La oferta de hoteles en Vancouver se fusiona con maestría con su entorno natural, su rica diversidad cultural, su enfoque en la sostenibilidad y su espíritu inclusivo. Aquí te dejamos nuestros hospedajes soñados para que tomes nota para tu próximo viaje. Fotos: Cortesía.

 

Hoteles en Vancouver donde debes hospedarte

Rosewood Hotel Georgia Vancouver

 

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por Rosewood Hotel Georgia (@rosewoodhotelgeorgia)

Meticulosamente restaurado para conservar su esplendor original, la arquitectura clásica y elegante del edificio de este histórico hotel captura la esencia de una época antigua en Vancouver. Operado por Rosewood, cuenta con un total de 156 habitaciones y suites. Cada una de ellas está cuidadosamente diseñada para brindar comodidad y sofisticación. rosewoodhotels.com

 

Lee más Rosewood Hotel Georgia: el arte de la hospitalidad en Vancouver. 

Continue reading «Nuestros hospedajes soñados en Vancouver»

Ser una de las ciudades más cosmopolitas del mundo es un pasaporte con acceso ilimitado para saborear el mundo entero. La presencia de cocineros y cocineras de diversos orígenes y la disponibilidad de productos locales de alta calidad han dado vida a una escena culinaria rica, moderna y ecléctica. Esta es nuestra lista de restaurantes favoritos en Vancouver. Fotos: Marck Gutt.

 

Deleitarse con sabores multiculturales

 

Los encantadores restaurantes de Vancouver, dueños de una personalidad única y  localizados en diversos barrios históricos y mercados coloridos, reflejan la diversidad de culturas que convergen aquí, en la onírica ciudad de Vancouver.  

A finales de 2022, la ciudad canadiense se convirtió en la segunda en Canadá en contar con su propia Guía Michelin, una lista que sirve de inspiración perfecta para trazar una ruta de sabor. 

Aunque la Guía Michelin está integrada por ocho restaurantes que recibieron una estrella, nosotros tenemos nuestra propia guía de sitios favoritos para comer en Vancouver. Toma nota y saborea esta ciudad multiétnica.

 

Dónde comer en Vancouver

 

St. Lawrence

 

St Lawrence

 

Uno de los ocho restaurantes que recibieron estrella Michelin el año pasado y que, desde el 2009, es uno de los favoritos de la escena gastronómica local. Desde la cocina abierta de su íntimo y encantador restaurante, el chef Jean-Christophe Poirier traslada los sabores rústicos y reconfortantes de Quebec y Francia a la moderna costa de Columbia Británica, haciendo uso de la gran diversidad y calidad de productos locales. El ambiente es de lo más hogareño y cálido, y deja ver a los cocineros hacer un espectáculo con los ingredientes locales y dejarse llevar por el menú de siete tiempos con maridaje sugerido es toda una experiencia culinaria. stlawrencerestaurant.com

 

Nightshade

 

Nightshade

 

Es un paraíso vegano, donde se ofrece una gran diversidad de platillos de inspiración mundial ejecutados con maestría, técnicas reflexivas y creativas por el chef Chris Allen (quien cocinó algunos años para el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau). La filosofía de hacer uso de recursos locales para crear sus delicias veganas en un ambiente amigable, cálido y elegantemente floral les valió el reconocimiento Bib Gourmand Award otorgado por la Guía Michelin Vancouver 2022. nightshadeyvr.com

 

Chambar’s

 

Chambar's

 

Es el nuevo imperdible de Vancouver. El salón de techos altos y ladrillo rojo, con una barra de madera soñada evoca una brasserie tradicional, pero con el ambiente desenfadado, ecléctico y amigable de esta ciudad. Nico Schuermans, chef propietario, sirve cocina belga con toques locales e inspiración del mundo entero. El menú es 1oo% antojable, con platillos como el carpaccio de betabel marinada con raita y pistou de menta o el tayín de cordero. Además, cuentan con la lista más larga de cervezas belgas de la ciudad. chambar.com

