¿Cuál es la situación en el Volcán de La Palma?

La isla de La Palma continúa viviendo momentos de tensión tras la erupción del volcán en Cumbre Vieja que ha destruído un centenar de viviendas a su paso, forzando la evacuación de miles de personas, además de causar un gran daño al medio ambiente. Entérate de los detalles. Texto: Fernando Martínez / Fotos: Cortesía Turismo de Islas Canarias.

 

La isla más bonita del Archipiélago

 

La Isla de La Palma o también conocida como “La Isla Bonita“ forma parte del paradisiaco conjunto de las Islas Canarias en España. Está ubicada al extremo noroccidental del archipiélago y tienen una superficie de 706 km2. El principal atributo de este paraíso es su calidad medioambiental, lo que la convierte en un auténtico tesoro de la naturaleza con increíbles paisajes, profundos bosques, cielos estrellados, hermosas playas y por sus imponentes volcanes.

 

 

El inicio de la erupción

 

Volcán de La Palma

 

La comunidad científica que contaba con estaciones de monitoreo instaladas desde hace años en la zona, registró, desde el 11 de septiembre, en el suroeste de la isla, un enjambre sísmico, que se creía era magma que buscaba su camino a la superficie a través de las bocas del Volcán de La Palma, lo que culminó en una erupción volcánica.

Actualmente, mientras la lava se acerca al océano Atlántico y se encamina al municipio de Todoque, la Guardia Civil de España ha desplegado un plan de evacuación masivo tras la erupción del volcán Cumbre Vieja, debido a que la lava ha comenzado a encontrar camino por diversas bocas del volcán; lo que ha provocado que su avance fuese más rápido.

Sin embargo, aunque la Guardia Civil de España ha evacuado a más de 5 mil personas afectadas, recomiendan a la población seguir las medidas de prevención y dirigirse a los puntos de reunión establecidos.

 

 

Consecuencias medioambientales

 

Volcán de La Palma

 

Mientras la lava avanza, los expertos afirman que ocurrirá una nueva realidad ecológica debido a que el río de lava está deslizándose a través del Parque Natural de Cumbre Vieja, arrasando con la naturaleza del terreno y las extensiones de suelo forestal y suelo fértil que onda alrededor de las 400 hectáreas.

Actualmente los bomberos de Gran Canaria redoblan esfuerzos para frenar esta devastación al encauzar el río hacia un barranco, mientras enfrían los flancos para intentar que se concentre y no se desvíe. Sin embargo, el Instituto Volcanológico de Canarias estima que la erupción continuará entre 24 y 84 días más.

Volver a la normalidad será complicado y estará condicionada por la suma de los daños reflejados en el ambiente y en la infraestructura, pero, aunque desde el punto de vista humano es una catástrofe, esperamos que este fenómeno natural culmine lo antes posible y con la mínima cantidad de daños.

 

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