En nuestro último encuentro le contábamos acerca del Gong Cha (贡茶), el mítico Té tributo imperial chino que marcó la forma en que hoy se bebe esta milenaria infusión en todo el mundo. Fotos: cortesía Escuela Mexicana de Té.
Como ya explicamos, los Tés tributo eran aquellos que los emperadores chinos habían seleccionado para recibir como Contribución-Impuesto de sus súbditos; hebras de calidad excepcional, muy apreciadas por la corte imperial debido a su aroma, sabor, textura en boca y propiedades benéficas.
10 tés tributo chinos en la historia
Xinyang Maojian
Originario de Henan, posee una historia de más de 2 mil 300 años. En 1987, un grupo de arqueólogos descubrió té en una antigua tumba en Xinyang, mismo que describieron como una variante de Maojian.
Fue reconocido como un Té tributo durante la época Tang, pero las dinastías Yuan y Ming impusieron fuertes impuestos al té que redujeron su producción en la región. Generalmente se manufactura con un brote y una o dos hojas de Camellia Sinensis, horneado sobre carbón y enrulado manualmente.
Meng Ding Gan Lu
Es uno de los tés más antiguos de China, documentado por primera vez durante la dinastía Han. El maestro del té Wu Li Zhen plantó su primer jardín alrededor del año 50 a.C., destinado a la producción de esta singular hebra. También es el único Té tributo de la provincia de Sichuan.
El nombre Gan Lu a menudo se traduce como “melaza”, pero probablemente estaba relacionado con la palabra budista sánscrita que significa inmortal. El té fue seleccionado como tributo a principios del Siglo IX y su proceso de manufactura ha sido documentado extensamente: hay tres pasos de cocción de las hojas con un paso de enrulado después de cada uno. El té se seca completamente horneándolo sobre fuego de carbón y se caracteriza por brindar una infusión dulce y floral, con recuerdos de nuez en algunas ocasiones.
Junshan Yinzhen
Otro de los Tés tributo más antiguos, ofrecido al emperador desde la dinastía Tang, cuando la princesa Wencheng eligió recibirlo para su boda. Originalmente sus hebras se conocían como Huang Ling Mao o “pluma de cola amarilla” debido a su apariencia durante la infusión.
Junshan, la pequeña isla con 72 montañas en el lago Dong Ting, de donde procede este té, está cubierta de niebla casi todo el año. La mineralidad del suelo le da al té un cuerpo pesado y estructurado. Su manufactura incluye un brote y 4 a 5 hojas tiernas de Camellia Sinensis, que se secan en sartén antes de envolverlos y colocarlos en una olla húmeda durante 4 a 5 días. El proceso se repite hasta que las hebras adquieran su característico color amarillo. Su infusión es suave, delicada, dulce y vivaz.
Huangshan Maofeng
Originario de Anhui, toma su nombre de la forma y textura suave de sus hebras terminadas. Su producción probablemente comenzó en el área durante la dinastía Song, con la llegada de los monjes budistas, pero no fue hasta la dinastía Ming que se refinó y convirtió en tributo imperial.
El Huangshan Maofeng moderno se remonta a finales del Siglo XIX, cuando fue perfeccionado por Xie Zhegan. Se elabora con un brote y dos hojas de Camellia Sinensis, que se cuecen en sartén y se enrulan antes de hornearse varias veces. Su sabor es fácilmente reconocible por su dulzura persistente, con matices florales.
Lu’an Guapian
Este té verde fue desarrollado más recientemente en la provincia de Anhui, particularmente en la aldea de Liu An, en las montañas Da Bie. Actualmente se conoce popularmente como “té de semillas de melón”, por su peculiar figura y sabor.
Guapian fue elegido como tributo durante la dinastía Qing y fue uno de los tés predilectos del emperador Guaxong. Es un té único, elaborado con hojas, sin brotes; sus tallos se quitan a mano y las hojas se cuecen en cacerolas múltiples veces, enrulando simultáneamente con escobas cortas de paja. Su infusión es robusta, con dulzor prolongado y profundas notas frutales.
