Tras el oro negro

Entre haciendas, calles encantadoras y cafetales, recorrimos Coatepec, Xalapa y Xico para descubrir el proceso de producción del café veracruzano. A bordo del nuevo SUV Audi Q5 conocimos la magia que esta región le imprime a cada semilla, afirma Montserrat Romero.

Proceso del café > Audi Q5

Ser partícipe de todo el proceso que hay detrás de una humeante taza de café es una experiencia que todos los cafeteros de corazón tienen que vivir. Por ello, como apasionada de los aromas y sabores de este grano, disfruto de un recorrido por la cuenca veracruzana del café a bordo del versátil y confortable Audi Q5.

Elijo el color gris metalizado de la gama de 13 tonos que tiene este modelo, con asientos negros de piel y detalles de madera en su interior. Como niña con juguete nuevo, me abrocho el cinturón y emprendo el viaje rumbo a Coatepec, Pueblo Mágico del estado de Veracruz donde, en 1802, se sembró la primera planta de café de México, traída desde de Cuba.

Audi Q5

Directo al grano

“¿Qué hay detrás de una taza de café?”, me pregunta Iván Nikolai, conocedor de la zona y nuestro guía a lo largo del recorrido. Lo primero que me viene a la mente son sus propiedades organolépticas, sus beneficios a la salud y que nos mantiene activos.

Él concuerda con una sonrisa, y agrega: “Además de todo eso, su producción es todo un arte que se debe experimentar. Desde la pisca hasta el tostado; desde conocer los tipos de grano y catarlo. Incluso se pueden elaborar artesanías con él”. Con todo esto en mente, comienzo la ruta.

Finca Roma

La primera parada son los cafetales de Finca Roma, donde se cultiva el café Bola de Oro; para llegar hasta ahí, me apoyo en el sistema de navegación del Audi Q5. En el moderno touch pad, ubicado a un lado del asiento, digito nuestro destino y enseguida aparece la ruta en el tablero virtual Audi, situado justo enfrente del conductor.

En su pantalla se despliegan las funciones de un monitor central y el cuadro de mandos convencional. Todo listo, ¡allá voy!

Ya en la Finca Roma, Gisela Rivera, directora de la agencia Sendero Travel, me explica que en México hay dos tipos de arbustos de café: arábica y robusta.

Arábica

El arábica se da a una altura de 700 a 2 mil metros sobre el nivel del mar; crece de seis a ocho metros; es más sensible a la plaga de la roya; su contenido de cafeína es de 1.5% y su sabor es suave, aromático y dulce.

Robusta

En cambio, el robusta puede cultivarse entre los 100 y 700 metros sobre el nivel del mar; crece de ocho a 12 metros; es más resistente a las plagas y a las altas temperaturas; contiene 2.5% de cafeína y por ello su sabor es más fuerte y amargo. Con un canasto de mimbre empiezo la pisca de granos de café, recordando cortar solo los carnosos de color cereza.

La cáscara se elimina con una máquina despulpadora, pero yo lo hago con la mano para conocer su composición. Abajo de esta capa, hay otra de pulpa dulce llamada mucílago.

Por lo regular, esta parte se retira con agua a presión y tallándola manualmente. Ya sin esta miel, al grano le queda solo la capa pergamino, que se pone a secar al Sol en la zaranda —redes enmarcadas en madera— hasta obtener 10 o 12% de humedad.

En la morteadora se retira esta capa y parte de su película plateada. De ahí, se clasifica el grano para su posterior tostado. Culmino el arduo trabajo entre cafetales, con una taza de café bien calientito en la mano.

Finca Don Silvano

Para la cena, elijo la experiencia que ofrece Finca Don Silvano en su menú de cuatro tiempos elaborados con café. Para llegar, vuelvo al auto y me percato que las luces Audi Matrix LED del Audi Q5 aseguran una iluminación brillante y homogénea de la calzada; además, reducen la intensidad de la luz sobre los vehículos que vienen de frente.

Al llegar a Finca Don Silvano, abrazada por el bosque de niebla, el río Pixquiac y los cafetales, ya nos espera Tania Bonilla, chef y dueña de la finca. Para activar los sentidos, llega a la mesa un clericot que mezcla el vino tinto y el café que se produce ahí mismo.

