La identidad nacional es un sentimiento que proviene del orgullo de nuestras raíces. Diferentes productos, situaciones y tradiciones la provocan; entre ellos las bebidas con cierto contenido alcohólico. Aquí te dejamos algunas bebidas  que son representativas de cinco países del mundo. ¿Cuáles conoces?

Cachaça

Siente el ritmo de la samba con una caipirinha. Preparar este coctel es sencillo, solamente necesitarás limón, azúcar, hielo y cachaça, destilado considerado como símbolo de identidad brasileña. Está hecho del jugo de caña fermentado y destilado; su historia se remonta al siglo XVI, cuando la economía de Brasil se basaba en la producción de azúcar de caña.

Sake

¡Kampai! Con esta frase los japoneses brindan, y tú también puedes hacerlo, si es que tienes una «copita» de sake a la mano. Esta bebida nipona existe desde el siglo III, y está hecha a partir del grano de arroz cocido al vapor y fermentado. Puedes disfrutarlo tanto caliente como frío, dependiendo de la temporada del año en que te encuentres.

Pisco

La controversia podría ser eterna, pues el origen de esta bebida se lo adjudican dos países latinoamericanos: Chile y Perú. Es por esta razón que su elaboración posee distintos estándares. En el primer país, es elaborado por la destilación de vino de uvas como la moscatel y torontel; mientras que en el segundo, es un aguardiente obtenido por destilación de mostos frescos de uvas recientemente fermentadas.  Sin embargo, ambos son refrescantes y fuertes, por lo que te recomendamos consumirlo con cautela y responsabilidad.

Jerez

Es un producto con denominación de origen español, que debe su nombre a la ciudad que lo vio nacer, Jerez. Se trata de un vino joven al cual se le añade un pequeño porcentaje de aguardiente de vino, lo que le otorga una faceta a licor. Es ideal para tomar como aperitivo, pero también para cocinar pasteles, sopas, guisos y adobos.

Pulque

El agave es un símbolo ineludible del paisaje y la gastronomía mexicana. Esta planta es el origen de distintas creaciones, incluyendo al aguamiel, la principal materia prima para el pulque. Las civilizaciones prehispánicas lo consideraban una bebida de los dioses, sin embargo todos podían consumirlo, desde viejos y mozos, hasta niños. Actualmente puedes encontrarlo en pulquerías, establecimientos que lo sirven de forma natural o combinado con pulpa de fruta.