Una fuente con la escultura de Hércules, semidiós de la mitología griega, rodeada de árboles y bancas, y al fondo, una torre con un reloj, nos dan la bienvenida a Hotel Hércules, ubicada en el barrio Hércules, en la ciudad de Querétaro. Fotos: Cortesía.

Lo que antes eran las residencias de los trabajadores de más alto rango de la ex fábrica textilera El Hércules, hoy han sido rescatadas para ofrecer un hospedaje cómodo y acogedor, envuelto en antiguos muros con historia, y ataviado con mobiliario y objetos de los años 50 y 60 del siglo pasado, época de apogeo de esta fábrica.

 

Hotel Hércules, en Querétaro

 

Rescatada en su totalidad y convertida en un complejo que engloba una fábrica de cerveza artesanal, un jardín cervecero con áreas recreativas, tiendas de productos gourmet, artesanías y producción textil, así como una zona de estudios artísticos y de arquitectura, la ex Fábrica El Hércules te hará sentir en otra época.

 

La experiencia de dormir en Hotel Hércules

 

La sensación de estar durmiendo en una residencia antigua la brindan los techos altos con vigas, los enormes ventanales y una amplia terraza donde, sentado a la sombra de los árboles, logras escuchar los secretos que el viento viene arrastrando en su camino

 

Habitaciones decoradas al estilo de los años 60

 

Los muebles de épocas pasadas le dan un aire nostálgico al espacio. El teléfono para comunicarte a recepción es rotatorio y el aparato reproductor de música es un radio antiguo. El baño también es muy peculiar: está revestido con azulejos color verde aceituna y su enorme ventanal da la sensación de que los árboles del exterior se han metido

Cada una de las 40 habitaciones de Hotel Hércules es distinta; en ninguna encontrarás una pantalla porque la idea es desconectarte y disfrutar de la paz que se siente desde que llegas. Lo que sí es que siempre tendrás alguna cerveza de la casa, la Cervecería Hércules, de cortesía.

 

Gastronomía mexicana maridada con cervezas

 

En Hotel Hércules ofrece dos espacios para disfrutar de rica gastronomía. El principal es el restaurante El Comedor, de cocina mexicana contemporánea. La carta fue creada por el chef ejecutivo Santiago Migoya. 

Durante nuestra estancia, probamos las tostadas de chicharrón con insectos, la costilla de res braseada ocho horas en cerveza con puré de papa y aros de cebolla, y los sopes de aguacate con hueva de trucha local. También debes probar el pulpo zarandeado, los ravioles de maíz y poblano y la totoaba al pastor.

 

Comedor del Hotel Hércules

 

Por obvias razones, el maridaje recomendado es con alguna de las muchas etiquetas de Cervecería Hércules. Algunas de las que probamos fueron Lágermaiz y Espumosa, pero la que nos sorprendió fue Va a llover, cerveza salvaje que se deja reposar en barrica hasta por tres años, y cuyo sabor recuerda más a un vino o a una sidra

El otro sitio para comer es el restaurante Cocina del Mar, donde sirven platillos con pescados y mariscos como cocteles, aguachiles, sándwiches de camarón y tacos de pescado. Se encuentra en Buenavista, el área recreativa de Hotel Hércules, donde está la piscina y una cancha de volibol. Su ambientación remite al Acapulco de los años 50.

 

Un spa muy original

 

Acostumbrados a los spas elegantes, con muros pintados de colores blancos o claros, entrar al spa de Hotel Hércules resulta disruptivo. Se ubica en medio de unas ruinas, entre muros viejos y desgastados; un viejo tanque de gas funciona como regadera al aire libre, las cabinas para masajes están en una vieja sala de máquinas.

 

Spa del Hotel Hércules

 

Pero la paz que se percibe en este sitio lleno de nostalgia, y las adecuaciones que se han hecho de los espacios con instalaciones modernas, como las piletas de agua fría y caliente, una piscina de hidromasaje y un área de sauna, vapor y, en un futuro cercano, un baño turco (hammam), lo convierten en uno de los spas más originales que hemos visitado.

