Pan de chocolate

 

Ten cuidado de no hornear demasiado los panes, ya que el interior debe estar húmedo.

 

Porciones: de 8 a 12.

 

Ingredientes

 

  • 280 g de chocolate 50% cacao, picado
  • 480 ml de buttermilk o suero de mantequilla hecho en casa
  • 280 g de harina de trigo, más extra para espolvorear el molde
  • 60 g de cocoa en polvo, más extra para espolvorear el molde
  • 1 ¼ cdtas. de polvo para hornear
  • ¼ cdta. de bicarbonato de sodio
  • 340 g de mantequilla sin sal, más extra para engrasar el molde
  • 200 g de azúcar granulada
  • 200 g de azúcar mascabado
  • 5 huevos grandes
  • 2 moldes de panqué de 21.5 x 11 cm

 

Procedimiento

 

  1. Precalentar el horno a 165 ºC con la parrilla puesta en medio. Engrasar los dos moldes de pan y cubrir ligeramente con una mezcla de cocoa y harina. Colocar 170 gramos de chocolate en un recipiente resistente al calor y reservar. Calentar el suero de mantequilla en una cacerola pequeña a fuego medio.
  2. Añadir el chocolate del tazón y esperar hasta que se derrita. Batir hasta obtener una consistencia suave y dejar enfriar a temperatura ambiente.
  3. Mezclar la harina, la cocoa, el polvo para hornear y el bicarbonato de sodio en un tazón. Integrar la mantequilla y los azúcares con ayuda de una batidora eléctrica equipada con el accesorio de paleta a velocidad media, durante unos cinco minutos, hasta que esté suave y esponjosa.
  4. Agregar los huevos, uno a la vez, batiendo bien después de cada adición. Incorporar la mezcla de harina, un tercio a la vez. Alternar con la mezcla de chocolate, y batir suavemente hasta que todos los ingredientes estén completamente combinados.
  5. Añadir los 110 g restantes de chocolate picado a la mezcla. Transferir la mezcla a los moldes preparados y hornear los panes durante aproximadamente una hora, hasta que, al insertar un palillo en el centro, este salga con pocas migajas.
  6. Tener cuidado de no hornear demasiado los panes ya que el interior debe estar húmedo. Dejar enfriar por completo antes de servir.

 

 

Galletas con chispas de chocolate

No hay alimentos buenos ni malos; todo tiene que ver con dar las porciones adecuadas y cuidar la alimentación del resto del día.

 

Porciones: 36 galletas aproximadamente.

 

Ingredientes

 

  • 420 g de harina de trigo
  • 120 g de almendras, molidas
  • 300 g de azúcar mascabado
  • 100 g de azúcar granulada
  • 1 ½ cdtas. de bicarbonato de sodio
  • 1 cdta. de sal de mar, más 1 cdta. extra
  • 225 g de mantequilla sin sal, derretida
  • 2 huevos grandes, a temperatura ambiente
  • 2 cdtas. de extracto puro de vainilla
  • 470 g de chocolate negro, picado 2 charolas para hornear
  • Papel encerado

 

Procedimiento

 

  1. Precalentar el horno a 190 ºC. Cubrir las dos charolas para hornear con papel encerado. Batir la harina, las almendras molidas, los azúcares, el bicarbonato de sodio y la sal en un tazón mediano, reservar.
  2. Mezclar la mantequilla derretida, los huevos y la vainilla en un tazón, batiendo vigorosamente.
  3. Revolver los ingredientes húmedos con los ingredientes secos. Incorporar el chocolate, reservando un poco para la parte superior, y distribuir uniformemente por toda la masa. Formar bolas de masa con las manos.
  4. Acomodar en las charolas separadas con mucho espacio entre cada una. Hornear una charola a la vez durante 10 a 12 minutos. Retirar cuando los bordes estén crujientes, el interior suave y tenga un aspecto un poco crudo (las galletas continuarán horneándose en la charola a medida que se enfríen).
  5. Retirar del horno y espolvorear con sal, si se desea. Dejar enfriar en la charola durante al menos 2 minutos antes de transferir a un plato para compartir.

