En estos tiempos donde permanecer en casa resulta de suma relevancia, poder vivir experiencias que rompan la rutina resultan revitalizantes. Todo comenzó desde que llegó a la puerta de nuestra casa una caja de madera con unas letras grabadas: Rueda, Denominación de Origen. En su interior venía una botella de vino blanco, una copa, destapachorchos, queso camembert y galletas de maíz. Era el kit que esa D.O. me había mandado para la cata online que se realizaría a las 20:00 horas en la sala de nuestra casa, pero de manera virtual a través de la computadora. Fotos: Cortesía D.O. Rueda / Mariana Mendoza.
Me entregaron una carta en la que la D.O. Rueda hablaba de esta iniciativa llamada Cata desde Casa, que busca brindar un espacio para seguir disfrutando lo mejor de los vinos de esa región española, de una forma segura y siguiendo el precepto actual #mequedoencasa.
Que comience la experiencia
En esa misma carta, se sugería que el vino se enfriara a una temperatura de 9 °C, así que lo sumergimos en un recipiente con hielos, para darle la temperatura específica, antes de la cata, ya que es lo más recomendable, en vez de meter la botella al refrigerador.
Lo que seguía era descargar la aplicación Zoom en mi computadora y registrarme como usuaria –ya que era la primera vez que lo utilizaría–. Y como sería una videollamada con otros participantes, me arreglé un poquito más para sentirme cómoda.
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También preparé el lugar donde colocaría la computadora, cuidando el fondo que los demás participantes observarían. ¡Era como si fuera a recibir visitas en casa! Una situación un poco fuera de lo común.
Lista para oler y probar
A las 8:00 pm en punto ya tenía todo listo en la mesa. El vino destapado, la copa al lado, el queso rebanado y las galletas fuera del paquete. Di clic en el link que me enviaron a mi correo electrónico, y esperé a que me aceptaran en la sesión…
Apareció el rostro de Fabiana Díaz de León, sommelier embajadora de la D.O Rueda, quien nos dio la bienvenida a esta cata de la D.O. Rueda. Nos explicó que a algunos del grupo participante nos enviaron una botella con etiqueta verde y a otros, de color negro.
Esas no eran las originales, se las habían cambiado. ¿La razón? Esta D.O. representa a 67 bodegas, por lo que no pueden promover los vinos de una específica, sino que querían mostrarnos las características de los caldos con esa denominación.
Antes de catar el vino, Fabiana nos platicó que la D.O. Rueda tiene 40 años de existir. Proviene de la región Castilla y León, en España, de clima extremo y suelos “cascajosos”, donde nace una uva blanca autóctona que se llama verdejo, con la que se producen vinos blancos frescos, herbales y frutales.
Y aunque esta es considerada su “uva reina”, la D.O. admite otras uvas blancas como la sauvignon blanc, la viura, la chardonnay y la viognier.
Degustando el vino
Procedimos a catar. Lo primero que Fabiana nos pidió fue servirlo en la copa y colocarla por encima de una superficie blanca para observar su color: amarillo con destellos verdes.
Luego lo llevamos a nariz, donde notamos una expresión intensa de frutas tropicales y con huesos, como el chabacano, así como hierbas de monte bajo recién cortadas, como el hinojo.
Después, lo llevamos a boca, donde era frutal y fresco, pero que al final mostraba un amargor. Por último, lo probamos con el queso camembert que nos enviaron en la caja, con el que se hizo un maridaje de contraste por la cremosidad del mismo.
También lo probamos con galletas horneadas de maíz, porque Fabiana nos recomendó acompañar nuestra comida mexicana con estos vinos, los cuales están a la venta en México en tiendas de autoservicio o en línea en mercadodevinos.com o en amazon.com, pero pronto llegarán más etiquetas a nuestro país.
Identifica D.O. Rueda en las etiquetas con el logo oficial. Para conocer todas las bodegas que cuentan con esta categoría visita dorueda.com
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