 

Five Sails 

 

Restaurantes en Vancouver

 

La mejor vista de la ciudad envuelve una experiencia gastronómica contundente, con platos inspirados en la Costa Oeste y una hospitalidad impecable. El salón culinario del hotel Pan Pacific Hotel, en Canada Place es un mirador sorprendente al puerto, el mar, las montañas y el horizonte urbano de Vancouver. El chef Ernst Dorfler, campeón mundial de la medalla de oro olímpica culinaria, muestra a profundidad su experiencia y talento con cada menú de temporada, vegetariano y de tapas. glowbalgroup.com/five-sails

 

Maxine’s

 

Restaurantes en Vancouver

 

En el barrio de West End, este restaurante se ha consolidado rápidamente como uno de los favoritos de los locales, y de los visitantes bien informados. El interior del restaurante remite a los bistros europeos, y su ambiente cálido y hospitalario invita a quedarse a hacer las tres comidas en este sitio. El menú, diseñado por el chef ejecutivo Bobby Milheron y el chef de cocina Levi Johnston, presenta platos consolidados honrando el gran producto local del que gozan en Vancouver. maxinescafebar.com

 

Burdock & Co

 

Inaugurado en el verano de 2013, y reconocido con una estrella Michelin en 2022, ofrece elegantes platillos elaborados con ingredientes orgánicos. La buena relación que la chef Andrea Carlson tiene con los proveedores locales, asegura que sólo lo mejor llega hasta su cocina, ya sea que provenga de una granja situada a los alrededores de Vancouver o de algún jardín urbano. Una cuidadosa selección de vinos franceses e italianos, así como una lista de cervezas artesanales y cocteles hechos al gusto del comensal, acompañan el menú. burdockandco.com

 

También lee: Los mejores hoteles de Vancouver

Naturaleza salvaje, ciudades victorianas, paisajes remotos, las tormentas eléctricas más impresionantes y el mejor surf de Canadá se encuentran en la Isla de Vancouver. “Vengan en el invierno, entonces todo es más áspero… y maravilloso”, nos habían dicho. Por supuesto, seguimos el llamado. Texto: Cecilia Núñez / Fotos: Adobe Stock / Archivo. 

Flotamos silenciosos entre las nubes. Miramos hacia el mar y en dirección a las Rocallosas, conocidas como la columna vertebral de la Tierra. Los siksikas (pies negros) y otras Primeras Naciones, como se les llama en Canadá a los pueblos indígenas, creían en estas montañas como un lugar de culto. Y así lo creemos nosotros, y proponemos una travesía inolvidable más allá de la vertiente canadiense de esta cordillera, bordeando la privilegiada provincia de Columbia Británica hacia su esencia isleña.

La travesía aérea desde Vancouver a la Isla de Vancouver es de gran belleza. Debajo de las esponjosas extensiones de algodón, logramos ver los contornos de esta isla verde. Pronto, el avión de hélice aterriza en la ciudad de Victoria, un sueño de casas victorianas cuidadosamente acomodadas, callejones empedrados repletos de restaurantes y encantadoras boutiques.

 

Isla de Vancouver

 

Esta reliquia británica es la capital de la isla y de la provincia a la que pertenece. Tiene un centro muy animado, donde se encuentra su barrio chino: un pequeño laberinto de callejones a las que nos da la bienvenida su puerta monumental.

Además, en cada esquina se alojan restaurantes imperdibles, cervecerías con buena cocina, como la del acogedor The Drake. Cerca del puerto están el Parlamento, el señorial hotel Empress —que cuida las tradiciones más británicas, como su té de las cinco de la tarde— y el Royal Museum, con una espléndida muestra de arte de las Primeras Naciones.

