Ya le hemos dicho que los grandes horneados de la panadería internacional merecen contrapartes líquidas igualmente complejas. Entre las duplas más placenteras de la temporada navideña, ninguna es tan deliciosa como… ¡Fruitcake & Té! Fotos: Escuela Mexicana de Té.

Con orígenes que pueden trazarse hasta la época del Imperio Romano, el fruitcake es uno de los horneados más tradicionales de la época decembrina. Su antecedente más cercano, a nivel histórico, es una masa con frutos secos elaborada en tiempos romanos, que evolucionó en múltiples versiones regionales: el stollen alemán, el panettone italiano y, por supuesto, el fruitcake.

 

Nueces, almendras, pistaches, uvas pasas y cerezas, generalmente maceradas con brandy o cognac, forman parte de sus ingredientes. La mezcla de frutos secos se aglutina con mantequilla, azúcar, huevo y harina, para después hornearse y decorarse con más almendras, azúcar y frutos deshidratados. Este complejo perfil sensorial, plagado de dulzor, es lo que nos obliga a pensar en la infusión de hojas y brotes de Camellia Sinensis como su aliado indiscutible.

 

Fruitcake

 

¿Con qué tés se puede acompañar el fruitcake?

 

Si pensamos en una masa tradicional aromatizada con destilados de uva y profundos tonos de mantequilla y frutos secos, la respuesta son tés negros puros y oolongs de alta oxidación. Una buena taza de Sun Moon Lake, producido de forma artesanal en las montañas del Condado de Nantou, en Taiwán, es perfecto para la unión.

Imagine su corpulenta y estructurada infusión, con potentes aromas de frutos rojos maduros y recuerdos de algodón de azúcar y manzanas rojas caramelizadas, al compás del propio horneado decembrino. Del lado de los oolongs puros, nada como el Formosa Oolong, cuyos intensos aromas de frutos rojos maduros y pasificados, con astringencia refrescante y largo final frutal, permiten equilibrar el intenso dulzor del horneado.

 

Fruitcake y té

 

Pero no es todo, ¡no! Algunos tés verdes tostados y blends de té de corte europeo, también tienen cabida. El Hojicha japonés, repleto de potentes aromas de nueces rostizadas y explosivos sabores vegetales dulces, encuentra armonía con los tonos de mantequilla y fruta cristalizada de este panecillo. Lo mismo sucede con el mítico Earl Grey, cuyos recuerdos de bergamota hacen de la unión todo un suceso.

 

¡Ha prepararlo se ha dicho!

 

¡Y sí…!, la infusión de hojas y brotes de Camellia Sinensis también tiene espacio como un ingrediente más de la masa horneada. Existen miles de recetas que incorporan hojas de té o extractos de té a la base de harina y frutos secos previo a su cocción. ¿Cómo hacerlo? La recomendación es infundir el té con agua caliente, siguiendo los tiempos y temperaturas recomendados para cada tipología. Una vez lista la infusión, es necesario añadir los frutos secos y permitirles absorber completamente el sabor del té; después colarlos y, enseguida, comenzar la maceración con brandy y cognac.

¡Ojo!, un buen fruitcake decembrino macerado con ron también puede incorporar una pizca de matcha culinario en su masa cruda o espolvorearse este delicioso té verde puro justo antes de servir. Las deliciosas notas vegetales del té verde son perfectas para acompañar almendras, pistaches, nueces… ¡Bienvenida Navidad! escueladete.mx

 

Postres de Navidad

 

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Llegó Navidad, esa temporada del año en que té e infusiones calientes adquieren un carácter especial. De entre todas la expresiones líquidas que se sirven en Occidente, ninguna es tan importante en los festejos decembrinos como el Christmas Spiced Tea. ¡Tranquilo!, querido lector, prometemos dedicar la próxima entrega a nuestro tradicional ponche navideño mexicano. Fotos: Escuela Mexicana de Té. 

A través de su libro, Sed de Imperio: Cómo el té dio forma al mundo moderno, la investigadora Erika Rappaport, profesora de historia en la Universidad de California en Santa Barbara, describe los orígenes del vínculo que existe entre té y Navidad. Ya le habíamos dicho que hace 200 años, por extraño que parezca, poco se valoraba una taza de camellia sinensis (la planta del té), frutas, flores o especias durante la temporada decembrina.

 

¿Té en vez de alcohol?

 

Té de Navidad

 

Hasta mediados del Siglo XIX, Navidad era una fecha en la que los hombres de clase trabajadora en el Reino Unido y los Estados Unidos aprovechaban para celebrar en bares y barras, gastando su salario en el consumo desmedido de licores, destilados, aguardientes y demás bebidas alcohólicas. No son raras las ilustraciones y carteles de la época, donde se miran mujeres irrumpiendo en bares con sartenes levantadas para arrastrar a sus maridos ebrios a casa.

En la década de 1830, los detractores de la embriaguez pública fijaron su mirada en la Navidad. Los miembros de este movimiento, tanto en Reino Unido como en los Estados Unidos, apuntaron al té como la bebida ideal para la fecha; típicamente, celebraban fiestas de té masivas en salones decorados con ramas de pino, frutas de temporada y especias invernales. De acuerdo con Rappaport, hasta 4 mil asistentes de clase media y trabajadora eran invitados a sentarse en largas mesas comunes para escuchar testimonios que destacaban las virtudes de una vida libre de alcohol. Fascinante, ¿a poco no?

 

Té con sabor a Navidad

 

blend de té negro

 

Con el paso de los años, la infusión de camellia sinensis fue incorporando aquellos ingredientes de temporada: canela, clavo de olor, esencias cítricas, jengibre, anís, frutos deshidratados, caramelo y todo tipo de edulcorantes, desde azúcar refinada hasta miel de abeja. Así nació el popular Christmas Spiced Tea, blend de té negro con jengibre, canela y piel de naranja, cuyo origen puede situarse claramente en la Era Victoriana. Ciertamente, el Christmas Spiced Tea recuerda al té ruso, elaborado a partir de hebras oxidadas y ahumadas, enriquecidas con azúcar, miel o mermelada, gajos de frutos cítricos y clavo de olor.

Hoy, más que un único blend de té, el Christmas Spiced Tea responde a toda una categoría de blends especiados. Cada país, región, casa de té y consumidor final tiene su propia receta, aunque siempre se opta por tés robustos y de buena potencia sensorial, generalmente negros, además de canela, clavo de olor, jengibre, anís y un sinfín de frutos cítricos.

 

blend de té negro

 

Después de 190 años de historia, aún hay quienes buscan reunir a las bebidas alcohólicas con la tradición del té. Y es que, múltiples son las recetas que incorporan ron, brandy y otros destilados a la infusión de camellia. Diremos que, mientras el consumo sea responsable, todo es válido en el fascinante mundo del té.  escueladete.mx