Pastel helado de frambuesa

 

Refrescante y lleno de sabor, es un postre encantador para tener una comida perfecta.

 

Porciones: de 6 a 8.

 

Ingredientes

 

  • 10 galletas de oblea de chocolate, finamente trituradas (Disponibles en amazon.com)
  • 2 cdas. de mantequilla sin sal, derretida
  • 360 g de frambuesas 1 cdta. de jugo de limón recién exprimido, más 1 cdta. de ralladura
  • 3 huevos grandes 2 yemas de huevo
  • 1 vaina de vainilla, las semillas raspadas
  • 200 g de azúcar 1 pizca de sal
  • 360 ml de crema para batir
  • 1 molde para pan de 21.5 x 11 cm
  • Papel encerado, para cubrir
  • Plástico autoadherente, para cubrir

 

 

Procedimiento

 

  1. Cubrir el fondo del molde con papel encerado. Mezclar las galletas y la mantequilla derretida, reservar. Colocar las frambuesas, el jugo de limón y la ralladura en una licuadora de alta potencia y moler hasta obtener un puré con consistencia completamente suave. Reservar.
  2. Combinar los huevos enteros, las yemas, la vainilla, el azúcar y una pizca de sal en un recipiente a prueba de calor sobre una olla de agua hirviendo, de manera que el recipiente no toque el agua.
  3. Cocinar a fuego medio durante 5 minutos, moviendo hasta obtener una consistencia gruesa y de color pálido. Retirar del fuego y trabajar en una batidora eléctrica de 2 a 3 minutos más, hasta que la mezcla sea espesa y se encuentre fría.
  4. Batir la crema durante 2 o 3 minutos, hasta que se formen picos suaves. Añadir suavemente la mezcla de huevo a la crema, teniendo cuidado de mantenerla ligera y aireada. Separar 480 mililitros de esta mezcla, colocar en un tazón y añadir el puré de frambuesa hasta que tenga un color rosa uniforme.
  5. Mezclar las dos cremas en el molde con ayuda de dos cucharones, alternando entre la crema de vainilla y frambuesa. Es posible dejarlo así para una apariencia más moderna, o bien usar un cuchillo delgado para rayar y unir las dos cremas en algunos lugares antes de que se fije.
  6. Cubrir con plástico autoadherente y congelar por aproximadamente 1 hora, hasta que comience a endurecerse. Cuando el postre se haya endurecido un poco y no se mueva, espolvorear algunas migajas de chocolate con mantequilla de manera uniforme sobre la parte superior. Formar una costra y presionar ligeramente.
  7. Congelar durante al menos 2 horas hasta que esté completamente listo. Para servir, sumergir una espátula en agua tibia y girar el pastel sobre un plato frío. Rebanar y servir. Devolver al congelador si hay algún sobrante y reservar para una segunda ronda.

 

 

Espagueti con tocino y albóndigas de sopressata

 

Para ellos es súper divertido comer espagueti, pero lo será aún más si te ayudan con la preparación.

 

Porciones: de 4 a 6.

 

Ingredientes

  • 2 rebanadas de pan blanco de buena calidad, sin orillas
  • 80 ml de leche, caliente
  • 910 g de carne molida de res
  • 2 rebanadas de tocino, picado
  • 4 rodajas finas de sopressata, salami o una mezcla de ambas, picadas (Disponible en cornershopapp.com)
  • 2 dientes de ajo, machacados ¼ de cebolla blanca, finamente picada
  • 3 huevos grandes, ligeramente batidos
  • 25 g de queso manchego o queso italiano, rallado, más extra para servir
  • 2 cdas. de hojas de perejil frescas, picadas
  • ½ cdta. de pimienta negra recién molida, más extra para servir
  • ½ cdta. de sal de mar, más extra para salsa
  • 2 cdas. de aceite de oliva virgen extra, más extra para la salsa
  • 1 lata de 800 g de jitomates pelados (Disponible en superama.com.mx)
  • 1 ramita de albahaca fresca (opcional) 1 paquete de espaguetis Charola para hornear

