Prueba la auténtica cocina oaxaqueña del restaurante Xuva’

15 de febrero de 2024

Desde Santa María la Ribera, el restaurante Xuva’ es un espacio que le da visibilidad a los ingredientes de la mixteca oaxaqueña a través de la visión de Juan Aquino. Aquí cobran vida las memorias de la infancia y una herencia de tradiciones gastronómicas del chef, de modo que acudir a este lugar será un verdadero apapacho. Sigue leyendo y encuentra más motivos para visitarlo pronto. Fotos: Cortesía.

Así es el restaurante Xuva’

Cuando el chef Juan Aquino dejó su natal Santa María Zacatepec, en Oaxaca, tenía tan solo 15 años y mucha ilusión de compartir su forma de comer con el mundo. Al crecer respetando la naturaleza y honrando las tradiciones de su pueblo, para él fue fácil seguir con esa línea mientras se formaba profesionalmente en los fogones de Ciudad de México. Así, en el restaurante Xuva’ se materializa su sueño de tener su propio espacio para hacer lo que más le apasiona: cocinar.

A pocos metros del icónico kiosko Morisco de Santa María la Ribera, el restaurante Xuva’ se encuentra dentro de una casona del siglo XIX. Este inmueble fue remodelado por Mecate Studio y, además de tener el restaurante, hay un espacio cultural que invita a relajarse del ajetreo de la ciudad. A su vez, ha recibido reconocimiento por su diseño, en 2020 obtuvo el premio mundial de arquitectura y diseño Prix Versailles.

El restaurante Xuva’ se encuentra distribuido a lo largo de un pasillo cubierto de vegetación, y no solo de una ornamental, sino que también se trata de plantas comestibles y hierbas aromáticas que cuelgan del techo, mismas que se emplean para la cocina. De esta forma, se crea una atmósfera fresca y que otorga la sensación de estar al aire libre, debajo de un árbol.

Cocina oaxaqueña de raíz

En el restaurante Xuva’ puedes encontrar ingredientes de Oaxaca con los que se preparan recetas de cocina mexicana tradicional. Para que disfrutes mejor la experiencia, este lugar ofrece tres menús de degustación ($650), de modo que podrás llevarte una buena idea de la propuesta del chef Juan Aquino. Son de cuatro tiempos, y para el maridaje se deja abierta la posibilidad a explorar entre coctelería, mezcales o vinos mexicanos.

La coctelería es a base de ingredientes de temporada y jarabes hechos en casa, con Juan Toriz a cargo de la barra. Mientras que la línea de mezcales te invitará a conocer cerca de ocho agaves silvestres destilados en palenques de Oaxaca, provenientes de colegas y amigos del chef Juan Aquino, quien también es autor del libro «Comamos identidad».

En el menú hay un apartado de entradas llenas de sabor, sopas reconfortantes y recetas tradicionales que son herencia e investigación del chef. Mención aparte merece la selección de moles: cuentan con seis de ellos. El mole negro, uno de los más famosos, requiere un proceso de dos días y aproximadamente 29 ingredientes, mientras que para el blanco son cerca de 15. Todos adquieren un sabor único al ser preparados con algunos elementos traídos directamente de Oaxaca, como es el caso del chile de agua o las chicatanas.

Las proteínas empleadas van desde lengua de res hasta setas al grill, pero los meseros siempre estarán dispuestos y atentos a asesorarte sobre qué le va mejor a tu mole. Pero si te es difícil elegir, podrás optar por la degustación ($590), en la que se dan a degustar tres de ellos.

No te lo pierdas

En el menú del restaurante Xuva’ hay un apartado dulce para el final en el que los procesos artesanales también se contemplan. Por ello, hacen sus propios helados y tienen opciones al plato como el tamal de elote servido en salsa de rompope, que lleva crema pastelera y una lluvia de nibs de cacao. Acompaña con café de olla de granos tostados en casa o con el chocolate con agua o leche, que es receta del chef.

