Park City: recuerdos de invierno

Hasta el próximo 16 de abril, las montañas de Park City, en Utah, se pintan de blanco para demostrar que éste es un destino que rebasa todas las expectativas de unas vacaciones de esquí, dice Cecilia Núñez. Fotos: Charly Ramos.

Amanece a -3ºC con el cielo claro y un Sol ahora tímido que promete brillar sobre las cientos de pistas de esquí que se tejen sobre las montañas de Park City. La vista desde la ventana de la habitación en el encantador hotel de Montage Deer Valley obliga a abrir la puerta del balcón para respirar profundo la esencia de esta mañana fresca, dueña de un blanco resplandeciente.

La nieve cubre las montañas que parecen vigilar, muy de cerca la vida en este antiguo pueblo minero, convertido ahora en una vibrante ciudad en la que el arte en todas sus expresiones. El contacto con la naturaleza, la adrenalina de los deportes invernales, la escena culinaria y la vocación por la hospitalidad se conjugan con encanto.

Park City

La cordillera de Wasatch

Considerada el borde occidental de las legendarias montañas Rocallosas, se apodera de todas las vistas y abraza la ciudad con una presencia que proviene desde la frontera de Utah y Idaho, al sureste de Estados Unidos.

Pronto entenderemos que las montañas no están ahí solo para ser contempladas, sino para conquistarlas con un par de esquís o a bordo de una motocicleta de nieve. Por caminos que serían imposibles de recorrer a paso propio.

Park City

Se encuentra a unos 50 kilómetros de Salt Lake City, en Utah, donde se llega desde la Ciudad de México en vuelos directos. Después de 35 minutos de recorrido en tierra desde Salt Lake, viajeros ávidos de aventura se dan cita aquí. Atraídos por dos diferentes resorts de clase mundial, localizados muy cerca el uno del otro: Park City Mountain Resort y Deer Valley Resort.

“El primero es el complejo de esquí más grande de Estados Unidos, con casi 3,000 hectáreas de terreno apto para niños y adultos, experimentados y principiantes. Mientras que el segundo se distingue por ser uno de los destinos de esquí más lujosos de América del Norte”, reza la descripción oficial de turismo, y estamos a punto de confirmar la información.

Park City

Las pistas de esquí están justo aquí; al pie del balcón de la habitación, no hay necesidad ni siquiera de tomar un transporte: poner un pie en la zona de Deer Valley significa estar listo para deslizarse sobre la nieve.

La primera información que nos llega tiene que ver con el motor que enciende la vida aquí durante el invierno: la calidad de la nieve.

“Se ha registrado una precipitación promedio que rebasa los dos metros”; “la nueva espolvoreada promete un día de adrenalina”; “profundidad ideal para esquiar sobre nieve fresca tipo polvo…”. Son las frases que escuchamos por los pasillos del hotel, durante el desayuno y en nuestro recorrido.

Dicen que la nieve de Park City es de las mejores del mundo. Prácticamente seca y ligera como polvo, es una tentación irresistible para los esquiadores expertos y un aliciente para los principiantes. Todo nos va preparando para entender y vivir la nieve de manera más profunda.

Aventura en la montaña

Park City

Niños que aún no cumplen los tres años se deslizan con una facilidad casi envidiable por las pistas de esquí.

Principiantes de todas las edades celebran haber hecho sus primeras “pizzas” después de salir de la magic carpet —la alfombra mágica es una especie de rampa automática en la que los principiantes suben un tramo de montaña para practicar el desliz—. Y verdaderos expertos vuelan sobre la nieve practicando el freestyle en aquellas zonas “negras” o avanzadas.

Nosotros optamos por dejar los encuentros amistosos para el après ski, un concepto en francés que engloba todas las actividades que se pueden realizar después de esquiar.

Las opciones van desde beber una cerveza artesanal o un reconfortante chocolate caliente, disfrutar del lunch en alguno de los restaurantes, ir de compras en Main Street. Rendirse a un reparador masaje o sumergirse en una Hot Tub, un jacuzzi al aire libre donde la temperatura logra que sientas calor, disfrutando de la vista y de las montañas nevadas.

Decidimos separarnos por niveles de esquí y rendirnos a la aventura de forma personal.

“Aunque vayas acompañado, esquiar requiere toda tu concentración; es una actividad individual. Eres tú y la montaña”, afirma Geoff Swarts, nuestro anfitrión y el director de mercadotecnia para América Latina de la oficina de turismo de Park City.