 

Procedimiento

 

  1. Colocar el pan en un tazón grande y remojar con la leche, girando las rebanadas para que absorban el líquido. Transferir a una tabla y picar finamente.
  2. Mezclar el pan, la carne molida, el tocino, la sopressata, el ajo, la cebolla, los huevos, el queso, el perejil, la pimienta y la sal en un tazón. Revolver suavemente con las manos limpias hasta que todos los ingredientes estén completamente combinados.
  3. Formar albóndigas de entre 2.5 y 5 centímetros y colocar en una charola para hornear. Enjuagar tus manos de vez en cuando con agua fría para evitar que la carne se pegue. Reposar mientras se prepara el resto de los ingredientes.
  4. Calentar el aceite en una sartén grande. Incorporar las albóndigas en una sola capa, trabajando en lotes si es necesario. Freír las albóndigas, dejándolas cocinar sin mover hasta que estén uniformemente doradas, durante aproximadamente 3 minutos por lado.
  5. Verter más aceite a la sartén si es necesario. Utilizar unas pinzas para evitar aplastar las albóndigas. Transferir a un plato y reservar.
  6. Agregar los jitomates a la sartén caliente, machacar con un aplastador de papas o un tenedor para romper todos los trozos grandes. Raspar el fondo de la sartén para incorporar todos los trozos dorados de las albóndigas.
  7. Agregar la albahaca (si se utiliza), sal y un poco de aceite. Cocinar la salsa a fuego bajo durante unos 30 minutos, hasta que sea espesa. Retirar del fuego y reservar. Cocinar los espaguetis en agua hirviendo con sal hasta que estén al dente.
  8. Añadir las albóndigas a la salsa para que se calienten. Dividir los espaguetis en platos o tazones poco profundos, colocar una porción generosa de salsa y algunas albóndigas encima. Finalizar con un poco de queso rallado y un toque de pimienta negra. Servir.

Risotto con elote, zanahorias y col rizada

 

Revolver las verduras en el risotto es una buena forma de que se las coman sin ningún problema. Sírvelo en tazones divertidos y agrega un poco de queso rallado.

 

Porciones: 4.

 

Ingredientes

 

  • 2 cdas. de aceite de oliva virgen extra, más extra para cocinar
  • 1 cebolla, finamente picada 400 g de arroz arborio, limpio
  • 1.3-1.5 l de caldo de pollo o agua tibia
  • 60 g de mantequilla sin sal
  • 1 manojo de zanahorias baby (alrededor de seis), sin tallo, limpias y cortadas a lo largo
  • 45 g de col rizada, rebanada
  • 2 elotes, desgranados
  • 15 g de queso duro italiano, rallado, más extra para decorar

 

Procedimiento

 

  1. Calentar el aceite en una cacerola a fuego medio. Agregar la cebolla y cocinar, revolviendo, durante aproximadamente tres minutos.
  2. Añadir el arroz y revolver para cubrir con el aceite. Cocinar durante un minuto más y luego agregar medio litro del caldo tibio. Sazonar al gusto y hervir. Revolver y cocinar hasta que el líquido se haya evaporado. Incorporar 120 mililitros del caldo y continuar revolviendo de 20 a 25 minutos.
  3. Verter más caldo, 120 mililitros a la vez, hasta que el líquido se haya evaporado y el arroz esté al dente. La mayor parte del líquido debe absorberse y el arroz debe cocinarse, quedando alrededor de 120 mililitros de caldo.
  4. Calentar una cucharada de aceite y una cucharada de mantequilla en una sartén grande. Agregar las zanahorias y dorar ligeramente. Incorporar suficiente agua hasta cubrir un tercio, y cocinar hasta que estén tiernas, pero sin perder su color. Añadir la col rizada y revolver durante otros cinco minutos, hasta que se marchite.
  5. Poner los granos de elote y cocinar por un minuto más, hasta que se vuelvan de color amarillo brillante, pero aún estén crujientes. Sazonar los vegetales y retirar del agua.
  6. Verter otros 120 mililitros de caldo al risotto, según sea necesario. Colocar las tres cucharadas restantes de mantequilla junto con el queso.
  7. Revolver. Mezclar los vegetales con el risotto y cubrir con vegetales calientes y un poco de queso rallado. Servir.