Los fines de semana puedes comenzar bien el día desde este lugar, puesto que tienen un menú especial de desayunos los sábados y domingos. Ofrecen platillos como los huevos al comal con huevo de toro o las enmoladas de la casa, además de opciones para compartir e incluso panqué horneado en casa.

Sentirte cómodo y relajado también es parte de la experiencia del restaurante Xuva’. Todos los viernes podrás escuchar música en vivo en el pequeño escenario que se ubica al fondo. Además, la casona que alberga al restaurante también sirve como un refugio cultural, puesto que tiene una galería, una sala de lectura y una cafetería.

No dudes en visitar este restaurante y probar auténtica comida oaxaqueña hecha con el corazón. Cheque promedio: $800. Horarios: M-V: 13:00 a 22:00 horas; S: 9:00 a 21:00 horas; D: 8:00 a 18:00 horas. Dónde: Salvador Díaz Mirón no. 128, Colonia Santa María La Ribera. xuva.mx

¿Buscas nuevos lugares en CDMX? También lee: Mi Guerrero Ikal: el nuevo restaurante en Coyoacán inspirado en el arte de Saner.

26 de junio de 2023

El chef Mario Espinosa es el octavo cocinero de su familia, cuenta con más de 20 años de experiencia y es socio de tres restaurantes con atractivas propuestas gastronómicas. Tuvimos la oportunidad de conversar con él acerca de su carrera y las inspiraciones que ha tenido para llegar hasta donde está. ¡Conócelo! Fotos: cortesía

Mario Espinosa: ingeniero de día y cocinero de noche

Durante la década de los 70, el padre de Mario Espinosa, el señor Porfirio Espinosa López, se adentró al mundo de la cocina. Derivado de ello, el joven Mario, de 17 años, no tenía un interés verdadero en las labores culinarias. Sin embargo, las circunstancias lo hicieron introducirse. El chef recuerda:

“Yo no quería involúcrame en la cocina porque siempre viví en ese mundo y no me gustaba. Por ello, inicié mis estudios en Ingeniería en sistemas, pero también tuve que trabajar en el restaurante de tapas en el que estaba mi padre. Iba a la escuela por la mañana y trabajaba en la noche. Fue bastante complicado porque no dormía”.

Tiempo después, al señor Porfirio lo contrataron como chef personal de unos ejecutivos y su hijo se fue con él. Sobre ello, el chef Mario Espinosa nos contó:

“Un día, el chef de planta se percató de que no había postre. El cuate hizo un soufflé de chocolate en 20 minutos. Fue tan rápido, espontáneo y creativo que en ese momento detonó mi amor por la cocina. Me encantó la idea de ‘no pasa nada, ahorita lo solucionamos’”.

Después de eso, renunció a la ingeniería y comenzó su travesía en Ambrosía Centro Culinario.

En Mérida encontró su inspiración

De no querer saber nada de la cocina, pasó a realizar su servicio en Pujol, del chef Enrique Olvera. Al concluir, dirigió sus pasos a sitios como el restaurante El Giraldillo Gourmet. Finalmente, en 2008, se mudó a la capital de Yucatán para ser el chef ejecutivo del restaurante Rosas & Xocolate. Sobre esa época nos mencionó:

“Mi notoriedad detonó en Mérida. En 2011 me otorgaron el premio Distinción Bohemia y lo atribuí a los estupendos ingredientes de la región. Hasta la fecha, conservo en mi esencia el toque y la cocina yucateca”.

Los éxitos prosiguieron. En 2012, ideó la propuesta gastronómica modernist Maya cuisine del restaurante K’u’uk. Al respecto, el chef Mario Espinosa explica:

“Consistía en un menú de 12 o 15 tiempos. Llevábamos una sincronía, técnicas y toda la parte de cómo sorprender a la gente. Aprendí y me divertí muchísimo, pero al final, le di un giro, porque hoy en día hago lo contrario”.

