Santiago de Querétaro seduce a través de la mirada y el paladar. En su centro histórico, la vista se colma con numerosos ejemplos de arquitectura virreinal que dejan claro por qué fue nombrado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. La ciudad, además, da cabida a las propuestas gastronómicas más diversas que en los últimos años se han multiplicado y que, maridadas con los vinos de la región, hacen salivar a cualquier comensal. Te compartimos aquí cuatro recomendaciones pensadas en los foodies y amantes del arte en busca de lo mejor de Querétaro. Fotos: Charly Ramos

 

Lugares de Querétaro que ni los foodies ni los amantes del arte se pueden perder

 

Casa del Atrio: rodeado de maravillas

 

Si estás en el centro histórico de Querétaro, y quieres que el deleite visual no termine al llegar a tu hotel, Casa del Atrio es el lugar donde debes hospedarte si te consideras parte del grupo de amantes del arte. En este hotel boutique & spa, las plantas, antigüedades, piezas de arte y diseño que inundan cada rincón, hacen que el lugar se sienta a medio camino entre una galería de arte y un gabinete de curiosidades

 

Hotel Casa del Atrio

 

En la recepción, la selección de libros delata el gusto de los dueños por el arte y los viajes, lo que explica la ecléctica colección proveniente de lugares tan diversos —México, Grecia, China y África, entre muchos más. Un Krishna tallado en roble se encuentra al lado de un autobús de barro michoacano, mientras que un cuadro de la Virgen María comparte la vitrina con una mandolina en miniatura. Catalejos, cuchillos, balanzas, vasijas, lámparas, litografías y joyería son parte de la colección; si te internas en sus pasillos, fuentes y jardines, encontrarás detalles y piezas de arte escondidas por doquier. 

Hospédate en cualquiera de sus 17 tranquilas habitaciones, todas con un diseño único que se acompaña de arte abstracto, expresionista, dibujo y más. Al despertar, disfruta del desayuno en cualquiera de sus tres jardines —te recomendamos el del plúmbago— y renuévate en su spa antes de salir a pasear a las plazas principales de la ciudad, a solo dos minutos caminando. ¿Qué más puedes pedir?  Habitaciones: Desde $1,950 pesos.

 

Centro histórico y Diligencias: ruta para disfrutar del arte

 

Justo frente al hotel Casa del Atrio, se encuentra uno de los ejemplos más sobresalientes de arquitectura barroca en toda América: el exconvento de San Agustín, ahora Museo de Arte de Querétaro. Es conocido por muchos como “el edificio que canta”, por los ángeles tocando instrumentos que adornan sus columnas, pero quizá también porque el fino tallado en cantera de su claustro parece sobrepasar los límites de la materialidad y del arte. 

 

Querétaro para foodies y amantes del arte

 

Como este, existen muchos otros edificios en el centro histórico de Querétaro que demuestran la magnificencia del arte virreinal —el Antiguo Oratorio de San Felipe Neri o el exconvento de San Francisco de Asís, por solo mencionar algunos— y que hacen de un paseo a pie por sus calles una de las actividades más disfrutables. No te pierdas del templo sui géneris Santa Rosa de Viterbo y aprovecha que estás en la zona para hacer una parada en Punto Cero, la tienda del Clúster vitivinícola de Querétaro en donde puedes comprar etiquetas de las 30 bodegas y viñedos de la región. Perfecto para los foodies en busca de souvenirs.

El complemento perfecto de tu visita al centro histórico de Querétaro es un paseo con Diligencias, que parte de la Plaza de Armas y te ofrece un recorrido guiado por la historia de la capital a bordo de un vehículo eléctrico que es réplica del modelo Ford T 1908. Cuenta con tres rutas distintas, cada una con una duración aproximada de 45 minutos, un tiempo más que suficiente para que los amantes del arte se sientan satisfechos. Costo: $200 pesos. 

