Conoce estas cuatro bodegas de vinos argentinos que participaron en las pasadas actividades de la Embajada de Argentina en México, por motivo del mes del Malbec, y disfruta de sus vinos estrellas que recomiendan probar para adentrarte en el terroir que ha dado fama internacional a ese país sudamericano en la escena vinícola mundial.

 

Gran Reserva Franco Blend

 

vinos argentinos

 

Al ser un proyecto cien por ciento familiar, Bodega Familia Rosso ha promovido que la cuarta generación de esta familia italiana que llegó a Argentina, diseñe sus propias etiquetas nombradas como ellos, dentro de su línea Gran Reserva, la gama top en este momento. Ese es el caso de este blend llamado Franco, creado por el segundo de los hijos de Rodolfo Rosso, CEO de la bodega. Es 70% malbec, 20% de syrah y 10 petit verdot, un vino con características tánicas muy altas, elegante, para maridar con alimentos elevados en grasas como carnes rojas asadas, ahumadas y de caza. “Es el reflejo de la personalidad de mi hijo”, expresó Rodolfo. familiarosso.com

 

Luigy Bosca Malbec

 

vinos argentinos

 

Raúl Gil, sommelier corporativo de Cyrnos, importadores de Bodega Luigy Bosca nos presentó este vino insignia de la vinícola. Y al que muchos ubican como uno de los vinos más reconocidos de Argentina. Está elaborado con uva 100% malbec proveniente de Luján de Cuyo, con 12 meses de barrica, pero conformadas por una mezcla: un tercio en barrica nueva, un tercio en barricas de un uso, y un tercio de dos usos. El resultado es un caldo muy frutal, ideal para disfrutar con un rack de cordero con hongos salteados, o un ojo de bife madurado con risotto de quinoa. luigibosca.com.ar

 

Las Compuertas

 

vinos argentinos

 

Perteneciente a la familia de Terraza de los Andes este es un vino single vineyard muy peculiar, porque las cepas con las que fue elaborado datan de 1929. Es un malbec súper concentrado, por la vejez de la vid y a la vez elegante. Duerme en barricas de roble francés de uno a dos usos, hasta 18 meses.

Además, es un vino de altitud, ya que los viñedos están a 1,070 metros sobre el nivel del mar. Su método de irrigación es totalmente natural porque se lleva a cabo con el deshielo de la cordillera de los andes. terrazasdelosandes.com

 

La cañada

 

vinos argentinos

 

Hacienda de los Andes trajo este vino desde el Valle de Uco, que mezcla diferentes uvas tintas: torrontés, malbec, cabernet sauvignon, cabernet franc y petit verdot. En nariz presenta aromas de frutos rojos y negros con notas minerales. Es perfecto para acompañar carnes asadas, guisos, pastas y queso semiduros, nos compartió Pablo López Casideli, director comercial de la bodega. haciendadelosandes.com

 

¿Ya estás listo para brindar con estos vinos argentinos? Encuentra algunos de estos vinos en tiendas La Europea.

 

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La producción vitivinícola de nuestro país es reconocida a nivel mundial y el más reciente logro de nuestra industria enológica fue posicionarse entre los mejores 10 países productores del mundo en el Concours Mondial de Bruxelles, uno de los más importantes a nivel mundial y este año la sede elegida fue Suiza.

Los vinos mexicanos compiten con países como: España, Francia, Italia, Portugal, Suiza, Chile, China, Bulgaria y Sudáfrica. En total 39 vinos mexicanos fueron galardonados, y aquí encontrarás la lista completa concoursmondial.com. Fotos: Tomadas del sitio Concours Mondial de Bruxelles.

 

Concours Mondial de Bruxelles

 

Gran Medalla de Oro

 

Los vinos mexicanos que ganadora la Gran Medalla de Oro son: 

 

Caipirinha 2016

El Valle de Guadalupe es la principal región vinícola de México, por lo que este reconocimiento es más que merecido. Para la elaboración de este ensamble, bodega El Cielo utiliza cuatro cepas: cabernet sauvignon, shyra, nebbiolo y malbec.

