La Peña de Bernal, el tercer monolito más grande del mundo, es una de las joyas queretanas que todo mexicano debe visitar más de una vez en la vida. Además de regalarte majestuosas vistas desde las alturas, está enclavada en el encantador Pueblo Mágico de Bernal, en donde puedes pasear con calma y comprar bordados, artesanías, dulces regionales y deliciosas gorditas en su mercado. ¿Qué más hacer para disfrutar al máximo de la región? Aquí la respuesta. Fotos: Charly Ramos.
Actividades para hacer muy cerca de la Peña de Bernal
Hotel de Piedra
Aunque Hotel de Piedra es de alguna manera parte de la Peña de Bernal, pues está labrado con la misma roca del cerro y tiene acceso directo a su explanada, constituye un destino aparte pues es mucho más que un lugar para pernoctar; es un hotel cuyo encanto se descubre poco a poco y al que querrás dedicarle, por lo menos, un día completo.
Su construcción de piedra y madera, inspirada en una villa toscana, está llena de detalles. Sus sinuosos caminos se adaptan a la ladera de la Peña y dan como resultado múltiples rincones y terrazas con cautivantes vistas. En un balcón, una mesa y unas sillas junto a un enorme cactus se invita a la lectura, mientras que una sala cercana incita a conversar y compartir un trago, y los camastros junto a su alberca y jacuzzi regalan un descanso reparador.
Completa la experiencia en su Spa Puerta Cielo con un masaje holístico con descarga emocional y una parada en su delicioso restaurante que cuenta con una extensa cava de vinos, muchos de ellos regionales e incluso uno de la casa. Cheque promedio del restaurante: $600 MXN. Habitaciones: desde $3,188 MXN.
Cool Glamping
En el mismo municipio de Ezequiel Montes, otra opción de alojamiento tiene también como protagonista a la Peña de Bernal y los cerros circundantes. Se trata de Cool Glamping, un lugar en el que reina el silencio y en donde nueve domos geodésicos se levantan discretos entre el paisaje semidesértico.
Desde el deck de madera de cada domo, con alberca o jacuzzi a tu elección, puedes contemplar el majestuoso paisaje con tranquilidad, para apreciar las más de 50 especies de flora que hay en la zona. Toma los binoculares para intentar encontrar a la distancia a zorros, ardillas, conejos, coyotes y serpientes. Y si buscas un poco más de movimiento, la cercana tirolesa AVEX te dará la dosis exacta de adrenalina antes de cerrar el día con una fogata. Para el descanso, nada como dormir cobijado por un cielo repleto de estrellas —algunos de los domos cuentan con telescopio para que goces aún más del espectáculo nocturno. Costo: Desde $5,950 por domo.
Restaurante Olivo Tinto, en el viñedo Puertas de la Peña
Además de excelentes opciones de alojamiento, en la región existen múltiples restaurantes, viñedos y proyectos productivos anclados en la riqueza del suelo queretano. Uno de ellos es Puertas de la Peña, un viñedo que nació hace cuatro años y que hace algunos meses abrió las puertas de su restaurante Olivo Tinto, convirtiéndose rápidamente en uno de los imperdibles cerca de Peña de Bernal.
A solo 5 minutos del pueblo de Bernal, en un paisaje de ensueño, entre vides y un lago artificial, llegará a tu mesa el exquisito menú de la chef Ana Martorell, en el que recetas ancestrales se transforman con técnicas culinarias innovadoras. Ejemplo de ello es su versión de sopa de tortilla, que se hace con una crema de salsa tatemada en comal de barro. También son una delicia los camarones salteados en ajo negro con mole de quelites sobre una cama de puré de papa al cilantro.
El menú de Olivo Tinto se completa con los cinco vinos de la casa y una excelente propuesta de coctelería clásica y de autor. A todo ello se suman enormes salones de eventos que han convertido a Puertas de la Peña en un favorito para bodas y eventos sociales. ¡Toma nota!En 2024 se sumará un hotel boutique con SPA. Cheque promedio de Olivo Tinto: $800 MXN.
Quesos Vai y Tierra de Alonso
En el cercano municipio de Colón, a solo media hora de la Peña de Bernal, Quesos Vai y Tierra de Alonso son dos proyectos familiares enlazados por un origen en común: Vidal Alonso, un español que hace 100 años vendía primero leche y luego quesos en Ciudad de México, y que finalmente se trasladó a los campos queretanos, en donde su familia enraizó su corazón.
Los nietos de Vidal Alonso fundaron Finca Vai, un encantador espacio en donde, rodeados de vacas, borregos, gallinas y ganzos, las familias aprenden sobre el proceso de elaboración de los quesos. La visita guiada se complementa con una degustación de los Quesos Vai o un taller de quesos para niños. Además, muy pronto abrirán un taller de siembra en el huerto orgánico y uno de panadería. Suma una comida en su restaurante y tienes el plan ideal para un día entero.
Finca Vai es también el principal punto de venta de sus quesos —panela, Oaxaca, jocoque, ranchero, tipo cabra, manchego, reblochón, alpino y provolone— y otros productos artesanales como cajetas, mermeladas, salsas, cervezas, dulces regionales y más. Están en el centro de la Ruta de Arte, Queso y Vino y, de hecho, fueron precursores junto con Freixenet y la Secretaría de Turismo del Estado de Querétaro.
Justo enfrente, cruzando la carretera, se encuentra Tierra de Alonso, un viñedo con cinco varietales, un hotel de 10 habitaciones, un restaurante con deliciosas pizzas y el Spa de Baco, en el que la piel de la uva y el vino están al centro de sus tratamientos insignia. En un futuro muy próximo abrirán un apiario y un lago artificial, demostrando que los descendientes de Vidal Alonso han sabido renovarse sin perder su esencia: un auténtico respeto y amor por el campo que saben transmitir en cada detalle y conversación.
Baja el ritmo y conecta con el campo y la naturaleza en cualquiera de estos cuatro destinos cercca de la Peña de Bernal. Conoce más en queretaro.travel.
Y si buscas otros planes ideales para una escapada corta en el estado de Querétaro, mira todo lo que Amealco de Bonfil tiene que ofrecerte.
