Este lunes 8 de febrero China festeja el inicio del Año Nuevo Lunar, que en este periodo corresponde al Mono de Fuego, la cual es la fiesta más importante del país oriental, y también se le conoce como el Festival de la Primavera.
Para los chinos, esta celebración representa un tiempo de reflexión y nuevas esperanzas para el año que ha comenzado. Los festejos tienen una duración de 16 días a partir de la víspera de Año Nuevo y finaliza hasta el Festival de la Linterna, es decir, en el quinceavo día del primer mes lunar.
El calendario lunar ha sido utilizado por los chinos desde el año 2600 a.C., tiempo en el que el Emperador Huang Di, dio inicio al primer ciclo del zodíaco chino. Pues de acuerdo a la leyenda, el también llamado Emperador Amarillo, nombró a un animal para representar cada año en un ciclo de 12, en los que incluyó a: la rata, buey, tigre, conejo, dragón, serpiente, caballo, cabra, mono, gallo, perro y cerdo.
Durante este periodo las familias chinas limpian a conciencia sus hogares, ya que con ello se cree, alejarán cualquier tipo de mala fortuna, y de esta forma darle paso a la buena suerte. Asimismo, adornan sus ventanas y puertas con recortes de papel rojo y coplas poéticas, con las que expresan su alegría y esperanza en el Año Nuevo Lunar.
Asimismo, es natural ver hermoso fuegos artificiales, danzas del león y del dragón, con faroles y acertijos. Además, muchas familias se unen para ofrecer cenas en la víspera de Año Nuevo, pues se acostumbra visitar a parientes muy allegados.
Si decides viajar a China por estas fechas, quedarás maravillado por su extraordinarias costumbres del Año Nuevo, como la del “sobre rojo» que consiste en entregarle a los niños o parientes más jóvenes, un sobre como deseo de buena suerte, el cual contiene una cantidad de dinero. O degustar los deliciosos platillos típicos como los raviolis chinos, que se acostumbran preparar para la cena de Noche Vieja.
Checa El Año Nuevo chino llega a la Ciudad de México.