 

Malbec 2014

 

Del viñedo Roganto, este monovarietal tiene un sabor intenso con notas especiadas y afrutadas. Te recomendamos maridarlo con carnes rojas, lechón, pastas trufadas o quesos de añejamiento medio.

 

 

Medalla de Oro

 

Concours Mondial de Bruxelles

Los vinos mexicanos que ganaron la Medalla de Oro son:

Nebbiolo 2015

La bodega Viñedos de la Reina te consentirá con este vino elaborado 100% con uva nebbiolo.

L by Baumgartner 2015

Ensamble de tempranillo, nebbiolo y barbera, diseñado por la renombrada sommelier Sandra Fernandez Gaytán.

Malbec Reserva 2017

Representando a Guanajuato podemos encontrar esta etiqueta de Viñedo San Miguel.

Perseus 2015

Tras 24 meses en barrica, este caldo de Vinos El Cielo deleitará a tus sentidos con sus notas especiadas.

Sirius 2012

El enólogo Jesús Rivera diseñó este tinto para Vinos El Cielo, mezclando cepas de nebbiolo y malbec.

The Capital Grille Reserva 2016

Creado para el restaurante homónimo, es suave en nariz. Sin embargo, en boca presenta fuertes taninos y un cuerpo definido.

Escala 2015

Hilo Negro es una bodega ubicada en Ensenada, su monovarietal de shyraz es redondo en boca y te deslumbrará con brillantes rojos.

Cabernet Sauvignon – Syrah 2017

Monte Xanic es uno de los productores más reconocidos del país, en su línea Calixa podemos encontrar esta deliciosa mezcla de dos uvas emblemáticas.

G & G Reserva Especial 2016

Diseñado por la enóloga Gina Estrada, es una mezcla interesante de tempranillo, grenache y malbec.

Syrah 2015

Degusta este vino de la bodega Roganto y sorpréndete maridándolo con platillos como cordero, moles, atún sellado o quesos maduros.

Inspiración Coco Nebbiolo 2015

Creado en una vinícola regional, su cuerpo equilibrado lo convierte en la pareja perfecta de platillos como la cochinita pibil o los tacos de tuétano.

Atempo Rose 2018

El único rosado en nuestra lista. Proviene del estado de Querétaro y sus notas frutales te atraparán.

 

 

Medalla de Plata

 

 

Concours Mondial de Bruxelles

 

Vinos Mexicanos que ganaron las medalla de plata: 

 

Emevé: Shiraz 2015 y Cabernet Sauvigon 2014

Vino de la Reina: Cabernet Sauvignon 2017 y Syrah 2017

Casa Pedro Domecq: XA Blanco

Finca Sala Vivé: Brut Rosé

Casa Madero: Cabernet Sauvignon 2017, Malbec 2017 y Merlot 2017

El Cielo: Orión 2015, Eclipse 2017, Mi Viejo Molino 2016, Rosas & Xocolate 2015

Encinillas: La Casona 2016

Puerta de Lobo: Syrah 2017

Monte Xanic: Cabernet Sauvignon 2017 y Calixa Syrah 2017

Guanamé: Malbec 2016

Don Leo Linde: Cabernet Sauvignon – Merlot 2014

Viñedos Palomino: Marroc 2017

Casta de Vinos: Casta Negra 2017

Cordus: Nebbiolo 2015

De Cote: A Tempo Sauvignon Blanc 2018 e Inédito Blanco 2018

L.A.: Cetto Nebbiolo 2015

 

El Concours Mondial de Bruxelles comenzó a celebrarse en 1994. Los vinos participantes aspiran a obtener tres tipos de medallas: la Gran Medalla de Oro, la Medalla de Oro y la Medalla de Plata.