Jugar con los elementos de la naturaleza

El tiempo de ingeniar algo propio motivó al chef Mario Espinosa a incursionar como socio restaurantero en la Ciudad de México. En septiembre de 2020, con la pandemia como marco, se abrieron las puertas de su primogénito, Madereros. El fuego, las brasas y el asador es lo que le dan vida al recinto: “Se trata de hacer comida más basta, de compartir, de satisfacción”, lo define en pocas palabras.

El segundo proyecto del chef Espinosa vio la luz en 2021. En Tencüi retrató a los hijos más pequeños de la tierra, los hongos. En los platillos se implementan diversas variedades, desde setas rosas y trompetas, hasta porcini y huitlacoche. Por su parte, Magda es su restaurante más reciente, inaugurado a principios de 2023. Lo que formuló para él son platillos hechos con ingredientes que nacen en torno al agua de río: truchas, ostras, pato, frutas y vegetales frescos.

Construyendo sueños

Actualmente, el chef Mario Espinosa está a cargo de organizar a aproximadamente 100 trabajadores. Al respecto, el chef comenta:

“Yo creo que ahora juego más a empresario que a cocinero. Sin embargo, ahora hay que cuidar el bolsillo de las personas que están con nosotros, saber cómo manejar equipos, el cómo controlar y cómo hacer que funcione para todos”.

Y aunque el camino es largo todavía, el chef Mario Espinosa nos expuso algunos de los propósitos que desea lograr con los proyectos restauranteros:

“Quisiera lograr que fuéramos una empresa socialmente responsable, es algo a lo que aspiro, pero conlleva gastos extraordinarios que se deben planificar. Además, me gustaría generar un grupo fuerte y hacer realidad para ellos [los trabajadores] lo que en algún momento me prometieron a mí: empezar a hacer sociedad juntos y que se sientan parte de los lugares”, finalizó.

Si también quieres inspirarte con la historia de Elena Reygadas, mira aquí por qué fue nombrada mejor chef del mundo de 2023

24 de enero de 2023

Como aperitivos, para acompañar unas buenas cervezas o aliviar los días calurosos, las almejas y ostiones son joyas gastronómicas cargadas de vitaminas, minerales, proteínas y omega 3, ¡incluso en un porcentaje mayor que alimentos como leche o huevo! Sus beneficios para la salud y delicioso sabor las convierten en alimentos que deberías incluir en tu dieta sí o sí. Ya sea que seas amante de estos bivalvos, o estes incursionando en el tema, aquí te decimos dónde comer (muy buenas) almejas y ostiones en CDMX. Fotos: redes sociales oficiales, Unsplash.

Diferencia entre almejas y ostiones

Pero antes una parada técnica, ¿sabes cuál es la diferencia entre almejas y ostiones? El ostión se distingue por poseer una concha irregular y asimétrica, que por fuera es áspera y obscura, mientras que por dentro es lisa. Se puede encontrar tanto en el mar como en zonas litorales de aguas dulces y saladas. Son perfectos para servirse frescos, ahumados, en vinagre o en su concha.

Por otro lado, la almeja posee una concha delgada, ovalada y simétrica, conectada por dos músculos aductores. Se pueden consumir crudas, cocidas al vapor, hervidas, al horno y fritas. Eso sí, a la hora de cocinarlas debes tener en cuenta que aquellas almejas con valvas que no se hayan abierto después de tres minutos de cocción, es mejor desecharlas.

5 spots con (muy buenas) almejas y ostiones en CDMX

OLA

Para comenzar con esta ruta de lugares para probar muy buenas almejas y ostiones, hablemos de OLA. Esta es una barra de crudos y ostiones que recién abrió sus puertas, hace dos meses, en la colonia Roma Norte. Su filosofía consiste en resaltar el sabor real del producto de mar, ¡y que menos es más!