Geoff se dirige hacia las pistas avanzadas, acompañado de los expertos del grupo, y los demás nos quedamos descubriendo esta actividad que terminará por apasionarnos.

Park City

Aventura en Park City

Mientras miro a mis compañeros de viaje tomar su propio camino en las pistas, me interno en mi aventura personal. Recuerdo que fue justo en estas montañas, hace casi 10 años, donde tuve mi primer contacto con el esquí.

La lección más importante fue la de rendirme al fluir de la naturaleza, controlar la velocidad zigzagueando montaña abajo y dejar al miedo esperando lejos de la pista.

El paisaje desde las alturas conmueve profundamente, y hace que valga la pena el temblor de piernas que ya se alcanza a sentir por la súbita osadía de tomar el lift montaña arriba.

Aunque se necesita audacia para conquistar la pendiente que aparece delante, es muy tarde para arrepentirse. No hay vuelta atrás, la única manera de bajar es sobre los esquís, tratando de hacer caso omiso al desenfrenado latir del corazón.

Quien esquía sabe la emoción que despierta una bajada en una pista nueva, en un escenario helado, de un blanco deslumbrante. La excitación absoluta que nace de la velocidad y la adrenalina dura tan poco que una vez al pie de la montaña, la única obsesión es la de regresar. Ahora con más valor, montaña arriba en busca de otra dosis de emoción. La adicción es instantánea e irreversible.

Park City

Brillante pasado

Vamos internándonos en la historia de este destino a paso lento, mientras caminamos por Main Street, la calle principal de la ciudad que brilla con luces de colores y se engalana de boutiques de ropa, accesorios, galerías de arte. Y un sinfín de restaurantes que sirve platillos de diversos rincones del mundo.

Park City nació como un pueblo minero alrededor de 1868; después de unos años, durante la depresión de los años 30, la extracción de plata cesó y los habitantes emigraron en busca de nuevas oportunidades.

El lugar fue abandonado a una suerte de pueblo fantasma, pero la otra naturaleza de la ciudad comenzó a brillar como oro: el gran desarrollo turístico la convirtió en uno de los centros de esquí más atractivos de Estados Unidos.

En su historia contemporánea es imposible dejar de mencionar a Robert Redford, quien se enamoró de esta región y creó el Sundance Film Festival.

Se realiza todos los años en el mes de enero, cuando esta encantadora ciudad de montaña se convierte por unos días en un Hollywood invernal. Así, los viajeros y locales se encuentran en calles y restaurantes con leyendas como Pierce Brosnan, Al Pacino, Robert de Niro y Francis Ford Coppola.

“Aquí pasa algo muy curioso durante el Festival: los famosos no son acosados por los habitantes ni por los visitantes; todos van sin escoltas, van libres y con ganas de disfrutar de la ciudad”, cuenta Geoff Swarts.

Park City

A nuestro paso por Main Street, vemos encantadoras tiendas de comida orgánica; cafecitos con librerías en las que dan ganas de ver pasar tardes enteras; boutiques de moda; galerías de arte contemporáneo y rincones sorprendentes como Southwest Indian Traders, una tienda que vende esquís y raquetas de nieve del siglo pasado, hechas de madera y a mano que se han convertido en un objeto de culto para coleccionistas.

Si por las tardes el movimiento de Main Street y su escena culinaria nos tiene encantados, por las mañanas, las montañas con sus pistas de esquí, sus terrenos interminables para realizar snowmobile (moto de nieve) y otras actividades nos seducen de manera irremediable.

Antes de despedirnos de una semana de emociones inolvidables en Park City, nos enteramos de que este año, la temporada de esquí, gracias a la calidad de la nieve, se extenderá hasta el 16 de abril. La noticia nos tienta a volver antes de que la nieve se derrita para seguir creando memorias imborrables sobre el blanco inmaculado que cubre las montañas de este destino de esquí.

Más allá del esquí 

Park City ofrece un mundo de opciones para disfrutar de la nieve con diferentes actividades.

Snowmobiling

Para muchos, el ruido del motor y la naturaleza es una contradicción, pero las motos de nieve logran acceder a zonas a las que de otro modo sería imposible.