Dichos reconocimientos sirven como una garantía de calidad para los consumidores en el mundo. El secreto de su éxito está basado en la selección de un jurado experto en el mundo del vino. Enólogos, compradores internacionales, periodistas especializados y profesionales del vino de 51 países diferentes conforman el grupo de catadores.

Todas las muestras son degustadas «a ciegas» para garantizar la imparcialidad y los ganadores son sometidos a pruebas a posteriori para garantizar la calidad. 

La provincia de Salta, al norte de Argentina, se encuentra en las alturas. Es una zona desértica dentro de la cual se encuentra El Calafate, donde se hallan la mayoría de las bodegas de esta parte del país sudamericano.

Pero hay otra región vitivinícola que se ha dado a conocer gracias a la labor de una bodega con 188 años de antigüedad, es decir, la primera de Argentina. Bodega Colomé trabaja en viñedos de hasta 3,100 metros de altura, siendo éstos los más altos del mundo.

 

Bodegas Colomé

 

 

¿Qué sucede cuando se está a esa altura?

 

 

Valle Calchaquí presenta bajas temperaturas, por lo que las uvas tienen la cáscara más gruesa, dando como resultado vinos muy concentrados, con mucha complejidad y estructura.

Así lo constatamos en una cena maridaje ofrecida por Hess Collection, empresa distribuidora de la bodega, que se realizó en Estudio Millesime México, donde probamos sus etiquetas Colomé State, un interesante blend de puras uvas malbec, pero provenientes de distintos fincas ubicadas en diferentes alturas.

 

Bodegas Colomé

 

 

La otra botella fue Colomé Auténtico, el primero del viñedo 100% malbec. Proviene de viñedos de 90 años de edad ubicados a 2,300 metros. Pero lo más destacado es que no tiene nada de barrica, por lo que muestra todas las notas de la región: aromas de frutas negras y rojas, un elegante especiado y una excelente acidez.

En este evento probamos otras de las etiquetas de Hess Colecction, Amalaya, de la bodega homónima, ubicada en Calafate, con aromas a frutas rojas y negras con notas florales y especiadas, típicas de la región, y suaves notas a vainilla, provenientes de su paso por barrica de 12 meses.

 

Bodegas Colomé

 

Maridaje perfecto

 

Las delicias que Estudio Millesime preparó para acompañar estos vinos fueron una trenza de atún –cama de aguacate con sopa de jengibre y helado de rábano–; un ravioli relleno de pork belly; una costilla cocinada a baja temperatura por 36 horas, con puré de patata y tierra de cacao; y un tiramisú cubierto de chocolate y mouse de café.

Los vinos de Amalaya y Colomé se encuentran de venta en tiendas de autoservicio. hesscollection.com, amalaya.com, bodegacolome.com, millesimeworld.com

 

También checa Destinos imperdibles de Argentina. 

En el vasto mundo del té, Marruecos desempeña un papel interesantísimo. Este país del norte de África, diferenciado de entre todos los territorios del Magreb por sus pronunciadas montañas y llanuras, es el primer y más importante importador de té verde en todo el planeta. Sí, querido lector, en suelo marroquí la infusión de camellia es parte esencial de la vida diariaFotos: Adobe stock / Escuela Mexicana de Té. 

Como con gran parte de la historia de Marruecos, la tradición del té marroquí fue profundamente influenciada por Europa; literalmente, la infusión arribó con la apertura del comercio con África y Asia, durante el Siglo XVIII. Se dice que por aquella época, la reina Ana de Gran Bretaña envió cientos de regalos al Sultán Mulay Ismaíl para liberar a los esclavos apresados durante las redadas bárbaras de Europa Oriental; entre los presentes se encontraban algunas hojas de té.

