Un lugar que se antoja para disfrutar con un vaso de whisky, donde las lluvias son muy frecuentes y las leyendas de monstruos como el del Lago Ness, le dan a Escocia un toque místico. Sumado a que es hogar de gaitas, castillos medievales, e inmensos espacios verdes de las Tierras Altas, dentro de una cultura de tradiciones sorprendentes. Conoce estos lugares imperdibles de Escocia, de donde se dice que sólo hay dos estaciones: junio e invierno.
Glasgow
En gaélico, Glasgow, quiere decir querido y verde lugar; su historia se remonta a la edad de piedra, pero ahora es una ciudad moderna con animada vida teatral. Ahí encontrarás pubs llenos de historias donde no te sentirás como extranjero y una escena musical alternativa en auge por bandas como Franz Ferdinand o Simple Minds. Un lugar que combina tradiciones celtas con tiempos modernos.
Edimburgo
Es una capital cosmopolita donde se celebran populares festivales. Caminar entre sus calles es un agasajo porque se combinan elementos medievales, modernos y naturales, que te transportan a otras épocas. Edimburgo cuenta con un bello mirador en Calton Hill, que te ofrece una panorámica preciosa de la ciudad. Entre sus curiosidades, si tomas al autobús 44 en el Centro Histórico, en menos de 30 minutos estarás rodeado de inmensos espacios naturales.
Stirling, Parque Nacional Trossachs y Lago Katrine
Si deseas conocer la esencia de Escocia, visitar estos tres lugares es ideal para descubrir héroes escoceses, historias, batallas épicas, castillos, monumentos o leyendas. El lugar más emblemático es el monumento a William Wallace en el monte Abbey Craig; es una odisea que te transporta al pasado observando los objetos que pertenecieron a Wallace, para descubrir las historias que lo hicieron leyenda.
Lago Ness
Puede que cuando pienses en el Lago Ness tengas la imagen del monstruo en tu cabeza, pero este lago no es sólo niebla y criaturas míticas, pues también puedes visitar las ruinas del castillo Urquhart y disfrutar del paisaje del lago en verano. Pero si las ansias de conocer más sobre el monstruo te superan, puedes visitar el Centro de Exposiciones de Drumnadrochit, donde descubrirás más sobre este lugar y quienes lo habitan.
La Isla de Skye
Una isla tan bella que desde la época victoriana, los alpinistas llegaron ahí para explotar su salvajes valles y sus montañas. Ahora está unida a tierra firme por un larguísimo puente que vale la pena visitar en coche, sobre todo por su variedad de paisajes, y porque ahí aún se conserva la cultura y el idioma gaélico.