 

 

Madrid no pasa por un buen momento, debido a la pandemia por el Coronavirus, sin embargo, el espíritu de su gente hará que salga adelante a pesar de la crisis. Para recordarte porque es una de nuestras ciudades favoritas de Europa, hemos armado esta galería esperando te inspire a viajar en un futuro a la capital española. spain.info  Fotos: Adobe Stock. 

 

 

 

 

 

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Gracias a estos divertidos regalos para el Día del Niño podrán festejar con risas, juegos, comida saludable y viajes que alimenten la curiosidad innata de los más pequeños del hogar. Aquí te damos algunas opciones de obsequios para hacerlos aún más felices.

 

Diversión para llevar

 

Regalos para el Día del Niño

 

Mantén la frescura de la comida que le preparas a tu hijo en una lonchera Bentgo, una marca que tiene seis diseños diferentes con estampados y colores divertidos que les encantan a los más pequeños. Su distribución contempla cinco compartimientos a prueba de fugas, lo que te inspirará a crear un lunch más saludable y balanceado. Además, es resistente al movimiento por su recubrimiento de goma a prueba de caídas, así no tendrás que preocuparte por los accidentes. Costo: $747 pesos en amazon.com.mx

 

¡Hora de la autonomía!

 

regalos para los pequeños del hogar

 

Uno de los regalos para el Día del Niño que disfrutarán mucho es este reloj, agenda y fitness tracker que son las funciones del Octopus Watch, con el que los niños aprenderán a organizar su tiempo y horarios. Muestra recordatorios de los deberes y tareas programadas a través de una aplicación móvil y mide su actividad física. ¿Lo más divertido? La batería se recarga por la noche en una lámpara con forma de pulpo. Costo: $2, 235 pesos en ebay.com

 

Revolución en la granja

 

Regalos para niños

 

Otro de los regalos del Día del Niño que disfrutarán mucho tiene que ver con la hora de la comida. Por ello, haz que cada vez que estén en la mesa se sientan en un día de campo con estos manteles individuales que muestran caritas sonrientes de animalitos de la granja. Estamos seguros de que les alegrarás el día y les harás disfrutar más de sus alimentos. Al estar hechos 100% de plástico, serán muy fáciles de limpiar y su tamaño es de 36 x 36 centímetros. Costo: $159 pesos cada uno en zarahome.com

 

Futuros arquitectos

 

Qué regalar el Día del Niño

 

¿Sabes qué es lo que tu pequeño disfrutará casi tanto como viajar a Nueva York? ¡Edificar su propia Gran Manzana en miniatura!
Compuesto por 74 bloques de madera de haya, Blockitecture NYC Big Apple es un set de construcción con el que podrá levantar íconos como el Empire State o el High Line sin salir de su cuarto. Creado por el premiado diseñador James Paulius, está a la venta en la tienda del MoMa. ¿Así o más neoyorquino? Costo: $3,623 pesos en store.moma.org

 

Aves en la mesa

 

Ideas para regalo del Día del Niño

 

La hora de la comida es más divertida cuando se involucran colores y naturaleza. El diseño de Lilach Eytan te permite almacenar refrescantes bebidas para tus hijos en pequeñas jarras con forma de tucán. Estos recipientes, elaborados con fibra de bambú en amarillo o azul, son ideales para mantenerlos hidratados sin preocuparte por derrames, solo déjate guiar por su pico. Costo: $508 pesos en otodesign.com

 

 

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Los que saben dicen que beber una copa de vino tinto al día es bueno para el corazón. Pero nosotros comprobamos que pueden ser dos o tres, siempre y cuando el entusiasmo por el vino nos lleve directito al terruño que ve crecer la uva, y nos acerque a aquellos que consagran su vida al saber hacer del vino, como en Ribera del Duero.

