Vibrante y cosmopolita, la ciudad más poblada de Brasil tiene múltiples rostros y encantos, que descubrimos en un viaje que comenzó con el pie derecho, con un cómodo vuelo nocturno de Aeroméxico —menos de 10 horas y sin escalas. Cerramos los ojos sobrevolando el continente y al abrirlos ya estábamos en cielos brasileños, disfrutando del desayuno a bordo y listos para aprovechar el día entero en São Paulo. ¿Nuestra primera parada? El hotel de Marriott Renaissance, nuestro centro de operaciones y refugio ideal. Fotos: Cortesía y Mariana Pérez. 

 

Renaissance São Paulo Hotel: equilibrio entre exploración y descanso

 

Con la calidad que garantiza la cadena hotelera más grande del mundo, Marriott International, los hoteles Renaissance están pensados para quienes amamos salir a explorar la ciudad y al mismo tiempo buscamos el reconfortante apapacho de un hotel que sabe consentirte. En el caso de Marriott Renaissance São Paulo Hotel, con exquisito diseño, extensa colección de arte, gastronomía y servicio de navigators, quienes te ayudan a planear un itinerario nivel experto. Además, el gimnasio 24 horas y el spa con piscina exterior, jacuzzi y sauna fueron justo lo que necesitábamos para recargar pilas antes o después de cada aventura en São Paulo.

 

Marriott Renassaince Hotel São Paulo

 

Nuestro día empezaba siempre disfrutando el inigualable paisaje de rascacielos —dicen que en São Paulo hay alrededor de 6 mil edificios— desde nuestra habitación o desde uno de los pisos superiores en donde tomábamos el desayuno. A la hora de la comida, Terraço Jardins era una delicia, tanto por su espacio que se siente como un verde oasis en medio de la ciudad, como por su cocina brasileña con influencia del campo y la costa.

En la noche, Living Lounge Bar & Sushi era el lugar en donde nuestra conversación se hilaba sin prisa y entre risas. Aquí, la gastronomía brasileña también se hace presente con entradas como el pastel de feira con bobó de camarão (empanadas rellenas de un guisado de camarones y salsa de pimiento) y las coxinhas (similares a las croquetas de pollo), además de las imperdibles caipirinhas, pero el rey del menú es el sushi y no hay que irse sin probarlo. “La mejor comida japonesa fuera de Japón está en Brasil”, aseguró nuestra anfitriona, y la experiencia no la desmintió.

 

Marriott Renassaince Hotel São Paulo

 

No menos importante es la inmejorable ubicación de Marriott Renaissance São Paulo Hotel. Se encuentra en el distrito de Jardins, en donde las antiguas casonas recuerdan el auge del sector cafetalero. A unos pasos está la famosa Avenida Paulista y la calle Oscar Freire que hay que recorrer a pie al menos una vez para ver boutiques de moda, diseño, bares y restaurantes, los mejores de São Paulo. 

 

El arte que hace vibrar a una ciudad

 

Para entrar en contacto con la vena creativa de São Paulo, nada como el Parque do Ibirapuera, un hito de la ciudad en donde las obras arquitectónicas de Oscar Niemeyer dialogan con el paisaje y parecen tan vanguardistas como cuando fueron creadas hace 70 años. Nosotros iniciamos la visita en el Pabellón Ciccillo Matarazzo​, antiguo Palacio de la Industria, una construcción de Niemeyer que vale la pena visitar solo por el gusto de recorrer sus sinuosas rampas y ver el espacio transformarse a cada paso. Pero en esta ocasión, la recompensa fue doble, pues a la maestría arquitectónica se sumó la 35ª Bienal de São Paulo, una de las citas más importantes del arte contemporáneo internacional.

 

Museu de Arte de São Paulo

 

Afuera, los paulistanos hacían picnics y se reunían en torno a los puestos que los fines de semana venden todo tipo de antojos —no dejes de probar el helado de açaí y el acarajé, un platillo de origen africano—. Las parejas y familias bailaban improvisadamente al ritmo de la samba en vivo.

La siguiente parada en la agenda del arte fue el Museu de Arte de São Paulo, un espacio que también conjuga una icónica arquitectura modernista (esta vez a cargo de Lina Bo Bardi) y un programa expositivo de primer nivel. Su extenso acervo incluye nombres como Botticelli, Bosch, Cézanne, van Gogh, Modigliani y más.