Aquí abundan las buenas almejas y ostiones, pero entre nuestros favoritos están: las almejas con ponzu, mignonette (condimento a base de echalotes, pimienta y vinagre) y yuzukoshō (condimento japonés) y los ostiones tempura con ponzu abajo y yuzukoshõ arriba. Dónde: Colima 298, Roma Norte. IG: @olaolamx

Barra California Sur by FISM

Otro de los lugares que debes visitar si quieres probar deliciosas almejas y ostiones en la capital, es Barra California Sur by FISM. Aquí son especialistas en moluscos bivalvos vivos, cultivados en aguas de Baja California Sur, lo que te permite probar un pedacito de la riqueza natural, gastronómica, artística y cultural de la Baja Sur, sin salir de la Ciudad de México.

Este lugar está abierto de jueves a domingo. Los jueves son de Atelier, día en el que tienen un menú especial y la experiencia es más personal, pues te explican todo sobre los bivalvos vivos: anatomía, cómo abrirlos y cómo comerlos.

No puedes dejar de pedir sus ostiones al grill, la almeja coqueta (almeja chocolata con cubos de pescado, salsas especiales y mayo de sriracha), las almejas al grill con salsa de quesos (acompañadas con tortillas de harina de La Paz, Baja California Sur), y su almeja chocolata servida con salsa macha. Dónde: Fresno 168, Santa María la Ribera. IG: @barracaliforniasurfbyfism

Costela

El siguiente lugar que tienes que visitar en esta ruta de las mejores almejas y ostiones de la ciudad, es Costela. Este restaurante es la deliciosa creación de la chef Alexander Suástegui. Aquí encontrarás un menú relajado y nada pretencioso, eso sí, muy estético y sabroso.

Este se compone de grandes productos y joyitas del Pacífico, y el ingrediente es siempre el protagonista en sus platillos. De hecho cerca de 80% de lo que ofrece se prepara con productos sustentables. Desde almejas chocolatas de Ensenada frescas y preparadas, hasta ostiones Sol Azul de la Bahía de San Ignacio, Baja California Sur. Dónde: Melchor Ocampo 30, Cuauhtémoc. IG: @costelarestaurante

Somsaa

Es el turno de Somsaa, el Wine & Tea Room inspirado en sabores asiáticos que se instaló hace un mes en la colonia Roma. Se trata del restaurante hermano de Galanga Thai House, y está a cargo de las chefs Somsri (Ana) y Rachadaporn (Pui), quienes aquí experimentan recetas originarias de Indonesia, China y Malasia.

Es el lugar ideal para disfrutar de un espumoso y (muy buenos) ostiones con salsa de chiles, erizo, ikura, jengibre y cítricos. La orden es de cuatro piezas, ideal para compartir en una tarde entre amigos. Nos encanta que además en este lugar puedes acompañar tus ostiones con una gran variedad de vinos (por copeo o botella), sake espumoso, cocteles y tés (blanco, verderooibos, oolong, pu erh y negro). Dónde: Orizaba 219, Roma Norte. IG: @somsaamx

Mi Compa Chava

Finalmente, otra deliciosa opción para comer almejas y ostiones en Ciudad de México es Mi Compa Chava, a cargo del chef Salvador Orozco. Este spot te llevará de paseo a las carretas de Sinaloa a través de sus frescos productos del mar.

Entre los favoritos están: las almejas chocolatas con callo de hacha y su chile serrano bien picado encima y la charola de ostiones y almejas frescas (con limón, salsa rasurada y gotero de salsa de chiltepín). Dónde: Felipe Carrillo Puerto y Venustiano Carranza, Coyoacán. IG: @micompachava

¿Y el postre? Después de saborear las mejores almejas y ostiones en estos cinco lugares de Ciudad de México, no olvides reservar un espacio para el dulce final, aquí te decimos dónde están las mejores malteadas de la capital.

