Rodeado por las Montañas Rocallosas, se encuentra en Wyoming, Estados Unidos, un valle donde la naturaleza ha prevalecido ante el paso del hombre y el tiempo. Nombrado en honor su descubridor, David “Davey” Jackson, un célebre comerciante de pieles de castor del siglo XIX, Jackson Hole es uno de los mejores destinos para los viajeros que disfrutan la historia natural, las actividades al aire libre y la buena comida. Si estás planeando visitarlo, aquí te presentamos cinco imperdibles en tu itinerario.
Jackson Hole Mountain Resort
En las montañas que dibujan el contorno de Jackson Hole, se encuentra este resort de ski. Con una superficie de 2,500 acres, repartidos en dos montañas: Après Vous y Rendezvous, cuenta con 133 pistas para ski y snowboard; la mitad en nivel experto y el resto para participantes intermedios y principiantes. En el lugar se puede rentar el equipo necesario para realizar deportes de nieve, así como contratar clases particulares o grupales. (jacksonhole.com)
Wildlife Safaris
En Jackson Hole, la vida salvaje se encuentra por doquier. Y para descubrirla, nada como reservar un safari. El recorrido se lleva a cabo a bordo de una camioneta, a través de la carretera que atraviesa el Parque Nacional Grand Teton, que en invierno se cubre por completo de nieve. La aventura comienza a las 7 de la mañana, con un desayuno en alguna de las cafeterías locales, para después disfrutar el imponente paisaje blanco y avistar diversos animales en libertad: bisontes, puercoespines, águilas y zorros, entre otros.
El vehículo se detendrá en algunos puntos para poder tomar fotografías. Incluye préstamo de binoculares, amenidades, almuerzo y un paseo en trineo por el Refugio Nacional del Alce, donde habitan alrededor de 1,200 ejemplares de esta especie. Los safaris también están disponibles en verano, cuando el valle recupera su verdor y los ríos vuelven a fluir. (jacksonholewildlifesafaris.com)
Jackson Downtown
Pasear por el centro de este pueblo de cerca de 10,000 habitantes es una placentera y tranquila experiencia. La plaza cuenta con un pequeño estanque que en invierno se convierte en una pista de patinaje, así como grandes arcos construidos con las astas que pierden los alces en el invierno. En los alrededores, se encuentran diversas boutiques de ropa y artículos para el hogar, además de tiendas de dulces y souvenirs.
Paradas gastronómicas
Jackson Hole es el destino perfecto para los foodies. Con una oferta culinaria donde destacan los sabores refrescantes, las técnicas bien ejecutadas y las presentaciones modernas, hay más de un sitio para comer delicioso. Tal es el caso de algunos restaurantes après ski, localizados en Teton Village (un pequeño pueblo en la base de Jackson Hole Mountain Resort).
Entre estos, destaca el restaurante Osteria del chef Gavin Fine, de especialidad italiana, donde son imperdibles las coles de bruselas rostizadas, la pizza y los sandwiches helados. (jhosteria.com) O el restaurante Westbank Grill del hotel Four Seasons, que sorprende con platillos copiosos como el The grand tower -un plato de langosta y otros frutos del mar- y suculentos acompañamientos, como los espárragos salteados o las coliflores al gratin (fourseasons.com).
Para acompañar los alimentos con un paisaje sorprendente, el restaurante Palate del Wild Life Art Museum, además de contar con galerías repletas de asombrosas piezas de arte inspiradas en la vida salvaje de los alrededores, ofrece un restaurante con amplias vistas al valle. La recomendación es el fish & chips de salmón (wildlifeart.org).
Por su parte, el restaurante del hotel Amangani, ofrece una experiencia idílica, pues además de contar con interiores rústicos, se ubica en la cima de una colina, regalando desde sus ventanales, postales insuperables. Sus platillos están elaborados con ingredientes de temporada, como la sopa de cebolla carbonizada y el salmón con garam masala y semillas de granada (aman.com).
Y al dar una vuelta por el centro de Jackson, merece una visita la cafetería Persephone, cuya decoración en tonos pastel inspira a probar el chocolate caliente, que se sirve con malvaviscos gigantes de menta o vainilla (persephonebakery.com). A la hora de la cena, no hay mejor lugar para degustar platos libaneses es el restaurante Figs del Hotel Jackson. Aquí, el pan pita recién hecho se acompaña de delicias como kebab de cordero o jocoque. Para maridar, la limonada de rosas, los cocteles añejados de 3 a 6 meses en barrica o el vino israelí, son siempre una buena idea (hoteljackson.com).
Jackson Hole Food and Wine Festival
Este evento se lleva a cabo durante tres días, dos veces al año, en invierno y en verano. El evento se realiza en Teton Village y comprende diferentes actividades, como catas, talleres y cenas en torno a la gastronomía de la región. El evento culmina con una degustación de los mejores platillos de los restaurantes que se localizan en el pueblo y bebidas elaboradas en Jackson. Este festival apoya a Hole Food Rescue, una organización que recupera desperdicios de comida para los necesitados. (jhfoodandwine.com)