El ex Convento de San Francisco de Nuestra Señora de la Asunción que fue construido entre los años 1537 y 1540, que se encuentra al sureste de la plaza principal de Tlaxcala, hoy fue declarado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), como Patrimonio Cultural de la Humanidad. Fotos: Charly Ramos. 

Esta declaración se da luego de un largo proceso iniciado en 1994, por lo que el nombramiento que hoy recibe el Complejo Conventual Franciscano de Nuestra Señora de la Asunción, mejor conocido como la catedral de Tlaxcala, es una modalidad de extensión, ya que formará parte de la extensión del Bien Seriado Primeros Monasterios del siglo XVI en las Laderas del Popocatépetl, los cuales fueron declarados patrimonio mundial hace 27 años.

 

 

De los primeros conventos de América

 

Convento de San Francisco

 

 

La declaración se dio durante la 44 sesión de la UNESCO, que se lleva a cabo en China, en la que el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos) consideró que el Complejo Conventual de San Francisco, por ser parte del programa de construcción para la evangelización y colonización de los territorios del norte de México, es uno de los tres monasterios más importantes de América, que sigue en pie y que representa esa época.

Esta denominación se suma a la que la UNESCO otorgó en 2019 a Tlaxcala, con el proceso de elaboración de talavera, la cual es considerada como Patrimonio Cultural Inmaterial.

 

 

¿Cómo es el convento?

 

Convento de San Francisco

 

Si aún no lo conoces, te contamos que el Convento de San Francisco de Nuestra Señora de la Asunción está construido con una sola nave, con techado de madera a dos aguas, la cubierta es de viguería, adornado por un artesonado de madera de estilo mudéjar. La cúpula del templo es de forma octagonal, tiene una capilla abierta, una capilla posa, y otra anexa al templo. La torre de su campanario se encuentra separada del conjunto arquitectónico. Lo que fuera la casa conventual, hoy se encuentra el Museo Regional del estado.  visitmexico.com/tlaxcala

 

Sí, sabemos que la pandemia y las tormentas de las últimas semanas no alientan mucho a viajar pero, aunque no lo creas, hay destinos en México que lucen más bellos en época de lluvias. Algunos reverdecen y se llenan de vida, mientras que otros lucen más encantadores y románticos. Incluso los hay que se llegan a cubrir de blanca nieve… Si no nos crees, echa un vistazo a este top 5 y descubre a qué lugares nos referimos. Fotos: Unsplash / Adobe Stock / Arturo Torres Landa. 

 

 

Tlaxcala

 

A pesar de lo que sugieren los memes, Tlaxcala sí existe y es uno de los destinos en México que lucen más bellos en época de lluvias. Hay varias razones para afirmar esto: en primer lugar, las lluvias del verano son el «ingrediente» indispensable para que las luciérnagas puedan reproducirse por miles en Nanacamilpa. Esto se debe a que los bosques donde habitan deben mantener una humedad constante que permita la eclosión y alimentación de sus larvas. Además, la lluvia también impregna de especial belleza las recorridos nocturnos, pues durante la caminata sentirás cómo la humedad del bosque te abraza.

Este año, la temporada de avistamiento de luciérnagas transcurrirá del 18 de junio al 15 de agosto, durante la cual cada santuario podrá operar con un aforo máximo del 30%. Así, lo más recomendable es contratar los servicios de centros de visitantes autorizados. Si quieres una recomendación, contacta a Canto del Bosque, que además de tours también cuentan con cabañas.

 

Nanacamilpa, Tlaxcala, uno de los destinos de México que son más bellos con la lluvia

Valles de Ensenada

 

Imagínate caminar a través de un extenso campo de flores blancas, rojas y amarillas, bajo un cielo azul intenso colmado de nubes. Después de un rato de andar, te topas con unas suaves colinas cubiertas de hierba fresca y, detrás de las montañas, llegas de pronto al mar… Este paisaje, por idílico que parezca, existe y se encuentra en México, específicamente en Baja California. Generalmente áridos y calurosos a lo largo del año, los valles que rodean Ensenada renacen con las primeras lluvias de la temporada, cubriéndose de una bella alfombra de flores y pastos silvestres.

Otro de los motivos por los cuales Ensenada aparece en nuestra lista de destinos en México que lucen más bellos en época de lluvias es que beneficia el cultivo de la uva en Valle de Guadalupe. Así, al ya de por sí encantador panorama de las vides llenas de racimos de uva, agrégale un clima más agradable y una mejor vendimia.

 

 

Oaxaca

 

Seguramente has escuchado que a Ciudad de México la llaman «La Ciudad de los Palacios», o que a la capital de Yucatán la suelen apodar como «la Blanca Mérida«. Sin embargo, estas dos ciudades no son las únicas con un sobrenombre inspirado, y la prueba es «la Verde Antequera»¿o nunca has oído hablar de ella?

Si es tu caso, tienes que saber que nos referimos a la ciudad de Oaxaca, que recibe este apelativo por dos interesantes razones. Lo de «Antequera» se debe a que la fundaron con el nombre de Villa de Antequera de Guaxaca, y lo «Verde» proviene del efecto que causa la lluvia en sus construcciones. La gran mayoría de las iglesias y palacios de Oaxaca fueron construidos con cantera verde, piedra que, al mojarse, adquiere una coloración verduzca muy particular. Así, cuando las tormentas llegan, esta urbe se «pinta» de color olivo; sus calles empedradas destellan con el agua y los cerros de las cercanías, casi siempre secos, reverdecen.

 

 

Ahora que ya conoces este dato curioso, ¿por qué no visitarla en esta temporada lluviosa? El hotel Quinta Real Oaxaca es una gran opción para hospedarte.

 

 

Cuetzalan

 

Casi todos los Pueblos Mágicos de México lucen aún más místicos después de la lluvia, pues adquieren una atmósfera fresca y brumosa muy especial. Sin embargo, entre ellos destaca Cuetzalan por varias razones. Ubicado en la Sierra Norte de Puebla, los bosques templados y tropicales que cubren las elevaciones cercanas se tornan aún más exuberantes. Además, las  cascadas que bajan de sus laderas crecen en caudal y regalan postales únicas, como pasa con Las Golondrinas, El Salto o Corazón del Bosque. Visitar Cuetzalan en esta época también hace que se disfrute más el Jardín Botánico Xoxoctic, un santuario en el que caminarás entre orquídeas, helechos, cafetales y bromelias, especies que adoran la humedad.

Desde luego, pasear por las calles empedradas del pueblo, escuchando el gotear de los tejados y oliendo el aroma a tierra mojada de sus alrededores, es una experiencia única solo apreciable cuando las nubes se desahogan.

 

Nevado de Toluca

 

Si te preguntáramos por la mejor época para ver nieve en el Nevado de Toluca, ¿qué responderías? Muy probablemente dirías que el invierno, pues las bajas temperaturas (y las películas de Hollywood) dejan claro que se trata de la estación nevada. La realidad es que es en la temporada húmeda cuando el Nevado de Toluca luce más blanco, y es por ello que es uno de los destinos de México que son más bellos con la lluvia. Para que caiga nieve sobre este y otros volcanes de México es necesario un índice de humedad atmosférica considerable, el cual es más frecuente en la época tórrida. Así, las tormentas que en las partes bajas caerían como lluvia, en las elevadas cimas se precipitan en forma de nieve. Todos los días se aprende algo nuevo.

 

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Toma el volante y emprende un viaje por carretera para llegar a estos hoteles boutique, glampings y casas en renta. En los alrededores de Ciudad de México, encontrarás privacidad, desconexión y paz absoluta. Anímate y conoce estos extraordinarios hospedajes privados. Fotos: Cortesía. 

 

Hoteles boutique

 

Modernidad natural en Casa Chichipicas, Estado de México

 

Hospedajes privados

 

Explora la nueva normalidad en este íntimo hotel a un par de cuadras del Centro Histórico de Valle de Bravo. La arquitectura contemporánea se fusiona con la tradición de este Pueblo Mágico ubicado alrededor del lago de Avándaro. Sus 10 suites, dos con una relajante terraza en la que cuelga una hamaca y dos más que tienen una tina ideal para baños de sales, seducen con sus techos altos de madera y ventanales con una vista inmersiva al bosque. Los espacios comunes poseen una decoración en tonos neutros y con detalles en madera, desde la sala de TV, hasta la alberca climatizada, el jacuzzi y la terraza. Para completar tu estancia, revisa su catálogo de experiencias, que incluye masajes terapéuticos y de relajación en tu propia habitación y recorridos en velero para explorar la belleza del lago.

