El que antes era un sitio para apaciguar tus antojos de chocolate, hoy ha ampliado sus horizontes para ofrecer otro tipo de experiencias en la colonia Condesa. Hablamos de Tout Chocolat que remodeló su boutique para ofrecer un área de comedor.

En este sitio con mesas, sillas y un diseño acogedor, no sólo existirá un sitio tranquilo para disfrutar de deliciosas bebidas preparadas a base de cacao y café, sino que cada tres meses invitará chefs que, en conjunto con el cocinero de la casa, Luis Robledo, prepararán cenas especiales.

 

Cenas en Tout Chocolat

 

Estas cenas utilizarán el cacao como un ingrediente diferenciador en los platillos ofrecidos, como el ceviche de totoaba con mucilago de cacao, yuzu, jengibre y habanero, que probamos en la apertura de esta temporada de cenas en Tout Chocolat.

En conjunto con el chef pastelero Jason Licker, Luis Robledo preparó también un arroz cremoso con salmón confitado en manteca de cacao y pecanas, y un egg roll elaborado de confit de pato con cacao y ciruela.

 

Cenas en Tout Chocolat

 

Por su parte, Jason Licker nos impresionó con tres momentos dulces: una crema de sake con frutos rojos, cítricos y toffee salado; una tarta de matcha en grado ceremonial y crema de chocolate; y un créme brûlèe de vainilla, frambuesa y yuzu.

Entérate de las próximas cenas en Tout Chocolat siguiendo sus redes sociales. El costo será anunciado allí mismo, ya que variará de acuerdo al chef invitado. Horarios: Lunes a Sábado de 8:00 am a 20:00 horas; Domingos de 10:00 a 16:00 horas. Dónde. Amsterdam 154, Hipódromo. Teléfono: 5211-9840. @ToutChocolat_Mx, toutchocolat.mx

 

Cenas en Tout Chocolat

 

 

También checa Chocolate, bocados místicos. 

Barry Callebaut es reconocido en el ámbito mundial por ser un productor de cacao y chocolate de alta calidad. La presencia de la marca en México lleva ya varios años, pero es la primera vez que trae al país productos de su línea Orígenes Callebaut: Sao Thomé y Brazil.

La presentación se realizó en el hotel Camino Real de Polanco, en el restaurante China Grill. Allí, los chefs Luis Robledo, director de la Chocolate Academy de México, y Maricú Ortiz, embajadora de la marca, ofrecieron una serie de postres, bombones y otras delicias preparadas con los dos chocolates. Tanto Luis como Maricú decidieron que Sao Thomé y Brazil fueran los primeros de la línea Orígenes Callebaut en llegar a México.

Callebaut

Sao Thomé es un chocolate de África elaborado con cacao forastero a 70%. Es amargo con una gran concentración de cacao. En nariz se percibe ligeramente especiado, tostado, con un toque de café con leche. En boca, la primera impresión es dulce con un amargor marcado, que se complementa con notas a frutos negros confitados, flores y granos de café. Para éste prepararon un chocolate con una ganache de té, aunque comentaron que le quedaban bien combinaciones con arándano, limón, tomillo, fruta de la pasión, caramelo, vinagre balsámico, cardamomo, queso de cabra, plátano o pimienta de Sechuán.

Por su parte, Brazil se elabora con cacao trinitario y forastero a 66.8%. Obviamente proviene de la nación carioca y lo más representativo es su intenso sabor a cacao, aroma penetrante. Algunas notas a frutas tropicales frescas, en especial de plátano verde, y al final se perciben alguno toques ahumados con un amargor bien marcado.

Para éste se creó un chocolate con una ganache de maracuyá, el cual combina bien con frutas tropicales como plátano, piña, guayaba y coco. Aunque también se puede probar con miel, almendras, cacahuates y cáscara de naranja.

Callebaut

La serie de nuevos productos de Callebaut

Para completar la serie de nuevos productos de Callebaut, los chefs mostraron las Minicrispearls mixtas, una mezcla de perlas de chocolates amargo, de leche y blanco con corazón crujiente. Minichocrocks, trocitos irregulares de chocolate amargo para decorar postres. Y la Creme dell’ Artigiano Nocciola, una crema de avellana lista para su uso. Esta última es ideal como relleno en panadería y pastelería, pues no pierde su consistencia ni se quema, así que es posible usarla para antes o después de hornear como betún, inyectado en preparaciones, como relleno de bombones o simplemente como decoración.