 

Tour en Querétaro Diligencias

 

 

Carola Terraza: el nuevo spot favorito de los foodies

 

También en el corazón de la ciudad de Querétaro, Carola Terraza cautiva a los foodies al dar un paso adentro. Sus salones con distintos ambientes tienen en común una cuidada propuesta de diseño interior, con colores neutros y piezas artesanales de barro, madera, ladrillo, piedra y mimbre. Se coronan con una terraza con vistas al centro histórico que es el escenario ideal para disfrutar de excelentes propuestas gastronómicas a cualquier hora del día  —¿alguien dijo DJs y música en vivo los fines de semana

 

Restaurante Carola

 

Su cocina rinde homenaje a los sabores mexicanos con técnicas culinarias internacionales, entre las que destacan la japonesa y la francesa. A nuestra mesa llegó un fresco amuse: un karague de huauzontle con pipián rojo y salteado de quelites y pápalo. Le siguió una ensalada con jitomate, sofrito de kale, ricotta de almendra hecho en casa y esferificaciones de xnipec. El plato fuerte, llamado Costas de Guerrero e inspirado en la gastronomía de Barra Vieja, nos deleitó con una trucha salmonada envuelta en hoja santa, con ayocotes y un mole verde al estilo Guerrero. Los postres fueron el colofón que terminó de demostrar que probablemente cualquier platillo de su extenso menú sea garantía de satisfacción, en especial para los foodies

Carola Terraza se encuentra dentro de Casa Santiago Hotel Boutique, con 19 habitaciones en las que la artesanía queretana y mexicana también se hace presente. Habitaciones: Desde $1,570 pesos. CH. en Carola Terraza: $600 pesos.

 

Cao Cao, honrando a Querétaro y su cocina

 

Con una panadería, una pozolería y dos restaurantes en la capital, el chef Israel Soriano pone en alto la gastronomía de Querétaro. Originario de la Ciudad de México, este cocinero autodidacta enamorado del estado es presidente de Cocineros Queretanos. “Querétaro tiene mucho potencial gastronómico por ser una región vinícola, por ser productores de queso y por la riqueza de su cocina tradicional”, nos dice antes de describirnos algunos de los platillos regionales: nopal en penca, chivo tapeado, pollo en cuñete, gallina briaga, conejo al pulque, camote achicalado, caldo de buey y gorditas de maíz quebrado

En uno de los barrios históricos de Querétaro, frente a la antigua estación del tren, se levanta desde hace seis años uno de sus restaurantes, el cual los foodies no pueden dejar de visitar: Cao Cao. Este establecimiento pet friendly, casual y relajado, tiene como slogan “Somos un café buena onda”, y lo cumple tanto en su ambiente como en los platos que llegan a la mesa. 

 

Querétaro para foodies y amantes del arte

 

Comfort food con un toque creativo y productos de la mejor calidad” es como el chef Israel describe la propuesta de Cao Cao que te cautivará al primer bocado. 

Otra de las bondades del lugar es que puedes experimentar sus sabores de una forma innovadora a través de la cena Sentidos Vivos, organizada por Ruta Incluyente, promotora turística que ofrece recorridos guiados y experiencias gastronómicas para personas con discapacidad visual, auditiva y motriz. En Sentidos Vivos, los comensales (sean foodies o amantes del arte) se vendan los ojos antes de entrar al restaurante y degustan así los cuatro tiempos sorpresa del menú, guiados por una persona con discapacidad visual. Mayor atención y concentración en los olores, sabores y texturas, y sobre todo, sensibilización frente a la discapacidad, son los regalos de esta experiencia. CH en Cao Cao: $300 pesos. Cena Sentidos Vivos (cuatro tiempos con maridaje): $1,300 pesos.

Incluye estos planes en tu itinerario de foodies y amantes del arte para seguir enamorándote de la ciudad de Querétaro. Mejor aún, organiza una escapa larga que, además de la capital, incluya distintas regiones como Amealco de Bonfil y Bernal. No te vas a arrepentir.

Redescubre esa tierra virreinal con paisajes semidesérticas, bosques y sierras llamada Querétaro a través de una importante pirámide, una fábrica de puros, un festival cultural y rincones clásicos y por descubrir en la Ruta del Arte, Queso y Vino. Estos son nueve motivos (más) para viajar a Querétaro. Fotos: Cortesía SECTUR Querétaro; Elsa Navarrete. 