Para la década de 1860 la bebida se extendía rápidamente por todo el país. Aunque se consideraba un artículo de lujo y un símbolo de alto nivel socioeconómico, finalmente logró llegar a los mercados de las grandes ciudades, a las rutas de las caravanas y todos los rincones de la cordillera del Atlas.

 

Té marroquí

 

 

El mundo con olor a té marroquí

 

Hoy, la cultura del té marroquí se ha difundido a lo largo de África, desde el extremo norte del continente y hasta el sur de España. El elaborado ritual asociado a su consumo es considerado toda una forma de arte local, así como una profunda expresión de la hospitalidad en los hogares.

¿Cómo se prepara…? Antes de detallar el meticuloso proceso de infusión, es necesario apuntar a la variedad de té que se utiliza en el mismo: Gunpowder. Originario de la provincia de Zhejiang, China, el Gunpowder es un té verde de intenso sabor ahumado, con tonos de ceniza, tabaco rubio y nueces tostadas, estructurado y agradablemente dulce. Este té fue sumamente importante durante cientos de años y es que, gracias a su capacidad para mantenerse en buen estado, derivada de su secado intenso, podía transportarse en caravanas y largas travesías por el océano. Al llegar a Marruecos, el Gunpowder formó una alianza natural con el azúcar y la menta fresca.

 

Té marroquí

 

Vayamos al proceso de infusión, mismo que requiere tiempo, maestría y precisión. Primero, el té verde se remoja en agua hirviendo; la costumbre es añadir dos cucharadas soperas de té por cada litro de agua. Inmediatamente después la infusión se pasa a otra tetera, método que permite filtrar el polvo y cualquier otra impureza en las hojas.

Se añaden nueve cucharadas de azúcar y otra porción de agua hirviendo para disolver perfectamente los cristales de azúcar. Por último, se incorporan puñados de menta fresca y tiernos brotes de naranja.

Ante los invitados, la infusión debe presentarse siempre dentro de la propia tetera, sobre una charola metálica para té. El anfitrión debe verter el líquido desde una gran altura para producir una consistencia espumosa en cada cuenco de cristal. Entre locales se dice que: “el primer vaso es tan amargo como la vida, el segundo es igual de fuerte que el amor y el tercero, y generalmente último, es tan dulce como la muerte”. escueladete.mx

 

 

También checa Marrakech: asalto a los sentidos. 

Sotol, pox, bacanora, raicilla, tequila, mezcal, ron, ginebra, licor de lavanda, de lichi y por supuesto, el café con licor de hierbas, son algunos de los destilados y licores mexicanos que se exhiben en una atractiva vitrina ubicada dentro de una casa de la colonia Roma.

Se llama Casa Corajito, un nuevo concepto donde se invita a todos aquellos que quieran conocer, probar y comprar etiquetas premium de esas bebidas mexicanas, como el sotol Flor del Desierto, raicilla Estancia, pox Casa Na’am, bacanora Santo Cuviso, y el gin artesanal Katún, entre otras.

 

Casa Corajito

 

En este sitio de agradable atmósfera, con pequeñas mesitas y plantas que cuelgan del techo, podrás realizar un tasting de tres, cuatro y hasta cinco bebidas para conocer sus aromas. También sus notas y sabores de los destilados o licores de tu elección, los cuales serán maridados con botana chiapaneca.

 

Un licor diferente

 

Pero el gran protagonista de este lugar es Corajito, el café chiapaneco orgánico mezclado con licor de hierbas y cítricos. El cual se produce y embotella en esta casa, un interesante proceso que los amantes del café podrán venir a conocer y degustar.

Mauricio Castellanos, director general de Sin Rival Destilados –distribuidora de Corajito y de todos los destilados y licores que aquí se exhiben–, nos platicó que esta bebida ya cumplió un año y ha sido muy bien recibida en el mercado, pero que ahora quieren dar a conocer otros destilados gourmet de pequeños productores.