En esta cosmopolita ciudad hay lugar para todos, incluidos nosotros, una mexicana y un sueco que encontraron en Canadá sus puntos de convergencia. Nos alojamos en el lujoso Fairmont Empress, solo para continuar esta fantasía de coincidencias. Desde el ventanal de nuestra habitación, somos testigos del espectáculo de los veleros descansando a unos metros del puerto. El hotel tiene este aire de delicadeza y la actitud de saberse un sitio muy especial.

 

Isla de Vancouver

 

En su icónico bar, probamos cocteles a base de champaña y de la Empress 1908, el destilado insignia del Fairmont Empress. Se trata de una ginebra que ostenta un fino equilibrio entre los ingredientes botánicos naturales que intervienen en su destilación. Microdestilada en alambiques de cobre, está fabricada artesanalmente utilizando enebro, rosas, semillas de cilantro, cáscara de toronja, raíz de jengibre, corteza de canela y la conchita azul (Clitoria ternatea), una planta nativa de Asia que le da una nota terrosa distintiva y ese color azul índigo que nos tiene alucinados.

Logramos salir del Q bar y desafiando al viento frío caminamos por el puerto antes de refugiarnos en el restaurante 10 Acres Bistro, donde pedimos unos tradicionales fish & chips. “Tienen que probarlos en el pueblo pesquero de Victoria”, incita el camarero. “La mayor parte del menú proviene de nuestra propia granja en el norte de Saanich”, explica, y nosotros, obedecemos.

Paseamos también por la calle Government Street, donde descubrimos la tienda Command Post of Militaria. No nos pregunten las razones, pero pasamos horas husmeando entre recuerdos militares y muchos objetos de colección, uno más surreal que el otro.

Recorrido culinario

 

Hay ciertas paradas de sabor que no pensamos perdernos en Victoria, así que ideamos una tarde entera para degustar la ciudad, a bocados y a sorbitos. La primera: un aperitivo en Artisan Wine Shops, una boutique de vinos locales en la calle Broughton. Tyler Overton, detrás del mostrador, nos introduce a los vinos elaborados en la isla y en el resto de la Columbia Británica. “Muchas personas piensan que todo se trata de chardonnay, solo porque fue una de las primeras varietales por las fuimos elogiados, pero hacemos fantásticos rieslings también, aquí arriba los suelos son ricos en arcilla, arena y piedra, así que se producen muchos buenos vinos… Cada región es única, el terruño cambia mucho, prueben, por ejemplo, este merlot de CheckMate”, sonríe y nosotros también, después de catarlo.

 

Isla de Vancouver

 

Los vinos son sorprendentemente buenos y muy interesantes. La Isla de Vancouver está en la misma latitud que Champagne, pero tiene más de 30 microclimas diferentes. Artisan Wine Shop es uno de los muchos sitios que visitamos durante del recorrido guiado por las rutas gastronómicas de Victoria siguiendo las recomendaciones de Off the Eaten Track, tours imperdibles para todos aquellos que aman comer, y nosotros de verdad que somos amantes de la glotonería.

Probamos el mejor rol de canela de nuestras vidas en la panadería Crust Bakery, nos rendimos ante las delicias de la charcutería de Choux Choux, saboreamos la cocina de Medio Oriente en Yalla, fuimos por una galletita en The Cookie Guy y cerramos nuestra experiencia en la casa de té Partea. 

La niebla, la oscuridad y el frío se apoderan de la ciudad, y nos refugiamos en el antiguo bar de pescadores Little Jumbo, que se ha transformado en el mejor y más elegante bar de la ciudad. Las ostras, la champaña y los cocteles como Touch me Toddy (que lleva licor de cereza Luxardo, jengibre, canela, limón y manzana) nos mantienen animados y calientitos durante toda la noche.

 

Escalas imperdibles

 

Antes de conocer The Butchart Gardens, nunca había sido nuestra prioridad visitar los parques de los países que exploramos como viajeros. Esta idea se transformó cuando conocimos las 22 hectáreas de jardines que son denominados Sitio Histórico Nacional, y que durante todo el año se van transformando en verdaderos edenes.

