Cada vez están más cerca las vacaciones de Semana Santa, y si aún no sabes qué destino visitar y menos dónde te hospedarás, checa estos tres hoteles en México ideales para descansar y pasar unos días de ensueño entre confort, naturaleza y hermosos paisajes.

Inspiración urbana

Hyatt Regency Mexico City, Ciudad de México

Las razones detrás de un viaje son tan amplias como facetas tiene la vida: desde la firma de un negocio hasta la oportunidad de escaparse en pareja a un lugar diferente para celebrar el amor. Cualquiera que sea el motivo, el hospedaje debe brindar un espacio de inspiración y tranquilidad, sin perder la conexión con el ritmo del día a día. En el Hyatt Regency Mexico City el escape se torna amable, al llegar a disfrutar sus instalaciones renovadas por la firma George Wong, con base en Nueva York.

Al ingresar al lobby, apreciarás en el fondo las mesas de Rulfo, restaurante insignia de la propiedad, donde se conjugan platillos de las cocinas mexicana, argentina y peruana. También fíjate en el arte que embellece el espacio de la recepción, como el vibrante cuadro El vuelo, de la pintora argentina Clarisa Parlato. Si te hospedas en alguna suite, tendrás check-in prioritario en la recepción del Regency Club en el piso 40.

Al ingresar a tu habitación, sentirás la calma de su decoración inspirada en el feng shui, matizada con detalles de diseño mexicano. Si la cama o el amplio baño de mármol no fueran suficientes, desde la sala de tu suite puedes gozar de la majestuosa vista de la Ciudad de México, cuyos amaneceres con los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl delineados al fondo, comparten el escenario con los edificios del Paseo de la Reforma, el bosque y el castillo de Chapultepec.

Si quieres relajarte por un momento, acude a su renovado Fitness Center para ejercitarte y después disfrutar de la piscina techada, climatizada a 30°C, y de las canchas de tenis. Ser huésped de la suite te permitirá tener acceso a las facilidades del Regency Club, un espacio donde tendrás bebidas, desayuno americano y canapés incluidos durante tu estancia, para hacer de la Ciudad de México un hogar fuera del hogar. Regency Suite King desde $679 USD. mexicocity.regency.hyatt.com

Encanto de dos mundos

Banyan Tree Mayakoba, Riviera Maya

El árbol baniano refleja de manera perfecta cualquier resort de la marca: una acogedora sombra y su cobijo a los viajeros. Sin embargo, en éste, el primero en América, hay un sello que lo distingue de sus hoteles hermanos y la demás oferta de la Riviera Maya. Va más allá del galardonado spa, del aclamado campo de golf El Camaleón, de su magnífica playa y sus restaurantes de nivel mundial; incluso del hecho de que es el hotel más sustentable de toda la zona. Es probable que sea por su belleza casi mística, donde la cultura maya abraza el toque apacible del Lejano Oriente.

El registro lo haces en privado; luego, si lo deseas, el anfitrión designado a tu villa desempaca tus maletas, mientras tú y tu pareja disfrutan de una copa de champaña y un masaje de pies relajante: la mejor manera de empezar tus vacaciones.

Cada una de las 118 villas se diferencian por su diseño diverso. La intención es que se sientan como en un santuario personal, donde encontrarán piscina privada, bañera de hidromasaje y terraza con vista al mar, a colinas exuberantes, a la laguna interna o a los jardines. Todas se encuentran rodeadas de naturaleza, creando así una armonía que permea el espíritu. El cuidado a los pequeños detalles completa el encanto: la fragancia de las flores que embellecen la habitación, así como los aceites de hierba limón que la aromatizan y los suaves kimonos en lugar de batas, son la fusión perfecta de Oriente y Occidente.

Con la intención de brindar inolvidables experiencias para sus diferentes huéspedes, uno de los puntos más importantes es El Camaleón, el campo de golf de 18 hoyos diseñado por una de las leyendas de la PGA, el famoso jugador Greg Norman. Éste es el escenario del Mayakoba Golf Classic, el único evento del tour de la PGA que se lleva a cabo en América Latina. Cuestión que se entiende cuando se admira el precioso recorrido rodeado del paisaje tropical, con sus manglares tupidos y dos hoyos que dan a la costa del mar Caribe.

Bajo la filosofía de Banyan Tree de rejuvenecimiento del cuerpo, la mente y el alma, su galardonado spa es garantía de bienestar. Las manos expertas de los terapeutas son entrenadas durante años en la academia Banyan Tree Spa que se encuentra en Tailandia, y está inspirada por las tradiciones asiáticas antiguas que se transmiten, incluso hoy en día, generación tras generación. Explora el menú de tratamientos únicos y déjate consentir por el tacto intuitivo de dichos maestros.