14 de agosto de 2022

Colores amarillos, rosados, cafés y blancos, así como texturas esponjosas y carnosas inundan los platos de Tencüi, el nuevo restaurante del chef Mario Espinosa en el barrio de Santa María la Ribera. Luego de su paso por los restaurantes Rosas y Xocolate y Ku’u’k en Mérida, y de su éxito con Madereros en Ciudad de México, este chef estrena un templo fungi donde los hongos toman el protagonismo de la carta. Fotos: Arlett Mendoza y Gabriel Núñez.

Con un menú 80 por ciento vegetariano, Tencüi es el único restaurante en Ciudad de México que propone una carta inspirada en los hongos. Para lograrlo, el chef Mario Espinosa utiliza siete variedades de ellos: setas rosas, amarillas, blancas y azules, trompeta, enokitake, diente de león, shiitake, porcini y huitlacoche.

Todos este producto es cosechado en las cámaras de fructificación del propio restaurante y con productores locales de Cuernavaca, Puebla, Estado de México y Tlaxcala. Aunque el objetivo es que en seis meses estén produciendo en sus cámaras de fructificación el 100% de los hongos para la carta. Para ello, han reunido a un grupo de expertos micólogos que cuidan con dedicación estos insumos.

Entradas del chef Mario Espinosa

Ya sea que te sientes en la terraza o en el comedor, te sugerimos dar una vuelta por el restaurante para observar su diseño interior. Si miras con detenimiento, encontrarás hongos en muchos guiños de la decoración, los cuales festejan con elegancia a este ingrediente.

Luego, ordena el ceviche de hongos, con granizado de tomate, palmitos, coco deshidratado y polvo de hongos shiitake. Se acompañan con tostadas espolvoreadas con sal de grano y huitlacoche que le dan un plus delicioso al plato. “Me gustan mucho las texturas, el frío, el coco, el palmito y la acidez, todo le da un toque único”, asegura el chef Mario Espinosa.

Otro plato imperdible son los canelones rellenos con una mezcla de champiñones y enokitakes -que se usan tradicionalmente en las cocinas japonesa, china y coreana-. Estos se coronan con una ensalada de acelgas y huitlacoche que le da una rica frescura al plato.

¿Qué platos fuertes ordenar?

Si te gusta el curry este será tu plato consentido en Tencüi: enokitake a las brasas con croquetas de plátano macho, garbanzo, chía, setas blancas sobre un curry cremoso y goloso. “Hacemos una mezcla de especias como cardamomo, pimientas, canela y curcuma que aligeramos con leche de coco y aceite de oliva”, explica el chef Mario Espinosa.

Mientras que al ordenar la familia de setas con miso, puré de chirivía y emulsión de toronjil y lavanda, llegará hasta tu mesa un ramillete de setas carnosas con un toque a mantequilla. Al respecto, cuenta Mario: “Este plato nos gusta mucho porque encuentras la familia de hongos completa. Además el toronjil le da un golpe de sabor, que me encanta. Es uno de los platos que a la gente más le han gustado”.

Hongos hasta en los postres y cocteles

En Tencüi se nota que la idea de los hongos fue parte de una serie de experimentos divertidos, con resultados que sorprenden al paladar. Este es el caso del raspado de kombucha con fruta de temporada (a nosotros nos tocó piña deshidratada) y estaba delicioso, con el grado de dulzor justo y con una acidez deliciosa.

“Para los cocteles, Rafael Chinea, nuestro bartender, fue quien integró al mundo fungi en los tragos. Una vez nos dio uno que tenía una seta dentro, en el que percibía toda la humedad al llevarlo a la boca… no era tan agradable pero sí estaba padre tener ese golpe de humedad en la nariz. Así probó muchas combinaciones hasta que se lograron los de la carta”, explica el chef Mario Espinosa.