Viajar a un terruño tan querido como Querétaro siempre es un placer. Según el Instituto Cervantes, en la celebración del idioma castellano en 2011, la palabra más bonita del español fue… Querétaro.

Y no lo dudo, ya que al igual que el actor mexicano Gael García, quien propuso este término a concurso, considero que estas cuatro sílabas resultan de lo más armónicas, pero no solo eso, están cargadas de productos endémicos, como sus vinos y quesos, de emprendedores y de sitios imperdibles entre paisajes semiáridos. Aquí te damos más motivos para viajar a Querétaro, que se encuentra a solo dos horas de Ciudad de México.

 

1. Acudir a Hay Festival

 

Viajar a Querétaro

 

Aprovecha que se celebrará del 1 al 4 de septiembre la séptima edición de Hay Festival para viajar a Querétaro y disfrutar de su oferta cultural, turística y gastronómica. Por primera vez, estará presente en los municipios de Ezequiel Montes, Corregidora y Tequisquiapan, además de la capital del estado. Su programa constará de 94 actividades en disciplinas como literatura, música, cine, arte, ciencia, periodismo y derechos humanos.

Participantes de 15 países darán vida a diversos eventos, presentaciones, talleres y conciertos en museos, jardines y centros artísticos y culturales. Los boletos podrán adquirirse en la página web del festival o a partir del 29 de agosto en el Teatro de la Ciudad. Sin embargo, los habrá gratuitos como Hay Festivalito —para niños—, Hay Joven —para jóvenes— y Hay Delegaciones, entre otras actividades.

 

2. Recorrer el Pueblo Mágico de Bernal

 

Una de las sedes de Hay Festival es Bernal, reconocido por su riqueza arquitectónica, natural y cultural. En el primer Pueblo Mágico de Querétaro haz recorrido en tranvía de una hora para conocer al tercer monolito más grande del mundo que se levanta en un Área Natural Protegida y come una tradicional gordita de maíz quebrado rellena de queso enchilado.

 

Viajar a Querétaro

 

¿Dónde hospedarse en Bernal? De sus 130 alojamientos, Casa Mateo es otro de los motivos para viajar a Querétaro. Ofrece 18 habitaciones en una casona del S. XVIII, una piscina y una gran vista a la Peña, así como cocina mexicana gourmet y 150 etiquetas de vinos queretanos. Es más, este hotel boutique ya está haciendo su propio vino llamado Tiberivs y próximamente tendrá su viñedo.

 

3. Admirar la arquitectura del Museo de Arte de Querétaro

 

Uno de los espacios culturales a visitar en la capital del estado es el Museo de Arte de Querétaro alojado en el exconvento de San Agustín. Con cantera gris tallada, su patio barroco novohispano es considerado uno de los más bellos de Latinoamérica y éste es un motivo (más) para viajar a Querétaro.

Su edificación se remonta al S. XVIII y en 1987 fue declarado Patrimonio Cultural de la nación por el expresidente Miguel de la Madrid. Hoy en día, tras las restauraciones, cuenta con salas de exhibición permanentes y temporales que albergan obras manieristas, barrocas, neoclásicas y modernas.

 

4.- Descubrir la Zona Arqueológica El Cerrito

 

¿Sabías que en Querétaro hay una pirámide? En el municipio de Corregidora, otra de las sedes de Hay Festival, no solo hay un basamento piramidal, sino que se trata del centro ceremonial prehispánico más importante del centro norte de México, a solo siete kilómetros del Centro Histórico de Querétaro.

 

Viajar a Querétaro

 

Descubre la Zona Arqueológica El Cerrito que, con un basamento piramidal de 30 metros de altura —más alta que Chichén Itzá—, cuenta con dos peculiaridades. Una de ellas es que dos de sus caras aún siguen cubiertas por la vegetación del cerro, mientras que la segunda es el fortín construido en la parte alta de la pirámide por los entonces propietarios de la exhacienda El Cerrito en 1876.