Toma nota Habitaciones desde $3,300 en casachichipicas.com Duración del trrayecto: son 143 kilómetros, con un traslado aproximado de dos horas. Ruta y casetas: toma la autopista México-La Marquesa, con un costo de peajes de $88.

 

Ambiente de campo en Casa de Aves, Guanajuato

 

Hospedajes privado

 

Su estilo campestre es ideal para visitar después de la emergencia sanitaria, gracias a su privacidad. A 30 minutos del centro de San Miguel de Allende, Casa de Aves enmarca impresionantes vistas naturales. Sus 10 villas, enclavadas entre árboles y la flora y fauna típica de la zona, están amuebladas con Paquimé, artesanías con iconografía antigua en la que abundan figuras geométricamente perfectas. Durante tu estancia camina por veredas entre amplios jardines verdes, siéntate a la orilla de un lago y respira aire fresco en este santuario del descanso, que además combina experiencias como yoga, temazcal, masajes y faciales.

Toma nota Habitaciones desde $2,120 en casadeaves.mx. Duración del trayecto: son 292 kilómetros, con un traslado de casi cuatro horas. Ruta y casetas: toma la autopista México-Querétaro, para después ir hacia San Luis Potosí-San Miguel de Allende, con un costo de peajes de $229.

 

Glampings

 

Soledad privilegiada en Isla Tzibanzá, Querétaro

 

Hospedajes privados

 

Otro de los hospedajes privados que no te puedes perder, está en esta isla en donde tendrás una experiencia placentera marcada por la tranquilidad del agua. Es ideal para visitar tras el confinamiento, pues sus 12 cabañas estilo safari, bien equipadas y con capacidad de hasta cuatro personas, están separadas entre sí y rodeadas por áreas verdes. Al estar inmerso en las orillas de la presa Zimapán, tu mente se despejará desde el momento en que llegas al muelle a bordo de una lancha. Todas las mañanas disfrutarás de una hermosa vista hacia la Sierra Gorda, que puedes seguir contemplando mientras desayunas en el restaurante El Anzuelo. Ahí también se sirve el menú de comidas y cenas con cocina casera, que marida con los vinos de la región. Puedes realizar pesca deportiva, kayak y paseos en bote.

Toma nota Desde $1,400 por persona. Reserva vía WhatsApp al 773 182 6612. FB: @Isla Tzibanzá. Duración del trayecto: son 226 kilómetros, con un traslado aproximado de tres horas y media. Rutas y casetas: toma la autopista México-Querétaro, para salirse hacia Cadereyta de Montes, con un costo de peajes de $178.

 

 

Colección de aventuras en Picocanoa Rodavento, Veracruz

 

Glampings

 

La abundante vegetación y el murmullo del río de los Pescados son los anfitriones en este hotel diseñado para la aventura en Jalcomulco, que lo hacen uno de los hospedajes privados más privilegiados. Su concepto está dividido en dos áreas: Pico, una aldea de 24 cabañas con terrazas, en las que lucen materiales de madera, adobe y palma, y Canoa, una opción de glamping solo para adultos, en la que hay 10 suites, inspiradas en las antiguas expediciones africanas. Ambas exaltan el paisaje natural e inspiran a la relajación de toda tu familia, incluida tu mascota. Pero aquí, las actividades dispararán tus niveles de adrenalina, ya sea a través del rapel, rafting, circuitos de tirolesas, recorridos en bicicleta de montaña o exploraciones en un cañón. Sin embargo, también contemplan experiencias culturales, como visitas a fincas cafeteras o talleres de artesanías.

Toma nota Habitaciones desde $3,550 en picocanoa rodavento.com. Duración del trayecto: son 325 kilómetros, con un traslado de cuatro horas y media. Ruta y casetas: dirígete hacia la autopista México-Puebla, para tomar la desviación hacia Xalapa, con un costo de peajes de $628. 

 

Casas en renta

 

Diseño armónico en Japoneza Retreat, Tlaxcala

 

Hospedajes México

 

Ubicada muy cerca del Pueblo Mágico de Tlaxco, es una casa de campo que invita a contemplar la cercana laguna de Atlanga para luego dejarse consentir por el confort de sus espacios interiores de una forma privada. Está construida con materiales locales empleando la técnica japonesa shou-sugi-ban, que consiste en quemar la superficie de la madera y luego someterla a un baño de agua para preservarla. Además de una sala de estar con televisión, comedor para ocho comensales y una cocina, tiene cuatro habitaciones para que elijas la que mejor se acomode a tu estilo: nuestra favorita es Onsen, con un sauna y acceso a la terraza. Si viajas con un grupo de niños, la habitación con literas les va a encantar; si es con mascotas, estás de suerte porque es una propiedad pet friendly. Y finalmente, desearás pasar largas horas dentro del jacuzzi de madera de su terraza, con vistas a la tranquila laguna.

Toma nota Casa desde $10,000 en airbnb.com; incluye el uso del jacuzzi por un día y del sauna por dos horas. Duración del trayecto: son 289 kilómetros, con un traslado de dos horas y media. Ruta y Casetas: toma la autopista Peñón-Texcoco hacia Calpulalpan, con un peaje de $48.

 

Remanso entre árboles en La Casa de los Cuatro Vientos, Querétaro

 

 

Hoteles

 

Cerca de ahí de Pinal de Amoles hallarás esta cabaña privilegiada. Diseñada como un loft, la intención de sus constructores era que la estructura se adaptara a los alrededores y permitiera que la naturaleza tuviera un papel protagónico. Así, desde cualquier punto de la propiedad obtendrás algunas de las panorámicas más espectaculares de la Sierra Gorda, que podrás compartir con un máximo de cuatro ocupantes. Posee una cama king size en la planta baja, dos camas individuales en el nivel superior, una sala con chimenea (las temperaturas suelen ser bajas), cocineta y baño completos, un comedor, terraza y área ajardinada con asador. Se trata del lugar ideal para dedicarle muchos posts de Instagram y tardes enteras de contemplación y vino junto al fuego.

Toma nota Desde $1,890 en casa4vientos.com; no se admiten mascotas. Duración del trayecto: son 316 kilómetros, con un traslado de cuatro horas y media. Ruta y casetas: toma la autopista México-Querétaro, para ir hacia Jalpan de Serra, con un costo de peajes de $178.

 

Descanso contemporáneo en Tepoztlán Bungalow, Morelos

 

Hospedajes privados

 

Otro de los hospedajes privados que no puedes dejar de disfrutar se encuentra en Tepoztlán, se trata de un sitio muy original y privado, se trata de Tepoztlán Bungalow, un espacio vanguardista diseñado por la firma Cadaval & Solá Morales. Enclavado en una pendiente y rodeado de vegetación endémica, este alojamiento fue proyectado de tal forma que el paisaje y la luz penetran sin obstáculos por la fachada principal, recubierta por grandes ventanales. En sus amplias terrazas puedes relajarte durmiendo en su hamaca o leyendo un libro, a la vez que podrás usar la alberca y el jardín, ubicado en el terreno de los propietarios. En cuanto a sus interiores, tendrás a tu disposición dos cuartos (uno con cama king size), baño completo, comedor y cocina equipada.

Toma nota Bungalow $2,500 en airbnb.com. Si quieres utilizar la alberca, el costo de encendido de la caldera es de $70. Duración del trayecto: son 93 kilómetros, con un traslado aproximado de una hora y media. Ruta y casetas: toma la autopista México- Cuernavaca, para dirigirte hacia la salida de Tepoztlán, con un costo de peajes de $148.

 

¿Listo para disfrutar de estos hospedajes privados? ¡Cuéntanos cuáles visitas en nuestras redes sociales @FoodandTravelMX.

 

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Cada estado de nuestro país posee una enciclopedia completa de ingredientes y preparaciones únicas en sabor que vuelven casi imposible la tarea de hacer un listado específico. Para que te des un breve paseo por el universo culinario de México, realizamos un listado de los 10 platillos típicos de algunos estados, que de seguro harán que se te haga agua la boca. Fotos: Cortesía de los estados/ El Tajín/ Mariana Mendoza / Food and Travel.

