Alejadas del mundo, las Islas Feroe son un archipiélago que forma parte de Reino de Dinamarca. Están compuestas por 18 islas, por lo que han tenido que estar a la vanguardia en infraestructura para poder conectar todos los territorios a través de carreteras y túneles que van por debajo del mar. En diciembre del año pasado, se inauguró la primera glorieta submarina del mundo, que une tres carreteras subacuáticas para acortar los tiempos de traslado. Foto de portada: Unsplash. 

 

En las profundidades

 

El túnel de Eysturoy conecta la capital de las Islas Feroe, Tórshavn, con las localidades Strendur y Saltnes, que forman parte de la isla Eysturoy. Esta red de caminos suma un total de 11,2 kilómetros de largo. Antes de esta nueva vía, el camino para conectar la capital con estas localidades era de 55 kilómetros.

 

Glorieta submarina

Foto: Twitter @Visitfaroe.

 

La construcción de este proyecto inició en 2017 desde puntos opuestos, y fue en 2019 cuando los tres caminos convergieron en lo que ahora es la primera glorieta submarina del mundo. El punto más profundo del túnel está a 186 metros debajo del nivel del mar y, para garantizar la seguridad de los usuarios, la pendiente más pronunciada no supera el 5% de desnivel.

 

Caminos y arte

 

Sumado a la experiencia única de atravesar túneles debajo del mar, la primera glorieta submarina del mundo, que mide 80 metros de altura, tiene obras del artista local Trondur Patursson. La decoración consta de murales por las paredes y el techo con colores, luces y esculturas que simulan el fondo del océano. Estos dos factores harán de la rotonda un nuevo atractivo turístico para los visitantes de las Islas Feroe.

 

Glorieta submarina

 

 

Red de túneles

 

La empresa encargada del proyecto fue Eystur- og Sandoyartunlar. El túnel reduce la distancia entre Tórshavn y Runavík o Strendur de 55 kilómetros a 17 kilómetros, o de 64 minutos a tan solo 16. Este túnel es el tercero que existe bajo el mar para conectar distintos puntos de las Islas Feroe y la misma empresa ya está construyendo uno más que abrirá sus puertas en 2023.

Para poder atravesar el túnel de Eysturoy y conocer la primera glorieta submarina del mundo, el costo para los usuarios es de 75 coronas danesas ($250 MXN) por un viaje de ida.

 

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