Hilo Negro: la vinícola que rinde homenaje al arte del detalle
Bebidas | 4 min

Hilo Negro, la reconocida vinícola del Valle de Guadalupe, trajo su arte de la “confección de vinos” a la Ciudad de México con una colaboración en el restaurante Sonia. Bajo la dirección del chef Édgar Delgado, presentaron un menú degustación en el que cada platillo destacó las cualidades de los vinos de la bodega. La experiencia fue enriquecida por la participación de Ramón Salgado, fundador de Hilo Negro, así como por el enólogo Daniel Lonnberg, cuyo conocimiento y pasión por la vinicultura han sido clave en la creación de estos vinos de alta calidad. ¡Conoce más al respecto! Texto: Miriam Lira / Fotos: cortesía

 

Maridaje ideal: un menú sensorial

 

hilo negro chefs

 

La experiencia comenzó con pan y mantequilla de la casa, acompañados por el vino Invisible reforzado (100% sauvignon blanc). Este inicio sencillo, pero efectivo, preparó a los comensales para el siguiente paso en el viaje culinario. La croqueta de bacalao, servida como botana, se combinó con un vino rosado Tricot (100% primitivo). Este maridaje demostró cómo los sabores del mar y la tierra pueden complementarse perfectamente con vinos rosados.

Como entrada, se ofrecieron tacos de papada de cerdo con paté de lobina ahumado, maridado con vino tinto Ricrac (50% cabernet sauvignon 25% nebbiolo y 25% syrah). Esta combinación destacó por su equilibrio de sabores y texturas. Mientras que el plato fuerte fueron unas carnitas de guajolote con mole negro, compota de plátano y ajonjolí, acompañado por otro tinto, ZigZag (70% nebbiolo y 30% syrah). Esta elección subrayó la riqueza de la cocina mexicana y su compatibilidad con los vinos robustos.

Para finalizar, el postre de camote en tacha se maridó con el tinto de Nido de Abeja (100% primitivo), cerrando la comida con una dulce nota y demostrando que los tintos también van bien con los postres.

 

El corazón de Hilo Negro

 

¿Quién es el enólogo? El maestro «costurero» detrás del vino. Originario de Santiago de Chile, Daniel Lonnberg es el enólogo de Hilo Negro desde 2013. Su experiencia en proyectos como Casa de Piedra y Adobe Guadalupe ha sido fundamental para la creación de vinos tintos y blancos de alta calidad.

Hoy, en Hilo Negro, Daniel Lonnberg logra una perfecta sintonía de sabores en cada etiqueta y que le han valido ganar más de 60 medallas para la vinícola.

En cuanto a la particularidad del nombre, “Hilo Negro refleja la dedicación y el detalle en la creación de cada vino”, asegura Daniel, quien también refiere que el detalle es similar al arte de la costura. Su viñedo de ocho hectáreas alberga más de 40 mil plantas de diversas variedades en el corazón del Valle de Guadalupe, ofreciendo etiquetas que cuentan historias con cada copa.

hilo negro vinos

Sus experiencias: celebrando los sabores de Ensenada

 

De acuerdo con Ramón Salgado, el restaurante de la vinícola Hilo Negro, Emat, cocina de huerto, cuyo nombre significa «tierra» en kumiai, celebra la calidad y frescura de los ingredientes de la región del Valle de Guadalupe y una parada indispensable si planeas visitarlos. Bajo la dirección del chef Eduardo Salgado, «Ofrece originales interpretaciones en menús de degustación y platos a la carta, maridados con los vinos de la bodega y cervezas artesanales de Baja California», asegura.

Otra de las experiencias que se pueden gozar es Algaravino, el espacio de cata y degustación de Hilo Negro. En un ambiente sofisticado, ofrecen catas especializadas al gusto de cada visitante. Visítalos jueves, viernes, sábado, domingo y lunes, de 11:00 a 18:00 horas.

Al igual que en la costura, cada detalle cuenta en el vino para crear e hilar experiencias memorables, ahora que conoces un poco más de la historia de Hilo Negro, no dejes de disfrutar de sus experiencias gastronómicas.

Visita el sitio web de Hilo Negro para más información y sigue sus redes sociales para estar al tanto de próximas degustaciones y maridajes. Ojo, ¡su fiesta de la vendimia es el próximo 24 de agosto! Dónde: Carretera Francisco Zarco – El Tigre Km 11, El Porvenir, Ensenada, Baja California. Para tomar en cuenta: el restaurante abre lunes, jueves, viernes, sábado y domingo de 13:00 a 21:00 horas. Cheque promedio: $700 por persona.

 

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