¿Qué es el sargazo y qué se está haciendo para controlarlo?
México es famoso en el mundo entero por sus paradisiacas playas, sin embargo, un nuevo enemigo pone en peligro a todos los litorales del Caribe. Pero ¿qué es el sargazo? Éste llegó por primera vez a nuestras costas en 2015 y este año tiñó el famoso mar turquesa de Cancún con un tono marrón.
Te contamos más acerca de esta nueva realidad en Quintana Roo y las acciones que se están tomando para combatirlo.
El sargazo es una macroalga marina plantónica del género sargassum, y a pesar de que no hay muchas investigaciones al respecto, se cree que proviene del Mar de los Sargazos, cerca de las Islas Bermudas, en el océano Atlántico Norte y al norte Ecuador. Es arrastrado a las costas de Brasil en donde se acumulan llegando a formar pequeñas “islas”.
Caribe afectando
Debido a las corrientes marinas llega al Caribe afectando a diferentes destinos turísticos.
Los visitantes se quejan del fétido olor, producto de la descomposición del sargazo en la arena, así como de la desagradable sensación que produce el contacto con la piel al momento de pisarlo o nadar.
No es tóxico sin embargo puede generar urticaria y los gases de ácido sulfhídrico, producidos cuando se descompone, pueden generar dolores de cabeza y mareos.
Greenpeace
Según la organización ambientalista Greenpeace, la actividad humana es la principal responsable del aumento de esta alga, debido al incremento de deshechos naturales ricos en materia orgánica y la sobreutilización de fertilizantes en la industria agrícola, los cuales han generado las condiciones para el desarrollo del sargazo.
Otro de los posibles culpables señalados por la agrupación es el calentamiento global, que ha elevado las temperaturas marinas acelerando el ciclo de vida y reproducción.
Se han realizado esfuerzos por parte de diversos agentes como los gobiernos federal y estatal o la iniciativa privada liderada por los empresarios hoteleros.
Se han logrado retirar más de 125 mil metros cúbicos de 41 playas, sin embargo, los esfuerzos parecen fútiles ya que el sargazo duplica su biomasa cada 18 días.
Se teme que se reduzca el número de turistas, un fenómeno que tendría un enorme impacto en toda la zona que depende casi exclusivamente de esta industria y podría perder parte de los 8 mil 810 millones de dólares generados el año pasado.
Resulta imposible generar una buena impresión en los turistas que llegan buscando un destino de playa perfecto y se encuentran con la marea marrón, pero la ocupación hotelera se ha mantenido a pesar de todo.
Antisargazo
Se asignaron 62 millones de pesos del Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden) pero no han sido suficientes, por lo que el gobierno de Quintana Roo solicitó 218 millones más, para llevar a cabo un proyecto de creación de estructuras “antisargazo” que lo detendrán antes de llegar a las playas.
Éstas barreras serán colocadas a 300 metros de la costa para respetar a la vida marina y estarán hechas con materiales no contaminantes avalados por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos.
Pero no todos los aspectos del sargazo son negativos, también sirve como hábitat de muchas especies marinas como peces, cangrejos, camarones y tortugas jóvenes; es una fuente de alimento para estos animales a la par de proporcionar sombra y refugio.
Por lo que una de las soluciones para controlarlo, es la inclusión de la inversión privada y el desarrollo de una industria local que aproveche la llegada a las playas mexicanas.
Formas de apoyar a la solución
Los usos que se pueden dar al sargazo son muchos, por ejemplo,existe un proyecto en conjunto por la Universidad Tecnológica de Cancún, la Universidad Nacional Autónoma de México y una empresa danesa, para crear una planta procesadora que transformará al sargazo en gas metano generando electricidad, carbón vegetal y biogás.
Los gobiernos de Japón y China han manifestado su interés por utilizarlo en la industria cosmética y de alimentos, tanto para humanos como para animales y también podría ser utilizado en la industria farmacéutica por sus diversas propiedades.
Se espera que el fenómeno termine en septiembre con el enfriamiento de los mares y el ecosistema recupere sus características habituales, justo para la temporada alta en los destinos de playa.
Una de las mejores formas de apoyar a la solución es viajando a los destinos y reducir la contaminación al mínimo, generando una derrama económica que beneficie a las miles de personas que viven del turismo.