 

Pollo con mole de Xico, Veracruz

 

Platillos típicos

 

Quien ha ido a Xico habrá percibido la magia que este pueblito guarda en cada rincón y que parece que trae consigo la neblina que baja. Es por eso que sus famosos moles no podían estar lejos de esa personalidad. De acuerdo con el sitio web Larousse Cocina, el pollo con mole es un guiso de color negro y sabor dulzón.

Sus ingredientes son los chiles ancho, mulato y pasilla; manteca de cerdo, ajo, cebolla, tortilla, bolillo, pasitas, ciruelas pasas, avellanas, nueces, ajonjolí, cacahuates, almendras, piñones, pepitas de calabaza, plátano macho, jitomate, chocolate, anís, canela, pimienta, orégano y azúcar o piloncillo. Con tantos ingredientes ya podrás imaginarte su gran sabor. Se sirve con piezas de pollo o guajolote, acompañado en ocasiones, de arroz con camarón seco.

 

Taco estilo Ensenada, Ensenada

 

Taco Ensenada

 

Definitivamente, los mariscos de esta ciudad de Baja California son de los más frescos y sabrosos de México. Y acompañarlos con tortillas puede ser considerada una experiencia casi religiosa. Dicen que este taco nació entre 1960 y 1961 en el llamado “Mercado Negro”, conocido por la frescura de sus productos del mar.

Su composición consta de un trozo de pescado capeado frito en manteca o aceite (que le da una consistencia dorada y esponjada), acompañado de col picada, salsa bandera (jitomate, cebolla y chile serrano), un toque de mayonesa o aderezo, limón y sal, todo sobre una tortilla de maíz o de harina, si se prefiere.

 

Enchiladas potosinas, San Luis Potosí

 

Platillos típicos

 

Otro de los platillos típicos de México son las enchiladas potosinas. La vox populi asegura que uno de los platillos más icónicos y deliciosos de la gastronomía potosina fue creado accidentalmente por Crisatina Jalomo, cuando en el molino, en lugar de entregarle masa de nixtamal pura, se la dieron mezclada con chile. Para no desperdiciar la masa la usó para hacer tortillas. El resultado le gustó tanto que a partir de ese día siempre pedía la misma mezcla en el molino. Luego mejoró sus tortillas colocándoles relleno de queso y salsa, las dobló como una quesadilla, las puso al comal y añadió crema y queso rallado.

 

Caldo de piedra, Oaxaca

 

Platillos típicos

 

Si nunca has probado este “original” platillo (entre comillas porque data de la época prehispánica), no sabes de lo que te has perdido. Está preparado con agua, rebanadas de jitomate, chile verde, cebolla en rebanadas, ajos machacados y hierba santa. Su peculiaridad es que se le agregan dos o tres piedras calientes al rojo vivo que estimulan la ebullición del agua. Una vez cocidas las verduras se le añaden trozos de pescado o camarones de río, y se come en la misma jícara en la que fue elaborado. Este caldo subsiste hasta la actualidad en algunas comunidades indígenas del país, entre los chinantecos de Oaxaca. En el pueblo de Usila le agregan camarón, pescado, cilantro, epazote, ajo, tomate, cebollín y chile seco, de acuerdo con Larousse Cocina.

 

Birria, Jalisco

 

 

Birria

Sin duda se trata de uno de los platillos típicos más populares de nuestro país. Este guisado se elabora con carne de chivo condimentada con una mezcla de chiles (chilacate, guajillo, pasilla, morita y cascabel), ajo, cebolla, pimienta negra, clavo vinagre, comino, canela, tomillo ajonjolí y laurel. Primero se sala la carne y luego se deja marinar con la salsa por alrededor de 12 horas. Luego, la carne se envuelve en pencas de maguey, con más mezcla de marinado, y se introduce en una olla sellada para cocinarla sobre el fuego o al horno.

Una vez que la carne está suave, se separa el jugo para añadirle jitomate previamente asado y molido, y se pone a hervir. Al caldo condimentado, se le añade la carne y está listo para servirse acompañado de cebolla picada y orégano, limón, tortillas y salsa picante. Cada municipio de Jalisco cuenta con su propia versión y se puede utilizar carne de conejo, tejón, tlacuache, res, cerdo o venado.

 

Asado de Boda, Zacatecas

 

Comida mexicana

 

Se cree que su origen data de la época revolucionaria y que fue elaborado especialmente para Pancho Villa quien, a su llegada a Zacatecas, pidió que se le preparara carne de cerdo con chile, pero que le agregaron otros ingredientes al adobo como nueces, almendras, canela y diversas especies, por lo que tiene toques dulces. Este es uno de los platillos más tradicionales y populares del estado; se sirve en todo tipo de celebraciones, en especial en las bodas. Se acompaña de arroz, frijoles y tortillas.

 

Asado de puerco en chile colorado, Chihuahua

 

Platillos típicos

 

Este es uno de los platillos típicos más populares del estado. Se prepara en rancherías y se sirve en bodas; por lo general se sirve con arroz rojo y frijoles. Además, es el relleno por excelencia de los famosos burritos, de las gorditas y los tamales en este estado. Se utiliza carne de cerdo, la cual se pone a cocinar para que suelte su grasa y se dore con ésta. Se debe cocinar lento para que se ablande. Una vez dorada, se agrega harina para espesar y salsa de chile colorado.

Para ese adobo se utilizan tres tipos de chiles: guajillo, de la tierra y ancho, los cuales se hidratan en agua caliente y se licúan con agua y ajo. Cuando la carne está integrada con la salsa, se agregan hojas de laurel, comino, canela, semilla de cilantro, clavo, chocolate de mesa, pimienta, orégano y sal al gusto. ¡Delicioso!

 

Uchepos, Michoacán

 

Uchepos

 

Se trata de tamales dulces, preparados por manos purépechas, hechos con elotes muy tiernos mezclados con leche, azúcar, nata o crema y sal, de acuerdo con Larousse Cocina. Se pueden comer solos, pero con frecuencia se sirve con salsa de jitomate o tomate, crema y queso fresco; también se puede acompañar con rajas de chile poblano o chilaca.

Para su elaboración se desgranan y muelen los elotes, y las hojas se guardan para envolverlos. En un recipiente se bate la nata con el azúcar y al final, se agrega la masa de los elotes. Se coloca una cucharada grande de la masa en el centro de cada una de las hojas y se introducen en una vaporera para su cocimiento.

 

Frijol con puerco, Yucatán

 

Frijoles

 

La tradición en este estado dicta que los lunes se debe comer este platillo. ¿La razón? Los cerdos se mataban los días sábado, y lo que no se vendía, parte del retazo (cabeza, patas y algunos trozos de maciza) se utilizaba los lunes para prepararlo con frijoles. Es un guiso que va acompañado de cilantro, rábanos finamente picados y de chiltomate, una salsa a base de habanero tatemado y jitomate. ¡Qué rico!

 

Tortas de huazontles rellenas de queso, Tlaxcala

 

Huazontles

 

Los huazontles son una planta muy importante para la cultura mexicana por sus propiedades nutritivas (calcio, hierro, fósforo, vitaminas A, C, E y complejo B), y porque era utilizada en ceremonias prehispánicas. Para los tlaxcaltecas, las tortitas de huazontle rellenas de queso y bañadas en salsa de jitomate son un platillo que han comido desde niños en casa de sus abuelas. Un platillo entrañable y de gran sabor. Las tortitas van capeadas con harina y huevo, y por lo general se rellenan de queso fresco o panela.

Cuéntanos en nuestras redes sociales cuántos platillos típicos de México has probado y cuáles te faltan por probar.

 

El equipo de Food and Travel México te llevará de paseo por un país cuyo encanto hipnotiza a propios y a extraños. Entre anécdotas entrañables, reafirmarás que esa magia reside en sus costumbres y rituales, la diversidad de sus paisajes naturales, la calidez de su gente y su cocina legendaria. Disfruta y al mismo tiempo recorre y cómete a México a través de estos nueve relatos que te harán reafirmar tu amor por nuestro país.

 

Real de Catorce

 

 

Elsa Navarrete, coeditora, regresó impregnada de la melancolía que provoca caminar entre los vestigios de una bonanza minera, y sorprendida al ver el ritual de los huicholes en el Cerro del Quemado, en San Luis Potosí, México. 