Así que es momento de que agendes una escapada a la ciudad de Querétaro, te hospedes en Hotel Hércules y disfrutes cada espacio rescatado de esta antigua fábrica textil. ¿Qué esperas? Habitaciones: Desde $3,450 pesos. Dónde: Av. Hércules Ote. 1, Hércules, Santiago de Querétaro. hotelhercules.com

 

También lee: 5 actividades para celebrar el aniversario de la fundación de Querétaro

La pasta es un ingrediente tan versátil que puedes preparar muchos platillos con ella. Puedes disfrutarla solo acompañada de salsa y queso; o puedes rellenarla para tener una explosión de sabores. También puedes crear figuras divertidas, o pintarla de diferentes colores, creando una fiesta de tonalidades en el plato.

Para aprender a realizar pastas caseras, y conocer todas las variables que existen, asistimos a un taller de pastas artesanales que a partir de febrero impartirá el restaurante Mia Domenicca. Su chef, Santiago Migoya, nos explicó que es relativamente sencillo elaborarlas, ya que se utilizan ingredientes cotidianos. Tal vez solo se trata de comprar algunos instrumentales que harán más sencilla la tarea, pero que no son imprescindibles.

 

Las dos básicas

 

Mia Domemicca

 

Para comenzar, el chef explicó que hay miles de recetas, pero que dos son las básicas: las largas o secas, las cuales se utilizan para platos como el espagueti; las rellenas, que como su nombre lo indica, pueden rellenarse de lo que sea.

La elaboración es fácil: para medio kilo de pasta se necesitan 250 gramos de harina y 250 gramos de harina doble cero (llamada farina), 15 huevos y un poco de aceite de olivo y vino blanco. Los dos tipos de harina, que varían en el tipo de molido, se mezclan con las manos.

 

Mia Domemicca

 

A los huevos se les extrae únicamente la yemas (pueden usarse las claras, pero para los conocedores, cuando se elabora con pura yema, le da mejor color y sabor), y se vierten en un bowl. Utilizando éste, sobre la harina se forma un agujero de tal forma que las yemas puedan ser depositadas en su interior sin que se desparramen.

Luego, con las manos, se mezclan las yemas con la harina amasando constantemente hasta formar una pasta con consistencia suave, como de plastilina. De vez en cuando hay que verter el aceite y el vino, pero sin abusar. Se forma una bola con la pasta y se envuelve en plástico para que no se seque.

 

Usando la imaginación

 

Para formar las pastas la masa debe aplanarse y cortarse. Puede usarse un rodillo o una máquina llamada laminadora. De acuerdo al instrumento que se utilice, el corte que se haga y la forma final que se le dé a la masa, es que se obtendrá el tipo de pasta.

Por ejemplo, para pastas secas como el fetuccini, se puede utilizar un cuchillo para cortar en tiras y se deja secar. Para el espagueti, existe una máquina llamada guitarra, que con unos hilos corta la masa. Y si se quiere obtener en forma de tornillo, se hace un corte largo que enrollas en un delgado palito de plástico o madera, para obtener esa forma.

 

Mia Domemicca

 

En cuanto a las pastas para relleno, se pueden utilizar moldes de galletas y darles la forma o el doblez deseado. Por ejemplo, los moñitos o los caramelos se obtienen cortando la pasta como un círculo, se les agrega un relleno como queso cremoso y luego se dobla formando esas curiosas figuras.

Si te interesa este taller, que al final incluye una comida de tres tiempos y que  tendrá un costo aproximado de $1000 pesos por persona, llama a Mia Domenicca al teléfono 9130-8456 o entérate de las fechas en sus redes sociales. Dónde. Durango 279, Roma. miadomenicca.mx, @MiaDomenicca

 

Mia Domemicca

Reunir en un espacio a grandes restaurantes, productos gourmet y vinos, es un deleite, y más, si el objetivo es ayudar a niñas y niños en situación de calle o en riesgo de abandono, para brindarles la oportunidad de una vida más digna y autónoma. Fotos: Cortesía Ayúdate a Dar A.C.