En primavera, innumerables tulipanes, narcisos y jacintos regalan una celebración de fragancias y colores. En verano, el jardín de rosas arranca suspiros y los arces japoneses se colorean de tonos rojizos y dorados, en otoño. Nosotros nos dejamos cautivar por la magia de la Navidad. Miles de lucecitas nos hacen sentir en un cuento con sus decoraciones, iluminación expansiva y pista de patinaje sobre hielo al aire libre. La Navidad en The Butchart Gardens se extiende del 1 de diciembre al 6 de enero. Hay que tomar nota.

 

Isla de Vancouver

 

A la mañana siguiente, abordamos el auto con dirección hacia el norte. La primera parada es en Merridale Cidery & Distillery, donde compramos sidra artesanal para el viaje, y continuamos hacia la bodega Blue Grouse Estate Winery, en el Valle de Cowichan. Tenemos una cita con Bailey Williamson, un chef que se convirtió en enólogo y se enamoró tanto del valle de Cowichan que ahora vive aquí con su familia. Él estaba asombrado por las condiciones de la viticultura. “Es un microclima emocionante, con diferentes suelos y condiciones. Hacemos todo, desde espumosos hasta pinot noir”.

Después del silencioso valle de Cowichan vamos en busca del oleaje del mar y a la caza de las tormentas eléctricas más espectaculares del mundo. Tofino se encuentra en el otro extremo del océano Pacífico. Aquí, nada protege al visitante de la naturaleza salvaje.

 

Bienvenidos a este extraño lugar

 

Llegamos a nuestro alojamiento en medio de una tempestad. El cielo se ilumina como si alguien allá arriba decidiera prender todas las luces celestes, solo para volverlas a apagar después de un rugido impetuoso. El mar lucha salvajemente contra las rocas que rodean al hotel Wickaninnish Inn, donde la electricidad se ha ido hace un rato. A manera de recibimiento, nos dejamos alumbrar por unas cuantas velas de llamas bailarinas. Una anciana que se hospeda también en este recinto, pasa junto a nosotros en el vestíbulo, tan oscuro que apenas podemos distinguir su rostro arrugado. Ella susurra un saludo: “Bienvenidos a este extraño lugar”.  Nos tomamos la mano riendo nerviosos.

 

Isla de Vancouver

 

 

La bienvenida que nos da la naturaleza nos tiene fascinados: encontrarnos con el mar en medio de una tormenta eléctrica no es algo que hayamos vivido muchas veces… La extraña atmósfera llena de neblina y de relámpagos que alumbran los acantilados de vez en cuando solo refuerza nuestro asombro. No sabemos a dónde fue la dama después de navegar en silencio hacia la entrada, tal vez solo fueron las sombras las que nos hicieron una broma.

Desde el balcón de la habitación, escuchamos cómo el océano Pacífico se lanza contra los árboles justo enfrente de nosotros, pero es imposible distinguir las formas, está completamente oscuro allá afuera. La observación de tormentas durante el invierno es una actividad popular y estamos aquí, en parte, para eso. Esperamos con ansias la primera luz de la mañana, para lanzarnos a surfear las olas del mar iracundo.

 

Hermanas de surf

 

Seguimos en la Isla de Vancouver y nuestra instructora de surf, Melody Walford, nos saluda desde la orilla del mar a la mañana siguiente. No tiene buena cara, la tormenta de ayer dejó a las olas despeinadas y extrasalvajes.

Aunque la lluvia ha disminuido un poco, debemos concentrarnos para no soltar las tablas mientras caminamos contra el viento. “El agua está a unos dos grados centígrados” comenta Melody mientras nos preparamos. Aquí un punto de divergencia: el sueco no se aterrra ante la temperatura, mientras yo, la mexicana, me congelo solo de imaginar meterme a surfear en esas aguas heladas. Hoy, pocos se atreven a desafiar el clima. Mi poca experiencia en el surf y la maestría de mi compañero hacen las veces de aliados para vivir esta experiencia.

