Imagina lo que sería pasear por un lugar que se caracteriza por sus vinos de fama mundial, su exquisita gastronomía, sus prestigiosos monumentos de historia milenaria, además de majestuosos lugares naturales que te invitan a relajarte ¿Ya se te antojó? Hazlo realidad y visita Borgoña, destino único con una amplia diversidad de sitios que te encantarán y a los que querrás regresar una y otra vez.
Actualmente, Borgoña recibe a excursionistas, navegantes, ciclistas y jinetes; así como a amantes del vino y a familias enteras. Es también un destino para curiosos y amantes de lo inusual; es un refugio para sibaritas pero también para amantes del shopping. En esta fabulosa región europea encontrarás todo para disfrutar al máximo de una experiencia de viaje en la que lo único que necesitas es unos ojos abiertos y alma de viajero. Checa el itinerario que te propone Air France y déjate seducir por la diversidad de este mágico lugar.
Día 1. Llegada a Beaune
Descubre el área medieval alrededor de la Iglesia de Notre Dame y de la Antigua mansión de los Duques de Borgoña, en donde encontrarás jardines interiores y espectaculares vistas desde las murallas. Seguido por una visita al Hotel Dieu: fundado en el año 1443 por Nicolas Rolin, canciller de Borgoña. Originalmente construido como un palacio para los pobres, esta joya arquitectónica ha sido el símbolo de caridad por seis siglos, celebrando su generosidad una vez al año a través de su mundialmente famosa subasta de vinos. Visita el refugio de galerías subterráneas con una tremenda colección de botellas en el antiguo “Couvent des Ursulines”.
Para la hora de cenar, no dejes de ir al restaurante Loiseau des Vignes, poseedor de 1 estrella Michelin, con el espíritu innovador del chef Bernard Loiseau. Fue el primer restaurante de Beaune, que propuso una biblioteca de vinos con 70 prestigiosas apelaciones de vinos tintos y blancos, todos servidos por copa.
Hospédate en el Hotel Le Cep, miembro de Small Luxury Hotels of the World, que está idealmente localizado en el corazón de la histórica ciudad de Beaune. El hotel es la armoniosa combinación de varias mansiones privadas que provén encanto con: cómodos salones lounge con piano o chimenea, bóveda de desayuno, dos jardines interiores que datan del siglo XVI, un jardín francés, una torre panorámica, dos salones de conferencias y un estacionamiento con servicio, un restaurante gastronómico y un recién estrenado spa.
Día 2. Aprende a degustar vinos de Borgoña con Sensation Vin
Sensation Vin es un lugar enteramente consagrado al arte de la degustación de vinos. Te ofrece la posibilidad de descubrir más acerca de los vinos de Borgoña en poco tiempo. Sin importar el curso que elijas, incluye una presentación y una degustación a ciegas. Las clases están disponibles para grupos de 2 a 10 personas. Duración de 90 minutos en un día.
Disfruta de una deliciosa experiencia de degustación en Château de Pommard, ubicado en el corazón de 20 hectáreas de viñedo embellecido por su jardín “a la francesa”, este elegante lugar abre sus puertas para una degustación de vinos totalmente hechos en el estado.
Si el vino te abrió el apetito, come en el restaurante Le Cellier Volnaysien, que es prácticamente una genuina casa borgoñesa, con un menú de 5 especialidades locales a 5 minutos del sur de Beaune. Cellier Volnaysien te da la bienvenida en su hermosa bodega, su despensa para una comida cerca del fuego, y su terraza con flores en donde podrás degustar vinos de la propiedad y saborear de algunas de las especialidades de la región como el jamón con perejil, caracoles, huevos meurette y mucho más.
Después dirígete a la ruta de los Grands Crus, este icónico edificio y sus viñedos que alguna vez pertenecieron a los monjes de la abadía de Cîteaux. La hermandad de los caballeros de Winetasting Cup ahora son dueños del edificio, mientras que el viñedo esta compartido entre 80 vinicultores diferentes. La bodega de vinos es parte del tour guiado que termina con la proyección de un corto que muestra la historia del Castillo así como las actividades de la hermandad.
Cierra tu día espléndidamente con un tour guiado de Moutarderie Fallot, que es la última fábrica familiar independiente de mostaza en Borgoña. Su reputación viene de una sutil mezcla de tradición y modernidad, fundados en sus “experiencias sensoriales” en su tour seguido de una degustación en la barra de mostaza.
La cena la puedes elegir y el hospedaje sigue siendo en el Hotel Le Cep.
Día 3. L’Or des Valois
Si crees que le falta emoción a tu viaje, ve directo a cazar trufas con Thierry y su hijo Yann, quienes comparten su pasión por ellas. Logra la mejor caza con la ayuda de sus perros entrenados para enseñarles sus especialidades gastronómicas. Más tarde, visita la Abadía de Fontenay que está en el corazón de “Auxois” y fue fundada en 1118 por Saint Bernard. Rodeada de árboles y de una calma mística, podrás descubrir lo que los monjes encontraron en ese lugar para el trabajo corporal y mental: el claustro, la iglesia, la sala capitular, el scriptorium, la cocina, la forja y el Palacio Abacial. Aún te dará tiempo de hacer una parada a la capital de Auxois que ha mantenido su centro de estilo medieval. Delétite con sus casas antiguas, su iglesia y las puertas de la ciudad, son tan hermosas que querrás hacerte una foto ahí.
Regálate un momento de relajación en el spa de Relais Bernard Loiseau, que es un verdadero paraíso de paz y calma con hermosos ventanales que dan hacia los jardines, que en el centro poseen una pequeña piscina rodeada de piedra de diferentes plantas y una pequeña pieza del Morvan. Además, una cascada cae en el estanque con sus plantas acuáticas y peces, añadiendo paz y serenidad a la atmósfera.
Termina tu día con una exquisita cena en el restaurante Relais Bernard Loiseau, que cuenta con 3 estrellas Michelin, y está considerado como un verdadero punto para la cocina francesa, ya que te invitará a un viaje culinario único, con una decoración excepcional en donde todo esta diseñado para tu comodidad, en el que podrás descubrir sorprendentes sabores. El chef Patrick Bertron agrega a su herencia una sutil combinación de poder y simplicidad.
Día 4. Visita a Vézelay o Visita a Dijon
Ubicado en la punta de la “colina eternal”, la basílica es una pieza maestra de arte románico y muestra una extraordinaria colección de esculturas. Para llegar ahí, deberás montar la colina, entre dos hileras de casas mezcladas de todos los siglos, ya que este pueblo medieval ocupa totalmente un lado de la colina. Dijon tiene características excepcionales: los incontables monumentos en su centro peatonal totalmente conservado, es un recuerdo de que fue, bajo los duques de Borgoña, la capital del estado que abarca tanto a Flandes como a Borgoña.
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