Esto se logró en la doceava edición de la cata Ayúdate a dar, que además de ofrecer una velada con degustación de alimentos y bebidas, se buscó sensibilizar a los participantes ante la problemática de los niños en situación de calle, y reunir fondos con la subasta de la obra “Pequeños descubrimientos”, del pintor Manuel Ciria, que inició con un precio de 280 mil pesos.

 

Ayúdate a Dar

 

De este modo en el Salón Fuente del restaurante El Lago en el Bosque Chapultepec, se reunieron estos restaurantes, que ofrecieron deliciosos platillos como:

  • Aitana del chef Alberto Ituarte y Victor Morales: canelones de jaiba con salsa de langostinos.
  • Amaranta del chef Pablo Salas: Taco de quelites.
  • Cascabel de la chef Lula Martin del Campo: esquites ancestrales con alioli de chapulín.
  • El Lago del chef Jorge Sotelo: sopecito de chilorio y jamaica crujiente.
  • Eloise del chef Abel Hernández y la sommelier Laura Santander: roulade de cerdo.
  • Lur/ Koma del chef Mikel Alonso: gratín de cangrejo de pesca sustentable y espuma de espárrago
  • Mia Domenicca del chef Santiago Migoya: agnolottis de maíz.
  • Sepia del chef Julián Martínez Bello: cavatelli ragu rabo de res.

 

Ayúdate a Dar

 

De los productos gourmet había: aceites L´Amo, ibéricos como Cinco Jotas, Carrasco, la Jabugueña, de quesos participaron los de Villa Nolasco y de postres, Getarería la Romana, panes Da Silva y Ariztia, el café no podía faltar y estuvo a cargo de Illy.

Los vinos que nos ayudaron a maridar los platillos fueron: Vinos Wagner, algunos de la Vinoteca, de Marinter, de Grupo Ferimp y de Tibérica, entre otros.

 

Ayúdate a Dar

 

Finalmente, en la subasta, la obra del pintor Manuel Ciria se vendió en 590 mil pesos.

Entra a ayudateadar.org.mx y checa cómo puedes ayudar a esta Asociación que nació en el 2005.

Un escape urbano donde puedes deleitarte con los sabores de la cocina mediterránea, acaba de festejar dos años de haber abierto en la colonia Roma Norte en Ciudad de México.

Mia Domenicca es de esos lugares donde puedes disfrutar de una atmósfera relajada mientras degustas platillos provocadores, de esos que rompen tus paradigmas y ofrecen nuevas experiencias en el paladar.

Así nos sucedió con uno de los ingredientes que le da dado fama entre los comensales: las zetas rosas, cultivadas en el Estado de México, que preparan a la meuniere, con mantequilla, alcaparras, avellanas y limón. Su consistencia carnosa y su suave sabor permite impregnarse de todos esos ingredientes de una manera espectacular.

 

restaurante Mía Domenicca

 

Otros de los platillos que nos sorprendieron fueron las sardinas en chicharrón y aguacate, en el que el chef Santiago Migoya, juega con elementos de mar y tierra en un solo plato y fusiona diferentes cocinas. ¿Quién pensaría que ese pescado podría llevarse bien con el chicharrón de cerdo? A Santiago así le pareció.

El chef nos contó que uno de los platillos que en los últimos meses han sido muy solicitados son las pastas, las cuales las preparan allí mismo y las sirven con ingredientes de temporada.

El risotto de hongos silvestres, los agnolottis de maíz con queso grana paduno y  arúgula salvaje, y el fazzoletti de perejil y queso grana paduno, son algunas de las que ofrece en su carta actual.

 

restaurante Mía Domenicca

 

La hora del postre nos sorprendió con una panna cotta de hueso de mamey, en el que esta fruta se presentaba en distintas texturas –otra de las características de la cocina de Santiago– y un chocolate amargo colombiano con flor de sal, en aceite de oliva, el cual le asignaba notas a plátano a todo el bocado, por tratarse de un aceite muy frutal. Otro de los platos que nos dejó con muy buen sabor de boca. Cheque Promedio: $600-800 pesos por persona. Dónde. Durango  279, Roma  Norte. Horarios: martes  a  sábado, 1:30 pm a 12:00 am; domingo 1:30  pm a 6:00 pm. miadomenicca.mx