La imagen parece salida de un cuento: a nuestros costados, cientos de berries brotan de entre los arbustos, y nosotros únicamente tenemos que arrancarlas suavemente y saborearlas. Aunque no lo parezca, la escena es real y ocurre en Jalisco, estado mexicano a donde nos trasladamos invitados por Aneberries. Esta asociación mexicana reúne a 37 empresas dedicadas a la exportación de zarzamora, frambuesa, fresa y arándano, y fue fundada con el fin de establecer estándares de inocuidad y calidad. Aquí te ofrecemos un vistazo del trabajo que hay detrás de los berries mexicanos para que las incluyas en tu dieta. Fotos: Arturo Torres Landa.

 

 

Berries mexicanos: agradable sorpresa

 

A decir verdad, muchos de quienes asistimos al viaje ignorábamos que México fuera un importante productor de berries. Para casi todos, tanto las zarzamoras como los arándanos y las frambuesas eran frutos asociadas al frío, a los extremos sur y norte del continente. Sin embargo, los representantes de Anaberries nos contaron que nuestro país exporta más de 300 mil toneladas de berries al año. Ello se debe en gran medida a que el clima de México se mantiene favorable para el cultivo durante el invierno, algo que no sucede en Chile o Canadá, por ejemplo. Además, las empresas productoras de berries han implementado muchos procesos de sostenibilidad agrícola, selección genética, higiene y –muy importante– de responsabilidad social con sus trabajadores.

 

A recolectar zarzamoras

 

 

 

El primer punto que visitamos fue la granja de Expoberries, muy cerca de Sayula, donde se especializan en la producción de zarzamoras. Luego de pasar por filtros sanidad, presentes desde antes de la pandemia, pudimos caminar entre los campos donde se siembra y cosecha esta fruta. Allí nos explicaron que a los berries, en particular a la zarzamora, «les gustan» los suelos ácidos, característica presente en la región gracias a los volcanes. Un dato interesante es que la zarzamora, al igual que la uva, debe ser podada y sometida a cierto estrés. Esto para que la planta «crea» que es invierno y dé frutos como si estuviera en el norte.

 

 

 

 

 

Otro aspecto que nos sorprendió es la pericia y velocidad de los cosechadores, quienes retiran la fruta y la llevan velozmente a las mesas de empaque, a pocos metros del arbusto. Entre que es cortada y empaquetada, no hay más de 10 metros ni cinco minutos de espera y distancia, algo que garantiza la frescura de la zarzamora. Posteriormente, los clamshells (nombre de los recipientes) llenos se apilan y envían a un cuarto frío antes de su salida a punto de venta. En Expoberries dan trabajo a entre 90 y 400 trabajadores, dependiendo de la temporada. Desde luego, la sorpresa final fue el sabor de la variedad de zarzamora que aquí producen, llamada Sweet Caroline. Dulce y jugosa, la sentimos reventar en el paladar ni bien la probamos.

Cautivados por los arándanos

 

 

 

La siguiente parada de nuestro viaje en busca de berries fueron los campos de Hortifrut, empresa mexicana dedicada a la producción de frambuesas y arándanos. Nosotros visitamos los carriles de siembra de este último, un berry que es cada vez más solicitado por los mercados de Europa, Norteamérica, China y Japón. ¿Los motivos? Su enorme contenido de antioxidantes, además de que los arándanos mexicanos destacan por su calidad y dulzor. Algo que aprendimos mientras cortábamos arándanos perfectamente azules, es que la capa de polvo blanco que cubre la fruta se llama bloom y nunca debe limpiarse, pues ahí reside la mayor parte de sus antioxidantesAquí se especializan en cultivar las variedades Rocío, Ventura y Victoria, diferenciadas por su color, sabor y tamaño.

 

 

 

Durante nuestro recorrido conocimos datos muy interesantes de la producción sostenible de arándanos. Un ejemplo es que también siembran en macetas con sustrato de coco, para aumentar la calidad y concentrar los nutrientes. Además, para evitar que las aves piquen y coman las frutas, cuentan con personal dedicado a tocar el tambor para espantarlas –¡literalmente!– e incluso contratan cetreros, especialistas en adiestrar halcones. Además de un gran compromiso con la inocuidad y calidad del arándano en campo, en esta compañía se esmeran en el empaquetado veloz y eficiente, de modo que el tiempo entre al cosecha y el embalaje sea el mínimo.

