, reservas y grandes reservas.

Es en la Finca Santa Marta, en Burgos, donde sobre los viñedos que rodean a la hermosa casona, un arcoíris nos da la bienvenida. La conversación gira en torno al concepto del terroir y a las prácticas antiguas en las que la agricultura, además de un oficio, era una filosofía de vida.

 

Ribera del Duero Barricas

 

Los vinos de esta bodega de Ribera del Duero se realizan partiendo del cuidado del entorno de la planta, observando la calidad que cada año ofrecen los distintos suelos y realizando una vinificación respetuosa. Aquí hacen todo lo posible por dejar que el terruño se exprese de manera clara y poderosa. Las labores son artesanales, realizadas a mano y prescindiendo totalmente de productos de síntesis; el único aporte es una composta elaborada por ellos mismos.

Toma nota: Finca Santa Marta, carretera de Roa hacia Anguix, kilómetro 1. 8, Roa, Burgos, España. alonsodelyerro.es

 

Joya histórica de la viticultura: Dehesa de los Canónigos

 

Lo que en la antigüedad fuera la residencia de 22 monjes canónigos se convirtió en esta bodega, localizada en una de las fincas de mayor importancia histórica de la zona. Además, sus paredes guardan uno de los relatos más conmovedores de la historia del vino: después de la filoxera, una terrible enfermedad que aquejó a la vid europea en el siglo XVIII, ésta fue la primera bodega en Ribera del Duero en replantar sus tierras con injertos de vides procedentes de América.

 

Dehesa de los Canónigos

 

Así que estamos frente a una leyenda del mundo del vino en España. Para llegar a esta encantadora finca de 500 hectáreas, de las cuales 60 están totalmente consagradas al viñedo, recorremos el valle del Duero, dentro de la llamada Milla de Oro de la Ribera, nombrada así por ser enclave privilegiado para el buen desarrollo y maduración de las uvas.

Toma nota: Carretera Renedo-Pesquera kilómetro 39, Pesquera del Duero, Valladolid, España. dehesadeloscanonigos.com

 

Experiencias inolvidables: Finca Villacreces

 

Siglos atrás, este páramo fue el sitio donde religiosos se dedicaban a la oración y al cultivo de la tierra en Ribera del Duero. Ya para esos tiempos existía un pequeño viñedo donde nacía uva que era utilizada para el consumo propio y de otros monasterios cercanos.

Localizado también en plena Milla de Oro de Ribera del Duero, este sitio dueño de un entorno natural conmovedor con un bosque de centenarios pinos, viñedos y el fluir del río, es ideal para realizar experiencias de enoturismo. En Finca Villacreces han sabido llevar este concepto que une al mundo del vino con el del turismo más allá de cualquier expectativa. Se puede elegir entre catas de vino y queso, recorridos en bicicleta por la finca y los viñedos, pícnics a la orilla del río o experiencias gastronómicas en los extraordinarios comedores de la finca.

Toma nota: Carretera Soria, en el kilómetro 322, Valladolid, España.villacreces.com

Pasión por el terruño: Grupo Pesquera

 

La imagen del arco y de la torre de Pesquera del Duero es el símbolo del grupo Pesquera; con él, Alejandro Fernández busca reflejar el vínculo y el amor por su tierra natal y por el terruño que ve crecer a las uvas con las que le han dado vida, desde hace cuatro décadas, a sus míticos vinos Tinto Pesquera.

Son cuatro las bodegas que componen el legado vinícola de Alejandro Fernández, en la D.O de Ribera del Duero se encuentran Tinto Pesquera y Condado de Haza, todas reconocidas y alabadas en las catas más importantes del mundo. Todas están abiertas al enoturismo y organizan visitas y catas bajo reservación previa.

 

Ribera del Duero grupo Pesquera

 

“Alejandro Fernández, quien desde su infancia era un amante del terruño y alimentó su sueño bodeguero, es considerado desde el principio de su incursión en el mundo de los vinos como un visionario en la elaboración de caldos en la Ribera del Duero”, nos cuenta Olga Fernández, directora de la bodega Condado de Haza.

Toma nota: Calle Real 2, Pesquera de Duero, Valladolid, España. grupopesquera.com

 

Ícono del Duero: Balbás

 

La sexta generación de la familia Balbás está al frente de estas bodegas que nacieron en 1777. Catar sus vinos es probar parte importante de la historia de la Denominación de Origen, pues esta bodega, junto con otras ocho, fue fundadora en 1982 de la D.O. de Ribera del Duero.

La serie de regulaciones surgieron tras la iniciativa de una serie de viticultores y bodegueros preocupados por impulsar los viñedos y la calidad de los caldos de la Ribera del Duero. Todos aquellos vinos que ostenten el sello de la D.O. deben ser sometidos y superar un proceso de calificación desarrollado por el consejo regulador.

 

Ribera del Duero Botellas

 

A lo largo de su historia, Bodegas Balbás se ha convertido en ícono de calidad, conscientes de que la perfección requiere dedicación, esfuerzo y pasión. Algunas de sus cepas tienen más de 90 años, y actualmente cuenta con 102 hectáreas en producción en las que se cultivan tempranillo, cabernet sauvignon y merlot.

Toma nota: La Majada, s/n, La Horra, Burgos, España. balbas.es

 

Bodega legendaria: Cillar de Silos

 

Esta bodega debe su nombre a los monjes encargados de la cillería o despensa en la que se encontraba el vino. Muy cerca de aquí, se encuentra el monasterio de Santo Tomás de Silos, que data del siglo X y era muy famoso por sus celestiales cantos gregorianos.

Actualmente, Cillar de Silos cuenta con 68 hectáreas de viñedo, donde se cultiva principalmente la tinta tempranillo con la que se crea un caldo memorable. Tan memorable como su espectacular bodega subterránea, a la que llegamos caminando por el encantador pueblo. Con las condiciones ideales de humedad y temperatura, la bodega data del siglo XVII y se ha convertido en un atractivo del destino.

 

Cillar de Silos

 

Aunque Cillar de Silos se inauguró en 1994, fue desde 1970 que su propietario, Amalio Aragón, comenzó a comprar diferentes parcelas, y ahora dirige la bodega con sus hijos.

Toma nota: Calle Ribera del Duero, Quintana del Pidio, Burgos, España. cillardesilos.es

 

 

También lee: Puntos básicos para conocer la D.O. Ribera del Duero