Nunca un sorbo de este elixir de la tierra será el mismo que cuando se está frente a los viñedos, en los que la uva lucha por sobrevivir en condiciones que, de tanto parecer adversas, resultan ideales. Por eso, realizar un viaje por la cuenca del río Duero, al sur de la provincia de Burgos, por Castilla y León, justo en Aranda, es bueno también para el alma.

 

Virtudes otorgadas

 

El verdadero protagonista de este viaje es el río Duero, que nace en los Picos de Urbión, en Soria, y después de completar 897 kilómetros, desemboca en la ciudad portuguesa de Oporto, bañando a su paso el paisaje y los campos.

La Ribera del Duero nos lleva, a lo largo de 115 kilómetros, por caminos de una comarca esencialmente agrícola, donde se cultivan cereales, betabel y vid. La ganadería más conocida de esta zona son los rebaños de ovejas, a los que les rendiremos honor en los restaurantes locales que ofrecen los famosos y deliciosos corderos lechales asados.

 

Ribera del Duero silos

 

En medio de las condiciones naturales más convenientes para la elaboración del vino, vamos descubriendo que solo algunas de las zonas de la ribera del río forman parte de la Denominación de Origen (D.O).

Se trata de una región donde confluyen ciertas características: tierras arcillosas; 450 milímetros de lluvia al año; veranos tan cálidos que alcanzan los 40 grados centígrados, e inviernos tan fríos que pueden llegar hasta menos 18 grados, nos cuentan desde el Consejo Regulador de la D.O. Ribera del Duero, un organismo creado en 1982 con la finalidad de garantizar la calidad del vino.

 

Cientos de bodegas

 

Recorremos la franja vinícola de Ribera del Duero, que acoge a unas 300 bodegas, con tanta curiosidad como ganas de catar las diferentes versiones de una misma uva, la tempranillo, que es el alma de la zona, y a la que el consejo regulador ha admitido ensamblarla con otras variedades como cabernet sauvignon, merlot, malbec y garnacha, o la única blanca, la albillo (eso sí, en 25% como máximo).

Y mientras catamos estas joyas vinícolas de intenso color púrpura, notas a cereza y cuero, de textura aterciopelada, sabemos que estamos guardando para siempre las postales de estos viñedos y abrazando entrañables bodegas, moldeadas por su carácter histórico y por la encantadora personalidad de su gente.

 

Bajo el cobijo del olivo: Tr3smano

 

En el municipio de Peñafiel, en Valladolid, una bodega mimetizada en el desnivel natural de su parcela, construida con materiales de la tierra e iluminada con luz del Sol, nos obliga a hacer una parada, en la que descubrimos la presencia más deslumbrante de nuestro recorrido: un maravilloso olivo de más de 1,500 años.

El olivo domina, soberbio, la bodega de Tr3smano y relata la historia de Valladolid como valle de olivos. Construida por el estudio de arquitectos Konkrit Blu, y soñada por tres hombres amantes y expertos en vino, la bodega integra de manera conmovedora la capacidad técnica, la historia y el arte que dan como resultado un vino de gran calidad cuya esencia es la uva tempranillo.

 

Ribera del Duero Tr3smano

 

José Ramón Ruiz y Antonino Sierra González, socios de La Europea, la empresa líder de importación de vinos del mundo en México, tejieron su sueño de hacer un vino inolvidable en la Ribera del Duero, y para ello, se unieron a Fernando Remírez de Ganuza y a Pedro Aibar, grandes personalidades del mundo del vino.

Toma nota: Pago de las Bodegas, s/n 47314 Padilla de Duero, Valladolid, España. tresmano.com

 

Cuando el vino corre por las venas: Emilio Moro

 

Nunca se podrá catar un vino de la misma manera que recorriendo las bodegas donde cada viticultor le da su toque personal, y donde se entablan encendidas conversaciones alrededor de la mesa con las familias que por generaciones, han dedicado su tiempo y energía a ver nacer y desarrollar cada una de sus etiquetas de Ribera del Duero.

