Enorgullecer a Baco, el dios griego del vino, es más fácil de lo que podrías imaginar; y es que aprender a catar correctamente esta bebida solo requiere de algunos pasos, pues solamente necesitarás práctica, paciencia y determinación. Una vez que tengas más habilidad, podrás hacer excelentes maridajes con el menú que planees en tus eventos (que se volverán inolvidables). Aquí te dejamos una pequeña guía práctica para iniciarte en la técnica para catar un vino.
El primer paso que debes realizar es tomar consciencia de los sentidos que usarás para catar tu vino: estos serán, por orden cronológico: la vista, el olfato, el gusto y el tacto. Comienza por la fase visual: en ésta deberás servir un poco de vino en una copa que tomarás por la base o el tallo. Inclínala y observa el color del líquido, también pon atención al rastro que deja en el cristal (algunos lo llaman olas, lágrimas o piernas), este está ligado directamente a la concentración de alcohol: si caen lentamente entonces tienen más densidad de alcohol que si no lo hicieran.
La siguiente fase es la olfativa, para ésta debes acercar tu nariz sin agitar la copa y poner atención ¿a qué te recuerda? ¿uvas, frutas, tierra? Estos son los aromas primarios. Luego, agita levemente la copa y vuelve a olfatear: deberás identificar los aromas del alcohol y la fermentación, es decir secundarios. Para finalizar, agita con más avidez la copa: los aromas que surgirán son quizá los más difíciles de encontrar pero los puedes identificar, huelen como a frutos secos, vegetales y roble.
Ahora lo que estabas esperando: la fase gustativa. Da un pequeño sorbo a tu vino y pásalo de un lado a otro de tu boca para que impregne tu lengua. ¿Cuáles secciones de tu paladar estimuló? Si acaso la sensación consigue un equilibrio entre el dulce, amargo, salado y ácido podrás decir que es un vino redondo. Te recomendamos tomar conciencia de en qué parte de la lengua se perciben cada uno de estos sabores. Después, toma en cuenta la textura y su astringencia. Una vez que hayas tragado, expulsa aire por la nariz, lo que percibas será el retrogusto, lo que puede variar de persona a persona.
Tip: te recomendamos anotar lo que sientes en casa fase y hacerlo con cada copa que tomes: verás que poco a poco identificarás más olores y sabores. ¡Salud!