Este 5 de junio se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente, una fecha que cobra cada vez más relevancia. Y aunque la crisis climática y deterioro ambiental no ceden, afortunadamente hay personas dedicadas a enfrentarlos día a día. Un ejemplo es Fabián Arriaga, buzo y guía de naturaleza experto, quien se interna en los arrecifes de Quintana Roo para instalar viveros de coral. Aquí te contamos un poco sobre su labor y te decimos cómo puedes involucrarte. Fotos: Unsplash / Arturo Torres Landa.
De la montaña al mar
Veracruzano de nacimiento, Fabián Arriaga comenzó su carrera como guía de outdoors hace más de una década. Sin embargo, a pesar de su pasión por el mar, sus comienzos en esta profesión ocurrieron fuera del agua. «Empecé con el ecoturismo como guía de kayak de mar; en México Verde fui instructor de escalada y guía de rafting en los rápidos de Jalcomulco. Después me llamaron para dar clases en la Universidad de Quintana Roo, una de las pocas instituciones donde se imparte la carrera de Turismo Alternativo a nivel profesional en México. Después me mudé a Playa de Carmen para trabajar con Alltournative como supervisor de un parque con todos los procesos de seguridad que buscan las agencias extranjeras«, comenta sobre su experiencia.
Así, tras más de una década desarrollando productos de ecoturismo, Fabián formó parte del equipo de la experiencia Snorkelling Adventure, su primera incursión dentro del mar de Cobá Native Park Chimuch. «Por ser un área natural protegida, tuvimos varias reuniones de acercamiento con la comunidad y empezamos a trabajar muy de la mano con ellos. Así fuimos empezando esta relación de conservación que ha sido muy productiva. Eso permitió acercarnos a Inapesca para planear un vivero de coral: un programa de restauración del arrecife con una meta de 265 mil corales sembrados en el arrecife. Tras una capacitación completa para todo el personal del parque, iniciamos el proyecto de este vivero único», comparte Fabián Arriaga con orgullo.
Resultados sorprendentes
Arrancar un proyecto de este calibre requiere mucho trabajo de campo e investigación, pues es necesario encontrar las condiciones de profundidad, temperatura y corriente perfectas para un vivero de coral. «Uno de nuestros objetivos es minimizar el impacto a los arrecifes, reducir su carga. Aunque por arriba los veas perfectos, los cambios en la temperatura del agua los afecta. Por el tipo de estructura donde se monta el coral, unas bases de cemento y parrilla, se tiene que ubicar un punto submarino con arena», explica Fabián. Así, se toparon con el arrecife Caracol, bello pero poco visitado, el lugar perfecto para montar el santuario.
Actualmente, este vivero tiene espacio para 250 corales sembrados. «En realidad no solo sembramos en el vivero, sino alrededor a través de diferentes métodos de siembra. Algunos ejemplares de coral se reproducen en mientras que otros son tomados de pedazos del mismo arrecife. A estos trozos de coral derribado se les llama fragmentos de oportunidad: nunca se corta o mutila un coral para sembrarlo en otro lado. Después, esos mismos trozos de oportunidad son insertados en unos conectores de PVC que a su vez montamos en las parrillas afianzadas al fondo del mar», puntualiza Fabián Arriaga.
Un vivero de coral contra viento y marea
Este esfuerzo de recuperación tuvo un éxito inusitado, e incluso Inapesca se sorprendió de cómo en apenas un mes proliferó el vivero de coral. «Después de la parte de más dura del confinamiento por pandemia, lo primero que hice fue ir a ver el vivero«, confiesa Fabián. «Fue impresionante: varios ya estaban unidos y con un crecimiento de 25 cm en un año. Los mismos biólogos se quedaron sorprendidos», asegura complacido.
Sin embargo, como en todo esfuerzo de conservación, mantener en buen estado el vivero de coral conlleva enfrentar varios desafíos. ¿El más reciente? El huracán Zeta, que golpeó a Quintana Roo en octubre de 2020. «Zeta revolcó el vivero, y cuando nos fue posible nos sumergimos a ver el estado de los corales. Vimos algunos daños, pero afortunadamente el 90% había sobrevivido. Nos dedicamos a repararlo, sacar todos los corales, quitarlos y trasplantarlos todos en el arrecife Caracol. Nos dimos cuenta que, de los más de 50 mil corales que tiene identificados Inapesca, 8 mil habían sido rescatados por nuestro esfuerzo«, asegura Fabián.
¡Tú también puedes participar!
El vivero establecido por Fabián Arriaga, Inapesca y el equipo de Alltournative es un ejemplo en la Riviera Maya. Aún así, para que ese éxito repercuta en otros ámbitos es necesaria la participación de los viajeros, pieza fundamental en la conservación de los ecosistemas de Quintana Roo. «Inmediatamente después de reafianzar el vivero empezamos a llevar pasajeros para sepan que pueden aportar con su viaje; que su tour no solo sea ver los peces sino conocer todo el trabajo de estudio, crecimiento, protección y conservación de los arrecifes».
«Durante la bienvenida a estos tours de siembra de coral se les explica a los turistas qué es lo que harán y les enseñamos fotos. Esta experiencia le genera mucho valor al visitante, que emerge pensando: ‘no solo vine a darme una vuelta y darme un chapuzón, sino que vine a aportar mi grano de arena'», comenta Fabián sobre la retroalimentación que le han dado los participantes.
Respecto a los requisitos para sumergirse a rescatar corales, aclara: «Cualquiera puede hacer la inmersión. Como está muy poca profundidad, puedes usar esnórquel y visor, no es necesario saber bucear. Aparte, al lado del vivero está el arrecife Caracol, lo que permite sembrar y luego hacer un pequeño circuito sobre una barrera natural. Las sesiones duran entre 40 y 45 minutos; si tienen suerte, pueden ver tiburones raya, tortugas o manatíes. Ahí también hay una boca de manglar, de ahí vamos al vivero, y en el trayecto los guían explican todo sobre las especies», asevera el experto.
Para conocer cómo puedes integrarte a estas experiencias únicas, puedes dirigirte a la página oficial de Alltournative.
Si quieres continuar informado sobre la importancia de emprender acciones, en este Día Mundial del Medio Ambiente, tienes que saber qué son los microplásticos y cómo contaminan.