Existen construcciones que tienen el poder mágico de transportarte en el tiempo a través de sus fachadas e interiores. Conoce estos cinco palacios que te darán otra perspectiva de la historia de México.
Palacio Municipal de Veracruz
Su construcción comenzó en 1609 y finalizó 18 años después, en 1627. Este edificio colonial tiene un estilo toscano y sirvió de alojamiento a los gobernantes y virreyes de este estado en sus viajes a la ciudad de Veracruz. En sus orígenes, el palacio tenía dimensiones menores a las actuales y no contaba con la torre que lo identifica. En su interior se halla una pintura creada con motivo del 450 aniversario de la fundación de la urbe, obra de Víctor Ángel Villa Rosas.
Palacio Legislativo de Guanajuato
En su sede actual estuvo en 1753 el Palacio Marquesal de San Clemente. El edificio fue demolido en 1897 y por iniciativa del entonces gobernador, Manuel Gómez de Linares, se inició la obra del actual Palacio Legislativo de Guanajuato. El arquitecto a cargo fue Cecilio Luis Long, quien acondicionó el lugar para convertirse en el asiento de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de la entidad. Se terminó de construir tres años después, en 1900, durante el gobierno de Porfirio Díaz.
Palacio Municipal del Oro
Es un inmueble ubicado en el Estado de México y edificado en los inicios del siglo XX; tiene un estilo neoclásico y dos torres inglesas. Su construcción duró tres años y siete meses, siendo inaugurado el 2 de octubre de 1910. Fue declarado Monumento Histórico por el Instituto Nacional de Antropología e Historia. En su entrada se puede apreciar el mural Génesis minero, que retrata la vida de los habitantes en la época, creado por el pintor Manuel D’Rugama.
Palacio Municipal de Mérida
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Localizado en el costado poniente de la Plaza Principal del estado, fue edificado durante los años 1734 y 1736. En la actualidad es el órgano administrativo de Mérida. Cuenta con un reloj que se le colocó en 1871, el cual fue el primero de la ciudad. Además, tiene un patio trasero elevado, donde se encuentra un vestigio maya de la pirámide Bakluum-Chaam.
Palacio de Cortés
Es un monumento histórico situado en Cuernavaca, Morelos. Su construcción inició en 1526, en la etapa inicial del periodo novohispano en México. Está enclavado en las ruinas de Tlatloyacalli, un espacio que era utilizado para entregar tributos al cacique del lugar. Fue residencia de Hernán Cortes y ha fungido como cárcel, despacho oficial de Maximiliano I y sede del gobierno de Morelos. En la actualidad es el Museo de Antropología de Cuernavaca, conocido también como Museo Cuauhnáhuac.