 

Recorrer México

 

Todo se inició cuando crucé la puerta de entrada obligatoria: el Túnel de Ogarrio. Después de esperar mi turno, ya que para autos es de un solo sentido a la vez, y recorrer sus 2.3 kilómetros que datan de principios del siglo XX, descubrí al final la joya del altiplano potosino con 1,400 habitantes, rodeado de leyendas y paisajes semidesérticos.

En la actualidad, el tiempo parece haberse detenido en sus calles y edificios de piedra. Los vestigios de un esplendor remoto te transportan del bullicio urbano a una atmósfera introspectiva. Y esta impresión es su fuerza de atracción. Entre bosques de yucas (palma china), biznagas y otras cactáceas, la magia está suspendida en el aire. Eso se debe en parte a que aquí se encuentra el Wirikuta, la tierra sagrada para los huicholes o wixárikas. Para conocer su centro ceremonial, el Cerro del Quemado, donde esta etnia culmina la peregrinación que hace cada año, solicité los servicios de los caballerangos que están sentados en la calle principal, con todo y sombrero.

Don Chuy fue mi guía. Y mientras me ayudaba a montar al Cuervo, un caballo marrón de 10 años, me explicó que el recorrido duraría en total, ¡tres horas!; hecho que mis piernas resintieron al día siguiente. La mina de San Agustín, de una arquitectura islámica muy particular, fue apenas el umbral de este camino conocido de memoria por los caballos.

“Suban rápido, están los huicholes”, gritó un caballerango que venía descendiendo del cerro. “Están de suerte”, insistió al comentar que su última peregrinación ya había ocurrido. En esa ocasión, casi única, algunos habían regresado para volver a pedir a sus dioses por las lluvias. En la cumbre de la montaña, donde nace el sol para los wixárikas, presencié la ceremonia a lo lejos.

Fue inevitable, se me enchinó la piel al sentir el fervor del ritual en sus altares de piedras, con el desierto a la lejanía. Al terminar, dejaron sus ofrendas y regresaron a sus casas, que tal vez podían estar en Nayarit, Jalisco o Durango. visitmexico.com/

 

San Cristobal de Las Casas

 

Nunca se imaginó Aurora Yee, redactora, lo que aprendería entre las calles bohemias de San Cristobal de Las Casas, Chiapas, México, en donde late con fuerza la cultura chiapaneca rodeada de edificios coloniales y etnias autóctonas.

 

Recorrer México

 

Caminaba en las calles de San Cris, como le llaman cariñosamente los locales, cuando de pronto el cielo dejó caer pequeñas gotas de lluvia que apenas acariciaban. No aceleré el paso, porque como habitual visitante de este encantador Pueblo Mágico, sabía que las lloviznas son pasajeras e intermitentes.

De pronto la vi bajo el tejabán de una casona colonial. Era una niña de unos ocho años, cabizbaja, pero con la mirada más expresiva de todo el andador peatonal de la calle 20 de noviembre. Me enternecí con su gesto infantil de colocar toda su venta en el piso para jugar. La mercancía constaba de monederos bordados y servilletas de textiles coloridos, y estaban amurallados con algunos paraguas. Le sonreí y me sonrió. Me pareció que esa escena era digna de recordar, así que lo hice. Preparé la cámara y le tomé una foto.

Ella me vio y me frunció el entrecejo con desaprobación. Los tzotziles, como otros pueblos mayas, tienen la creencia de que su alma puede ser capturada si son fotografiados. Entonces me acerqué y le pregunté si aquello le había molestado. No me contestó hasta que puse interés en sus bellas artesanías y en su indumentaria. Así, supe que se llamaba Ikal, que luego de la escuela ayudaba con la venta familiar y que eran de Zinacantán, un pueblo cercano dedicado a la elaboración de textiles.

Después de la plática, ya tenía un par de piezas, un paraguas en la mano y la enseñanza de ser más respetuosa con las fotos. No estaba enojada en realidad, aquella tan solo era una niña que, como muchas otras, vive una injusta infancia con trabajo y pocas oportunidades, con un mundo de responsabilidades, pero también una vida llena de sueños. Una vez hecha la compra, ella se fue feliz con todas sus cosas y con un nuevo semblante. Yo seguí explorando por las calles empedradas, ahora con la protección del paraguas de Ikal. visitmexico.com/destino/san-cristobal-de-las-casas

 

Nanacamilpa

 

En Tlaxcala, muy cerca de Ciudad de México, Mariana Mendoza, coordinadora editorial, comió rico, bebió pulque y tuvo encuentros cercanos con dos especies animales: una muy tierna; otra, un tanto salvaje.

 

Tlaxcala

 

Existen historias de encuentros con animales salvajes que a veces creemos que solo suceden en lugares tan remotos como África. Así que jamás me hubiera imaginado lo que me pasaría en un sitio tan cercano a Ciudad de México como Tlaxcala. Este es uno de los estados más pequeños, pero sorprendentemente rico en gastronomía, naturaleza y cultura.

El día inició visitando San Bartolomé del Monte, una ex hacienda pulquera en Nanacamilpa, donde vivió el llamado Rey del Pulque, Ignacio Torres Adalid. Continuó con el recorrido por los campos magueyeros del Rancho San Isidro, donde observamos esa generosa planta que entrega su corazón para sangrar el delicioso aguamiel, que luego se convierte en pulque.

La jornada terminaría pasando la noche en un sitio encantador llamado Canto del Bosque, un centro ecoturístico con cabañas y zona de acampado; pero antes, un acontecimiento sin igual nos esperaba: el avistamiento de luciérnagas. Cuando oscurecía, nos reunimos en un numeroso grupo para caminar juntos hacia el interior del bosque.

Pero en nuestra labor periodística, uno de los guías decidió que lo mejor era que nos apartáramos del resto para caminar con calma y detenernos largo rato para tener una mejor percepción de la experiencia. Después de disfrutar de la seductora danza de los pequeños insectos, y un tanto extasiados por esa magia de la naturaleza, caminábamos al lado del guía.

Yo, con grabadora en mano, hacía preguntas sobre algunos detalles. De pronto, un gruñido al lado del camino me hizo interrumpirlo: “¿qué fue eso?”, pregunté un poco alarmada. “Ha de ser un gato montés”, me respondió. Tratando de guardar la calma, apreté el paso para llegar hacia la planicie donde iniciaba el campamento, donde había otras personas esperándonos.

Cuando llegamos, nuestro guía les contó lo que habíamos oído, pero otro lo interrumpió: “Pues por ahí hay un lobo paseándose… Miren, si dirijo la luz de mi lámpara hacia los árboles, se iluminan sus ojos color rojo”. Por instinto volteé tratando de encontrarlos, pero algo en mi interior me gritó: “¡Corre, Mariana, correeeeee!”. Prefiero no pensar en cómo me vi huyendo despavorida, pero las risas me lo dijeron todo. Facebook. @santuario.delasluciernagasnanacamilpa

 

 

Hierve el Agua

 

En la antigüedad fue un sitio sagrado para los zapotecas que ahí habitaban, por el nacimiento de agua. Ahora, este destino oaxaqueño debe ser respetado y preservado… Cuando lo conoció Ana Belen Ortiz, coeditora web, la hizo soñar.

 

Recorrer México

 

La primera vez que conocí Hierve el Agua en Oaxaca, México, fue acompañada de un grupo extraordinario de periodistas y un influencer. Llegamos al abrir el parque, caminamos por un pasillo de terracería que nos llevaría a las famosas cascadas petrificadas y las pozas de agua, mejor conocidas como el Anfiteatro.

Al final del camino, estaba una reja que era el acceso a este sitio que posee más de 2,500 años de antigüedad. En ella colgaba un letrero con las reglas para entrar, la más importante: respetar y preservar el lugar. Una vez adentro confirmé por qué los zapotecas lo consideraban un espacio sagrado, pues al ver las pozas de agua me maravillé por su forma, pues se cree que fueron un sistema de riego en la antigüedad.

Pero al subir la mirada, las cascadas petrificadas me impactaron: se trata de agua carbonatada que quedó en estado sólido hace miles de años, cayendo a más de 50 metros de altura. Sentí tanta paz que tuve el deseo de nadar en las pozas, no sin antes preguntar si estaba permitido. Me dijeron que era un sitio de contemplación, pero que no estaba prohibido nadar.