Otro museo que definitivamente merece una vista es la Pinacoteca de São Paulo, con un acervo de 6 mil obras que incluye pintura, escultura, collage, dibujo y otras técnicas, además de un interesante programa de exposiciones temporales nacionales e internacionales. 

Por último, Beco do Batman es una zona en donde el arte urbano es el protagonista. Entre sus callejones con coloridos murales te encontrarás bares, galerías, botecos (pequeños establecimientos con bocadillos y bebidas) y puestos callejeros que ofrecen joyería, artesanías, viniles y más

 

Arte en Beco do Batman

 

 

Conocer São Paulo a mordidas

 

La gastronomía del norte y nordeste de Brasil se encuentran excelentemente representada en el restaurante paulista Balaio IMS, a cargo del chef Rodrigo Oliveira. 

A nuestra mesa llegaron delicias como el mix de hongos con berenjena y salsa de tucupi preto (una salsa hecha a partir de la fermentación de la raíz de la mandioca, que se exprime con un utensilio indígena llamado tipiti) y el baião cremoso con queso, arroz, frijoles del nordeste de Brasil, crema de leche, reducción de cebolla morada y pimiento. Con opciones vegetarianas y libres de gluten y una coctelería exquisita, Balaio IMS es una parada imprescindible en la famosa Avenida Paulista.

No te vayas sin asomarte a ver la escultura monumental del aclamado estadounidense Richard Serra en el patio del fondo, que dialoga con los rascacielos circundantes. 

 

Restaurante Balaio

 

Otra excelente opción para el paladar es A Casa do Porco, que en 2023 se coronó con el puesto número 12 del ranking mundial y el número 4 en los Latin America’s 50 Best Restaurants. El nombre no deja lugar a equivocaciones: en este restaurante de la chef Janaína Torres Rueda, el puerco reina en todas sus presentaciones. Desde el embutido de cabeza y las tapas de puerco asado con yuca que iniciaron con el festín, pasando por su versión del club sándwich con tripa frita y hasta un postre con tocino, quedamos sorprendidos por la versatilidad de este animal tan presente en la cocina de Iberoamérica.

 

Balaio, restaurante de São Paulo

 

Estos son solo dos restaurantes entre un sinfín de propuestas gastronómicas que reflejan la diversidad de los sabores paulistas. En tu visita seguramente sumarás más a la lista y te darás cuenta que São Paulo es una ciudad intensa, diversa, fascinante y culturalmente desafiante. Es, como la llaman los brasileños, “la ciudad que no puede parar”. 

Reserva en aeromexico.com y marriot.com. Y si quieres seguir explorando los restaurantes de São Paulo, aquí tienes más recomendaciones.

Si tienes como próximo destino de viaje a la ciudad más grande de Brasil y Sudámerica, es imprescindible que saborees la inmensidad de su propuesta culinaria. ¿No sabes por dónde empezar? Entonces visita cualquiera de estos restaurantes de São Paulo donde se comprueba que la riqueza de Brasil es tan grande como su territorio. Fotos: Arturo Torres Landa

 

4 restaurantes para saborear São Paulo

 

D.O.M., toda una institución brasileña

 

DOM, uno de los mejores restaurantes en Sao Paulo

 

Alex Atala es, sin duda, una de las figuras más conocidas de la gastronomía brasileña, pues se ha encargado de extraer elementos y productos de la selva amazónica para presentarlos con técnicas de vanguardia. Dentro de D.O.M., su restaurante en São Paulo, el chef propone un menú degustación que ensalza la diversidad natural y cultural de Brasil en tono gourmet. Así, la experiencia comienza con un vino natural Aluá tan fresco que debe consumirse en menos de dos meses, todo junto al aperitivo más clásico del restaurante: una hormiga amazónica acompañada de esferificaciones de agar-agar, algas y frutas congeladas. El insecto ha sido teñido de un rosa brillante, y a decir de Atala, lo hicieron “por pura fantasía”. En el extremo, por su emplatado sencillo, se encuentran los camarones cubiertos con polvo de café y el pirarucú salado al pil-pil con tapenade de açaí: se desbarata como un flan.