 

Isla de Vancouver

 

 

Algunos perros deambulan alegremente junto al mar, parecen pensar que la vida es grandiosa, que una tormenta y el mar helado con olas locas no son motivo de preocupación. Decidimos imitarlos y abrazar el reto. Surf Sisters ha estado en Tofino durante 20 años, según nos dice Melody. “Comenzó con la finalidad de que las chicas se sintieran cómodas con el surf, por eso todas nuestras instructoras son mujeres. A veces recibimos alguna solicitud de hombres, pero la descartamos. Aunque sí tenemos invitados masculinos”, se ríe, tratando de ser empática con mi acompañante.

El surf es extremadamente duro e increíblemente divertido, me crea una adicción casi inmediata la sensación de volar sobre las olas, escuchando mi respiración y fluyendo en paz, en medio de este oleaje intenso. “La adrenalina de un día como éste durará mucho tiempo”, dice Melody. Entendemos a lo que se refiere: tenemos dificultades para dejar de temblar, pero tampoco podemos evitar las sonrisas que se dibujan en nuestras caras azotadas por el clima.

No hay mejor manera de relajarse después de surfear que en el spa de Wickaninnish Inn. Pronto estamos sentados en la sala de vapor, volviendo, lentamente a nosotros mismos. Después, nos dirigimos a Wolf in the Fog, donde disfrutamos de cocteles, brindando por el fantástico día. Tofino es el paraíso de surf de Canadá, un lugar remoto, acogedor e incomparable. Tan lejano de todo que entendemos por qué muchos se mudan aquí, lejos de la civilización.

Continuamos hasta 1909 Kitchen, donde estaremos sentados toda la noche degustando una de las mejores cenas del viaje. Ostras y mejillones, frutos del mar y la pesca del día, vinos locales y promesas de volver pronto.

 

Isla de Vancouver

 

 

A la caza de tormentas eléctricas

 

En la Isla de Vancouver ¡la tormenta ha empeorado! Y nosotros estamos felices de caminar en la playa como si estuviéramos dentro de una nube, creada por la neblina, la lluvia, el vapor y la brisa del mar.

Las olas se elevan hasta formar cascadas blancas que solo se vuelven cada vez más y más altas y rompen contra las rocas negras. El avistamiento de tormentas es una de las actividades más intensas, pero, al mismo tiempo, meditativas. Apenas escuchamos nuestros propios pensamientos, amando cada sonido proveniente del iracundo océano.

A medida que cae la noche, el mar gana un mayor impulso y las olas se vuelven aún más grandes y sobrecogedoras, ¿o es el crepúsculo lo que hace que todo se sienta mucho más amenazador? Una mujer solitaria viene corriendo con la tabla bajo el brazo. Sin dudarlo, se lanza directamente al mar. La seguimos remando en nuestras tablas sobre las olas. Está claro que ella tiene un objetivo y que sabe lo que está haciendo: va a montar las olas más altas.

Nosotros decidimos sobrevivir en la orilla. Quizá sea una de esas valientes surfistas de Surf Sisters. La seguimos hasta que desaparece en el horizonte, al igual que nuestro plan de regresar a casa: la Isla de Vancouver nos tiene cautivos.

 

Isla de Vancouver

 

 

Información de viaje

 

La Isla de Vancouver pertenece a la provincia de la Columbia Británica, Canadá. Es la ínsula más grande de la costa occidental de América, y la undécima de Canadá, con 32.134 kilómetros cuadrados.

 

Cómo llegar

 

Para llegar a la Isla de Vancouver, lo puedes hacer por Aeroméxico (aeroméxico.com) y Air Canadá (aircanada.com) operan vuelos desde Ciudad de México hacia Vancouver. Una vez en esta ciudad continúa el viaje en avioneta o en ferry (bcferries.com) hacia Swartz Bay. Desde ahí se hace una hora a Victoria, y tres horas hasta Tofino.

