Los vinos chianti se ubican entre los más famosos y prestigiosos de Italia, tanto así que es el estilo de vino que Italia más exporta hacia el resto del mundo. Conoce un poco de su historia, qué los hace especiales y cómo puedes probarlos en México. Fotos: Mariana Mendoza y cortesía
¿Habías escuchado hablar de los vinos chianti? Este estilo de vinos italianos cuenta con Denominación de Origen Controlada y Garantizada (DOCG), por lo que puedes imaginar la importancia que tiene proteger el legado que contiene cadabotella.
Una de sus principales características es que deben estar producidos con mínimo 80% de uva sangiovese, es decir, puede contener otro tipo de uvas en un porcentaje mínimo, además de haberse producido en una zona geográfica delimitada de Italia.
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¿Qué hace hace especiales a los vinos chianti?
El origen de los vinos chianti es muy antiguo, sin embargo, el registro histórico más importante data del año 1716, cuando el duque toscano Cosme III promulgó una ley que regulaba la producción de estos vinos. La Denominación de Origen de los vinos de Chianti oficial llegó hasta 1896, por lo que la de los vinos chianti es considerada la primera DO reconocida oficialmente en el mundo.
En un inicio, esta DO abarcaba la región de Chianti, en la Toscana, entre Florencia y Siena. Pero con el paso del tiempo, se fue extendiendo hasta hoy abarcar siete subzonas: Classico (la original), Arentini, Colli Fiorentini, Colli Senesi, Colline Pisane, Montalbano y Rufina. En términos generales, los vinos chianti son frutales, secos y ligeramente tánicos, con notas de cereza, ciruela y violeta.
¿Cómo probarlos en México?
Para degustar un vino chianti, te recomendamos la etiqueta Ruffino Chianti. Con más de dos siglos de existencia, Ruffino es una bodega italiana con una larga tradición en nuestro país, pues ha traído a México sus vinos chianti desde hace cien años.
Ruffino Chianti es elaborado en la región de la Toscana y es una mezcla de uvas sangiovese y merlot. Es muy amable al paladar y brinda un retrogusto de tanicidad moderada; en nariz, presenta notas a fruta fresca y especias.
En Italia, este vino suele ser acompañado con platos de pasta con salsa bolognese, pizzas, pescado (si es que tiene un poco de salsa), aunque sus representantes en México aseguran que va perfecto con los tacos al pastor.
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