Tipos de copa para cada vino

Beber una copa de vino es un placer. Sin embargo, para poder disfrutar plenamente de esta bebida, existe una gran variedad de copas que por su diseño, realzan las características únicas de los vinos de algunas cepas o regiones vinícolas específicas. Aquí te mostramos algunos ejemplos de copas creadas para los vinos de estas zonas europeas. 

Champaña: 

Es una copa alargada, con forma de tulipán y borde superior estrecho. Concentra el aroma de los vinos espumosos y a la vez facilita la formación del característico perlage.

copa

Burdeos:

Esta copa, por su gran volumen, promueve una buena oxigenación del vino y por lo tanto una completa expresión aromática; del mismo modo, permite que se perciba primero la dulzura de la bebida, enfatizando las cualidades frutales. Se utiliza para vinos tintos de buen cuerpo, complejos y ricos en taninos.

copa

Borgoña:

Para vinos tintos de taninos moderados, de buena acidez y un elevado contenido de alcohol. Su forma controla el flujo del vino, moderando las sensaciones ácidas y destacando las dulces. Su amplio cáliz favorece el despliegue de matices aromáticos.

copa

Chablis:

Es ideal para vinos blancos ligeros y de alta acidez, pues su cáliz pequeño y tallo alto, evitan que el vino se caliente. Su diseño propicia el equilibrio gustativo y la liberación de notas especiadas y minerales, así como una marcada percepción de frescura.

copa

Jerez:

Esta copa es pequeña y de forma ovalada con boca estrecha que concentra los aromas y equilibra el gusto. Se utiliza para vinos licorosos y generosos de textura densa.

copa

Sin importar qué copa se utilice, para poder apreciar adecuadamente las características del vino, no hay que olvidar lavarlas con agua tibia y limpiarlas con un trapo antes de usarlas, para evitar restos de grasa o suciedad.