Viajar en tren es una de esas experiencias que debes vivir por lo menos una vez en tu vida, o varias –dependiendo qué tan adicto te vuelvas a la tranquilidad de la vibración de los vagones. Fotos: Archivo / Eliher Hidalgo. 

Sin embargo, no todos los ferrocarriles son iguales en los diferentes países, algunos son más modernos, otros más lujosos y, en algunos sitios, transportarse de esta manera es tan usual que la gente lo ocupa para ir al trabajo diario.

Por eso aquí te ofrecemos una lista de lo que debes saber para realizar tu primer viaje en tren, o si acaso ya lo hiciste pero quieres volver a experimentarlo sin tantos contratiempos, también te servirá.

 

Viaja ligero

 

 

En el mundo de los trenes hay de todo, desde grandes estaciones, que se comparan a terminales aéreas, hasta muy pequeñas, donde solo verás una plataforma y una pequeña sala de espera.

Algunas de ellas se encuentran en el centro de grandes ciudades y hay muchas formas de acceso, otras están a la orilla de pueblos cuyos métodos de transporte son limitados.

Tomando esto en cuenta: viaja ligero. Si sabes qué lugares quieres visitar y qué hay en sus alrededores será mejor, pues así no te tomará por sorpresa ninguna circunstancia. Tener una maleta o mochila que te sea fácil transportar por ti mismo, te hará más agradable el viaje.

 

La puntualidad es clave

 

 

 

Suena tonto en la modernidad, donde uno tiene que estar un par de horas antes en el aeropuerto antes de tu vuelo, y tal vez los trenes no son tan recurridos –en ciertos destinos–, pero la puntualidad sigue siendo clave.

Es recomendable que llegues con anticipación, incluso si reservaste tus boletos por internet, sobre todo para familiarizarte con la estación y saber por cual andén saldrás. Para no tener contratiempos al momento de abordar.

En este tema, hay boletos que solo sirven para un viaje a cierta hora, y si lo pierdes, tendrás que comprar otro boleto para el siguiente tren y perderás algunas horas. Claro que también existen boletos que cubren rutas y tú puedes subirte en cualquier horario, cuestión que sirve si se te hace temprano o muy tarde.

 

Rutas y viajes directos

 

 

Hay ciertas agencias, como Rail Europe que te permiten comprar un pase para viajar por todo un país por un cierto número de días o incluso transportarte entre 31 territorios diferentes de Europa, durante un mes sin ninguna limitante de horarios. Así que si quieres conocer un continente completo en tren o solo viajar sin limitantes, es recomendable que revises estos pases y que sepas qué incluyen.

Hay otros trenes, como el Chepe, en el norte de México, que solo cubren una ruta. Sin embargo, en esa ruta hay paradas obligadas que debes visitar. Lo bueno es que también estás cubierto, pues puedes comprar tu boleto por todo el recorrido y decidir: en qué puntos te vas a bajar, cuánto tiempo quieres quedarte ahí y cuándo reiniciarás tu recorrido.

Realmente el tip es que siempre estés consciente de qué cubre tu boleto, para cuántos días es, los horarios del tren o si puedes andar libremente por la red de ferrocarriles de varios países y, en un momento de locura, salirte de tu itinerario hacia la aventura.

 

Comida a bordo

 

 

Como decía arriba, en el mundo de los trenes existe de todo. Hay trenes como el Chepe Express que tiene un restaurante impresionante, Urike, cuya carta fue diseñada por los chefs Daniel Ovadía y Salvador Orozco.

También están los del grupo Belmond, que se especializa en hoteles de lujo, pero su selección de trenes brinda una oferta de experiencias sobre rieles con una elegancia superior. Aquí, la comida obviamente es de primera.

Sin embargo, en muchos casos los trenes tienen vagones comedores, con una oferta menos suculenta o incluso solo con algunos bocadillos calóricos que probablemente quieras evitar. Así que, antes de subirte a tu tren, es bueno que tú traigas tus propios snacks para el recorrido.

También existe el vagón bar, que no ofrece una carta sublime de cocteles, pero sí tendrán un buen trago para animarte a platicar con los otros pasajeros y, es posible, que termines jugando dominó con tus nuevos compañeros de viaje.

 

Pernocta para llegar al destino

 

 

Todo viaje te lleva del punto A al B, eso es lógico. Sin embargo, hay tramos de tren que sirven perfectamente para dormir y ahorrarte una noche de hotel. Hay otros trenes, como el que cruza Canadá de costa a costa, que la verdadera experiencia es todo el viaje, con sus escalas y sus noches a bordo.

Si vas a dormir una noche a bordo, bien puedes hacerlo en uno de los mullidos sillones del tren, que son muy diferentes a los incómodos de las aerolíneas. Pero, si piensas estar un par de días, o más, sobre los rieles, entonces es mejor que pidas un espacio en un dormitorio o en una habitación.

Algunos trenes tienen opciones más completas, que incluyen tu propio baño y habitación privada; en otros tendrás que compartir el pequeño cuarto con otra persona. Así que todo depende lo que estés buscando.

 

Disfruta de la aventura en Tren

 

 

Tal vez el detalle más importante, por eso está al último, es que desplazarse en tren no se trata tanto sobre llegar de un lado a otro, sino de disfrutar del recorrido: ver el paisaje cambiar y relajarte.

Aprovecha la oportunidad para leer un libro, admirar la naturaleza o hacer nuevos amigos. Disfruta de la desconexión que ofrece este medio de transporte y no te dejes interrumpirla.

Viajar en tren tampoco es acerca del precio. Sí, hay paquetes económicos que por la diversidad de opciones son muy baratos, pero si quieres algo directo es mejor el avión, así que en tren no se trata tanto de ahorrar sino de disfrutar la travesía –por si no lo he dicho suficientes veces.

Por último, muchos trenes tienen vagones domos y los mejores tienen un vagón terraza. En estos podrás tomar fotos excelentes de tu viaje, que después podrás presumir con todo mundo. Los vagones terraza tienen la ventaja que da visión sin obstrucciones del paisaje, así que las postales serán preciosas.

¿Ya estás listo para hacer tu primer viaje en tren? ¡Te encantará!