 

Campos de fresas por siempre

 

 

 

 

Nuestro viaje por Jalisco llegó a su fin cerca del Pueblo Mágico de Tapalpa, cerca del cual se ubican las instalaciones de Grupo Los Cerritos. En compañía de sus especialistas y agrónomos nos adentramos en los pormenores del cultivo de fresas, sin duda el berry más conocido en México y el que se produce en mayor volumen. Sin lugar a dudas, quedamos sorprendidos por las medidas de control, higiene y responsabilidad social con las que trabajan. Aquí cuentan con un reservorio para administrar su propio suministro de agua; riegan por goteo y han implementado una siembra tanto a ras de suelo como en mesas elevadas. Esta última modalidad no solo permite que la fresa crezca más sana y nutritiva, sino que evita que sus trabajadores deban pasar largas horas agachados mientras recogen el fruto.

 

 

 

 

En cuanto al rubro social, Grupo Los Cerritos tiene una posada con escuela para la pernocta y educación de su personal, que en gran medida proviene de zonas rurales de otros estados. Además, promueve actividades deportivas entre sus trabajadores y extiende estos beneficios a las parejas que han migrado con los empleados. De igual forma nos sorprendió saber que las medidas de cuidado e higiene de esta empresa, como de todas las demás asociadas a Aneberries, hacen posible comer el fruto directamente de la planta, sin necesidad de lavarlas o desinfectarlas.

Por supuesto, quedamos encantados con la estampa que ofrecen sus campos: frondosas hileras de las que surgen flores blancas, brotes de verde pálido y gordas fresas sonrosadas. Desde luego, no pudimos evitar cortar algunas y comerlas ahí mismo: el mejor homenaje al trabajo realizado por los agricultores y campesinos mexicanos.

 

 

Si quieres conocer más acerca de los estándares, actividades y asociados de Aneberries, echa un vistazo a su página web o sígueles la pista en su perfil de Instagram, donde comparten datos interesantes sobre los berries mexicanos. ¿Verdad que ya se antoja salir a comprarlas?

¿Sabes dónde también quedan perfectos? En tu copa, por eso te ofrecemos algunas recetas para preparar cocteles primaverales con flores y frutos.

Venerada en la gastronomía japonesa, esta fruta cítrica se ha ganado un estatus de culto entre los restaurantes y las cocinas caseras del mundo al aportar un sabor interesante tanto a platos sencillos como a postres. Clarissa Hyman y Andrea Cabrera develan sus secretos.  Fotos: Adobe Stock. 

Su tamaño puede variar entre el de una mandarina y el de una naranja pequeña, mientras que su cáscara es gruesa y rugosa. El yuzu es miembro del género Citrus, es decir, esta fruta cítrica es algo así como la hermana pequeña de origen asiático de las naranjas y las toronjas. Este ingrediente que cuelga de los árboles como un faro iluminado es ácido y ampliamente utilizado en la cocina japonesa.

El nombre de este árbol proviene del chino yòuzi. Se trata de uno de los más resistentes al frío de la familia de los cítricos. Crece de forma silvestre al interior de China, el Tíbet y Corea, pero está más asociado con Japón, donde se introdujo hace más de mil años. Actualmente este país lidera el camino de este fruto en términos de cultivo, especialmente a medida que aumenta su popularidad en Occidente.

El yuzu crece en arbustos erguidos o pequeños árboles espinosos con hojas muy perfumadas, y se utiliza durante todo el año, desde el fruto verde e inmaduro del otoño, hasta que se aproxima el invierno, cuando está maduro y se torna de color amarillo brillante. El yuzu tiene un aroma fresco e intenso, se percibe dulce como si mezclaras toronja y mandarina, mientras que su sabor es fuerte y astringente.

Es más aromático que la naranja, pero demasiado amargo para comerlo crudo; de ahí que en Japón se emplee principalmente como saborizante para aprovechar sus notas intensas. Debido a que sus semillas son mucho más grandes que las de las limas y los limones, es más difícil extraer su pulpa de color pálido.

 

Árbol de yuzu

 

 

Acidez que da sabor

 

En Japón se usa al igual que los limones, aunque su sabor es muy diferente. Si bien la fruta fresca puede ser difícil de encontrar, la ralladura es la parte más aromática y rica en aceites esenciales. Se puede obtener con un pelador o un cuchillo, para después secarla o confitarla. El yuzu también se utiliza en una amplia gama de dulces, pasteles y mermeladas, así como saborizante para snacks, como una versión de Doritos, y para refrescos, como la Yuzu Fanta.