 

Casa Corajito

 

 

Durante la presentación de este nuevo concepto, donde se convocó a mixólogos y dueños de bares, probamos algunos deliciosos cocteles hechos con Corajito. Tales como el Spritz, con vino espumoso tipo Brut, jugo de limón verde y de naranja. Y nuestro preferido, el Negroni, con mezcal, campari y un twist de naranja.

Tasting de tres bebidas: $210, de cuatro $250 y de cinco $310. Dónde. Guadalajara 13, Roma Norte. Horarios:L-V, de 11:00 a 18:00 horas. corajito.mx

 

Casa Corajito

 

 

También checa Bebidas mexicanas con denominación de origen.

Decir té, es apuntar a uno de los grandes pilares de la sociedad británica. Es cierto, a lo largo y ancho de todo el Reino Unido y sus territorios mancomunados, la infusión de camellia sinensis (la planta del té) es un verdadero indispensable de la mañana, tarde, noche… Fotos: Escuela Mexicana de Té. 

Los británicos empiezan su día con el llamado “té de la mañana temprana”, que se bebe en la cama con galletas sencillas; después le sigue el “té del desayuno”, dedicado a acompañar una serie de robustos y energéticos platillos. Más tarde llega el “té de las once”, la última taza antes del tradicional “té de la tarde”. Finalmente, se bebe una última dosis de la infusión antes de ir a dormir. De entre todas estas expresiones locales, el té vespertino posee un carácter especial.

 

Hora del té

 

El té de la tarde, ese que asociamos a la llamada hora del té, se originó en el Siglo XIX. Anna Maria Russell, séptima Duquesa de Bedford, fue la encargada de gestar esta icónica tradición británica.

En aquellos tiempos la comida se servía justo al mediodía y la cena muy tarde por la noche, por lo que la Duquesa de Bedford adoptó el hábito de beber té entre las tres y cuatro de la tarde junto a una selección de bocadillos ligeros. Al poco tiempo, la Duquesa comenzó a invitar a sus amigas más cercanas a compartir el té de la tarde, incluida la Reina Victoria. Así, sin saberlo, detonó una moda de éxito inmediato y una de las costumbres más representativas del Reino Unido.

 

Hora del té

 

Hoy, como en el pasado, compartir una taza de té con amigos o familiares tiene una profunda connotación social. El té se prepara siempre con base a cinco principios fundamentales:

1. La tetera, generalmente hecha de porcelana o cerámica de corte europeo, se calienta con agua para temperar.

2. Se añade una cucharada de té por cada persona invitada a la mesa y, como marca la tradición, una más para la propia tetera.

3. Se vierte agua caliente, nunca hirviendo, sobre las hojas y brotes de camellia sinensis.

4. Entre tres y cinco minutos se cuentan para permitir al líquido caliente, extraer todos los aromas y sabores del té.

5. El ritual culmina removiendo ligeramente las hebras y sirviendo inmediatamente a cada uno de los asistentes. Fascinante, ¿a poco no?

 

Hora del té

 

Acompañamientos y elementos del servicio. El té de la tarde suele realizarse con blends de té sobrios, generalmente a base de tés negros, para los cuales se disponen leche, terrones de azúcar y rodajas de limón amarillo. Pinzas, exprimidores y cubertería, de diferentes materiales, también son requeridos en la mesa.

¿Alimentos…? ¡Vamos allá! Sin lugar a dudas el establecimiento del té de la tarde dio pie a nuevos platillos y bocadillos. Aunque scones y sándwiches salados (de pepino, salmón ahumado, jamón cocido e incluso huevo) son frecuentes, también suelen servirse todo tipo de bollos, masas horneadas y pastas dulces, siempre dispuestos en los clásicos platos de tres pisos.

