El mito mexica sobre el conejo en la luna estaba relacionado con la fertilidad y el pulque, una bebida espirituosa al igual que el mezcal, que, llena de misticismo, se volvió uno de los elíxires preferidos por los dioses. Y justo esa leyenda inspiró a tres hermanos para crear Mezcalería Conejo en la Luna, que ahora está en Ciudad de México, en la Condesa, ofreciendo un espacio donde no solo podrás beber mezcal, sino llegar hasta su alma, conociendo su cultura y proceso de elaboración. Fotos: Cortesía, Adobe stock y Ana Belen Ortiz.
Conejo en la Luna: mezcal tradicional
¿Qué diferencia hay entre un mezcal ancestral, regional, industrial y tradicional? ¡Toda la diferencia del mundo! El tradicional se elabora reconociendo el trabajo e historia del productor, respetando su legado que por generaciones se han dedicado a la elaboración del mezcal. Así nos lo compartió Jesús Sánchez, director general de Mezcalería Conejo en la Luna.
“Para efectos de la Norma Oficial 070 –la que rige la categoría mezcal–, el mezcal tradicional no existe, sólo existe el ancestral, el regional y el industrial. La diferencia es que nosotros, como Conejo en la Luna, reconocemos al productor y la historia detrás del productor, mientras que la norma reconoce los artefactos con los que se hace mezcal y no a las familias que han hecho mezcal por más de 300 años, sus tradiciones, costumbres y cultura del mezcal, que está dentro del ADN de la sociedad de donde proviene esta bebida. No nada más se trata de hacer un destilado y venderlo: forma parte de los pueblos de quienes lo producen, y nosotros, como Conejo en la Luna, rescatamos la tradición”.
Cultura del mezcal
De esta forma, mezcal Conejo en la Luna, proyecto creado por tres hermanos, entre ellos Jesús Sánchez, que tenían el mismo deseo de difundir la cultura del mezcal por todo México, comenzaron a buscar productores de diferentes partes del país para no solo ofrecer mezcal de una sola región.
“Fuimos a buscar productores, hicimos una revisión de sus costos, de cómo fabricaban, cuánto fabricaban y en cuánto lo vendían. Le pusimos un sobreprecio y, sobre ese, nosotros les pagamos, tratando de darle un poco de sustentabilidad a la cultura del mezcal, porque si tú regateas para sacar el mejor provecho económico, el productor se va. Por el contrario, si les pagas de manera justa, ellos mejoran su calidad y mantienen la cultura de la producción del mezcal«.
«Nosotros hicimos una selección alrededor del país y ahora tenemos maestros mezcaleros de Oaxaca, San Luís Potosí, Guanajuato, Estado de México, Durango y Chihuahua. Tratamos de buscar la tradición en cada región, trayendo ese pedacito de México a Conejo en la Luna y podérselo ofrecer a nuestros clientes”, nos dijo Jesús Sánchez.
Mezcalería Conejo en la Luna
Mezcalería Conejo en la Luna nació justo a un costado de la pirámide del Sol de Teotihuacan en 2017, y llegó como concepto a Ciudad de México a finales de 2021 con la finalidad de seguir expandiendo la cultura del mezcal.
Está ubicado dentro del Hotel María Condesa, en la calle de Atlixco de la colonia Condesa, donde podrás encontrar un relajante espacio que te invitará desde aprender a beber mezcal y conocer sobre su lugar de origen, hasta disfrutarlo en coctel y maridarlo con deliciosa gastronomía.
“Parte de lo que nosotros promovemos es enseñarles a los clientes cómo degustar el mezcal. Por ello, la gastronomía que tenemos es comida tradicional mexicana y prehispánica, como gusanos de maguey, escamoles, chapulines, y hormigas chicatanas de Oaxaca. Además, parte de nuestros ingredientes los cultivamos nosotros, y también estamos incorporando quesos de Michoacán, de la zona de La Ruana, al igual que excelentes cecinas y chorizos de Tenancingo, en el Estado de México”, nos antojó Jesús.
Nosotros probamos una deliciosa ensalada Caprese con vegetales frescos, y una cecina de Uruapan y queso de La Ruana del Alto Michoacán, que nos encantó probar con un mezcal de maguey Cupreata de Michoacán.
¿Cómo se bebe el mezcal?
Seguramente ya has escuchado que el mezcal se bebe a besitos… sí, si es la primera vez que pruebas este espirituoso, debes comenzar con calma, nada de shots de un solo trago, ya que hay que tenerle respeto por la cantidad elevada de alcohol que contiene.
“El mezcal es fuerte, esa es una de sus características. No existen los mezcales suaves o por lo menos, no en los mezcales tradicionales. Eso es un mito. Los mezcales tradicionales se miden de 45 a 55 grados de alcohol y tienen una característica muy particular: las perlas que se forman al dejar en caída libre el alcohol y forman una especie de espuma. Ese perlado es una característica del propio alcohol que marca el volumen que contiene, así se guían los productores tradicionales. Nosotros solo promovemos mezcales tradicionales, así que todos poseen de desde 48 a 55 grados de alcohol”, nos explicó Jesús Sánchez.
En Mezcalería Conejo en la Luna recomiendan que primero le des un traguito a tu vaso de mezcal y enjuagues brevemente, sacando el aire por tu nariz, para que puedas percibir su intensidad y notas. Así, los demás tragos no sean tan intensos al paladar. Si es tu primera vez con el mezcal, lo ideal es comenzar con coctelería.
“Para los que son miedosos al mezcal –por creer que se pondrán la borrachera de su vid–, les recomendaría que empiecen con coctelería, que lo vayan conociendo a través de ella y definitivamente les va a gustar. Cuando ya sean masters en la coctelería, bébanlo derecho y que sea mezcal tradicional. El derecho lo pueden acompañar con fruta, como la naranja, ya que su dulzor equilibra la intensidad del mezcal. Ya cuando sean unos “expertazos” cien por ciento, un buen vaso de mezcal acompañado solo con agua simple. El mezcal está de moda pero hay que saberlo tomar”, compartió Jesús.
Coctelería ancestral
En tu próxima visita a la Mezcalería Conejo en la Luna, te recomendamos pedir la mezcazuela, la cual emula a los cantaritos tradicionales de tequila, el cual se bebe en una cazuelita de barro y se acompaña de cítricos como naranja, toronja y limón. También revisa los cocteles del mes; todos son innovadores, refrescantes y muy divertidos, como La guillotina, preparado a base de sandía, mezcal arroqueño de Oaxaca y frutos rojos y miel de agave.
No le pierdas la pista a Mezcalería Conejo en la Luna, ya que Jesús Sánchez nos compartió que tiene planes de llevarla próximamente al sur de Ciudad de México, en San Ángel, y exportar los mezcales mexicanos a Estados Unidos y Medio Oriente.
“Si llego a vender 100 mil litros de mezcal al año, yo soy feliz. Actualmente, con la cantidad de maestros mezcaleros que trabajamos, tenemos capacidad para eso y para un poquito más. Hoy estamos para mantener la cultura y la calidad, y no por la cantidad”.
Conoce más de los mezcales de Conejo en la Luna y no olvides preguntar por sus eventos y catas especiales. Dónde: Esquina, Atlixco y Campeche 132, Condesa. Cheque Promedio: $650 por persona. IG: @conejoenlalunacondesa
También te recomendamos leer Productores y empresarios fortalecen la indistrua del mezcal en México.