Por ubicarse en América Central, Costa Rica goza de un clima tropical que permite la producción de frutos de inigualable sabor. Éstos contribuyen a su clásica y encantadora gastronomía, la cual comparte con otros países latinoamericanos. Aquí te presentamos cinco frutas características de su territorio.
Tacaco
Se trata de una planta trepadora relacionada con el chayote, la cual solo existe para su consumo en Costa Rica. Suele preparase en diferentes platillos, como la olla de carne, en la cual se usa solo su pulpa o cocido y sin cáscara. En la actualidad se está impulsando una iniciativa en ese país para denominarlo Patrimonio Cultural y Natural de Costa Rica.
Pejibaye
Es una palmera tropical de América, sus frutos suelen venir en racimos de hasta 140 piezas de color amarillo, naranja o escarlata dependiendo de su madurez. Tienen la piel fina y un sabor dulce con textura almidonada. Además, el tronco de la planta produce palmitos que igualmente se utilizan culinariamente.
Níspero zapotillo
A este fruto se le conoce como chicozapote en el sureste mexicano. Tiene un sabor dulce y aromático, de forma muy similar a la ciruela pero con pulpa traslúcida y cáscara color café. Además de la savia del tronco del árbol se produce una especie de chicle desde tiempos prehispánicos
Cas
Es un fruto de la familia de las mirtáceas originario de regiones tropicales y americanos, aunque también puede crecer en climas templados. Su forma es similar a la de una guayaba, cuenta con una cáscara suave y amarilla que según su madurez varía en color, por su sabor suele usarse en refrescos y jarabes.
Banano de Costa Rica
La gran calidad de sus bananos es el resultado de 130 años de cultivo en tierras ticas. Este cultivo es de los más importantes a nivel cultural y económico en el país. Actualmente los plátanos que se producen en Costa Rica cuentan con Denominación de Origen y provienen de la costa oeste del país, de lugares como Parrita, Quepis y Golfito.