Entré y dejé que mi cuerpo flotara: éramos la sierra, las cascadas, las pozas y yo… Hasta que el zumbido intenso de un “insecto” me hizo salir del trance: abrí los ojos y no vi nada, volví a cerrarlos, pero mi paz se interrumpió por completo al escuchar: “Si no lo apagas, tendremos que quitártelo”. Inmediatamente salí del agua para ver lo que ocurría. Eran 10 lugareños con machetes enfundados, desconcertados por un objeto volador.

Ese zumbido provenía de un ¡dron!, que había sido volado sin permiso por el influencer. Los lugareños manifestaron su molestia, más cuando el sujeto se negó a apagarlo, pues dijo: “Necesito las mejores fotos”. Al ser él parte de nuestro grupo, nos pidieron a todos retirarnos.

A causa de ello, tuve que decirle adiós a este bellísimo lugar, que, como todo buen periodista de viajes, investigué antes de visitarlo. Así, me enteré de que algunas regiones de Oaxaca, como San Lorenzo Albarradas, se gobiernan bajo el régimen de Usos y Costumbres, por lo que es fundamental respetar las prácticas de los habitantes. Al alejarnos, me retumbaba en la cabeza el refrán: “Donde fueres, haz lo que vieres”. oaxaca.travel

 

 

Ixmiquilpan

 

Por una noche, Montserrat Romero, redactora, fue una indocumentada en Hidalgo: cruzó pantanos, brincó bardas, se enfrentó a ladrones y se arrastró por el lodo para no ser hallada. Al final, la comunidad hñahñu le dio una gran lección.

 

Destinos nacionales

 

Un fin de semana me fui al Parque EcoAlberto en Ixmiquilpan, Hidalgo, mi estado natal. Este complejo dirigido en su totalidad por indígenas hñahñu llamó mi atención porque es un todo incluido de actividades: parque acuático con aguas termales, área de acampar, toboganes, kayak, tirolesa y rapel.

Pero, sobre todo, ofrece una experiencia interesante: una caminata nocturna para vivir la travesía de un inmigrante ilegal, un tipo de turismo negro. Así que, después de una tarde acuática, a las 20:00 horas llegaron por nosotros en unas camionetas de redilas. Nos subimos en la parte de atrás y emprendimos el viaje a la montaña.

¡Yo, Freddy, soy su pollero, y vamos a cruzar esa frontera!”, nos decían antes de que se escucharan las sirenas de la Border Patrol. “¡Stop right there!”, gritaron. La adrenalina subió, corrí para no ser atrapada; suerte que no corrieron algunos. Nos escondimos entre árboles, mientras los polleros daban instrucciones: “¡agáchate o te quedas aquí tieso!”.

En el camino nos encontramos a ladrones y narcotraficantes. Cruzamos un río y el agua nos llegaba a las rodillas. Entré a una zona rocosa, era difícil de ver, mientras brincábamos bardas con alambres de púas. Caímos en un pantano y en equipo nos ayudamos a salir; también atravesamos túneles.

El propósito de esta caminata es crear conciencia, ya que hace muchos años los pobladores de esta comunidad emigraban en un 70% a Estados Unidos, para vivir el sueño americano, lo que ocasionaba muchas muertes. “¡Pecho tierra!” Se oyeron unos “disparos” y nos tiramos al suelo, y así recorrimos un tramo.

La media noche nos alcanzó cuando estábamos por fin cruzando la frontera, y ahí estaba la policía con altavoces creando conciencia: ¿por qué te vas de tu país?, y es que 400 migrantes murieron en la frontera entre México y Estados Unidos en 2018. Nos vendaron los ojos y caminamos uno tras otro hasta que paramos y nos quitamos el paliacate.

Una gran colina se alzaba frente a nosotros iluminada con muchas antorchas que simbolizan a los hñahñus fallecidos como braceros. Una experiencia que enseña a ser solidarios, trabajar en equipo, vencer miedos y creer en ti mismo. Música, un café caliente, pan de la región y la camaradería de esta comunidad indígena cerraron aquella noche. visitmexico.com/estados/hidalgo

 

 

Puebla

 

Conocido por su arquitectura colonial y talavera, este destino también llama desde su legado culinario, cuyo chile en nogada hace que Laura Otero, coordinadora digital, vuelva una y otra vez, pero esta vez lo comió con una gran compañía.

 

Destinos de México

 

Visitar Puebla es regocijar la mirada y satisfacer al paladar. Caminar por su Centro Histórico siempre es un goce, gracias a la sofisticación barroca que engalana cada una de sus bien trazadas calles. En esta ocasión, quise volver como tantas veces para saborear un chile en nogada. Ya antes había probado algunos otros en este mismo destino, pero volví para dirigirme a lo que me habían dicho que era la parada obligada para estos menesteres.

Caminé hacia Augurio. Me detuve en la pequeña puerta de madera desde donde se logra ver la cocina abierta de color rosa mexicano. Ahí estaba su chef, Ángel Vázquez, quien con una sonrisa genuina recibe a sus comensales para presentarles su obra maestra: receta extraída del recetario familiar de su padre. Caminé por el piso de piedra para sentarme a la mesa mientras recorría el lugar con la mirada. De reojo pude observar en una de las esquinas a un señor de figura esbelta y cabello cano; tenía tanto parecido con Ángel que en seguida los emparenté.

No podía esperar para probar el tan ansiado manjar de historia conventual, así que fue lo que ordené. Llegó, le tomé una foto mientras él ya me seducía con su aroma a nuez. Hice el primer corte y, mientras la nogada se extendía por el plato, aquel señor que había visto minutos antes se acercó a mi mesa para decir:

Nosotros traemos los ingredientes de este chile; de la mano de los productores, vamos al campo, los recolectamos, somos sus amigos y ellos son los nuestros”. Sin preguntar se sentó a la mesa para platicarme del orgullo que siente por su hijo, por sus logros y viajes.

Y así, mientras fui consumiendo mi antojo, el padre del chef se confesó un amante de la cocina, de los sabores de México y de las tortillas hechas a mano. Sin darme cuenta de las más de tres horas que habían pasado, comprobé que no había errado en decidir entrar a este rinconcito donde no solo se come delicioso, sino donde cada día se cuentan verdaderas historias de amor a México, a su gente y a su gastronomía. visitpuebla.mx

 

Las coloradas

 

Entre una majestuosa playa rosa y un peculiar guía turístico, Andrea Cabrera, redactora, se adentró en los característicos paisajes naturales y la calidez de la gente que habita el norte de Yucatán.

 

Recorrer México

 

Me alisté para salir de Mérida, Yucatán, México, y emprender otra aventura en las calurosas tierras yucatecas. Dos horas y media de viaje en carretera y ya veo enormes montañas de sal que indican mi llegada a Río Lagartos, pintoresco pueblo que alberga Las Coloradas, un paraje reconocido por sus famosas minas de sal, donde sucede uno de los fenómenos naturales más instagrameables de los últimos tiempos: la “playa rosa”.

Apenas terminé de estacionar el auto cuando Iván —uno de los guías que ahí ofrecen tours de 25 minutos— ya tocaba mi ventanilla. Me llamó la atención que aún estando bajo los intensos rayos de Sol, él conservara una sonrisa fresca que invitaba a sonreír también, así que cerramos el trato por $50.

En la cerca, donde empieza la visita, no paraba de mirar los tatuajes, pies descalzos, bronceado intenso y sombrero de safari de Iván; incluso su aspecto me hizo dudar de haberlo elegido como nuestro guía. Con actitud bonachona y la sonrisa en el rostro —que no había desaparecido aun cuando estábamos a 38 ºC—, comenzó a explicarnos perfectamente el fenómeno que ocurre en este lugar.

Cuánto conocimiento almacenado en esa apariencia tan desenfadada, sin pretensiones ni egocentrismos. Me explicó que, debido a los altos niveles de salinidad de estas aguas, se forman halobacterias, que junto a las algas que habitan el lugar, producen grandes cantidades de sustancias color rojizo y entintan el lugar de un característico tono rosado.