Sí, querido lector, todo esto contribuye al placer de beber té al puro estilo británico. escueladete.mx

Un día, el maestro destilero de la escocesa Glenmorangie, Dr. Bill, realizaba un recorrido por los sembradíos de malta, pero decidió salir por los terrenos colindantes. Caminando, encontró una levadura silvestre, tomó unas muestras, las llevó al laboratorio y las empezó a estudiar: Glenmorangie Allta. Fotos: Cortesía Glenmorangie. 

En ese proceso se dio cuenta que ésta era completamente distinta a las demás. Era salvaje, no domesticable, “completamente descarriada, imponente y no tenía ese toque ni sutileza que tiene cualquier otra levadura”, nos platica Diego Ocaranza, brand manager de Glenmorangie.

 

Glenmorangie Allta

 

Dr. Bill decidió explorar para ver que pasaba con esa planta. El resultado es Allta, un simple malt que “presenta notas muy extremistas: por una parte se encuentra la levadura poderosa y dominante, pero al mismo tiempo, está balanceada con notas cremosas, mielosas y vainillosas, muy elegantes y sofisticadas”, asegura Diego.

Así lo comprobamos durante una cata y cena maridaje donde probamos esta nueva etiqueta de Glenmorangie, donde destacaron sus notas a naranja y miel que le asigna su tiempo de añejamiento en barricas de roble americano, que antes fueron usadas para producir bourbon.

 

Glenmorangie Allta

Glenmorangie Allta

Esta botella, “rompe las barreras de la graduación alcohólica. Todas nuestras etiquetas rondaban entre 43 a 46 grados. Con Allta, Dr. Bill se atreve a llevarla a 51.2 grados”. Para su brand manager, “la mejor forma de beberlo es solito, porque todo lo lastima, hasta el mismo hielo. Y se puede disfrutar a cualquier hora: puede ser digestivo, aperitivo, o puedes maridarlo con mole, con una entrada o con el postre”.

En esta ocasión lo disfrutamos con un roulax de cerdo relleno de espinaca y queso de cabra. Este es el décimo año que Glenmorangie lanza una edición limitada. De las 10 mil que se producirán en todo el mundo, a nuestro país solo llegarán 660 y tendrá un costo de $1,989. glenmorangie.com

 

Food and Travel recomienda el consumo moderado del alcohol y no para menores de 18 años. 

Los amantes de la cerveza artesanal han encontrado en las cuatro sucursales de HOP un refugio. Hace poco abrió sus puertas el primer speakeasy cervecero de la Ciudad de México. La premisa es simple, ofrecer cervezas de barril únicas en su tipo en el país. Te contamos todo lo que nos es posible revelar de este increíble lugar escondido en el corazón de Polanco.

 

Speakeasy

 

La Era de la Prohibición en Estados Unidos inició el 16 de enero de 1920. Con la promulgación de la Enmienda XVIII a la constitución del país vecino, se prohibió la venta de bebidas alcohólicas en todo el territorio. No obstante, el mercado buscó otras formas de servicio y así nacieron los speakeasy. Este tipo de bares clandestinos recibió su nombre porque al hablar de ellos era necesario susurrar.

En la actualidad los speakeasy se mantienen como un concepto secreto. En la Ciudad de México existen diferentes opciones pero solamente uno especializado en cerveza: HOP. No te podemos decir como ingresar, eso lo debes investigar por tu cuenta. Sin embargo si te podemos contar un poco de lo que pasa adentro.

Una vez que hayas encontrado la manera de entrar, podrás encontrar tres tipos distintos de cerveza de barril. Cuando se termina el barril, se cambia de marca garantizando que cada visita será única. Nosotros probamos una porter de la cervecera Deschutes, la legendaria 120 Minute IPA de Dogfish Brewery y Primordial Noir de Cascade Brewing.

 

Speakeasy

 

Después de unos tragos, es normal que se despierte tu apetito. Con esto en mente, diseñaron un menú secreto de alimentos en el que podrás elegir entre una tabla de jamón serrano, queso y aceitunas o un sándwich estilo Chicago con pastrami y mostaza vieja.