Además, la sensación de libertad y la emoción que produce deslizarse con velocidad por enormes extensiones blancas es incomparable. deervalley.com

Snowshoeing

Para lograr avanzar unos pasos sin resbalar en el intento hay que ir con unos zapatos especiales llamados raquetas. Que permiten pisar firmemente adhiriéndose al suelo sin importar lo inclinado o accidentado del terreno. Caminar sobre la nieve por las montañas es un imperdible. visitparkcity.com

Bobsled

Es un deporte olímpico que se heredó como un atractivo turístico a partir de los Juegos Olímpicos de Salt Lake City 2002. Recorrer mil 335 metros a 120 kilómetros por hora en un trineo olímpico se convierten en los 52 segundos más emocionantes de la vida. utaholympiclegacy.org

Park City

La percepción de un local 

Geoff Swarts llegó a Park City desde Colorado y se enamoró para siempre de este destino. Nos comparte algunos los momentos que más atesora viviendo aquí.    

Tomar una cerveza artesanal con los amigos después de una mañana entera de esquiar en las montañas.

Vivir la atmósfera de celebración en las calles de la ciudad durante el festival de cine de Sundance.

Hacer del esquí un momento de contacto consigo mismo y la naturaleza, una oportunidad para vivir el presente y para superar sus propias marcas.

Park City

Información de viaje

Park City abraza dos resorts de esquí que juntos convierten a esta ciudad en uno de los más reconocidos destinos de invierno, con 59 lifts y más de 400 pistas para equiar. La  temporada de esquí 2016 termina el 16 de abril.

CÓMO LLEGAR

Delta Air Lines (es.delta.com) opera un vuelo directo diariamente hacia Salt Lake City desde la Ciudad de México. Desde ahí, Park City se encuentra a 35 minutos por tierra.

RECURSOS

visitparkcity.com Para información sobre actividades por estación, hospedaje, restaurantes, tips de viaje y paquetes turísticos.

Tip de viaje Al adquirir el TRIP (pase internacional para ambos resorts) se disfruta ilimitadamente ambas áreas de esquí. visitparkcity.com/trip

 Dónde quedarse

Montage Deer Valley Con reminiscencias de los grandes refugios de montaña del oeste, Montage Deer Valley es un resort que promete una escapada clásica de montaña.

Los huéspedes disfrutan una privilegiada ubicación sobre el Empire Pass, de acceso directo a la estación de esquí, y del Spa Montage. El más grande de Utah, con un diseño de inspiración alpina y una extensión de más de 3,200 metros.

Tarifas de invierno: desde $650 USD. montagehotels.com/deervalley

Silver Star en Park City Resort

Ofrece condominios de lujo, casas de campo y cabañas, situados en medio de la montaña, con acceso a las estaciones de esquí.

El lugar rinde homenaje a los días en que Park City era un importante pueblo minero, combinando edificios históricos con arquitectura moderna para crear una atmósfera encantadora que se complementa con una plaza al aire libre, tiendas, cafecitos y una piscina climatizada.

Se ofrece servicio de concierge, servicio de limpieza diario y servicio de transporte gratuito para todos los huéspedes. Las propiedades varían en tamaño: desde casas de campo o condominios con dos habitaciones, hasta cabañas con cinco habitaciones.

Tarifas de invierno desde $745 USD por noche, por un alojamiento de dos habitaciones, y desde $4,690 USD por noche, por una cabaña de 5 habitaciones.

Reservaciones: [email protected] resortswest.com

Park City

Dónde comer

Tupelo

El chef Matt Harris cree en los movimientos de slow food y “de la granja a la mesa”, conceptos que se sienten en cada uno de los platillos de este restaurante contemporáneo. tupeloparkcity.com

The Farm Restaurant

Al pie de Red Pine Gondola, en Canyons Village, este restaurante es ideal para disfrutar del après ski con un menú innovador y cocteles para celebrar el día de esquí. parkcitymountain.com

Fireside comedor en Deer Valley Resort

 Una experiencia culinaria en la que en cuatro diferentes chimeneas se montan estaciones buffet que van desde raclette hasta cabrito a la leña y fondue de chocolate y caramelo hecho en casa. deervalley.com

High West Distillery & Saloon

La primera destilería de Utah abrió sus puertas en 1870 y se ha convertido en un rincón gastronómico inspirado en cocina del oeste. highwest.com

Riverhorse

Es uno de los restaurantes más reconocidos de Estados Unidos. Ofrece comida americana ecléctica; el menú cambia según la estación y demandas creativas del chef Adams. riverhorseparkcity.com

Royal Street Cafe

Localizado en Silver Lake Lodge, ofrece un menú casual  de cocina americana e internacional. deervalley.com

Glitretind Restaurant

La cocina que abraza el famoso hotel Stein Eriksen Lodge rebasa las expectativas más altas. Se enfoca en menú de estación, ingredientes locales y sustentables. steinlodge.com