El salón de D.O.M., uno de lo restaurantes de São Paulo galardonado con Estrellas Michelin, está decorado con cráneos de animales, tocados de plumas y cestos confeccionados por pueblos originarios. La sensación que se tiene dentro es la de haber sido invitado a la casa de un explorador del siglo XIX. En buena medida, el trabajo de su creador ha consistido en abrirse paso por la selva para abrirle los ojos al mundo sobre la cocina de Brasil y su alacena.

 

Evvai: uno de los restaurantes más divertidos de São Paulo

 

Restaurante Evvai

 

En la actualidad, millones de paulistas tienen un ancestro italiano, una herencia que es columna vertebral de Evvai (puesto 14 en los Latin America’s 50 Best Restaurants), uno de los restaurantes de São Paulo  que se ha especializado en servir cocina oriundi, como se conoce a los descendientes de italianos. Aquí, el chef Luis Filipe Souza construye una experiencia electrizante y desenfadada, la cual comienza al abrir una caja de joyería puesta al centro de la mesa. De ella emergen bolitas de pão de queijo cubiertas con hoja de oro, así como rollitos de melón con prosciutto que anuncian que la cena se desenvolverá con teatralidad. El pão de mandioca con manteca de frambuesa no decepciona en cuanto a efectismo, pues se sirve en una ostra colocada sobre la escultura de un coral. Lo mismo sucede con la bomba de vieira, que sirven emplatada en los dedos de una mano de yeso que hace el típico ademán italiano.

La cocina de este espacio, uno de los restaurantes de São Paulo más destacados, también tiene un elemento hogareño que se palpa en el pescado al acqua-pazza, método italiano para escalfar pescados blancos. Servido con aceitunas, alcaparras y tomate deshidratado, se baña en caldo frente al comensal para que el líquido termine de cocinar la carne suave. La cena cierra con la paleta de pistache y cupuazú, especie de cacao blanco que, en palabras del chef, es pariente del pistache. Con la primera mordida, del interior del postre surgen diminutos caramelos efervescentes (Peta Zetas en España, Crazy Dips en México), los cuales revientan en reacción en cadena por toda la boca.

 

A Baianeira: un viaje a Salvador de Bahía

 

A Baianeira, uno de los Restaurantes en Sao Paulo

 

Cuando se le pregunta a los chefs paulistas por la cocina regional de Brasil que más les emociona, la gran mayoría menciona a Salvador de Bahía, en el noreste del país, pues concentra las expresiones culturales más auténticas del Brasil afrodescendiente, mestizo e indígena. Para averiguar por qué los restaurantes de São Paulo toman inspiración de la cocina de este estado, hay que comer en A Baianeira, situado en el distrito emergente de Barra Funda. El inmueble donde se instala este restaurante es la antigua casa de la chef, Manuelle Ferraz, y quizás por eso el espacio se percibe entrañable. El balconcito que da a la calle regala vistas a otros balcones con postigos azules, hacia árboles que sueltan nueces gordas y a una maraña de cables de alta tensión donde se posan pajarillos amarillos.

Para abrir apetito, hay que pedir un Goró de Mainha, bebida artesanal hecha con cachaça, limón mandarina, piña, jengibre y especias. Después, probar el pão de queijo relleno y un pastel do día: el relleno suave y exterior crujiente de esta fritura salada, muy tradicional de Brasil, pone a la boca sobre aviso. En A Baianeira, hay menús del día o a la carta, aunque no debe faltar en la mesa el picadinho de panela, un estofado de carne a la cacerola que aquí emplatan con un huevo estrellado y acompañan con un plátano verde frito con hojas de col, servido con arroz blanco, feijoada y farofa a unlado. Se trata de uno de los restaurantes de São Paulo con más sabor hogareño y autóctono.