The Rainforest es otro oasis de serenidad, una experiencia hidrotermal completa especial para combatir el estrés. Recorre de Rain Walk, un camino de diferentes tipos de lluvias que te llevarán a la entrada de la Aroma Steam Chamber, donde los vapores aromáticos calmarán tu espíritu; de ahí, reactivarás tu circulación en la Experience Showers. Relájate en el sauna y luego ve por un masaje enérgico en la Ice Fountain. Al final es necesario reconstituirse y para eso están la Vitality Pool y Waterfall.

La gastronomía debe estar a la par de las demás experiencias, y los restaurantes del resort cumplen la labor de satisfacer a todos los paladares, incluso si lo que necesitas es que sea kosher. La comida puede ser servida en casi cualquier lado: en la terraza de tu villa, admirando la puesta de Sol en la playa, en uno de los múltiples rincones exuberantes de Mayakoba e, incluso, frente al bello árbol baniano. Si deseas seguir disfrutando de tu villa, pide la parrillada para que la hagan ahí mismo. Los chefs del resort prepararán platillos suculentos con los mejores cortes de carne, los pescados más frescos y los mariscos del día.

Si lo prefieres, puedes navegar a bordo de diversas embarcaciones entre los canales de la laguna de Mayakoba. Tal vez la favorita sea Ixchel, una trajinera tradicional nombrada por la diosa maya de la Luna, sobre la cual recorrerás los manglares mientras degustas cocina mexicana deliciosa. Así, atardeceres, aperitivos y tapas se convertirán en noches románticas. Villa desde $499 USD. banyantree.com

Pequeña Venecia caribeña

Fairmont Mayakoba Riviera Maya

En el territorio mexicano abundan grandes tesoros, muchos de ellos en el interior de la república, pero cuando se recorren destinos de playa, las aguas que los bañan consiguen destinos únicos. Eso ocurre en Mayakoba, un enclave donde convergen el mar Caribe, una bella laguna y tres afamadas firmas de hoteles, entre ellas Fairmont Mayakoba. Los azules del mar, de varios tonos e intensidades, bordean por un lado al hotel, mientras que, por el otro, los manglares y la laguna interior lo protegen, convirtiéndolo en un refugio de alto nivel, que ha sido galardonado con cinco diamantes por la AAA.

Solo por esta conjunción de ambientes, es obligado alojarse en este complejo alguna vez en la vida. Y al adentrarte entre sus suites, caminar sus pequeñas calles adoquinadas, cruzar sus puentes y disfrutar de sus experiencias exclusivas, te darás cuenta del porqué esta decisión es la más acertada.

Este hotel está pensado para que el huésped no extrañe nada; al contrario, que disfrute y se relaje. Todo puede comenzar en las diversas habitaciones, suites y casitas o las suites privadas, a la orilla de la playa de arena blanca. O quizá, en su alberca infinita solo para adultos, sin duda un buen lugar para degustar alguno de sus cocteles, como el que preparan especialmente con licor Ancho Reyes, a base de chile ancho. Si una tarde relajada a la orilla del mar, o recorriendo sus piscinas no es suficiente y todavía el cuerpo pide más descanso, es hora de encontrar la paz en la calidez de su spa Willow Stream. En alguna de sus 20 salas podrás elegir entre un amplio menú de tratamientos, algunos utilizan ingredientes autóctonos y tradiciones nativas inspiradas en la cultura maya.

Si viajas en pareja, no dudes en optar por la suite especial para dos, que se ubica en la copa de los árboles del spa. Quizá también pasear en barca o kayak por los canales de esta pequeña Venecia, conociendo su flora y fauna protegida, puede ser una opción gourmet, experiencia acompañada de espumoso frío.

Quizá todo eso, y más, fue lo que hizo que el chef Richard Sandoval, mexicano reconocido internacionalmente y propietario de un gran número de restaurantes en Estados Unidos, pusiera sus ojos en este complejo de lujo para dar un twist a su oferta gastronómica. Desde hace pocos meses llegó para ponerse al frente de su cocina el chef ejecutivo Eric de Maeyer, quien se encarga de que cada día junto a su sous chef, Raúl Castro, se cumplan al pie de la letra las directrices del chef Sandoval. En los restaurantes Las Brisas, La Laguna y El Puerto, la carta se ha reinventado y ha alcanzado otro nivel en donde el comensal vive una experiencia acorde a los cinco diamantes que ostenta orgulloso este hotel.

Las Brisas ofrece cocina fresca de mar, en la que destacan marinados especiales como el mojo y el adobo, ceviches de estilo caribeño y múltiples variedades de sashimi. Abierto todo el día, en La Laguna es posible probar especialidades mexicanas, además, de disfrutar una de sus nuevas actividades, una cena-cata maridaje de cervezas artesanales, todas ellas elaboradas en México, y acompañadas de platillos como unas carnitas estilo Michoacán con cebollitas encurtidas y salsa de cítricos. Por último, El Puerto opera como un restaurante que fusiona en su carta los ingredientes asiáticos y latinoamericanos, para llevar al plato sabores del mundo. Habitación Fairmont King desde $405 USD.  fairmont.mx/mayakoba-riviera-maya/