“Uno de los recuerdos más antiguos que conservo es el olor del lagar. Cuando era niño, acompañaba allí a mi padre para ayudarle a prensar la uva. Y en los descansos comíamos patatas con las manos impregnadas de vino. ¡Estaban deliciosas! Ése es un recuerdo imborrable”, nos cuenta lleno de orgullo y pasión, en cada palabra que enuncia, José Moro, tercera generación de viticultores, y actual presidente de las legendarias bodegas Emilio Moro.

 

Ribera del Duero Emilio Moro

 

José nos recibe en esta bodega, localizada en Pesquera del Duero, en Valladolid, cuya historia se remonta a más de medio siglo de amor al terruño. “La primera generación se entregó a la tierra, la segunda inculcó a la tercera el saber hacer, y ésta última, ha construido una marca de nivel internacional”.

A todas estas generaciones las une la pasión por el vino y a esta bodega de 200 hectáreas propias, las cuales ven crecer las uvas que dotan de personalidad a su variedad de tinto fino. Las experiencias enoturísticas que ofrecen son ideales para conocer en primera persona todo el proceso de elaboración del vino, desde el cultivo de las cepas en el viñedo hasta su degustación.

Toma nota: Carretera Peñafiel-Valoria, S/N. Pesquera de Duero, Valladolid, España. emiliomoro.com

 

Entorno en armonía: Alonso del Yerro

 

En una ruta enoturística por Ribera del Duero, atravesamos los municipios de las provincias de Soria, Segovia, Valladolid y Burgos, donde se le dan vida a vinos rosados, roble (tintos jóvenes), crianzas, reservas y grandes reservas.

Es en la Finca Santa Marta, en Burgos, donde sobre los viñedos que rodean a la hermosa casona, un arcoíris nos da la bienvenida. La conversación gira en torno al concepto del terroir y a las prácticas antiguas en las que la agricultura, además de un oficio, era una filosofía de vida.

 

Ribera del Duero Barricas

 

Los vinos de esta bodega de Ribera del Duero se realizan partiendo del cuidado del entorno de la planta, observando la calidad que cada año ofrecen los distintos suelos y realizando una vinificación respetuosa. Aquí hacen todo lo posible por dejar que el terruño se exprese de manera clara y poderosa. Las labores son artesanales, realizadas a mano y prescindiendo totalmente de productos de síntesis; el único aporte es una composta elaborada por ellos mismos.

Toma nota: Finca Santa Marta, carretera de Roa hacia Anguix, kilómetro 1. 8, Roa, Burgos, España. alonsodelyerro.es

 

Joya histórica de la viticultura: Dehesa de los Canónigos

 

Lo que en la antigüedad fuera la residencia de 22 monjes canónigos se convirtió en esta bodega, localizada en una de las fincas de mayor importancia histórica de la zona. Además, sus paredes guardan uno de los relatos más conmovedores de la historia del vino: después de la filoxera, una terrible enfermedad que aquejó a la vid europea en el siglo XVIII, ésta fue la primera bodega en Ribera del Duero en replantar sus tierras con injertos de vides procedentes de América.

 

Dehesa de los Canónigos

 

Así que estamos frente a una leyenda del mundo del vino en España. Para llegar a esta encantadora finca de 500 hectáreas, de las cuales 60 están totalmente consagradas al viñedo, recorremos el valle del Duero, dentro de la llamada Milla de Oro de la Ribera, nombrada así por ser enclave privilegiado para el buen desarrollo y maduración de las uvas.

Toma nota: Carretera Renedo-Pesquera kilómetro 39, Pesquera del Duero, Valladolid, España. dehesadeloscanonigos.com

 

Experiencias inolvidables: Finca Villacreces

 

Siglos atrás, este páramo fue el sitio donde religiosos se dedicaban a la oración y al cultivo de la tierra en Ribera del Duero. Ya para esos tiempos existía un pequeño viñedo donde nacía uva que era utilizada para el consumo propio y de otros monasterios cercanos.