Estarán cambiando la carta cada dos o tres meses de acuerdo a la producción de hongos que tengan, lo que ayudará a que cada que vayas a Tencüi, tengas una experiencia novedosa, con el sello único del chef Mario Espinosa. Cheque promedio: $600. Dónde: Eligio Ancona 191, colonia Santa María la Ribera. IG: @tencui.mx

Conoce los tipos de hongos comestibles.

29 de julio de 2021

La colonia Santa María la Ribera es un barrio tradicional que, a pesar de su historia centenaria, cuenta con una de las escenas culinarias más novedosas e internacionales de Ciudad de México. Instalados en casonas señoriales y dotados de una especial vibra bohemia, los restaurantes de esta lista destacan también por su sabor y autenticidad. ¿Ya los conoces?

María Ciento 38, con el sazón de la nonna

Se trata de un verdadero santuario para todos los amantes de la comida italiana, pues además se especializa en auténtica cocina de Sicilia. Prácticamente todas sus mesas están colocadas en una bonita terraza con pérgolas y enredaderas, recreando el encanto mediterráneo en el corazón de Santa María la Ribera. De su carta de especialidades no te puedes perder su pasta al pesto de pistache ni la pizza Sfincione, que lleva alcachofas y queso provola affumicata. Sus desayunos también son deliciosos: ordena el brioche poché a la mortadela que también lleva pistache y acompáñalo con un capuchino cremoso. Para el postre, tienes que elegir un gelato, entre los cuales nuestro favorito es —sí, adivinaste—, el de pistache. Cheque promedio: $450. Dónde: Santa María la Ribera 138. IG: mariaciento38

Kolobok: desde Rusia con amor

Es uno de los restaurantes consentidos de la Santa María la Ribera, pues comenzó como un sencillo puesto donde sus creadores, de origen ruso, vendían empanadas fritas. Hoy, Kolobok es sin duda un referente de la gastronomía de Europa del este en Ciudad de México. Si no estás muy familiarizado con esta gastronomía, no te preocupes: su carta se encarga de explicarte y recomendarte. Si quieres nuestra sugerencia, pregunta por el beefstróganov (ternera con salsa y setas) o la sopa borsch, hecha con betabel y crema agria. Otras delicias de degustación obligatoria son el pastel de miel (súper recomendable) y sus empanadas saladas o dulces. Cheque promedio: $350. Dónde: Salvador Díaz Mirón 87. kolobok.com.mx

Jametaro, sabor casero a la japonesa

La Ciudad de México ha experimentado una fiebre por el ramen en los últimos años. Si tú también has caído rendido ante esta sustanciosa preparación japonesa, debes probar el que preparan en Jametaro. Abierto en 2019 en lo que antes fuera una vivienda particular, aquí se especializan en servir ramen de soya, sal y miso, todos deliciosos. También te van a gustar sus platos generosos de yakimeshi y los gyoza que elaboran en el momento. Un punto importante a tomar en cuenta (y que demuestra su compromiso por servir solo comida fresca) es que si se acaba el consomé para el ramen, cierran antes el local. Este cuidado por ofrecer una comida auténtica y casera se debe a Masahiro Kanashige, creador de Jametaro que se mudó desde Japón para vivir con su familia en la Santa María la Ribera.

Además de probar todo lo anterior, tampoco te puedes ir sin adquirir algún producto de diseño: venden sudaderas y playeras impresas con divertidos personajes nipones. Cheque promedio: $275. Dónde: Eligio Ancona 167. IG: jametaro

La Sabina: jazz, pizza y cocteles

¿Qué es lo que se obtiene si mezclas jazz, pizzas, cocteles y comida mexicana dentro de una casona porfiriana de principios del siglo XX? La respuesta es La Sabina, uno de los conceptos más originales de la Santa María la Ribera. Aquí te encontrarás con que cada espacio de la antigua mansión ha sido habilitado como centro de consumo, de modo que podrás comer en su jardín o en el elegante comedor. Sin importar cuál elijas, tendrás a la vista pinturas y murales de artistas contemporáneos, los cuales le dan un toque de color y modernidad al sitio. Después de abrir el apetito con sus gorditas de chicharrón prensado, prueba las enmoladas de pato con mole de tamarindo o alguna pizza horneada en leña.

