Restaurantes con sabor a México

Diana Féito nos invita a celebrar el mes patrio a través de platillos de Baja California, de cocina tradicional y de sabores que nos hacen gritar: ¡Viva México!

Nuevo

Primario

      Pasión, creatividad y trabajo fueron los ejes que trazaron el camino de lo que fue bautizado como Primario. Este exitoso food truck se abrió paso en el gusto de los comensales, al sorprender con platillos que desafiaban a la tradición, por lo que decidieron abrir el restaurante. La gordita de cangrejo es el plato emblemático en este espacio sobrio donde el protagonista es la experiencia gastronómica. Técnicas culinarias de alta cocina mezcladas con materia prima mexicana crean opciones interesantes como el fideo seco con un toque de chipotle y hoja santa, el burrito de marlín ahumado con salsa tártara o el tlacoyo de pork belly con pipián verde. Este lugar fue planeado para ser revisitado una y otra vez. Por si fuera poco, 10 de sus platos fuertes pueden ser ordenados en diferentes presentaciones: gorditas, burritos, tlacoyos y tlayudas. La carta también ofrece desayunos, entre los que destacan los huevos en cazuela o los chilaquiles acompañados de pan dulce artesanal y jugos de la casa. CH: $180. Río Elba 31, Cuauhtémoc. primariomx.com

El CardenalLos consentidos mexicanos

El Cardenal

       La calidez michoacana toma forma a través de una humeante taza de chocolate, pan recién horneado y natas frescas. Se trata de un restaurante familiar con más de 30 años de existencia, con una propuesta auténtica. Los desayunos en El Cardenal se han convertido en una tradición en la capital. Una gran variedad de platillos mexicanos colman la irresistible carta con alternativas de temporada como la tortilla de huevo con escamoles, aporreado con huevo —estilo Michoacán—, enchiladas de huitlacoche o un omelette de claras con chile de agua. Se recomienda hacer reservación. CH: $180. Palma 23, Centro Histórico. restauranteelcardenal.com

NicosNicos

       Su reciente aniversario número 58 es prueba del porqué se ha convertido en uno de los favoritos. Su personalidad de acento mexicano se conjuga con cada uno de los platillos que elaboran en su cocina. El chef Gerardo Vázquez Lugo traslada su pasión por la gastronomía mexicana a la carta, respetando las tradiciones de la culinaria con opciones como la sopa seca de natas —receta del siglo XIX del Convento de las Capuchinas—, el cerdo en adobo de antaño o el dueto de capirotadas, que se ha convertido en emblema del restaurante. El café de olla es obligado para terminar el banquete. CH: $550. Avenida Cuitláhuac 3102, Clavería. nicosmexico.mx

El BajíoEl Bajío

     Dese 1972 este lugar ofrece lo mejor de la gastronomía tradicional mexicana. A través de su carta, la chef Carmen Ramírez Degollado, Titita, invita a dar un recorrido culinario por diferentes zonas del país. Entre sus platos míticos se encuentran las empanadas de plátano rellenas de frijol, las tostadas —de pata o de minilla—, los tacos de carnitas o las enchiladas de mole negro hecho en casa. Destaca su decoración con elementos coloridos que celebra la cultura mexicana en cada rincón. Es el lugar ideal para acudir con toda la familia. CH: $300. Avenida Cuitláhuac 2709, Azcapotzalco. restauranteelbajio.com.mx

MerotoroConsolidado

Merotoro

Cocina franca que enamora desde el primer bocado.

     La amistad entre los restauranteros Gabriela Cámara y Pablo Bueno de Contramar y el afamado chef Jair Téllez dio como resultado Merotoro. Una fusión entre cocina de mar y tierra que por más de cinco años le ha dado vida a la colonia Condesa. Un salón amplio y sencillo donde sobresalen detalles de madera da la bienvenida.

     La atmósfera relajada invita a pasar un buen momento sin tener que preocuparse por el entorno. Si bien su cocina está marcada por tener influencia de Baja California, el menú ofrece platillos de autor que no necesariamente se encasillan en dicha región. Su cava ofrece vinos francos con gran variedad de caldos de Valle de Guadalupe, sin olvidarse de grandes regiones como Chile, Francia o España.

    Aquí el menú es tan variable que a diario se imprime. Las alternativas varían de acuerdo con la disponibilidad del producto. El objetivo: platillos frescos que embelesan al paladar. Cuatro tiempos marcan el ritmo durante la comida. Para comenzar, un vuelve a la vida de maíz criollo con leche de tigre es la alternativa. Seguido por un arroz negro con hongos silvestres, o uno de los favoritos, la quijada de cerdo ibérico aderezado con un huevo pochado y lentejas braseadas, que ha mantenido su lugar en la carta desde sus inicios. Es obligado visitar el tercer tiempo con un extraviado a la parrilla con puré de chícharo y aceituna negra. Cada bocado es un asalto a los sentidos. Los postres son un buen pretexto para continuar la experiencia. La galleta con mora azul y helado de nata es perfecta para el dulce final.

    En 2014, Merotoro obtuvo la posición 26 dentro de la lista de los 50 Mejores Restaurantes de Latinoamérica. Tras una visita es sencillo comprender la relevancia del lugar. Su servicio impecable, sumado a una cocina honesta y directa, hacen de este restaurante un sitio imprescindible en la agenda de cualquier sibarita que visite la Ciudad de México. CH: $750. Ámsterdam 204, Condesa. merotoro.mx

Castello del NeroGlobal Gourmet

Castello del Nero Toscana, Italia.

      De entrada, se sabe que vas a beber bien en Castello del Nero: su lista de vinos ha ganado varios premios internacionales y el lugar cuenta con vistas a Antinori, hogar de los grandes toscanos originales. Pero este hotel de lujo, situado en un castillo del siglo XII, a media hora de Florencia y Siena, también ofrece una gran propuesta culinaria. Su taberna junto a la piscina es auténtica, y el restaurante La Torre es el protagonista del lugar. Lo rústico siempre es mejor en la Toscana, y el Castello ofrece mozzarella de búfala local, excelente charcutería, y pan artesanal de distintos tipos para sumergir en el aceite de oliva que produce la casa; un punto culminante de cada comida. El chef Giovanni Luca di Pirro se inspira en los hermosos pueblos de los alrededores para confeccionar platillos como su huevo cocido a fuego lento con mousse de parmesano y ensalada tibia de habas y espárragos jóvenes. El tagliatelle casero con tomates frescos y albahaca del jardín de la propiedad es excelente, mientras que el cappelletti con agua del Mediterráneo y ragout de langosta está lleno de sabores interesantes. Muy intrigantes y marítimos. Las clases de cocina que ofrece el hotel son otro de sus distintivos, así como la degustación de vinos, la cual se ofrece en una cava que incluye excelentes tintos de los propios viñedos del Castello. castellodelnero.com