Por último, no te pierdas una visita a su nuevo Museo de Sitio para conocer más sobre las culturas que lo ocuparon este centro de adoración como la tolteca y la chichimeca.

 

5. Volver a Tequisquiapan

 

Ningún viaje a Querétaro está completo sin haber visitado Tequisquiapan una sede más de Hay Festival, conocida por sus minas de ópalo, la cestería tradicional, vuelos en globo al amanecer y los viñedos de sus alrededores.

Después de hacer un recorrido en su pintoresco centro a bordo del clásico de Tranvía de Tequis, visita a unos cuantos pasos la pequeña vinícola Viña Tx que cuenta con un lúdico viñedo en parra, perfecto para conocer 15 variedades de uvas y tomarse las mejores fotos.

 

Tequisquiapan

 

 

6. Hacienda Atongo

 

Con casi 370 años de historia, Hacienda Atongo es un motivo más para viajar a Querétaro. Se trata de un idílico complejo campirano que ofrece un hotel boutique con 14 habitaciones ataviadas con elementos originales de la época, el Restaurante 1651 con mesas entre la vegetación del patio principal, viñedos y un amplio portafolio de experiencias como cata de sus vinos en la cava, recorridos en los viñedos, para niños, teatralizados y en bicicleta, experiencia ecuestre y días de campo.

En esta hacienda colonial, terminada de construir en 1651 y restaurada totalmente, disfruta del encanto histórico, mientras degustas su reconocido vino Lavino Malbec con 18 meses en barrica. ¡Su gusto aterciopelado te encantará!

 

Hacienda Otongo

 

 

7. Visitar la Real Fábrica de Tabaco

 

Sí, en Querétaro también se producen puros y ésta es otra razón para viajar a Querétaro. En la Real Fábrica de Tabaco conoce la historia del puro en México, así como cada detalle del proceso artesanal de sus puros en un tour de una hora.

Entre naturaleza semidesértica y un exquisito diseño, se alzan sus instalaciones donde destaca un agradable patio —ahí puedes degustar un puro y acompañarlo con un vino de venta en su boutique—, y la sala donde se encuentran trabajando los torceadores de origen veracruzano (San Andrés Tuxtla) que confeccionan uno a uno los puros con tabaco de Los Tuxtlas para sus líneas Black Cházaro y Habana Cházaro y con el que cultivan en Bernal para su línea Peña Blanca.

 

Fábrica de Puros

 

 

8. Probar deliciosos quesos en Cava Bocanegra

 

Otro de los motivos para viajar a Querétaro es conocer Cava Bocanegra, donde maduran los quesos artesanales Néole, con 16 años de experiencia. Reserva previamente una visita guiada para descubrir su cava que se encuentra a cinco metros bajo tierra y que puede contener 1,500 quesos, mientras te explican sobre la producción de sus 16 tipos de quesos madurados y su proceso.

Luego, en en su hermosa terraza serás parte de una degustación de quesos con cerveza o vino, en la que el amable personal te compartirá tips para combinar el sabor de sus quesos —como el excelso Virgen de Lourdes, reconocido por su consistencia firme pero algo elástica— con aceitunas, ate, manzana y miel.

 

cava de quesos

 

 

9. Hacer una nueva actividad enoturística en Freixenet México

 

Freixenet México es la bodega más grande de vino espumoso en México y una de las más importantes en América Latina. Y este clásico de la Ruta del Arte, Queso y Vino es otra razón para viajar a Querétaro.

Si ya hiciste la visita clásica, donde te sumerges en su cava a 25 metros de profundidad y degustas un vino, ahora puedes hacer otra de sus actividades enoturísticas como un recorrido por los viñedos en tranvía, una cata de tres vinos acompañados de tapas y una cabalgata entre viñedos.

No dejes de llevarte a casa una botella de Sala Vivé Brut Rosé y asistir a alguno de sus eventos anuales como la Fiesta de la Vendimia y el Festival de la Paella.

 

Freixenet

 

¿Listo para viajar a Querétaro y maravillarte con el segundo destino sin playa más visitado de México?