Si quieres visitar este lugar te recomendamos estar al pendiente de sus redes sociales. El speakeasy abre sus puertas de lunes a domingo a partir de las seis de la tarde. Recuerda, mantén el secreto y viaja a través del tiempo en este lugar único. Dónde Av. Ejército Nacional #622, Polanco. @HopTheBeerExperience

Pensar en sushi es, en definitiva, apuntar a té verde japonés… Es cierto, la infusión de hojas y brotes de camellia sinensis (la planta del té) es el acompañamiento natural de nigiri, maki, chirashi, inari, oshi, nare y todo tipo de tipologías asociadas a este icónico bocadillo. No, querido lector, contrario a lo que se piensa comúnmente, el sake o fermentado de arroz es la pareja por excelencia del sashimiFotos: Escuela Mexicana de Té. 

Originario de la región de Edo, actualmente Tokio, el sushi surgió a principios del Siglo XVIII como un bocadillo rápido y sencillo para las clases populares japonesas.

Arroz sazonado con awasezu, mezcla de vinagre de arroz, azúcar, sal y mirin, así como pescados, mariscos, huevo cocido y algas comestibles (denominadas genéricamente nori) son indispensables para su confección, sin importar si se trata de piezas moldeadas a mano, “nigiri”; rollos, “maki”, o cubos prensados con todo tipo de proteínas, “oshi”.

 

Sushi y té verde

 

Maridando sushi

 

La tradición en territorio nipón dicta que el buen sushi siempre debe acompañarse con té verde tibio, generalmente gyokuro o sencha de alta calidad; la infusión de camellia sinensis ayuda a limpiar el paladar, a refrescarlo entre bocadillos gracias a su marcada astringencia. Delicioso y lógico, ¿a poco no?

Una a una, las distintas expresiones de la camellia ofrecen posibilidades frente a pescados blancos crudos, encurtidos, crustáceos, moluscos… El bancha, por ejemplo, té verde puro de cosecha tardía, de hojas gruesas y grandes obtenidas después de la nueva estación, valorado por sus intensas notas marinas y herbáceas, es perfecto para acentuar el sabor del sushi aderezado con pescados blancos de sabor neutro, como el robalo, de algas marinas y vegetales frescos.

 

Sushi y té verde

 

Crustáceos y moluscos de buena intensidad gustativa, por el contrario, encuentran balance con infusiones ricas en matices torrefactos; un nigiri de erizo de mar es fascinante con pequeños sorbos de genmaicha, blend de sencha y arroz tostado, mientras que makis y oshis de camarón dulce y arroz sazonado hacen lo propio con un buen cuenco de hojicha, té verde puro tostado, de sabor dulce y suave.

Vayamos ahora al extremo de la complejidad sensorial. En el caso de los sushi preparados con pescados encurtidos, como la macarela, la opción son tés verdes potentes, con buena mineralidad y amplia expresión aromática y gustativa.

 

Té con sabor a mar

 

Los expertos señalan al sencha y al gyokuro como los ejemplares idóneos; los matices yodados que caracterizan a estas hebras, así como su dulzor, astringencia y amargor balanceados, los hace perfectos para acompañar untuosas y avinagradas sardinas, lomos de verdel fresco e incluso huevas de pez volador envueltas en pequeñas láminas de nori.

 

Sushi y té verde

 

En el caso de los pescados grasos, las proteínas más deseadas a la hora de servir sushi, es necesario apuntar a tés de igual intensidad. Un nigiri de toro, corte extra graso del atún, es verdaderamente sublime al compás de cualquier gyokuro, mientras que el hamachi, exquisito y de textura mantecosa, casi graso, hace lo propio con un cuenco de matcha de grado ceremonial.

La próxima vez que pruebe sushi, hágalo con una taza de té verde. ¡Se sorprenderá! escueladete.mx