 

Mar, trópico y origen en Taioba

 

Taioba, en las playas de Sao Paulo

 

Además de ser la cuarta ciudad más grande del mundo, São Paulo es capital de un estado del mismo nombre con un amplio litoral marino. Así, es costumbre de los paulistas tomar la carretera los fines de semana, cruzar las montañas cubiertas de mata Atlántica hasta llegar a alguna playa y ahí probar las propuestas de sus restaurantes. Una de las más populares es la de Camburi, en donde el chef Eudes Assis ha establecido uno de los restaurantes más innovadores del estado de São Paulo: Taioba. El nombre de su establecimiento rinde honor a una enorme planta tropical, en tanto que su concepto homenajea a la cocina caiçara, palabra de origen tupí para referirse a los habitantes de la costa Atlántica de Brasil, descendientes de portugueses, indígenas y africanos.

Para difundir mejor su cultura y conservarla, Assis ofrece una carta con recetas que abrevan de los saberes de su comunidad, como sucede con la manjubinhas, especie de anchoas locales cubiertas con panko y mayonesa que se deshacen en la boca a pesar de su crocancia. Si se tuviera que pedir solo plato, esta debería ser la moqueca: cocido de pescado y mariscos con arroz, coco y castaña de Pará, que llega burbujeando a la mesa. Es una suerte de curry tropical que reconforta como suelen hacen los caldos hogareños. Insignia de la casa (además de la caipirinha de mandarina con limón y pimienta rosa) es también el plato Azul Marinho, compuesto por un filete de pescado con plátano verde y papilla de camarón, todo cocinado al calor de una cacerola de hierro forjado, utensilio caiçara por antonomasia

Como has podido ver, la oferta culinaria es muy diversa y amerita adentrarse en ella poco a poco, con cada visita a esta ciudad multifacética. Si se te abrió el apetito, y quieres conocer las propuestas de estos restaurantes en São Paulo, recuerda que hay vuelos directos desde la Ciudad de México.

 

Y si tu antojo te exige cruzar un océano, tras conocer la promesa de estos restaurantes, mira aquí dónde comer en Roma: 3 spots favoritos de los locales

Pensar en té es apuntar a China, India, Japón, Sri Lanka, Malawi, Vietnam, Kenia, Indonesia y un puñado de países que lideran su producción mundial. De entre todos estos, uno sigue siendo relativamente desconocido a pesar de su vasta y fascinante historia: ¡Brasil! Fotos: Escuela Mexicana de Té, Chás Amaya & Sítio Shimada. 

El cultivo y manufactura de té en Brasil es resultado de su herencia colonial temprana y de la profunda influencia de Oriente experimentada a lo largo de los siglos. Una y otra vez le hemos contado que los portugueses fueron los primeros occidentales que tuvieron contacto con la infusión de hojas y brotes de Camellia Sinensis, la planta del té; su avanzada tecnología naviera, así como su fascinación por los aromas y sabores del Lejano Oriente, favorecieron el inicio del comercio de hebras entre Asia y Europa a principios del Siglo XVII. Es lógico pensar que la colonización del territorio que hoy ocupa Brasil, a cargo de los portugueses, incluyó el propio cultivo de la Camellia Sinensis.

 

Tés de Brasil

 

Tés de Brasil

 

Las primeras referencias apuntan a la corona portuguesa como el gran detonador de la producción de té en Brasil. Semillas y mano de obra traídos desde China florecieron rápidamente en estos territorios, en particular en los más próximos a São Sebastião do Rio de Janeiro. El Jardín Botánico de la otrora capital del Imperio Portugués incluso actuó como estación de investigación y desarrollo de nuevas tipologías de té. ¡Fascinante!

Con la consumación de su independencia, en 1822, el té brasileño inmediatamente se adhirió al listado de productos nacionales de gran valor. El nuevo gobierno, liderado por Pedro I, dio órdenes al Jardín Botánico de Río de Janeiro para incentivar su manufactura, creando documentos detallados de cultivo de plantas y enviándolos junto con semillas a todas las provincias brasileñas.

 

São Paulo gran productor de té

 

De forma paralela, São Paulo y Minas Gerais también desarrollaron plantaciones de té con semillas recolectadas del Jardín Botánico de Río. Sin embargo, debido a la falta de conocimientos sobre su procesamiento, el té fue rápidamente opacado por el café y la expansión urbana. A pesar de estos obstáculos, São Paulo se las arregló para exportar 30 toneladas de té en 1850 e incluso, en 1862, enviar muestras de té para competir y ganar en la Exposición Universal de Londres.

