En el año 2010, la gastronomía mexicana fue considerada como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). Sin embargo, existe una confusión de si se refiere a toda la comida mexicana o solo algunos platillos.
«La cocina tradicional mexicana, cultura comunitaria, ancestral y viva – El paradigma de Michoacán»
El título inscrito en la UNESCO aclara que se trata de “La cocina tradicional mexicana, cultura comunitaria, ancestral y viva – El paradigma de Michoacán». Por lo que el nombramiento se trata de solo la cocina tradicional y no toda la cocina mexicana. En el sitio web de la institución ich.unesco.org/es, puedes consultar el escrito que se presentó ante la UNESCO; ya que éste es un requisito indispensable al momento de presentar una propuesta para adquirir esta distinción.
El patrimonio inmaterial cultural no tangible
Es conocido como oral o inmaterial; consta de tradiciones y expresiones orales, incluido el idioma. También las artes del espectáculo, usos sociales, rituales y actos festivos, conocimientos. Así como los usos relacionados con naturaleza y universo, y técnicas ancestrales tradicionales.
México es el país latinoamericano con el mayor número de registros en la lista; aunque la mayoría de los patrimonios inmateriales de México son de motivos indígenas, por lo que cuenta con nueve: la charrería, el mariachi, la pirekua, canto tradicional purépecha, la fiesta tradicional parachicos, ritual de los voladores, lugares de memoria y tradiciones vivas de los otomí, y las fiestas indígenas dedicadas a los muertos.
En cuanto a la comida los intentos por hacer que fuese patrimonio inmaterial de la humanidad fueron dos; el primero en 2005 y el segundo en 2010. El primer intento para obtener esta distinción; fue para que toda la comida mexicana fuera considerada de esta forma, usando al maíz como justificación; pero no se contaban con los requisitos necesarios.
En el segundo intento que otorgó la distinción a la cocina mexicana; se describió la importancia de los pueblos indígenas en el conocimiento culinario, así como del maíz, frijol y chile en la cocina mexicana, y la relación que existen con otras cocinas de otros estados. Haciendo necesario delimitar y buscar una cocina, que contara con los requisitos, intentos de preservación e historia; por lo que se optó por la michoacana.
Esta distinción no sólo es un título, por lo que se deben hacer esfuerzos para preservarlo; por ello, en el año 2015, el Presidente de México, Enrique Peña Nieto, en coordinación con las secretarías de Turismo y de Hacienda, firmaron la Política de Fomento a la Gastronomía Nacional, del que se desprendió la marca Ven a Comer, con la que se busca elevar la productividad de la industria de producción de alimentos en el país.
Recordemos, que así como las cocineras tradicionales heredan sus recetas; nosotros debemos de preservar nuestra cocina de maíz y de tradiciones indígenas.