La pasarela entre arena, agua rosada y rayos de Sol la disfruté aún más acompañada de él, quien me recordó que la vida es para vestirte como quieras y ser la versión que quieras de ti, porque eso no define lo que hay en tu interior. Finalmente, Iván se ofreció a tomarnos la foto del recuerdo y hasta nos convenció de hacer poses graciosas que se quedaron en la memoria. yucatan.gob.mx/?p=coloradas

 

La Paz

 

La riqueza del mar de Cortés en Baja California Sur es innegable, por eso viajeros de todo el mundo acuden a él para admirar su vida subacuática. Arturo Torres, redactor, se encontró con uno de sus habitantes temporales más sorprendentes.

 

La Paz Baja California

 

Partimos de la marina de La Paz temprano por la mañana. Sabíamos que, entre más joven el día, mejores serían las posibilidades de lograr nuestro objetivo. A bordo del bote, una pareja proveniente de Japón no podía ocultar el doble asombro que sentían: en parte por estar cerca de cumplir su sueño de nadar en el llamado Acuario del Mundo, así como por toparse con un sujeto con una playera de la película nipona Mi vecino Totoro, es decir, yo.

Finalmente, tras cerca de 40 minutos de haber zarpado, la radio del capitán inició a crepitar: “¡allí, una aleta, a las 12:10!”, le indicaron de otra embarcación. Y entonces lo vimos: como un enorme colmillo negro, la aleta dorsal de un tiburón ballena rompía las olas. Sin pensarlo dos veces, nos colocamos las aletas, el respirador y el visor, y nos arrojamos al Mar de Cortés.

Dentro, la opacidad de las aguas complicaba ver al pez más grande del planeta; el temor de todos era que el tiburón ballena se hubiese alejado hacia profundidades inalcanzables para dos japoneses y un mexicano armados con traje de baño y equipo de esnorquel. De pronto, los rayos del Sol penetraron el agua, y a través de ese prisma luminoso lo pudimos ver: enorme como un autobús de pasajeros, sereno como una montaña. La luz le caminaba por el dorso, dejándonos ver el tono azulado y las manchas blancas que salpican su piel.

Lo más sorprendente de nadar al lado de un tiburón ballena es la aparente calma con la que se desplazan, y que con el más mínimo movimiento de su musculosa cola son capaces de escabullirse a gran velocidad, hacia la negrura.

Así, fueron varios los intentos que hicimos por alcanzar al gigante, y cuando estuvimos a punto de rendirnos, el tiburón ballena apareció por última vez, abriendo las fauces desdentadas, haciéndonos creer que se despedía con una sonrisa de dos metros, como la que dibujábamos nosotros detrás del respirador. golapaz.com

 

 

Biósfera de Sian Ka’an

 

En una incursión a la Riviera Maya, Arlett Mendoza, editora adjunta, quedó enamorada de los tonos azules y verdes de la laguna de Muyil. Flotando en sus aguas prístinas mientras escuchaba el trinar de las aves, sintió que podía tocar el cielo.

 

Recorrer México

 

Flotar hacia el éxtasis, fue la promesa en mi itinerario para descubrir los canales de Muyil, asentados en la Reserva de la Biósfera de Sian Ka’an. Sonreí pensando que era exagerada la expectativa, pero la incredulidad comenzó a desvanecerse desde mi llegada a este destino de la Riviera Maya.

La imponente selva y los diversos tonos de azul, celeste, turquesa y verde de la laguna de Muyil que se une con el mar Caribe, me hipnotizaron. Esta reserva es rica en biodiversidad: en sus 528 mil 148 hectáreas se encuentran ríos subterráneos, cenotes, lagunas y manglares habitados por 100 especies de mamíferos, cuatro de ellos en peligro de extinción: el jaguar, el tapir, el manatí y el pecarí. De ahí que desde 1987 fuera declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Abordé una lancha que cruzó parte de la laguna hasta llegar a los canales que trazaron en medio del manglar los antiguos mayas como vía para el comercio, y que hoy, se aprovechan para los viajeros ávidos de experiencias auténticas. El guía me pidió meter las piernas por donde van los brazos del chaleco salvavidas y que me lanzara al agua, todo un alivio en medio de los 39 °C del clima que ya me hostigaba. La idea era simple: fluir con la corriente del canal, sin más esfuerzo que un pataleo ligero para guiar el cuerpo.

Y mientras tanto, escuchar el trinar de algunas de las 300 especies de aves que habitan la reserva y el correr del viento, observar pequeños peces plateados a través de las cristalinas aguas, y perderme en medio de las esponjosas nubes blancas que acompañaban mi recorrido. Sin duda, la promesa de “flotar hacia el éxtasis” se había cumplido.

De regreso a tierra firme, exploré con un guía experto la zona arqueológica de Muyil, una de las más importantes de las 20 que se hallan en Sian Ka’an. Descubrir las edificaciones de esta ciudad que floreció entre los años 1200 y 1250, completó esta inmersión por un rincón celestial de la Riviera Maya. visitartulum.com

 

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Sincretismo, estacionalidad, herencia y sabor… En los fogones tlaxcaltecas las ollas dan cuenta de sabores únicos en su diversidad de moles. Aquí te antojamos seis moles deliciosos. Texto: Alejandro Mendoza / Fotos: Adobe Stock. 

1.- Mole de fiesta o colorado: se prepara con chiles ancho, pasilla, mulato y chipotle. Se sirve con gallina criolla o con guajolote, dependiendo la ocasión. Se acompaña con tamales tontos de anís (sin salsa ni carne). En las fiestas se sirve con arroz rojo y frijoles de la olla.

2.- Mole de guajolote: similar al de fiesta o colorado; se diferencia de éste porque la gente de campo prepara huauzontles que simulan piernas de guajolote, y las sirven con este mole como si fuera la carne que lo acompaña.

 

Moles mexicanos

 

 

3.- Mole de Matuma o de ladrillo: esta preparación tiene un carácter ceremonial. Se prepara para la fiesta de la Matuma en Ixtenco, los días 24 de cada mes. Es un mole espeso con chile guajillo, masa y, en ocasiones, chile ancho. Se sirve con carne de res y tamales azules o morados.

4.- Texmole con chito: su consistencia es espesa y se prepara con chile guajillo y masa. Se acompaña con chito, que es carne seca de chivo o de caballo. Es un platillo tradicional en las comunidades nahuas de las faldas de la Malintzin.

 

Mole verde

 

 

5.- Mole negro de huitlacoche: se prepara con caldo de carne de cerdo, masa (para la consistencia) y huitlacoche seco (para el color). Se sirve con carne de cerdo.

6.- Mole chilpoposo: se prepara con chile guajillo, flores de calabaza y masa. Se acompaña con charales secos. Es un platillo tradicional de las comunidades nahuas.

 

¿Cuál de todos los moles mexicanos es tu favorito? Comenta en nuestras redes sociales @FoodandTravelMX.

 

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Junto en lo que será la nueva realidad post COVI-19, llega también un nuevo estilo de vida y por lo tanto una nueva forma de viajar. Después de esta larga cuarentena seguramente todos queremos tomar maletas para emprender nuestra primera travesía en esta nueva realidad. Optaremos fundamentalmente por viajar por carretera en vehículo propio que garanticen el distanciamiento social y por lo tanto la seguridad del viajero.

La nueva normalidad, no solo en México, sino en el mundo, estará marcada por los viajes de proximidad, de acuerdo con el diario español La Vanguardia. Bajo este concepto, viajar por carretera en México ayudarán a recuperar las pérdidas en el sector turístico, además de ser una alternativa para evitar el turismo de masas. Para tu primer viaje post COVID-19, aquí te sugerimos seis destinos nacionales a los que puedes llegar por carretera y en menos de 3 horas partiendo de Ciudad de México:

 

Valle de Bravo, Estado de México

 

Viajar por México

 

Aproximadamente a dos horas de la Ciudad de México, a través de la carretera México-Toluca, llegarás hasta este destino nacional de aventureros. De día puedes disfrutar de actividades deportivas como el esquí acuático, velero y kayak, pasando por motocross y senderismo, mientras que de noche puedes optar por encender una fogata y admirar el cielo, o preparar para el día siguiente un transformador temazcal. Reencuéntrate con tus amigos en un roadtrip a Valle de Bravo, que además es Pueblo Mágico de México, ubicado en el Estado de México.