Su popularidad entre los chefs occidentales quizá comenzó con el clásico y adictivo bacalao negro marinado con salsa yuzu y miso de Nobu, quienes también son creadores de la natilla de yuzu para tartas, y cuentan con dos sucursales en Ciudad de México: Polanco y Arcos Bosques.

Fuera de México, Yotam Ottolenghi, cocinero israelí, prepara una deliciosa ensalada de betabel confitado, lentejas y yuzu, mientras que Anna Hansen, chef al frente de The Modern Pantry en Londres, prefiere preparaciones más elaboradas como el salmón de Alaska ahumado en té con una salsa holandesa con yuzu y huevos pochados.

Aunque en el país el yuzu es difícil de encontrar, es más probable que exista en tiendas gourmet, orientales y algunas veces en el Mercado de San Juan. O bien, puedes visitar ciertos restaurantes como Mar del Zur en Monterrey, del chef Eduardo Palazuelos, donde disfrutarás de esta fruta en originales preparaciones como el tiradito de hamachi acompañado de salsa yuzu con soya y chapulines.

A medida que se extiende su fama, ahora el yuzu también se agrega como una fragancia para helados, postres, pasteles y más bocados dulces. Al comprarlo embotellado, busca jugo 100% natural, sin aditivos ni azúcar añadida, para obtener mejores beneficios.

 

Postres yuzu

 

 

Beneficios

 

El yuzu contiene vitaminas A y C, y es bajo en calorías. Contiene compuestos vegetales como carotenoides, flavonoides y limonoides, los cuales actúan como antioxidantes naturales. En la actualidad también se utiliza para crear cosméticos por sus diferentes beneficios a nivel cutáneo.

 

Dato curioso

 

Durante la noche del solsticio de invierno, los japoneses acostumbran a tomar un yuzu-yu, o baño de yuzu, para protegerse de los resfriados, cuidar la piel, calentar el cuerpo y relajar la mente. Se trata de un baño caliente en el que flotan varias frutas enteras envueltas en una gasa. Para hacerlo, sumérgete en la bañera, respira el aire perfumado y frota tu piel con la fruta ablandada. Después de esto, te prometemos relajación absoluta.

 

Ideas para prepararlo de forma práctica

 

Agrega un pequeño trozo de ralladura en el último momento a un tazón de sopa o sobre vegetales cocidos, pescado y guisos calientes. También funciona muy bien en un ramen de fideos udon o soba. Mézclalo con miso para hacer un condimento intrigante y úsalo como aderezo para ensaladas verdes o tazones de edamames. Incluso puedes hacer un hermoso contenedor con la cáscara de yuzu quitando toda la pulpa, manteniendo la piel intacta y rellenándola con miso para después hornearlo. Finalmente, no olvides que el ajonjolí tostado en un aderezo de yuzu agrega textura y una sutil nota cítrica a fideos y ensaladas.

El yuzu va bien con… Adobos y salsas, su sabor es ideal para aromatizar vegetales y tofu; también funciona con carne de cerdo. Es sublime en aderezo para aliñar los pescados crudos. La cáscara de este fruto se puede incorporar en sopas y platos cocinados a fuego bajo. En la barra, pruébalo con ginebra en lugar de limón, así como en mojito.

 

Yuzu

 

Otros cítricos japoneses populares

 

Sudachi (Citrus sudachi) Cítrico pequeño y redondo, muy aromático y con un sabor ácido que recuerda a la lima.

Kabosu (Citrus sphaerocarpa) Un cítrico muy típico de la prefectura de Oita en la isla de Kyushu. Su pulpa es amarilla y jugosa, y su sabor fuerte y refrescante.

Hassaku (Citrus hassaku) Originaria de las prefecturas de Ehime, Hiroshima y Wakayama.

Iyokan (Citrus iyo) Fue descubierta en Yamaguchi en la era Meiji. Su piel es gruesa, pero se puede pelar con las manos, y es ligeramente ácida.

Natsumikan (Citrus natsudaidai) También se le conoce como naranja japonesa de verano. Produce mucho jugo, pero tiene poco dulzor y es bastante ácida.