Dulces tradicionales Wagashi: para acompañar el té japonés

En la tradición del té japonés siempre hay un fascinante lado dulce, una forma de arte tanto visual como culinaria… ¡Wagashi! Descritos generalmente como “dulces tradicionales” que se sirven durante la ceremonia del té, los wagashi varían en forma, composición y decoración de una región a otra en todo Japón. Hoy, muchos incluso, se consideran preciados regalos entre los amantes del té, ya sea en su versión tradicional o en adaptaciones más modernas (denominadas dagashi). Fotos: Cortesía Escuela Mexicana de Té.

Pero vayamos a su origen. La palabra japonesa para dulces, kashi, originalmente sólo se refería a frutas y nueces. En la antigüedad, el azúcar era caro y difícil de conseguir, por lo que se utilizaban como dulces frutas y nueces naturalmente dulces. Con el creciente comercio de azúcar entre China y Japón, este se convirtió en un ingrediente doméstico común al final del período Muromachi (1336-1573).

 

Dulces tradicionales japoneses Wagashi

 

Fuertemente influenciados por el consumo de té, los dulces de acompañamiento se hicieron populares en la sociedad nipona durante el período Edo (1603-1867); el carácter meloso brindaba balance al potente gusto vegetal del té. Finalmente, el término wagashi fue acuñado durante el periodo Meiji (1868-1912) para diferenciar las creaciones locales de las variedades europeas y chinas importadas. Desde entonces, los wagashi se fueron volviendo más y más expresivos.

 

¿Cuáles son los ingredientes de los dulces tradicionales japoneses Wagashi?

 

Tradicionalmente, los wagashi son de origen vegetal, no contienen lácteos y utilizan agar para darles su característica textura gelatinosa. Por eso, se consideran mucho más saludables que los bocadillos dulces occidentales, que suelen tener un mayor contenido de azúcar. Su preparación incluye siempre arroz de grano corto que se cuece al vapor y se machaca hasta obtener una pasta maleable.

 

Dulces tradicionales japoneses Wagashi

 

Otros ingredientes tradicionales incluyen mochi (flor de arroz), anko (pasta de frijol azuki), agua, azúcar, fécula de maíz y fruta. Por lo general, suelen bautizarse con nombres de poesía y tienen sabores únicos, de una región a otra, de una temporada a otra. Algunos bocadillos de temporada, como el sakura mochi, son especialmente populares, mientras que en otoño se prefieren los sabores de castaña.

Hoy en día, los wagashi se pueden encontrar en todo Japón… Se ofrecen en cafés, restaurantes, templos y jardines selectos donde se sirve té. Kioto en particular tiene muchas tiendas de bocadillos tradicionales donde los visitantes pueden probar todo tipo de formas y sabores.

 

¿Cuáles son los wagashi más comunes?

 

Dulces japoneses

 

Entre los más comunes se cuentan Dango, bolas de mochi redondas y masticables, colocadas en un palito y cubiertas con un almíbar dulce y salado hecho de soya, azúcar y almidón; Daifuku, mochi pequeño y redondo relleno con una dulce pasta de frijoles rojos, saborizado con fresas o soya; Dorayaki, un tipo de pastel hecho de pasta dulce de frijoles rojos intercalada entre dos capas de bizcocho esponjoso horneado, y Manju, que se prepara envolviendo ingredientes aromatizados como anko, mermelada de castañas o camote en una masa laminada que después se cuece al vapor.

¡Es cierto!, como el té, la cultura wagashi es reflejo de la naturaleza humilde de Japón y de las estaciones en constante cambio. Aunque el wagashi se puede encontrar en grandes supermercados y tiendas de conveniencia de todo el mundo, los mejores exponentes son exclusivos de casas de té especializadas. escueladete.mx

 

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