Taiping Houkui
Es el más grande de los famosos tés chinos. Se produce cerca de la base de Huangshan, un área brumosa, con suelo fértil. Es un tipo de “jiancha” o té de hojas puntiagudas. Se convirtió en tributo durante la dinastía Qing, pero ganó más fama al ganar el primer premio en la Exposición Mundial del Té de Panamá, en 1915.
Es famoso por sus «dos cuchillos y un palo»: dos hojas rectas que abrazan un enorme brote con vellosidades blancas, sólo obtenibles de la Shi Da Cha, una variedad de Camellia Sinensis de hojas grandes que sólo se encuentra en la provincia de Anhui.
Longjing
Nativo de la región del Lago Oeste, en la provincia de Zhejiang, se produce desde la dinastía Tang. Comúnmente conocido como Dragonwell, recibió su nombre durante la dinastía Song pero no saltó a la fama hasta la dinastía Qing, a finales del Siglo XVIII.
El Dragonwell se produce tradicionalmente utilizando una variedad de árbol antiguo, denominado Qunti, nativo del Lago Oeste; más recientemente se desarrolló el cultivar Long Jing 43, cuya tasa de crecimiento más rápida permite recolectarlo entre 7 y 10 días antes que la variedad anterior.
Su manufactura incluye brote y 1 a 2 hojas. Se hornean dos veces y, durante la segunda cocción, se le da su característica forma aplanada. Su infusión es reconocible por su color amarillo pálido, aromas de frutos secos y nueces, y dulzor en boca.
Bi Luo Chun
Originario de la montaña Dong Ding, en Jiangsu, su nombre se traduce literalmente como “Caracol verde de primavera”, debido a su forma enrulada y el color brillante. Ha sido un Té tributo desde la dinastía Qing.
Solo se cosechan primeras hojas y brotes; entre conocedores se sabe que el Bi Luo Chun – Pi Lo Chun más fino es aquel que se elabora con el brote más nuevo y la primera hoja aún enrollados, que le otorgan su peculiar forma de “lengua de gorrión”. Todas y cada una de las hojas se procesan cuidadosamente a mano, para crear una forma similar a la de un caracol; después se tuestan para secarlas y frenar su oxidación. En taza es untuoso, con sabores vegetales y agradables tonos de nuez.
Da Hong Pao
Un oolong de la montaña Wu Yi, en la provincia de Fujian. Ha sido Té tributo desde la dinastía Ming, a finales del Siglo XIII. Se dice que las plantas originales tienen siglos de antigüedad y todavía se pueden encontrar en un acantilado en la reserva natural de Wu Yi, aunque ya no producen té. Los puristas señalan que el Da Hong Pao actual debe producirse a partir de descendientes de las plantas madre, reproducidas a partir de tallos originales: Bei Dou (Estrella del Norte), Que She (Lengua de gorrión) y Qi Dan.
El Da Hong Pao utiliza las 3 a 5 hojas superiores de la planta. Las hojas se tuestan sobre llamas de carbón a fuego lento, durante un largo período, agitándolas o volteándolas constantemente. El enrulado se realizará 3 o 4 veces, con largos períodos de reposo que pueden durar de 3 a 4 semanas. Cuando se infunde, el té ofrece un cuerpo incomparable, gran dulzor de miel, matices florales y excepcional mineralidad.
Tieguanyin
Oolong del condado de Anxi, en la provincia de Fujian. Se convirtió en Té tributo durante la dinastía Qing y, más allá de un varietal, es un estilo de procesamiento. Catalogado entre los 10 tés más famosos de China y reconocido como uno de los oolongs más preciados del mundo, se produce a partir de una compleja y minuciosa serie de pasos, entre los que también se incorporan técnicas secretas desarrolladas por cada productor.
Tras la cosecha, las hojas de una variedad específica de Camellia Sinensis se marchitan al sol incipientemente y después se enfrían y sacuden vigorosamente. Después, se someten a un nuevo proceso de marchitado, que incluye un cierto grado de oxidación que ayuda a desarrollar matices florales y reducir notas herbales o astringencia excesiva en las hebras terminadas. Ya listas, las hojas se enrulan en varias ocasiones, con movimientos e intensidades celosamente guardados por cada productor, antes de finalmente secarse. Dependiendo de su región de cultivo, el Tieguanyin desarrollará diferentes matices aromáticos y gustativos. escueladete.mx