 

Recursos

 

Hello BC (hellobc.com) ofrece información sobre actividades por estación, hospedaje, restaurantes, tips de viaje y paquetes turísticos.

 

Más información

 

Para mayores detalles sobre la Isla de Vancouver, Victoria y Tofino, visita vancouverisland.travel, tourismvictoria.com y tourismtofino.com

 

 

Isla de Vancouver

 

 

Dónde quedarse

 

Fairmont Empress Este elegante hotel, localizado en Victoria, se encuentra en la lista de los más emblemáticos del mundo. Es imperdible una visita a su bar. Habitación doble desde $230 USD. fairmont.com/empress-victoria

Wickaninnish Inn Con una espectacular ubicación en la playa de Tofino, excelentes restaurante y spa. Habitación doble desde $315 USD. wickinn.com

the DOUGLAS, An Autograph Collection Hotel En Vancouver, dentro del Parq Vancouver, cuenta con un diseño sustentable y contemporáneo. Habitación sencilla desde $400 USD. thedouglasvancouver.com

JW Marriott Parq Vancouver Hospédate cerca de las principales atracciones de Vancouver: Rogers Arena, BC Place y Queen Elizabeth Theatre. Habitación doble desde $280 USD. jwmarriottparqvancouver.com

 

 

Isla de Vancouver

 

 

Dónde comer

 

10 Acres Bistro Casi todos sus ingredientes provienen de una granja propia. El fish & chips —acompañado de una cerveza producida también en Victoria— es imperdible. 10acres.ca

Little Jumbo Quizás el mejor bar de Victoria. Buen menú también con gran presencia de mariscos y creaciones contemporáneas. littlejumbo.ca

Off The Eaten Track Tours Ofrece diversos tours gastronómicos en Victoria, que muestran la cultura culinaria multifacética de la ciudad. Por supuesto, incluye muchas catas y probaditas a los platillos de los mejores restaurantes. offtheeatentracktours.ca

1909 Kitchen El chef Paul Moran se inspira en los ingredientes de las costas y el bosque de Tofino para crear su menú. tofinoresortandmarina.com

Dentro del Rosewood Hotel Georgia, un clásico de los años 20 que ha sido renovado, se encuentra el restaurante Hawksworth, que le hace justicia en lo estético a este hotel tan emblemático de Vancouver. Fotos: Charly Ramos. 

El chef David Hawksworth se ha vuelto un ícono de la escena gastronómica local, pero también de la región de British Columbia. Ostentando la bandera de los productos que están cerca y la calidad de los mismos.

 

restaurante Hawksworth

El restaurante Hawksworth refleja en su decoración el mismo detalle que este cocinero canadiense le da a la comida. Es al mismo tiempo un lugar elegante como relajado donde bien se puede festejar un aniversario como salir a comer con los amigos.

Las descripciones en el menú son básicas, pero las sorpresa es cuando llegan los platillos: cangrejo Dungeness de la costa oeste, flor de jamaica y flor de sauco resultan una armonía salpicada de tonos.

 

Hawksworth

 

El cordero de primavera con chícharos, morillas y menta refleja el cuidado que se tiene en el plato para armar algo con pocos elementos, pero que sepan como estallar en el paladar para iniciar la noche.

Si quieres algo más ligero, siéntate en la barra y pide uno de sus bocados. El KFC (Korean Fried Cauliflower) es una coliflor rostizada con sabores coreanos, un poco de ajonjolí y cilantro para terminar. Mientras que la hamburguesa es directa: carne de la mejor calidad, un aro de cebolla, tocino y queso cheddar.

 

Hawksworth

 

Mucha gente le gusta realizar eventos, así que tienen varias opciones de salones privados, menús elaborados para la ocasión o de una lista de la cuál puedes elegir, todos hechos con el mismo cuidado que la carta. Cheque promedio: $75 USD. Dónde:  801 W Georgia St, Vancouver, Canadá. hawksworthrestaurant.com