Cuenta la leyenda que un día Genmai, el sirviente de un samurái, estaba sirviendo té a su maestro antes de una importante batalla. Al verter la infusión sobre el cuenco, unos cuantos granos de arroz tostado cayeron accidentalmente desde su manga. En un arranque de ira, causado por la ruina de su preciado té, el samurái desenvainó su espada y decapitó a su sirviente. Fotos: Escuela Mexicana de Té.

Inmediatamente después, el samurái se volvió a sentar y comenzó a beber el té, descubriendo que el arroz había cambiado su sabor; en vez de arruinarlo, el arroz le había dado un gusto fascinante. El samurái sintió un remordimiento instantáneo acerca de su cruel injusticia y ordenó que este nuevo té se sirviera cada mañana para conmemorar a su sirviente. Para honrarlo aún más, bautizó el té con su nombre: Genmaicha o “el té de Genmai”.

 

Genmaicha

 

Hoy, el Genmaicha se cuenta entre los más grandes blends de té de Japón, reconocido por su peculiar aspecto, delicioso aroma y sabor. Piense, querido lector, en la perfecta combinación de té verde con arroz tostado. Lejos de romanticismos, es importante decir que los orígenes del Genmaicha aún son confusos.

Algunos especialistas apuntan a la mezcla de té verde con arroz como una herramienta de carácter religioso, empleada por los monjes budistas durante sus regímenes de ayuno debido a sus propiedades nutritivas y estimulantes. Otros, confirman que este singular blend de té surgió en Kioto como una alternativa económica para las clases populares; originalmente, el Genmaicha fue llamado el “té del pueblo” debido a que era consumido por los japoneses de más bajos recursos y es que, el arroz servía de relleno, permitiendo reducir el volumen y, por tanto, el costo del té.

 

Genmaicha

 

¿Cómo se elabora…?

 

El Genmaicha puede producirse con cualquier variedad de té verde japonés: sencha, bancha, hojicha, gyokuro e incluso matcha, aunque la gran mayoría incorpora variedades más sencillas, como bancha o sencha. Algunos puristas aseguran que emplear grandes tipologías de té verde en la confección de la mezcla, como gyokuro o matcha de grado ceremonial, es un desperdicio.

La segunda variable en esta singular mezcla es el arroz. Primero, los granos enteros se tuestan en tambores giratorios durante algunos minutos, a temperaturas que rondan los 150 a 170 °C. El proceso permite caramelizar los almidones naturales del arroz, desarrollando aromas y sabores placenteros. Muchas veces, el calor también hace reventar los granos, convirtiéndolos en una especie de “palomitas blancas de arroz” denominadas Hana. Esta palomitas se añaden también al blend de té para darle una apariencia atractiva y fascinantemente distinta. ¡Sí!, muchos consumidores identifican al Genmaicha como el té de palomitas.

 

Té Genmaicha

 

¡Aromas y sabores! En taza, este blend ofrece toda una explosión de aromas y sabores. En nariz intensos tonos de cereales tostados y arroz cocido, con un fondo marino muy sutil. La mezcla se caracteriza por su textura densa en boca, con agradable frescura, recuerdos de cereales cocidos y una placentera mineralidad salina. Recuerde infundirlo con agua a 75 °C, por no más de 2 minutos. escueladete.mx

 

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