Localizado también en plena Milla de Oro de Ribera del Duero, este sitio dueño de un entorno natural conmovedor con un bosque de centenarios pinos, viñedos y el fluir del río, es ideal para realizar experiencias de enoturismo. En Finca Villacreces han sabido llevar este concepto que une al mundo del vino con el del turismo más allá de cualquier expectativa. Se puede elegir entre catas de vino y queso, recorridos en bicicleta por la finca y los viñedos, pícnics a la orilla del río o experiencias gastronómicas en los extraordinarios comedores de la finca.

Toma nota: Carretera Soria, en el kilómetro 322, Valladolid, España.villacreces.com

Pasión por el terruño: Grupo Pesquera

 

La imagen del arco y de la torre de Pesquera del Duero es el símbolo del grupo Pesquera; con él, Alejandro Fernández busca reflejar el vínculo y el amor por su tierra natal y por el terruño que ve crecer a las uvas con las que le han dado vida, desde hace cuatro décadas, a sus míticos vinos Tinto Pesquera.

Son cuatro las bodegas que componen el legado vinícola de Alejandro Fernández, en la D.O de Ribera del Duero se encuentran Tinto Pesquera y Condado de Haza, todas reconocidas y alabadas en las catas más importantes del mundo. Todas están abiertas al enoturismo y organizan visitas y catas bajo reservación previa.

 

Ribera del Duero grupo Pesquera

 

“Alejandro Fernández, quien desde su infancia era un amante del terruño y alimentó su sueño bodeguero, es considerado desde el principio de su incursión en el mundo de los vinos como un visionario en la elaboración de caldos en la Ribera del Duero”, nos cuenta Olga Fernández, directora de la bodega Condado de Haza.

Toma nota: Calle Real 2, Pesquera de Duero, Valladolid, España. grupopesquera.com

 

Ícono del Duero: Balbás

 

La sexta generación de la familia Balbás está al frente de estas bodegas que nacieron en 1777. Catar sus vinos es probar parte importante de la historia de la Denominación de Origen, pues esta bodega, junto con otras ocho, fue fundadora en 1982 de la D.O. de Ribera del Duero.

La serie de regulaciones surgieron tras la iniciativa de una serie de viticultores y bodegueros preocupados por impulsar los viñedos y la calidad de los caldos de la Ribera del Duero. Todos aquellos vinos que ostenten el sello de la D.O. deben ser sometidos y superar un proceso de calificación desarrollado por el consejo regulador.

 

Ribera del Duero Botellas

 

A lo largo de su historia, Bodegas Balbás se ha convertido en ícono de calidad, conscientes de que la perfección requiere dedicación, esfuerzo y pasión. Algunas de sus cepas tienen más de 90 años, y actualmente cuenta con 102 hectáreas en producción en las que se cultivan tempranillo, cabernet sauvignon y merlot.

Toma nota: La Majada, s/n, La Horra, Burgos, España. balbas.es

 

Bodega legendaria: Cillar de Silos

 

Esta bodega debe su nombre a los monjes encargados de la cillería o despensa en la que se encontraba el vino. Muy cerca de aquí, se encuentra el monasterio de Santo Tomás de Silos, que data del siglo X y era muy famoso por sus celestiales cantos gregorianos.

Actualmente, Cillar de Silos cuenta con 68 hectáreas de viñedo, donde se cultiva principalmente la tinta tempranillo con la que se crea un caldo memorable. Tan memorable como su espectacular bodega subterránea, a la que llegamos caminando por el encantador pueblo. Con las condiciones ideales de humedad y temperatura, la bodega data del siglo XVII y se ha convertido en un atractivo del destino.

 

Cillar de Silos

 

Aunque Cillar de Silos se inauguró en 1994, fue desde 1970 que su propietario, Amalio Aragón, comenzó a comprar diferentes parcelas, y ahora dirige la bodega con sus hijos.