 

Tés de Brasil

 

Sin embargo, la gran revolución llegó de la mano de los inmigrantes japoneses. En 1922, Torazo Okamoto comenzó el cultivo de plántulas niponas en su propiedad del Vale do Ribeira, en São Paulo; incrustado en el Bosque Atlántico brasileño, este territorio permitía la obtención de hojas de calidad gracias a su gran humedad, altas temperaturas y abundantes lluvias.

Okamoto apuntó originalmente a la producción de té verde para vender entre sus compatriotas, sin embargo, rápidamente vio el potencial comercial del té negro. Convencido, viajó a Japón para buscar varietales adecuados, sin embargo, en su camino de regreso decidió hacer una visita a Sri Lanka, donde se apoderó de algunas semillas de Camellia y logró llevarlas a casa de contrabando escondidas en hogazas de pan. Así inicio la era dorada del té en Brasil.

 

¿Qué tés se producen en este territorio?

 

Brasil

 

¡Literalmente todo!, desde tés negros de estilo ortodoxo, hasta tés blancos, verdes y oolongs en hojas sueltas, así como algunos tés verdes pulverizados… ¡Sí, como el matcha! Algunos productores de gran prestigio, como Yamamotoyama do Brasil, incluso elaboran variedades artesanales de Shincha, Sencha, Bancha, Genmaicha y Hojicha para exportación.

Si bien los consumidores brasileños históricamente han preferido al café y la yerba mate por encima del té, en la última década ha surgido un nuevo mercado ansioso por descubrir hebras de especialidad y bebidas ricas en compuestos benéficos para la salud, detonando una novedosa revolución. A México, cabe decir, sólo llegan tés brasileños en maletas de turistas, visitantes y entusiastas que tienen la oportunidad de adquirirlos en su territorio natal. Si los ve por ahí no pierda la oportunidad de probarlos… ¡Son únicos y realmente excepcionales! escueladete.mx

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Este año, el American Express Icon Award 2020 fue otorgado a Janaina Rueda. Este reconocimiento, otorgado por los Latin America’s 50 Best Restaurants, representa un ejemplo para la comunidad de cocineros latinoamericanos que están cambiando la industria por medio de sus acciones. Sigue leyendo sobre la entrevista que tuvimos con ella y descubre por qué esta chef brasileña es la merecida ganadora de dicho reconocimiento. Fotos: Cortesía.

 

Pasión por la cocina

 

La chef Janaina Rueda comenzó a trabajar desde una edad temprana, a los 14 años, y siempre cocinaba para sus seres queridos como parte de algo que disfrutaba hacer. Por ello, su idea siempre fue abrir un restaurante en donde sirvieran cocina popular y de casa.Cuando tenía 27 años conocí a Jeferson Rueda y él me fue enseñando a cocinar profesionalmente y también a cuidar de un restaurante. Nos casamos y abrimos Bar da Dona Onça donde yo nací, en el centro de São Paulo”, recuerda. 

 

 

Más tarde, en 2008, abrieron A Casa do Porco y fue un suceso impactante que se centrara en una cocina muy casera, con todas las bases y técnicas de los restaurantes de manteles largos, y con el cerdo como elemento principal. “Empezamos a hacer acciones culturales en torno al cerdo y estos eventos tuvieron mucho éxito. Se vendía a precios populares con guarniciones incluidas”, recuerda. Esta especie de acción social que hacían desde la calle les daba la oportunidad de tener una venta  de cerca de 4 mil raciones con un precio de menos de 2 dólares por persona, algo bastante accesible y exquisito para todos.

Este restaurante, ubicado en el número cuatro de los Latin America’s 50 Best Restaurants, se ha convertido en una parada obligada de São Paulo. “Nosotros somos agricultores familiares, criamos el cerdo, y fue un trabajo de muchos años. Con un menú de degustación de 25 dólares, esto es una forma de pensar que la “alta cocina” debe ser accesible para muchas personas, no para unas cuantas”, afirma la chef.

 

A favor de la comunidad

 

Una de las cosas que convirtieron a esta chef en un ícono de Latinoamérica es su interés por la educación alimentaria: “Queremos desmitificar el hecho de que en Brasil existe una “alta” o “baja” gastronomía. Esto no existe, lo que hay es comida buena, y puede ser comida popular o fine dining. Me gusta hacer las dos cosas juntas y que las personas prueben lo que no probarían en un restaurante popular, como ingredientes nativos o muy costosos, quiero que todos conozcan lo que existe en toda la ola de gastronomía brasileña a través de estos platos”, cuenta.

