El destino de Colorado donde los niños pueden esquiar gratis
El invierno en Colorado es una invitación a disfrutar las Montañas Rocosas nevadas, una invitación que se extiende a los primeros días de la primavera. Para ser más específicos, hasta mediados de abril (época con precios más accesibles). Y esta escapada es aún más divertida cuando se decide compartirla con los más pequeños de la familia. Este año, nos aventuramos y nos fuimos con nuestros dos hijos, de ocho y seis años, a esquiar a Keystone Resort para vivir cuatro días de pura nieve, esquís, diversión y momentos memorables. ¡Te cuento cómo esquiar gratis con niños! Fotos: Elsa Navarrete
No te pierdas la etapa de esquiar con niños
Dicen que explorar la montaña es sinónimo de tiempo de calidad en familia, y ahora puedo decir que es cierto. Esta es nuestra segunda escapada de este tipo, pero en esta ocasión dedicamos cuatro jornadas completas a esta actividad y nos pareció fascinante. El esquí no es solo un deporte de invierno, va más allá. Es una experiencia formativa que aporta beneficios físicos, emocionales y sociales a los niños. Introducirlos en este mundo desde temprana edad les da ventajas técnicas y siembra habilidades para la vida.

La edad ideal para empezar a esquiar es a partir de los 3 o 4 años, y para ello es primordial que tomen clases con instructores certificados para niños. El esquí es un ejercicio completo que fortalece músculos (piernas, abdomen y brazos), mejora el equilibrio y la coordinación, promueve la resistencia cardiovascular en un entorno lúdico y, sin duda, incentiva el amor por la naturaleza y las actividades al aire libre.
Además del desarrollo de la fuerza física, aprender a esquiar implica enfrentar desafíos —como ir dominando las pendientes o levantarse tras una caída—, lo que genera autoconfianza, enseña resiliencia —«¡lo intentaré de nuevo!»— y fomenta la independencia. Y lo más increíble: los niños aprenden a hacerlo más rápido que los adultos, debido a su menor miedo al riesgo, mayor flexibilidad y su centro de gravedad más bajo que proporciona estabilidad.
Otro de los beneficios de esquiar con niños es la conexión familiar: el esquí es uno de los pocos deportes que pueden disfrutarse en familia durante un viaje exclusivo para esta actividad, generando recuerdos compartidos —¡esos viajes a la nieve quedan grabados para siempre! Puede ser una tradición que se puede mantiene año tras año, así como tiempo de calidad lejos de pantallas y rutinas que nos ayuda a frenar el ritmo de la vida moderna.
Siempre he pensado que los viajes en la naturaleza son el mejor antídoto contra el estrés y la mejor aula para los niños. Y en esta ocasión, los incentivo a invertir para que sus hijos aprendan a esquiar y así regalarles diversión y herramientas para el presente y el futuro.
Viaje pensado para niños
Desde el momento en que decidimos ir a esquiar con los niños, supimos que Keystone era una de las mejores opciones. No solo es conocido por su ambiente familiar y sus pistas para principiantes, también es el único resort de Vail Resorts donde los niños ¡esquían gratis!
Este refugio consiente a tu bolsillo —porque representa un ahorro significativo— a través de una oferta especial disponible todo el año, sin fechas restringidas. Solo hay que reservar alojamiento por dos o más noches con Keystone Resort para recibir un día de esquí gratis para niños de 12 años o menos, además de un día gratis por cada noche adicional reservada. Esta promoción se aplica automáticamente y al momento de hacer check in te dan tus pases de cortesía. Una maravilla.


Una opción de alojamiento es Keystone Lodge & Spa, un hotel de 152 habitaciones que, ubicado en Lakeside Village, ofrece espectaculares vistas a las montañas circundantes, al lago Keystone y al río Snake. Y la otra alternativa —por la cual optamos— son los condos (también hay lofts, townhouses) de Keystone Resort Vacation Rentals, con diferentes capacidades para todo tipo de familias.
Llegada a Keystone: un mundo de nieve y calidez
Las maletas estaban llenas de ropa térmica, guantes, gorros y ropa para esquiar. Los niños, emocionados, no dejaban de recordar cuando esquiaron por primera vez y tomaron su primera clase hace dos años en Big Bear, California. Y así, sabiendo cómo llevar los esquis (french fries) y sabiendo frenar (pizza), emprendimos el viaje.
El aeropuerto de llegada es el de Denver, y desde ahí, el trayecto en auto —nosotros rentamos uno— hacia Keystone fue un espectáculo en sí mismo. La carretera serpenteante regala hermosas vistas de montañas cubiertas de bosques de pinos y nieve. Una hora y media después, llegamos al destino.