Toma nota: Calle Ribera del Duero, Quintana del Pidio, Burgos, España. cillardesilos.es

 

 

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La pandemia ocasionada por el COVID-19 ha modificado la operación de millones de restaurantes a nivel mundial. Desde España, el chef Roberto Ruiz de Punto MX, galardonado con una estrella Michelin, nos cuenta sobre las acciones que implementa como mexicano en Madrid ante el aislamiento por el virus. Descubre todos los detalles con esta entrevista. Fotografías: cortesía Punto MX.

 

¿Qué es lo haces para tener una visión positiva ante esta situación?

 

Continuar con hábitos como la hora de despertarnos y seguir trabajando. Tengo reuniones con el equipo, vemos cambios de recetas y propuestas para los nuevos restaurantes, que normalmente es lo más tardado en tiempo de oficina. Seguir lo más activos posible es la mejor forma de no perder el hilo. Con tanta información, a veces no somos capaces de digerirla. Hay días en que no se está del mejor humor, pero hay que orientarlo a mantener la mente ocupada. A nivel casero, me puse a hacer comida que nunca había realizado, como cocina india y japonesa. Es tiempo de buscar hobbies que teníamos perdidos y de ver lo importante que es estar con uno mismo.

 

Roberto Ruiz Punto MX

 

¿Qué ha pasado con todo el equipo que trabaja contigo?

 

Mi esposa, María Fernández, y yo nos aseguramos que todos estuviéramos bien. Hemos hecho grupos de trabajo para comunicarnos a distancia y transmitir el optimismo. Lo fácil era llenarlos de chistes o de críticas de lo que está haciendo mal el gobierno, pero en realidad es muy buen tiempo para meter tutoriales de cómo hacer distintas preparaciones, así como de comunicar el verdadero espíritu del restaurante.

 

¿Qué cambios y acciones vienen para tus restaurantes al reactivar las actividades?

 

Lo primero es la salud, después podemos afrontar lo que sea. Hay que estar con la mente abierta para provocar los cambios que tengamos que hacer. Esto va a ser un antes y un después. Entendemos que hay repercusiones económicas y estamos viendo qué ajustes podemos hacer. Hoy es aventurado decir cómo va a terminar, no sabemos ni cómo ni cuándo, pero creemos que no será una época de bonanza y hay que aplicarnos con eso. Afortunadamente, los mexicanos tenemos un ingenio especial para adaptarnos. Si algo va a cambiar, es el punto nutricional, así como apuntar a ser más ecológicos; es un muy buen momento para reinventarnos. Queremos hacer la mejor versión de nosotros mismos y de nuestros restaurantes.

 

Gordita Punt MX

 

¿Cómo crees que esta pandemia transformará al mundo del fine dining y a la gastronomía en general?

 

La referencia que tengo es recordar la crisis del 2008, en la que cambiaron hábitos en el dinero, así como cambió el mundo de los viajes después del 11 de septiembre (11S). Esta vez, el fine dining no es prioridad y es un afectado directo de todo lo que está sucediendo, es ahí donde los cocineros tendremos que encontrar espacio. Creo que nos viene un buen tiempo de reflexión, de la cultura del esfuerzo y de doblarnos las mangas y cocinar, para ver cómo afrontar estos nuevos retos. Hoy la prioridad es la salud, por lo que necesitamos gastronomía que entienda de nutrición.

 

Roberto Ruiz Punto MX

 

¿Qué mensaje le darías a otros cocineros del mundo?

 

Después de esto, la forma de relacionarnos cambiará, no me adelantaría a decir cómo será, pero creo que hay que estar receptivos y entender que lo que funcionaba antes no va a funcionar dentro de los siguientes meses. Como humanidad nunca habíamos pasado algo de esta magnitud, pero unidos tenemos que buscar una solución. Ser cocineros se ve maravilloso del Instagram para afuera, pero la realidad es que es una profesión durísima en la que hay que estar constantemente luchando. Esta es una crisis más. Lo que pasa es que es la más complicada que todos hemos vivido, así que nos toca una buena dosis de realidad. Hay que tomarlo con mucho optimismo, que es la única forma de lograrlo. puntomx.es

 

 

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