Esta ciudad turca ubicada en la costa del mar Egeo es la combinación perfecta entre antigüedad y modernidad. Aquí una guía práctica para adentrarte en Esmirna, el destino ideal para los visitantes más ávidos de sabores extraordinarios. Fotos: Carl Pendle.
¿Por qué ir?
La historia de la tercera ciudad más importante de Turquía está basada en la migración. Los judíos sefardíes trajeron boyoz rellenos de alcachofas y tahini, mientras que los comerciantes levantinos masticaban ortiga, pamplina y más de 100 hierbas comestibles de todo el Mediterráneo.
En el cacofónico bazar Kemeralti, uno de los más antiguos del país, destacan sabores más contemporáneos: piensa en sopa de menta y lahmacun (pan plano con una mezcla de carne picada, cebolla, perejil, pimientos y especias).
La mayoría de los amantes de la comida llegan durante la primavera, cuando los sabores regionales florecen, junto con sus árboles de cítricos. La Perla del Egeo, amigable para los peatones, es la que más comida callejera ofrece en esa nación.
Recorre sus calles para encontrar brochetas de mejillones midye tava (fritos), pastelillos de queso katmer y postres de sambali (pastel hecho con harina, sémola y yogurt).
¿Qué hacer?
Recarga energías con una taza de café turco y dirígete al ventoso paseo de Kordon, para admirar un paisaje de la costa del Golfo de Esmirna. Espera ver vías para bicicletas, gente volando papalotes y bares de vinos que ofrecen pinot noir local.
Tierra adentro, sus calles encaladas albergan tabernas que sirven calamares fritos y ouzo (un licor anisado de origen griego), imponentes iglesias antiguas y, justo después del laberinto del bazar Kemeralti, con sus puestos, jardines de té y boutiques artesanales, está un ágora que era utilizado para almacenar aceite de oliva y queso feta, cuando Marco Aurelio estaba en el trono de Roma.
Pasea entre sus ruinas o entra al Museo de Arqueología de Esmirna, que muestra objetos del barrio marinero de Teos. El mejor lugar para contemplar la puesta de sol es el elevador Asansör, construido en 1907, que te llevará hasta una cafetería vintage donde podrás apreciar vistas panorámicas.
¿Dónde quedarse?
Un poco fuera del centro, Club Marvy (clubmarvy.com) es una joya con dos playas gemelas (una solo para adultos). Este lugar cosecha su fruta y produce aceite con sus propias aceitunas.
Reserva una mesa en Buono, restaurante a cargo de la chef italiana Cristina Bowerman, galardonada con estrellas Michelin, quien adquiere sus ingredientes en Degirmen Farm, el primer huerto orgánico de la región.
Swissotel Efes Izmir (swissotel.com) se encuentra justo en medio de todos los sitios de interés culinario y cultural. Su hammam, piscinas y la máquina exprimidora de jugo de granada son una ventaja extra.
Key Hotel (keyhotel.com) ofrece vistas al mar y su carta de vinos con 250 etiquetas incluye añadas de los viñedos de Urla, que datan de la época romana. En 2018, el hotel eco-chic Gaia Alaçati (gaiaalacati.com) abrió sus puertas para revelar una serie de creaciones elaboradas con materiales reciclados, incluido un bar hecho con postes de lámparas viejas.
¿Dónde comer y beber?
Si quieres probar cocina auténtica, dirígete a las lokantas (pequeños restaurantes locales). Billur Et Lokantasi ofrece empanadas de queso tulum de leche de cabra y köfte (carne molida), seguidos de un delicioso postre de calabaza.
El exclusivo Balmumu Dükkan sirve los favoritos de Esmirna en un atractivo espacio, los cuales son confeccionados por el master chef Ahmet Bey. Su sopa de tahini y los boreks son muy vistosos.
Para los comensales más osados, está Kokoreççi Asım que sirve tripas de cordero a las brasas. Su kokoreç, servido en un bollo caliente con tomates y cebollas, es un antídoto perfecto para la resaca. Si eres amante de los mariscos, visita Sakiz Alsancak.
Prueba opciones de mezze frías y calientes (aperitivos), seguidas de un plato fuerte de pescado (como el besugo horneado con sal). La panadería Zeynel Ergin Gevrek Firini es ideal para comprar panecillos a la hora del desayuno, aceitunas de Esmirna y halloumi (queso) a la parrilla.
Se te acaba el tiempo
A cinco minutos en automóvil del aeropuerto se encuentran los viñedos de la bodega Isabey, establecida en 1942. Su restaurante sirve suntuosos cortes de carne maridados con sus famosos sauvignon blancs.
Tip de viaje El primer sitio Slow Food de Turquía es Seferihisar, un pueblo con un estilo muy tradicional que se asienta sobre el sitio arqueológico de Teos. Su popular mercado callejero solo vende productos locales, los comerciantes cosen a mano sus prendas, producen sus propias joyas y reinventan especialidades locales de mariscos, como los kebabs de congrio.
Información de viaje
La moneda es la lira turca (1 TRY = 3.50 MXN), y el huso horario es GMT +3. La mejor época para viajar es durante la primavera, para disfrutar temperaturas cálidas y agradables.
Cómo llegar
Turkish Airlines (turkishairlines.com) vuela a Esmirna desde Ciudad de México, vía Estambul. Vuelo redondo desde $1,480 USD.
Recursos
Visit Izmir (visitizmir.org) es la página web de turismo local y contiene guías de recetas y lecciones de historia, con videos e información práctica para aprovechar tu visita a la urbe más tranquila de Turquía.
Más información
Levant de Philip Mansel ($21.75 USD, amazon.com) cuenta la historia de los centros comerciales del Mediterráneo oriental: Esmirna, Alejandría y Beirut.
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