Su inmenso lago es la escena principal de espectaculares vistas y competencias deportivas. Sus calles empedradas y construcciones de adobe llenan de encanto sus rincones tapizados de restaurantes y tiendas de artesanías. No dejes de visitar la Capilla de Santa María para admirar al Cristo Negro, realizar una meditación en Casa de Oración Carmel Maranatha y conocer el Museo Arqueológico. Sin olvidar hacer una parada en la Stupa de la Paz, ¡Te encantará!  edomex.gob.mx/valledebravo_magico

 

Tepoztlán y Las Estacas, Morelos

 

Viajar por México

 

Otro de los destinos para disfrutar al viajar por carretera, es esta ruta a Morelos definitivamente es una conexión con la naturaleza, la introspección y energía. Desde Ciudad de México viaja por carretera con dirección a Cuernavaca, después de una hora y media llegarás al Pueblo Mágico de Tepoztlán. Aquí, las faldas del Tepozteco albergan una combinación de tradiciones milenarias y cultura que te invitan a olvidarte del estrés.

Anímate a disfrutar de la gran experiencia que es entrar a un temazcal, sube el Cerro del Tepozteco y rodéate de su mística antes de llegar a la cima, donde se ubica el pequeño templo dedicado al dios Tepoztécatl. Además recorre el mercado central, visita el Ex Convento de la Natividad o diviértete en el Parque Nacional El Tepozteco.

Si tu viaje está pensando para disfrutar de varios días de descanso, entonces toma la autopista de Cuautla y después de conducir aproximadamente una hora, llegarás al parque Las Estacas, ubicado en el municipio de Tlalizapán. Su principal atractivo es el brote del río Yautepec, aquí se puedes nadar, esnorquelear y bucear. El agua de esta reserva ecológica estatal se caracteriza por ser cristalina y refrescante. visitmexico.com/destino/tepoztlan/

 

Tequisquiapan y San Sebastián Bernal, Querétaro

 

Viajar por carretera Querétaro

 

Un buen crew de amigos, música y botanitas para el camino, la receta ideal para viajar por carretera lleno de aventura y diversión. Saliendo de la Ciudad de México toma la autopista a Querétaro, dos horas y media en carretera bastan para llegar al Pueblo Mágico de Tequisquiapan. Entre calles coloniales y clima templado conoce más acerca del mundo vinícola y prueba los mejores productos de queserías y vinícolas queretanas, elévate en globo aerostático o adéntrate en las Minas de Ópalo de este encantador destino.

A media hora de distancia visita San Sebastián Bernal, otro de los Pueblos Mágicos queretanos. Sede de uno de los atractivos turísticos más importantes de Querétaro, la Peña de Bernal, que es tercer monolito más grande del mundo. Este pueblo es ideal para los amantes de escaladas, rappel, ceremonias espirituales y deliciosa comida como las gorditas martajadas y los dulces típicos como natillas y chiclosos de leche de cabra. tequisquiapanpueblomagico.com.mx

 

San Miguel de Allende, Guanajuato

 

 

Este destino es garantía en cualquier roadtrip, ya sea con familia, pareja o amigos. En San Miguel de Allende, reconocido por la UNESCO en 2008 como Patrimonio de la Humanidad,  puedes realizar un sin fin de actividades que se adapten a tus planes. Cosmopolita y artístico, de calles empedradas y paisajes increíbles donde la protagonista es la Parroquia de San Miguel Arcángel con su estilo neogótico.

Aproximadamente a dos horas de la Ciudad de México (tomando la carretera a Querétaro), este pintoresco lugar te invita a adentrarte en su Mercado de Artesanías, hospedarte en uno de sus glamurosos hoteles boutique, tomar un helado en su plaza principal, subirte al tren turístico y visitar sus terrazas. Por las noches bebe una copa en sus bares y baila hasta el amanecer en sus clubes nocturnos. visitmexico.com/destino/san-miguel-de-allende/

 

Val’Quirico, Tlaxcala

 

Viajar por carretera Valquirico

 

Sombrerito, lentes y una buena cámara para emprender un viaje en carretera que tiene como destino el pueblo de Val’Quirico, denominado la Toscana mexicana con sede en Tlaxcala. Desde Ciudad de México, toma la carretera México-Puebla y conduce aproximadamente una hora y cuarenta minutos hasta llegar a Val’Quirico, un pueblo medieval estilo europeo que entre murales y túneles esconde románticos paisajes y exquisita comida.

Disfruta la tarde comprando un par de artesanías de cerámica mientras saboreas un helado, para después adentrarte en uno de sus bares con música en vivo, mientras desde la terraza, contemplas la belleza arquitectónica del lugar. valquirico.com

 

Cholula, Puebla

 

Puebla viajes post covid

 

Aproximadamente a dos horas de la Ciudad de México tomando la carretera a Puebla, llegarás a Cholula, una ciudad caracterizada por sus profundas raíces prehispánicas. Esta ciudad fue levantada sobre los cimientos de una urbe indígena con diversos templos y adoratorios, donde más tarde se construyeron templos católicos, de los que hoy puedes visitar 27.

En este Pueblo Mágico es imperdible visitar la Iglesia de los Remedios, ubicada justo frente a la Gran Pirámide de Cholula, la más grande del mundo -4 veces el tamaño de la gran pirámide de Giza, Egipto-. Además no dejes de visitar el Museo Regional de Cholula para conocer la riqueza histórica y cultural del lugar o adentrarte en Container City, una mini ciudad creada a base de contenedores que alberga una amplia oferta de restaurantes, bares y tiendas de artesanías. corazondepuebla.com.mx

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Ahora que estás en casa, es momento de aprender un poco más de nuestro hermoso México lindo, y qué mejor que empezar por conocer el origen del nombre de los estados de la República Mexicana y su significado. Muchos tienen ese nombre por culturas prehispánicas, porque hacen alusión a la naturaleza. ¡Así que checa la lista!

 

  1. Aguascalientes

 

Se nombra así debido a la abundancia de aguas termales en la región y significa literalmente aguas calientes.

 

  1. Baja California Sur y Norte

 

La teoría más aceptada es que los españoles la nombraron así por un lugar imaginario de una novela de caballería de García Rodríguez de MontalvoLas sergas de Esplandián. En la novela existía una isla llamada California – “cálida fornax” que significa “horno caliente”.

 

  1. Campeche

 

En maya, Kaan significa “culebra” y Peech “garrapata”, que se traduce como “lugar de serpientes y garrapatas”. De hecho hubo un poblado maya que se llamó KaanPeech. Seguramente los españoles adaptaron el vocablo nativo a palabras familiares para ellos, por eso el nombre de Campeche.

 

  1. Chiapas

 

Los mexicas cuando llegaron a este lugar lo llamaron Chía – apan, que en lengua náhuatl significa “río de la chía”. Después se castellanizó a Chiapas.

 

República Mexicana

 

  1. Chihuahua

 

Hay cinco interpretaciones, cuatro de origen Tarahumara y una del náhuatl. La que viene del náhuatl es: Xicahua, que significa cosa seca. Las otras cuatro son de origen Tarahumara:

  • Junto a dos aguas: debido a la descomposición de la palabra Chihuahua, donde “chi” es lugar y las dos sílabas “hua, hua” es agua. No obstante, dos aguas se traduce como “Okubawiki”, en Tarahumara.
  • “Donde ladran los perros”, porque en la zona había muchos perros xoloitzcuintles que ladraban mucho.
  • “Costalera”, por la palabra “chihuahuira”, la cual usan los tarahumaras para referirse a un costal.
  • “Lugar de piedra agujerada”, lo que no puede ser posible, ya que “piedra” se traduce como “rehéque”, y “agujerada” se expresa como “ehuárame”.

 

  1. Coahuila

 

Proviene del náhuatl donde  “Coatl”  y “Huila”, hacen referencia a “víbora que vuela”. Otra teoría señala que la palabra deriva de “Quauitl”  – árbol, y “la” – abundancia.

 

  1. Colima

 

Deriva de la palabra náhuatl “coliman”, en donde “colli” significa cerro o volcán, y “maitl” – mano dominante. Dando como resultado “lugar donde domina el Dios del fuego”. Otros sugieren que también proviene de la palabra de origen náhuatl “Acolman”, que significa “lugar donde tuerce el agua”.

 

  1. Durango

 

Francisco de Ibarra fue un español que visitó este lugar y se dice que le puso Durango porque era el nombre de un poblado en la provincia española de Vizcaya, donde él nació. También en euskera significa “vega rodeada de agua y montañas”.