 

 

De esta forma, Janaina Rueda considera una verdadera gratificación que su trabajo pueda contribuir al bienestar de los demás. “Cuando miramos personas muy sencillas accediendo a probar nuestra comida y les gusta es muy gratificante, esa es la misión”, dijo Janaina Rueda en entrevista. Otro ejemplo de su gran corazón es que fue voluntaria en un programa en el que logró que la calidad de los desayunos escolares mejoraran para las escuelas públicas hace 5 años. Esta labor la hizo al capacitar a cerca de 1800 cocineras y modificar el menú por uno con comida fresca, natural y equilibrada.

Algunos de los pensamientos que hacen que esta chef sea una verdadera inspiración para cocineros es que busca unión para hacer bienes sociales. Así, Janaina Rueda afirma: “No solo tenemos que hablar, hay que hacer acciones que lleguen a la población. La misión de los cocineros es buscar accesibilidad para que las masas populares puedan comer productos mejores; buscar ser accesibles. Cambiamos el mundo de la alimentación cuando podemos dar acceso. Todos los cocineros debemos empezar a luchar por eso, todos, juntos, principalmente de América Latina”.

 

American Express Icon Award 2020

 

Con este premio, la chef pretende ayudar a muchas más personas, en lo que considera que la visibilidad conlleva una responsabilidad. “Me siento muy contenta, es una expresión de amor cuando tu recibes algo como esto; es como si recibieras un corazón grande y es gratificante, pienso que si yo tengo este reconocimiento, preciso ser una persona mejor, tengo que apoyar a más gente y es un compromiso aún mayor para seguir ayudando«, declaró.

 

 

Con el título de American Express Icon Award 2020, la chef afirma que quiere ser una voz de todos los cocineros de América Latina. Y como mensaje en tiempos de contingencia, la chef cree firmemente que la buena comida se vende donde sea: «si eres buen cocinero siempre habrá éxito, porque pueden tirar todo de nosotros, pero nunca nuestro talento y amor por la cocina«. Por último, Janaina Rueda nos compartió que la pandemia es una oportunidad para ver la vida de otra manera: «Podemos vivir más simples, la pandemia también fue un paraíso para entender que podemos vivir con menos», afirmó con el optimismo que le caracteriza. 

 

 

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Sheraton Hotels & Resorts es la marca más global y antigua de Marriott International, con presencia en más de 70 países alrededor del mundo. Sin embargo, todo lo clásico debe renovarse para agradar al viajero actual. Prueba de esto son los nuevos hoteles como el Sheraton Santos, ubicado cerca de la ciudad de São Paulo, en Brasil. Fotos: Cortesía Marriott International. 

Este rediseño ya se ve plasmado en el lobby de Sheraton Santos, que deja de ser un simple lugar para registrarse y se convierte en un espacio para interactuar. Ahí mismo encontrarás el bar/cafetería que por las mañanas ofrece café de origen local y por las tardes y noches brinda coctelería basada en Brasil.

 

Sheraton Santos

 

Su restaurante Lagar hace también énfasis en la cultura local, marcada por la población portuguesa que llegó a fundar la ciudad. El chef Erick de Domenico crea versiones modernas con bacalao como el gratinado en horno de piedra, con palmitos y cebolla caramelizada o el que va acompañado de puré de papa al ajo y limones asados.

De las 212 habitaciones y suites del Sheraton Santos, las preferidas son las que te dan acceso al Sheraton Club Lounge, un espacio exclusivo donde puedes trabajar con tranquilidad y disfrutar de desayuno, bocadillos o la hora feliz. Además, la playa está muy cerca, pero la alberca techada con inmejorables vistas es otra opción para descansar después de un largo día.

 

Sheraton Santos

 

Así que ya lo sabes, si estás por viajar a São Paulo, en Brasil, entonces  debes hospedarte en el hotel Sheraton Santos, y disfrutar de su renovación, ideal para el viajero actual. sheraton.com/santos