Nuestro condo en Arapahoe Lodge en River Run Village nos recibió con una calidez que contrastaba con el frío exterior. La decoración y amenidades nos hicieron sentir como en casa. Tenía todo lo necesario para una estancia cómoda: una habitación con una cama matrimonial, un sofá cama para los niños, una cocina equipada, un comedor y un pequeño balcón donde podíamos sentir la vibra local del pueblo; incluso el edificio cuenta con lockers especiales para resguardar tu equipo de esquí.
Días consagrados a esquiar con niños
Rentamos el equipo (esquís, botas, bastones y cascos) en una de las tiendas de Epic Mountain Rentals (con un gran servicio y devolución disponible en cualquier tienda), nos subimos a la góndola con cabinas con capacidad para seis personas y, en la cima, comenzamos a deslizarnos en la zona de aprendizaje. Nuestros cuerpos empezaron a recordar lo aprendido en clase y poco a poco tomamos más confianza, subiendo de nuevo por el lift exclusivo de esta área para volver a conquistar estas pequeñas pendientes. Después de varias horas, logros y caídas, era momento de conquistar toda una pista (obvio, verde).
Con 138 pistas de todo tipo, Keystone Resort da especial atención y mimo a las familias y esquiadores principiantes, quienes pueden descender por el famoso Family Ski Trail. Esta pista ofrece pendientes más suaves y anchas, perfectas para aprender a esquiar sin presión, reducir el riesgo de caídas y facilitar el control.
La Family Ski Trail está alejada de esquiadores avanzados, lo que minimiza el tráfico y las colisiones. Y, tras bajar la montaña tres veces a través de esta pista, puedo decir que sí logra que los niños (y los adultos principiantes) ganen confianza en un entorno tranquilo (aunque he de agregar que en este resort hay bastantes snowboarders que bajan a más velocidad).
Una forma divertida de disfrutar de la montaña al tiempo que se toma un descanso de las pistas es Snow Fort que, en la cima de la montaña Dercum, es la estructura de nieve y hielo más grande del mundo. Con esculturas, cuevas y vistas espectaculares, los niños se divirtieron en las resbaladillas y la pequeña pista de tubing que es gratuita. Es un lugar obligado para toda la familia.
Tras finalizar la jornada, el jacuzzi al aire libre del edificio era el refugio perfecto para toda la familia. Los niños lo disfrutaron por igual, mientras el agua calientita nos ayudaba a relajar los músculos.
Por las noches, exploramos el pueblo de Keystone. Cenamos en Pizza on the Run, uno de los restaurantes locales, donde probamos una deliciosa y reconfortante pizza. Los niños, agotados pero felices, se dormían casi de inmediato al regresar a la habitación.

El adiós: recuerdos que durarán
La última noche llegó demasiado pronto, pero fue mágica porque esa noche nevó, la cereza del pastel de cualquier escapada invernal. Mientras empacábamos, los niños no dejaban de hablar de todo lo que habíamos vivido y así nos despedimos de las montañas con la promesa de regresar. Este lugar nos regaló no solo unas divertidas vacaciones, sino también la oportunidad de conectarnos como familia en un entorno natural mágico.
¿Más consejos para esquiar con niños en Keystone? Reserva con anticipación: las clases de esquí y el alojamiento se llenan rápido en temporada alta, además de que se pueden obtener mejores precios. Es importante equiparse bien. Asegúrense de llevar ropa térmica, protector solar y gafas de sol (o, aún mejor, goggles) para todos. Y encontrar el momento para relajarse en el après-ski de Kickapoo Tavern, en los jacuzzis al aire libre y en el spa. Después de un día en las pistas, son el mejor regalo.
En este viaje fuimos sommeliers de snacks, mayordomos de quitar botas, perseguidores de niños empoderados bajando las pendientes, cargadores de esquís, choferes, animadores, ayudantes en el momento de subir y bajar del lift y de la góndola… Pero, sin duda, esquiar en familia da una fuente natural de felicidad. Sentí cómo ralenticé el ritmo y estaba concentrada solo en mis movimientos, en ver a mis hijos divertidos, aprendiendo un nuevo deporte… en disfrutar de la experiencia y los pequeños detalles.
Con ese espíritu ideal para esquiar en familia, que tan buenos resultados le ha dado, y promociones para esquiar con niños gratis, Keystone Resort hace que practicar este deporte sea más accesible. ¿Listos para su primera aventura sobre nieve? Conoce más en la página web de este destino en Colorado.

También lee sobre el mágico baile de las ballenas en Ixtapa Zihuatanejo y no te pierdas este espectáculo natural en la siguiente temporada.