20 instantáneas de nuestra estancia en Barceló Maya Riviera

El lobby del nuevo Barceló Maya Riviera es una gran ventana al lujo y placer que vivimos durante la experiencia al estilo Food and Travel. Foto: Charly Ramos.

Nuestra habitación era una Swim Up, con acceso a una piscina exclusiva y tina de hidromasaje en la terraza. Foto: Charly Ramos.

Esta categoría cuenta con sala, comedor, recámara y un gran baño con otra tina de hidromasaje. Foto: Charly Ramos.

La cena del primer día fue en el restaurante Sapporo, especializado en cocina nikkei. Nos encantó el árbol que está en el recibidor. Foto: Charly Ramos.

Una fusión entre la gastronomía peruana con la japonesa es la que aquí disfrutamos. Ordenamos un rollo tempura de camarón envuelto en atún. Foto: Charly Ramos.

Al otro día disfrutamos del room service desde el balcón de la suite presidencial, con una espectacular vista. Foto: Charly Ramos.

La piscina del hotel tiene 250 metros lineales y está dividida en cuatro segmentos; es considerada la más grande del Caribe mexicano. Foto: Charly Ramos.

En su interior hay jacuzzis sumergidos burbujeando constantemente. Lo disfrutamos con una bebida del Pool Bar. Foto: Charly Ramos.

También vivimos un momento Moët & Chandon con refrescantes cocteles preparados con esta deliciosa champagne. Foto: Charly Ramos.

En el Maya Mall, ubicado en el complejo Barceló Maya Grand Resort, hay diferentes tiendas, restaurantes y hasta un carrusel. Foto: Charly Ramos.

También disfrutamos del circuito de hidroterapia de Your Spa Experience, antes de nuestro masaje. Foto: Charly Ramos.

En Agave nos recibió está sonriente hostess vestida de acuerdo con la personalidad de este restaurante 100% mexicano. Foto: Charly Ramos.

Durante los días de la experiencia, visitamos la zona arqueológica de Cobá con la agencia Alltournative. Foto: Charly Ramos.

También vivimos una ceremonia maya para pedirle a los aluxes, guardianes de la selva, permiso para descubrir sus secretos. Foto: Charly Ramos.

En la comunidad Tres Reyes, disfrutamos de ricos platillos tradicionales cocinados por mujeres mayas. Foto: Charly Ramos.

De regreso al hotel, cenamos en La Comedie, de cocina francesa. Su decoración es espectacular. Foto: Charly Ramos.

En la noche disfrutamos de la colorida coctelería del Bahía Lobby Bar. Foto: Charly Ramos.

Otro restaurante para cenar es La Dolce Vita, de suculencias italianas. En total, hay cinco restaurantes, uno tipo buffet y cuatro de especialidades. Foto: Charly Ramos.

Uno de nuestros rincones preferidos fue el gimnasio ubicado al lado del spa, con una decoración muy original. Foto: Charly Ramos.