Si vas un jueves por la tarde, te encontrarás con presentaciones de jazz y una barra de cocteles. Cheque promedio: $430. Dónde: Sabino 255. FB: La Sabina

El Revolcadero: Acapulco en Santa María la Ribera

La Santa María la Ribera es una colonia que siempre ha atraído a creadores y bohemios, y prueba de ello es que cuenta con varios espacios que exhiben arte. Entre los más nuevos se encuentra Acapulco 62, una galería con exposiciones de arte itinerantes justo enfrente del famoso kiosco Morisco. Además de darte un festín con los ojos, en un patio contiguo a la galería podrás degustar la propuesta de El Revolcadero. Recientemente abierto, este restaurancito sirve deliciosas preparaciones con mariscos, todas inspiradas en la cultura playera de Acapulco.

Compruébalo con los tacos de camarones capeados, las tortas o los aguachiles. También recomendable el taco de pork belly con pulpo que mezcla lo mejor de la tierra y el mar. La mejor parte es que con frecuencia lanzan combos económicos con caguama incluida. Cheque promedio: $250. Dónde: Manuel Carpio 94. FB: El Revolcadero

¿Te quedaste con ganas de una copita de vino con sabor a barrio? Chécate estos 5 wine bars imperdibles en la colonia Roma.

25 de julio de 2019

La colonia Santa María la Ribera poco a poco se ha convertido en el nuevo epicentro gastronómico de Ciudad de México, ya que ha visto nacer deliciosos espacios como el restaurante La Sabina, de cocina mexicana contemporánea, y que habita una encantadora casa que data del año 1908, ubicada en la calle de Sabino 255, de ahí su nombre.

Al entrar disfrutarás de apacibles mesas al aire libre, desde donde podrás percibir los exquisitos aromas de su cocina, como los que se preparan en su horno de piedra como pizzas, hasta sus exquisitos platillos que van desde espléndido ceviche de cecina, hasta enmoladas de pato de tamarindo, que sin duda te abrirán el apetito.

Este restaurante abrió desde hace poco más de dos años, gracias a la iniciativa de Adriana Moreno, quien se asoció con un grupo de amigos, que simplemente tenían el deseo de crear un espacio donde se comiera y se bebiera bien, pero que a la vez tuviera un agradable ambiente que combinara música, cultura y arte, y sin duda lo lograron extraordinariamente con La Sabina.

Delicias mexicanas

La gastronomía que se sirve en La Sabina, es cero pretenciosa, simplemente se tratan de platillos llenos de sabor, abundantes y de vistosas presentaciones como la ensalada de mozzarella y salsa pesto, el ceviche de cecina con salsa de cítricos y aceite de chiles, la pizza de horno de piedra La Paulita, con casse de tomate, cochinita pibil y queso mozzarella, o las enmoladas de pato de tamarindo, amaranto y queso, que son una delicia.

Disfruta también de su mixología creativa como el coctel Magnolia que es preparado con gin, jarabe de cardamomo, romero y toronja, de intensidad media y muy refrescante.

También prueba La Santa con raicilla, carpano Dry y jarabe de hoja santa, lemongrass y salmuera perfectos para continuar con la tertulia que sin duda querrás seguir en La Sabina. No te pierdas los martes 2 x 1 en cocteles de destilados y los jueves de jazz, que son un agasajo para todos tus sentidos.

Arte itinerante

Si algo tiene La Sabina, es que no solo se trata de un restaurante más, ya que aquí también podrás encontrar exposiciones de arte, galerías y hasta bazares de artesanías, siempre con el objetivo de impulsar el talento mexicano.

