Save the Children y Luna Escondida: unidos por la niñez migrante

La organización humanitaria Save the Children y el chef Eduardo García, del reconocido restaurante Máximo, organizaron un encuentro entre amigos, arte, gastronomía y alta hotelería en un oasis secreto en San Miguel de Allende: Luna Escondida. Conoce los detalles y revive este evento en pro de la niñez. Fotos: Gabriel Núñez.

 

Una deuda actual con el futuro

 

Millones de niñas, niños y adolescentes se ven forzados a dejar sus casas, sus familias y amigos para migrar a países desconocidos. Realizan, a veces solos, la más hostil y desgarradora travesía, con la finalidad de encontrar nuevas oportunidades para empezar de nuevo. Se trasladan de un sitio a otro, sufriendo un sinfín de peligros, buscando escapar de una situación insostenible, marcada por  la violencia, la pobreza y el cambio climático. Caminan kilómetros tejiendo en su inocencia el sueño de acceder a un mejor futuro. 

Si, como sociedad, no somos capaces de brindarle a la niñez un lugar seguro para vivir y desarrollarse, entonces somos parte del problema.

 “Los retos y peligros que vive la niñez migrante en su salida, trayecto y llegada a México son muy duros, pues son los más vulnerables a ser víctimas de trata y tráfico de personas, explotación, secuestro, extorsión, abuso sexual y reclutamiento forzado de organizaciones criminales. A su vez, son más propensos a enfermarse, sufrir deshidratación y desnutrición”, me explica José Lugo Rodriguez, coordinador de Incidencia Política de Protección a la Niñez migrante de Save the Children

 

Cena Save the Children en Luna Escondida

 

 

Save the Children: creando espacios seguros para la niñez migrante

 

Pero también podemos ser parte de la solución: desde 2018, Save the Children cuenta con un programa especial de atención a la niñez migrante en 31 Espacios Amigables ubicados en nueve estados de México para brindar apoyo en educación, salud y protección frente a esta emergencia humanitaria. A la fecha, la organización ha logrado apoyar a más de 20 mil niñas, niños y adolescentes.

“Trabajamos tanto en la frontera norte como en la frontera sur para crear espacios de protección para niñas y niños migrantes; lo hacemos dentro de albergues. El año pasado instalamos 32 espacios seguros que se llaman Child-Friendly Spaces. Allí hay personal de Save the Children que trabaja, directamente con niños, niñas y adolescentes, temas de contención emocional y educación emergente, así como también temas de autocuidado, nutrición y conocimiento de sus derechos. Aunque están migrando, son niñas y niños sujetos de derechos”, declara en entrevista para Food and Travel Ivonne Alvarado Camacho, trabajadora de Coordinación de Aliados Estratégicos de Save the Children

 

Revive aquí este inolvidable evento

 

Cena Save the Children en Luna Escondida

 

 

Sabores filantrópicos en Luna Escondida

 

La gastronomía es una fuente indiscutible de placer, pero también puede ser una herramienta de transformación social y económica. Save the Children, Luna Escondida y Grupo Máximo brindaron una cena con causa con el objetivo de procurar fondos en favor de las niñas y niños migrantes.

 “Yo migré desde niño a un país (Estados Unidos) donde trabajaba en el campo, y regresé a México a trabajar en la cocina. Me uní a Save the Children, y la verdad es que estoy muy agradecido con la existencia de este proyecto. Apoyar a la niñez mundial es una tarea de los cocineros en México; lo podemos hacer y lo hacemos con gusto y entrega”, dice el chef Eduardo García, embajador de Save the Children México que hace unas semanas organizó y cocinó en un evento lleno de arte, amigos y consciencia por la infancia

 

Chef Eduardo García

 

Entre complicidades, pláticas profundas y transformadoras sobre la labor con la niñez migrante que Save the Children está logrando, se realizó una cena en beneficio a la niñez migrante en Luna Escondida, donde quedó demostrado el saber hacer del virtuoso chef Eduardo García

Localizado a solo 15 minutos del centro de San Miguel de Allende, Luna Escondida es un sitio incomparable: uno de sus secretos mejor guardados de México

 

Luna Escondida, un nuevo motivo para viajar a San Miguel de Allende

 

Desde hace unos meses, Luna Escondida abre las puertas de sus íntimas casonas o villas para el disfrute de las almas viajeras que deseen disfrutar de este santuario que celebra al amor en todas sus expresiones: realizando bodas, eventos filantrópicos como este y en la atención que los propietarios y los miembros del staff le ponen a cada detalle.

“La mayoría de los lugares que consideramos únicos tienen grandes historias tras ellos, y Luna Escondida no podía quedarse atrás. Este espacio rodeado de naturaleza, paz y tradición mexicana ha pasado por una fantástica transformación alimentada por la energía y el corazón de esta familia”, cuentan Jorge y Lupita la pareja creadora de este concepto de hospitalidad sin precedentes.

 

Evento filantrópico

 

Su deseo de compartir el rancho con el mundo es una manifestación de amor, y parte de su compromiso con el bienestar y la felicidad de quienes le rodean.

La renta de Luna Escondida está diseñada para su uso privado. Sus encantadoras villas, con capacidad para seis, ocho o diez personas, son ideales para viajes en familia. Si quieres saber más sobre este concepto, no dudes en entrar a su página web.

Para conocer todas las acciones que Save the Children emprende en favor de las generaciones más jóvenes, entra a su sitio oficial en México.

Y si quieres ser testigo de algunos instantes de este evento, mira la transmisión en vivo realizada desde @foodandtravelmx en Instagram.

 

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