Entre todos los tés del mundo y los 10 grandes tés de China, sólo uno es capaz de brindar todo un cúmulo de aromas y sabores en 1 hoja… Su nombre: LiuAn GuaPian, “Melon Seed”. Fotos: Escuela Mexicana de Té.
Originario de la zona de Dabie Mountain, en la provincia de Anhui, el té LiuAn GuaPian se hizo popular por primera vez durante la dinastía Qing gracias a su fragancia y delicado sabor. Se trata, querido lector, del único té puro sin brotes manufacturado a partir de una sola hoja. El té se recolecta en una etapa más madura de la planta, cuando las hojas han alcanzado el tamaño suficiente para enrollarse con una especie de escoba y después hornearse docenas de veces.
El origen del té LiuAn GuaPian
La historia cuenta que el té LiuAn GuaPian nació en el pueblo de Liu An y se convirtió en uno de los tés más populares de la dinastía Qing rápidamente. En sus versos, el poeta Yuan Ming escribió que este singular té verde puro surgió de las montañas brumosas de la cordillera Qi Shan, exactamente “de entre el este de la cueva de la pitón, el oeste de la cueva de los murciélagos, el sur de la cuenca dorada, la luna y el norte de la placa de cristal”.
En 1856, la emperatriz Dowager Cixi, del clan Manchú Yehe Nara, disfrutó 26 tazas de té en un sólo mes, popularizándolo entre los miembros de la corte imperial. A inicios de la década de 1970 Henry Kissinger, quien se desempeñó como Secretario de Estado de los Estados Unidos, visitó China por primera vez; entre los regalos secretos recibidos se hallaba un pequeño saco de té LiuAn GuaPian, mismo que Kissinger describió como uno de los “preciados patrimonios históricos y culturales” de China.
En 1856, la emperatriz Dowager Cixi, del clan Manchú Yehe Nara, disfrutó 26 tazas de té en un sólo mes, popularizándolo entre los miembros de la corte imperial. A inicios de la década de 1970 Henry Kissinger, quien se desempeñó como Secretario de Estado de los Estados Unidos, visitó China por primera vez; entre los regalos secretos recibidos se hallaba un pequeño saco de té LiuAn GuaPian, mismo que Kissinger describió como uno de los “preciados patrimonios históricos y culturales” de China.
¿A qué huele y sabe?
Las hojas dedicadas a su producción se cosechan dentro de los 10 días previos y posteriores a la lluvia. Los recolectores saben que sólo deben emplear hojas duras, bien formadas y maduras, nunca tiernas. Una vez en la fábrica el tallo de la única hoja que forma cada hebra de LiuAn GuaPian se somete a un proceso que le brinda una textura leñosa, muy típica.
El té verde terminado tiene un tono esmeralda bien característico, que deriva en un licor de color verde claro brillante con un aroma vegetal fresco. El sabor tiene un refrescante perfil vegetal, cremoso, con ligeras notas herbáceas de espinacas cocidas. El final en boca ofrece notas herbáceas dulces y un ligero toque picante, bien punzante y mineral. En general, se trata de un té verde con un perfil chino clásico pero con un sabor muy refinado.
Los mejores resultados sensoriales llegan cuando el té se infunde a 75 °C, durante 1:30 a 2:00 minutos, en extracciones múltiples, aumentando gradualmente el tiempo de contacto con el líquido caliente en cada ocasión. ¡Delicioso! escueladete.mx
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