Por ello, mientras disfrutas de su exquisita gastronomía puedes dar una vuelta por sus amplias instalaciones, admirar las muestras de arte o simplemente su increíble arquitectura, que te dejará en la memoria bellísimas postales de un sitio apacible que invita a la buena conversación y deliciosa gastronomía.

Recientemente tuvieron un extraordinario evento de Dj’s en el que predominó el ritmo, el buen ambiente y refrescantes cocteles con mezcal. Si deseas realizar tus eventos privados, La Sabina también tiene esta modalidad, en el que podrás tener tus fiestas en alguna de las zonas de la casa, incluida la preciosa terraza que tienen en el segundo piso.

Sin duda La Sabina es el imperdible hot spot de Santa María La Ribera, y su cocina mexicana contemporánea, su mixología, su buen ambiente y excelente servicio te harán regresar. Dónde. Sabino 255. Sta María La Ribera. Cheque Promedio: $350. Facebook: @lasabina255

7 de mayo de 2019

Los restaurantes van y vienen, sobretodo en lugares como Ciudad de México donde algunos cierran antes de cumplir el año o los dos años. Tres no hacen a un consolidado, pero definitivamente indica que un lugar va por buen camino, como María Ciento38. Aquí te dejamos cinco razones por las que creemos que deberías ir y dejarte consentir. Fotos: Arturo Mateos / Cortesía María Ciento38.

Desayunos los fines de semana

Es verdad que los desayunos son solo sábados y domingos, y que abren a las 10, pero definitivamente se volverán unos de tus favoritos. La sugerencia sin duda alguna son los huevos María, que básicamente es como comer una pizza en el desayuno y salirte con la tuya. Además, ya nos dijeron que tendrán opciones de cocteles con prosecco para hacer el fin más «bruncheable», así que conviene no perdérselo.

El Pan de María

A la parte frontal de la casona del siglo XIX, ubicada en Santa María la Ribera, muy cerca del kiosco morisco de la colonia, encontrarás la versión más relajada de María Ciento38. El café es digno de probarse y de su pan dulce no dejes de probar el rol de canela que cuando sale inunda el lugar con su aroma. Los paquetes también son excelentes sobretodo si escoges el arancini de ragú o el panino de ensalada de papa, que suena contraintuitivo aunque realmente es suculento, como para chuparse los dedos si fuera necesario.

La carta de vinos

Todo ha ido mejorando, incluida su selección de etiquetas que fue diseñada para maridar con los platillos del menú. Una de sus etiquetas más versátiles es Antonutti Collevento 921 Rosé, el cual es fresco, frutal y vibrante en boca. Lo cual lo vuelve ideal para iniciar la comida sobre todo con las deleitables albóndigas de sardinas (no solo para amantes de las sardinas, y sin espinas).

Gelato

Sí, en muchos lados puede uno conseguir helado pero, como dijera un amigo, gelato no es helado. Claro que en ningún lugar de Ciudad de México, hasta donde yo sé, puedes conseguir gelato de fior di latte -queso fresco- elaborado con leche de búfala. Lo mejor es ya irte por lo más gordo y pedir un gelato briosh que es básicamente como suena: pan brioche relleno de helado.

¡Sfincione!

Desde que presentaron esta pizza siciliana que lleva una mezcla de pan molido especiado, hongos, salsa pomodoro, queso provola affumicata, alcachofa y anchoas ha sido uno de mis platillos favoritos. Aunque la combinación pueda parecer que será muy salada, la verdad es que el balance es magnífico y te hace salivar desde que la hueles. Esperamos con ansia el siguiente aniversario, todo lo nuevo que siempre tienen en María Ciento38 y que se vuelva uno de los consolidados de la ciudad. Dónde. Calle Santa María la Ribera 138, Col. Santa María la Ribera, Ciudad de México. Tel. 55 71592039. Cheque Promedio: desde $400 pesos por persona. mariaciento38.com.mx