Esta bodega italiana, fundada en 1935 por Gaetano Marzotto, es célebre por su inconfundible pinot grigio. De reflejos pajizos y notas a manzana, es el vino elaborado a partir de esta cepa más vendido en el mundo. Sin embargo, Santa Margherita produce otros magníficos caldos. Aquí te presentamos algunos para aproximarte a la tradición de esta vinícola italiana con más de 80 años de historia. Fotos: Mariana Vega. 

 

Valdobbiadene Prosecco Superiore DOCG Brut

 

Elegantes burbujas, aromas frutales que recuerdan a manzana y flor de melocotón y un equilibrado paso por boca son las características de este vino espumoso que proviene de la localidad Valdobbiadene, al norte de Italia. Para producirlo se utilizan únicamente uvas glera, que fermentan durante 18 a 20 días en tanques con levaduras selectas. El maridaje ideal de este vino son aperitivos, quesos y platillos ligeros.

 

Santa Margherita

 

Stilrosé

 

Como un Riviera del Garda Classico Chiaretto DOC, este vino rosado obtiene su color delicado a partir de la mezcla de uvas groppello, barbera, sangiovese y marzemino. La mitad de éstas maceran durante una noche en contacto con los hollejos. El vino, de aromas florales, notas a lichi, frutos rojos y jengibre, madura en contacto con lías finas durante algunos meses antes de ser embotellado. Para acompañarlo, no hay nada mejor que platillos fríos, orientales o a base de frutos del mar.

 

Sparkling Rosé Brut

 

Este espumoso rosado de Santa Margherita se elabora con varietales chardonnay, glera y malbec. Esta última es la que aporta el color al vino. Cada una proviene de diferentes áreas, pero todas se cultivan en el valle del río Adige, en Veneto. Este vino tiene una segunda fermentación en tanques a temperatura controlada. Es fresco, ligero y de deliciosos aromas a flores, frutos blancos y rojos. Además, resulta perfecto para beberse junto con preparaciones especiadas del lejano oriente.

 

Santa Margherita

 

¿Qué esperas para probarlos? santamargherita.com