A bordo de la potente y bella Lincoln Navigator salimos a recorrer el mágico barrio de San Ángel, en Ciudad de México. ¿Al volante? El reconocido chef Abel Hernández, quien en preparación para una cena muy especial para papá, comprobó la amplitud, estabilidad y confort de este vehículo fuera de serie. Aquí te contamos todo el recorrido. Fotos: Gabriel Núñez.

Poderosa, amplia y cómoda, la Lincoln Navigator es el vehículo ideal para que papá salga a pasear con la familia, como comprobamos en nuestra ruta por San Ángel.

Nuestro anfitrión y conductor en la ruta con Lincoln Navigator fue el chef Abel Hernández, quien nos recibió en su restaurante, Loretta Bistrot.

A bordo, el chef quedó fascinado con los acabados de lujo de su tablero y la sensación táctil de las vestiduras, revestidas con piel escocesa Bridge of Weir.

Para comprobar su magnífica suspensión y su cabina silenciosa, condujimos por las calles empedradas de San Ángel. Confort y silencio en cada tramo del camino.

«Yo soy una persona alta y corpulenta, por eso la Lincoln Navigator me resulta ideal gracias a su amplitud. Además, sus asientos con 30 posiciones la hacen muy confortable», opinó Abel Hernández.

Son varios los acabados que confirman el refinado diseño interior de esta SUV, como se puede ver en la textura cromada de sus botones y diales.

La elegancia también se nota en sus rines de aluminio pulido 22″ con brazos de subrelieve.

Adicionalmente, la parrilla de aluminio satinado con el inconfundible logo de Lincoln no dejan lugar a dudas: el lujo está en los detalles.

Con una potencia de 450 HP, la Lincoln Navigator hace que cualquier recorrido por la ciudad se transforme en una experiencia de confort y eficiencia.
Para conocer más detalles de la Lincoln Navigator, puedes dirigirte a su página oficial y elegir tu modelo favorito.