Cómo ser un buen anfitrión: principios de la cultura turística

Valorar la cultura de un destino del mundo es uno de los motivos que lleva a querer comprender, respetar y cuidar a la sociedad que la demuestra en su día a día. De acuerdo con la Secretaría de Turismo de México, uno de los grandes atractivos de los destinos son las personas, quienes representan el rol de anfitriones en un país o localidad. Por eso aquí te dejamos los 10 principios de la cultura turística, todos puedes aplicarlos para dar la bienvenida a los viajeros.

Recibir con calidez y amabilidad

Acoger a una persona ajena a tu país o estado es enriquecedor, por eso dar una cálida bienvenida representa un gran preámbulo para que el viajero respete el destino.

Tratar como a ti te gustaría que te traten

El filósofo griego Platón tenía un lema aplicable a muchas áreas de la vida: “que me sea dado hacer a los otros lo que yo quisiera que me hicieran a mi”. Con esto se admite que todos somos iguales y merecemos un trato agradable. Aún más al viajar. 

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Ofrecer un servicio o apoyo amigable

Este punto va más allá de las personas que trabajan en el sector turístico, pues incluso podemos ofrecer apoyo amigable al ver a algún trotamundos perdido o que busque hacerse una fotografía en un monumento.

Interesarse por capacitarse o estudiar continuamente

Los distintos idiomas del mundo son una de las ventanas para abrirse a distintas culturas, por eso te recomendamos que aunque no labores en el sector turístico busques aprender una nueva lengua. ¡Seguramente lo utilizarás más pronto de lo que crees!

Conocer tu ciudad o localidad y atractivos

Si lo haces podrás tener invitados y llevarlos a los puntos más chic, divertidos o impresionantes de tu ciudad o estado. Recuerda informarte con datos curiosos, probablemente te sorprenderás con lo que puedes encontrar.

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Cuidar los parques, monumentos y zonas de interés de tu localidad      

Preservar y custodiar los atractivos de nuestro país es una responsabilidad que embellece nuestro entorno y anima al turista a respetarlo.

Promover con orgullo los atractivos de tu localidad

Enorgullecerse de los sitios de interés de nuestro país es hacerlo también con nuestra nacionalidad y cultura turística.

No abusar del turista 

Incluso protegerlo o brindarle orientación para que adquiera artesanías locales o recuerdos a precio justo.

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Comentar con compañeros que atender bien al turista es tarea de todos 

Un buen anfitrión contagia el entusiasmo por tratar bien a cualquier viajero, tanto a locales como extranjeros.

Sonreír al turista

Una sonrisa amable puede cambiar el día de una persona y su percepción de los habitantes de un país.