El aroma y sabor de las empanadas de carne, con salsa de chipotle y café, regala a mis pápilas gustativas un sabor picante que exalta lo robusto de este grano. Las costillas en salsa BBQ de café continuaron guiándonos por esa cena sensorial, que cerró con broche de oro con un tiramisú de pan de macadamia con chocolate, acompañado de café Don Silvano reposado en barrica de roble.

Coatepec aromático

Audi Q5

A la mañana siguiente visito el centro de Coatepec, el primer Pueblo Mágico de Veracruz desde 2006. Es famoso por su arquitectura y su café de altura, que se cultiva a los 1,250 metros sobre el nivel del mar; por ello goza de un clima templado con escasa variación de temperaturas a lo largo del año.

Coatepec está el parque Miguel Hidalgo

Rodeado de tiendas y cafeterías, y con un kiosco en su parte central. A un costado se encuentra la parroquia de San Jerónimo, una construcción que data de 1702 y que engalana el sitio con su estilo neoclásico.

Está orientada siguiendo el curso del Sol naciente; por ello, cuando el astro se ubica en posición cenital —durante los solsticios verano o invierno—, en el pórtico derecho donde se encuentran los colmillos de la deidad Cóatl se puede apreciar un juego de luz y sombra que asemeja el descenso de una serpiente, según me explica Max Barrera, mi guía durante este día.

El resto del centro de Coatepec está salpicado por casonas. Coloridas, de grandes portones, techos de teja, balcones y jardines centrales, estas viviendas forman parte del folclor coatepecano y son testigos de la era de oro del café, allá por los años 50 del siglo XX.

Rumbo a Xalapa

Que también brilla por su herencia cafetalera, agradezco que, tras caminar varias horas bajo el Sol, exista el clima individual del Audi Q5. Aprovecho para probar su sistema de sonido Bang & Olufsen, con altavoces colocados de forma estratégica para proporcionar la misma calidad de sonido a todos sus ocupantes.

Audi Q5

En Xalapa nos deleitamos con un obligado de la región: el chileatole de pollo, muy parecido al mole de olla de la Ciudad de México, solo que éste lleva bolitas de masa con epazote.

Con el estómago contento recorrimos el centro histórico, donde el palacio municipal destaca por su estilo indigenista y por las 12 caritas sonrientes de su fachada, típicas de la cultura totonaca.

En el Parque Juárez disfruto el típico mantecado veracruzano, un helado artesanal elaborado con vainilla natural. Otro rincón inolvidable de Xalapa es la Catedral Metropolitana; en su interior se puede observar una cruz que, según cuenta la leyenda, fue hecha con la madera de los barcos de Hernán Cortés.

La tradición oral de Xalapa indica que Cortés no quemó su naves, sino que ordenó desmontarlas para evitar que sus tropas desertaran y volvieran a Europa.

Jarocho Style

Para continuar con la ruta del café, vamos a Jarocho Style, una cafetería con siete años de existencia. Alejandro Natzul, dueño del local y apasionado también de esta bebida, me comenta que un barista debe obtener lo mejor del grano siguiendo la regla de “las cuatro M”: molino, molienda, máquina y mano. Para demostrar su habilidad, Alejandro nos prepara una limonada con espresso y un whisky con ginger ale y café, mi coctel favorito. ¿Qué más podía pedir?

Audi Q5

Sorbo a sorbo

A la mañana siguiente, me dirijo a Xico acompañada por Tania Bonilla, de Finca Don Silvano. Las dos coincidimos en que el camino se hace más corto gracias a los interiores espaciosos del Audi Q5. Nuestro destino es la cascada de Texolo, de agua muy cristalina que baja del Cofre de Perote. Para descender hasta su poza, cruzamos un puente construido en 1908 y bajamos 400 escalones, no sin antes pedir permiso a los dioses tocando una enorme piedra que tiene marcada una mano. Hecho esto, nos deleitamos con la caída de agua de 30 metros de alto y con el bello contraste de tonos verdes de sus alrededores.

