Las consolidadas listas de la UNESCO son más que un recordatorio de la cultura de la humanidad en el mundo. Su existencia son notas para la memoria histórica, cultural y natural de las sociedades del planeta y para la paz. De hecho, desde su fundación en 1945, el objetivo de la UNESCO se resume en la consolidación de la paz y la conservación del patrimonio que une a las distintas culturas humanas. Fotos: Unsplash y Pixabay.
Lo anterior lo ha continuado incluso durante periodos de crisis, de ahí que la lista de Patrimonios Culturales Intangibles de la Humanidad tuviera nuevas inscripciones aún durante la pandemia. Aquí te contamos siete recientes, todas relacionas con la cultura culinaria.
Bortsch, Ucrania
Inscrito apenas este 2022, el borscht es un platillo tradicional ucraniano de color rojo intenso. Los principales ingredientes de este plato de cuchara son dos distintas clases de betabel y el jugo fermentado del mismo. Va usualmente acompañado de pan de ajo.
Como habitualmente sucede con las recetas, el bortsch tiene muchas variantes dependiendo de la región en donde se prepara, mismas que se han consolidado de generación en generación.
De acuerdo con la UNESCO, el borscht es considerado parte de la lista de Patrimonios Culturales Intangibles debido a que es una expresión de hospitalidad que reúne a las comunidades, y – en ciertas áreas de Ucrania- es un platillo para celebraciones de boda y funerales.
Ceebu Jën, Senegal
Hace un año, las comunidades de pescadores de la isla Saint-Louis en Senegal celebraron la incorporación del Ceebu Jën en la lista de Patrimonios Culturales Intangibles de la Humanidad de la UNESCO.
Esta receta se considera parte de la identidad de Senegal y tradicionalmente consiste en una mezcla de pescado fresco y seco, arroz, moluscos, cebolla, ajo, perejil, chile, jitomate, berenjena, col, camote, mandioca, laurel y el vegetal okra.
Al comerlo, es necesario seguir algunas normas importantes: no cruzar las piernas, detener el plato con la mano izquierda y asegurarse que ningún grano de arroz sea desperdiciado.
«Caza» y extracción de trufas, Italia
«Cazar» y extraer trufas en Italia es una práctica cuyo conocimiento se ha transmitido oralmente durante siglos. A quienes se dedican a esto, se les conoce como tartufai y ellos resguardan la tradición en áreas rurales del país.
Los tartufai conocen el suelo, cómo cuidarlo, al medioambiente que los rodea, y las prácticas más adecuadas para preservar la biodiversidad de la región y cosechar las trufas que se utilizan en diversos platillos del país y el mundo.
Esta práctica también fue incluida recientemente en la lista de Patrimonios Culturales Intangibles de la Humanidad.
Pesca charfia, Túnez
A diferencia de otras técnicas de pesca, la que se practica en las Islas Kerkennah en Túnez, es sustentable. Esto se debe a su estructura triangular con hojas de palma, las cuales únicamente operan durante el equinoccio de otoño y junio.
Cada año la comunidad crea nuevas charfias, lo que conlleva rituales y celebraciones. La lista de Patrimonios Culturales de la Humanidad de la UNESCO, la incluyó en el 2020 también gracias a que para dedicarse a la pesca, los locales deben de entrenar y aprender sobre corrientes marinas y topografía.
Ftira, Malta
Todo el archipiélago de Malta tiene al ftira en común. Se trata de un pan largo, redondo, con un hueco al centro, plano, de corteza gruesa pero de textura suave al interior, que suele ir relleno de ingredientes mediterráneos.
La importancia de este pan es tal, que los panaderos locales siguen preparándolo a mano y existen distintos programas y cursos para aprender a hacerlo de forma correcta. De ahí que haya sido incluido en el 2020 en la lista de Patrimonios Culturales Intangibles.
Terere, Paraguay
También inscrito hace dos años, está el terere y las prácticas tradicionales que le rodean. El Terere es una bebida ancestral en Paraguay hecha con agua y Pohã Ñana, una planta medicinal que se combina con yerba mate.
Prepararlo y beberlo es todo un ritual, cuya tradición existe desde el siglo XVI. Gracias a estos rituales, los lazos de amistad, respeto y solidaridad en las comunidades se refuerzan.
Couscous, Algeria, Marruecos, Túnez y Mauritania
En estos cuatro lugares del mundo, preparar couscous es un acto ceremonial con distintas fases. Las cuales comienzan con la cosecha del cereal. Después, la obtención de las semillas y su triturado, así como la cocción de las mismas es hecha con herramientas particulares de arcilla y madera.
Más allá de un platillo, el couscous es un símbolo de solidaridad y comunidad. De ahí que la UNESCO la considerara para incluirlo en la lista de Patrimonios Culturales Intangibles de la Humanidad en el 2020.
Aquí te compartimos lugares en México que son parte de otra lista de la UNESCO para el Patrimonio de la Humanidad.