 

  1. Guanajuato

 

Su origen es purépecha donde Quana-huuato, significa “cerro de ranas”. Por su nombre, se observan diversas artesanías con figuras de ranas en ese estado.

 

  1. Guerrero

 

Su nombre se debe en honor a Vicente Guerrero, caudillo del Movimiento de Independencia de México y que en 1829 fue presidente de México.

 

República Mexicana

 

  1. Hidalgo

 

Nombrado así en honor a Miguel Hidalgo y Costilla, nombrado como «Padre de la Patria», al ser uno de los personajes históricos más importantes de México, al iniciar el movimiento de Independencia. 

 

  1. Jalisco

 

Deriva de la palabra náhuatl “Xallixco” donde “xalli” es arena; “ixtli” – cara o superficie; y “co”, que quiere decir “lugar”. De esto modo, su significado es: lugar arenoso o en la superficie de arena.

 

  1. México

 

De origen náhuatl: “metztli”, que significa Luna; “xictli”, que hace referencia a ombligo; y “co”, que significa lugar, dando como resultado: “en el ombligo de la Luna”.

 

  1. Michoacán

 

Proviene de la palabra náhuatl “Michihuacán” que significa “región de los pescados”. Los mexicas le dieron este nombre a la zona.

  1. Morelos

 

Se nombró así en honor a José María Morelos y Pavón, aunque se dice que antes era llamado “lugar donde hay tunas”, esto por la palabra “Nochtitlán”, donde “nochtli” es  “tuna”, y “tlan” significa “donde o entre”.

 

  1. Nayarit

 

Es una palabra de la lengua Cora que significa: “Hijo de Dios que está en el cielo y en el Sol”.

 

República Mexicana

 

  1. Nuevo León

 

Los españoles la nombran así por la región española de León, solo le antepusieron la palabra “nuevo”, y listo.

 

  1. Oaxaca

 

Viene del náhuatl Huāxyacac donde “Huāx” es huaje, una planta encontrada en los valles; “yaca” quiere decir “nariz” o “punta”, y “c”  -lugar, resultando como significado: “el lugar en la punta del guaje”.

 

  1. Puebla

 

Fray Toribio de Benavente, escribió el Ensayo de la Puebla de los Ángeles, en este hace referencia de una nueva conquista por los españoles. Puebla significa población.

 

  1. Querétaro

 

La palabra es de origen purépecha y significa: lugar de las piedras grandes.

 

  1. Quintana Roo

 

Fue nombrado así en honor a Andrés Quintana Roo, un político, escritor y poeta que participó en el acta de la Independencia Mexicana.

 

República Mexicana

 

 

  1. San Luis Potosí

 

Su nombre proviene del nombre Luis IX, rey de Francia, y Potosí porque hay una región minera en Bolivia llamada Potosí, y en el estado mexicano también había potencial para explotar una mina de plata.

 

  1. Sinaloa

 

Deriva de la lengua cahita. La palabra “sina”, que significa pitahaya, y “lobola”, que significa redondeado, significando: “pitahaya redonda”.

 

  1. Sonora

 

Se dice que cuando los españoles llegaron al Río Yaqui, lo nombraron “Señora”, debido a que arribaron el día de Nuestra Señora del Rosario. Los nativos no podían pronunciarlo y le decían Sonora.

 

  1. Tabasco

 

El nombre viene por el cacique indígena Tabscoob, quien gobernaba a los pobladores cuando los españoles llegaron al lugar.

 

  1. Tamaulipas

 

Proviene de la unión de los vocablos huastecos “tam” y “holipa”, que juntos significan “lugar donde se reza mucho”.

 

 

  1. Tlaxcala

 

Se dice que el pueblo que habitaba la región se llamaba Texcalac, que significa “despeñadero”. Cuando llegaron los españoles lo cambiaron a Tlaxcala, que significa en lengua de los nativos, “lugar de tortillas”.

 

  1. Veracruz

 

La palabra significa “verdadera cruz”. El nombre surgió cuando se fundó la “Villa Rica de la Vera Cruz”. Villa por la similitud que tenía con las villas de España, y rica por el oro que se encontró en el lugar y “Vera Cruz” por el día en que los españoles llegaron a la zona, que fue un viernes santo, en el que se conmemora la muerte de Jesucristo en la cruz, conocido como el día de “la verdadera cruz”.

 

  1. Yucatán

 

Existen varios significados, uno de ellos es que cuando un español les preguntó a los mayas que habitaban la zona cuál era el nombre del lugar, ellos le respondieron “Ma’anaatik ka t’ann”, que significa “no te entiendo”. Otro significado es que se cree que el hermano de Cristóbal Colón, Bartolomé, encontró a unos nativos que le dijeron Yuk’al-tan mayab, que significa “Todos los que hablan la lengua maya”.

 

  1. Zacatecas

 

Palabra del náhuatl zacatl y significa “lugar donde abunda el zacate”.   

 

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Viajar por nuestro país puede resultar una experiencia inolvidable, y si lo haces con un motivo en específico, la estadía puede ser más placentera y el viaje memorable. Por eso, te preparamos una lista de los festivales próximos a celebrarse para que disfrutes de los sabores de nuestro país sin ir tan lejos.

 

A comer se ha dicho

 

festivales

 

El Museo Nacional de Culturas Populares abrirá sus puertas del 28 de enero al 2 de febrero a 52 expositores nacionales e internacionales que se reunirán en la Feria del Tamal de Coyoacán, donde podrás disfrutar de tamales con sabores tradicionales como el de mole rojo, el de chile verde, de rajas o de dulce o, si lo prefieres, habrá de cochinita pibil y hasta de chicatana.

Para acompañar, prueba los exquisitos atoles de piña, guayaba, zarzamora, pinole y hasta champurrado. Dónde. Av. Miguel Hidalgo 289, Del Carmen, Coyoacán, Ciudad de México. Entrada Libre. Facebook: @MuseoNacionaldeCulturasPopulares

 

¡A volar!

 

festivales

 

El quinto Festival de Papalotes 2020, se llevará a cabo los días 15, 16, 22 y 23 de febrero en Tequisquiapan, Querétaro. Es un evento familiar en donde podrás elaborar y volar papalotes, como cuando eras niño. Tendrán actividades para los pequeñitos como talleres de elaboración de papalote cada dos horas a partir de las 11 de la mañana, taller de pintura infantil y juegos inflables.

Además, tendrás la oportunidad de apreciar la exhibición de vuelos de papalotes gigantes en los siguientes horarios: 12.00, 14:00 y 16:00 horas. Lleva a tu mascota porque es pet friendly. Dónde. Cava de quesos Bocanegra. Km 50.2 de la Carretera 200 Tequisquiapan a Querétaro. Acceso desde: $75 tequisquiapanpueblomagico.com.mx

 

La carne al asador

 

Festivales

 

Del 21 al 22 de marzo, se llevará a cabo la tercera edición del Festival del Asado Val’Quirico 2020 en Tlaxcala, que reunirá a más de 60 expositores en una fiesta en donde la parrilla es la reina. Reunirán a las mejores parrillas de la región y a maestros parrilleros internacionales para lograr una experiencia gastronómica única.

Es un evento para toda la familia en donde expertos en la parrilla cocinarán exquisitos cortes de carne y otros manjares. Habrá talleres, degustaciones, sorteos, competencias y, para los más pequeños, un área de niños. Dónde. Val´Quirico: Carretera a Xoxtla, Sta Isabel Tetlatlahuca Km. 2 Nativitas, Santeagueda, Teopantitla, Tlaxcala. Boletos desde: $120 festival-del-asado-valquirico-2020

 

Cervezas para todos

 

Festivales

 

Central Bazar organiza el segundo Festival de Cervezas y otras bebidas artesanales los días 14 y 15 de marzo en Ciudad de México. Así que si gustas de la cultura mexicana y su gastronomía, debes asistir a este festival en donde podrás degustar bebidas artesanales con o sin alcohol que se producen en nuestro país.

Bebidas como el mezcal o el tequila, sotol o raicilla, estarán presentes en este festival. Aunque también encontrarás una amplia gama de bebidas artesanales, pulque, chilate, tejate y hasta atoles. Evento para mayores de 18 años. Dónde. Casa Franciscana. Jesús María 42, Centro Histórico, Ciudad de México. Entrada libre centralbazarcdmx.com/