Información de viaje

Cómo llegar

Desde la Ciudad de México tomar la autopista de cuota México-Puebla y dirigirse a Orizaba; tomar la desviación hacia Perote-Xalapa Cuota. En Xalapa toma la autopista hacia Coatepec; son 30 minutos de recorrido aproximadamente.

Audi Q5

Dónde quedarse

Casa Real del Café Localizado en el centro de Coatepec, ocupa una casona de 1880. Cuenta con 17 habitaciones, restaurante, spa y jacuzzi exterior. Cuartos desde $1,000. casarealdelcafe.com.mx

Más Información

Tour del Café. Visita a cafetales de Finca Don Silvano, cata sensorial, taller de barismo y gastronomía con café. tourdelcafe.com.mx

Tour Senderos del Café. Visita a cafetales de Finca Roma, cata en Antiguo Beneficio Bola de Oro y recorrido en Hacienda de Pacho. senderotravel.com

De regreso a Coatepec tomo la carretera y enseguida noto el poder del motor 2.0 del Audi Q5. Acelero a 150 kilómetros por hora y parece que vuelo sin sentir los cambios de velocidad. Me produce seguridad el sensor de objetos frontales para evitar colisiones, que avisa cuando alguien o algo se acerca mucho al automóvil y ofrece tiempo para reaccionar.

Ya en Coatepec, en Finca Don Silvano nos reciben con una cata de café. La calidad de esta bebida se nota en su espuma de color avellana, espesa, pero que se desvanece lentamente. Si no es muy oscura o clara a la vista, significa que su intensidad es mediana y que su cuerpo, amargor y acidez están balanceados.

Audi Q5

Cata de café

Acerco la nariz y percibo la notas a chocolate, tabaco y maderas; luego agito la crema con una cuchara, para oxigenarlo, y descubro aromas secundarios a flores y frutas. Para saborearlo correctamente, hay que sorber el líquido y mojar con él toda la boca: así, las papilas gustativas se despiertan y brindan más información de su sabor.

Cena en Arcos de Belem

Para cenar elijo Arcos de Belem, un restaurante en el centro de Coatepec donde pruebo la zarzaparrilla, bebida típica hecha con la raíz de zarza, fresca y dulce.

También pido la sopa de xonequi (un quelite regional) que lleva como base frijol y bolitas de masa con epazote encima. Su sabor picosito, ácido y casero me remite a las comidas que hacía mi abuela, y esos mismos recuerdos y sensaciones son lo que Antonio Morales, nieto del fundador del restaurante, quiere transmitir a sus comensales.

A la mañana siguiente en mi Audi Q5…

Luego de varios de días tras la pista del “oro negro” veracruzano, subo a mi compañero de viaje, el Audi Q5. Veo por el retrovisor los cafetales colmados de cerezas, a los trabajadores piscando entre los arbustos. Conocer la producción de lo que los poetas llaman “el néctar negro de los sueños blancos” resultó un deleite para los sentidos. Me llevo un pedacito de este paraíso, donde aprendí que, tras una deliciosa taza de café, está el esfuerzo de cientos de personas que han convertido un mero proceso en un verdadero arte: el arte cafetalero mexicano. 

Audi Q5

No te lo pierdas

Vinos y licores Bautista Gálvez Desde 1917 producen licores como el de café, nanche, guanábana, naranja, maracuyá, entre otros sabores. Prueba sus toritos de café, cajeta y cacahuate. Prolongación Hernández y Hernández 91500, Coatepec, Veracruz.   

Panadería Los Brujos Ubicada en el centro de Xico, desde hace más de 30 años hace pan en horno de leña. Degusta el cocol de granillo y las empanadas de requesón. Melchor Ocampo 91240, Xico, Veracruz.

De carácter multifacético

El nuevo Audi Q5 presume un diseño deportivo con interiores espaciosos y una cajuela más grande y funcional. Cuenta con acústica mejorada y está diseñado para ofrecer el máximo confort. Posee motores 2.0 con nueva tecnología quattro para motores de cuatro cilindros. Su suspensión es más ágil, deportiva, poderosa y confortable. Tiene parrilla 3D con acabados de aluminio y está equipado con sistema Audi Drive Select. Su sonido B&O y el tablero virtual Audi interior, entre otras características, lo colocan una vez más como una referencia en el segmento.

Fotos: Eliher Hidalgo